Jornada familiar en la playa (3)
Tanto mi tía como mi madre demuestran que su sexualidad es mucho más intensa y desinhibida de lo que yo nunca hubiera imaginado, incluso al aire libre y con sus parientes más cercanos.
Tras su polvete al aire libre con mi tío, mi madre había venido hasta donde estábamos mi tía, mi primo y yo. Ella acababa de tener un orgasmo follando con mi tío, tal como nosotros habíamos visto y oído, y mi madre sin duda también se percataba de que nosotros habíamos estado follando puesto que los restos de semen en nuestras pollas y sobre la oronda anatomía de mi tía Diana lo hacían bien evidente. Nos había preguntado con picardía qué tal nuestra siesta y mi tía, recogiendo el guante, también le respondi...