Diario de confinamiento (6)

Un paso para atrás, dos para adelante

Diario de confinamiento (6) un paso atrás, dos para adelanteLunes 6 de abril

Me desperté con la intriga de cómo habría tomado mi hermana lo que había sucedido el día anterior. Había cruzado un límite: chuparle el pezón. En mi cabeza volvía la imagen de Sonia parada frente a mí con sus tetas perfectas en mi cara y sintiendo el pezón siendo recorrido por mi lengua y mis labios, y volvía a excitarme.

Sonia se levantó con el pelo alborotado, pero muy seria. Llevaba puesto un short y una re...

Un incesto inolvidable

El padre desea a la hija, la hija desea al padre, se presenta la ocasión y la cosa acaba en desmadre.

Rubén era un cincuentón, millonario, alto, moreno, con el cabello teñido de negro, y en buena forma para su edad. Su profesión conocida era la de abogado, pero durante más de veinte años fuera ladrón de guante blanco, cosa que solo sabía su madre y su hija Irma, una mulata preciosa, hija de una cubana, que fuera la segunda esposa se Rubén. Irma tenía ojos grandes y negros cómo la noche y sus medidas eran 92 - 65 - 90. Era abogada de profesión y cuando la ocasión se presentaba, ladrona de guante blanco, cosa...

HERMANA LUNA. Primera etapa: pajas

La prehistoria

No sé si esta historia tiene un comienzo de verdad. Fue todo tan gradual que soy incapaz de decir que empezó tal día o tal otro. Supongo que, por escoger un punto, podría empezar cuando en el cuerpo de mi hermana comenzaron a aparecer las señales de su desarrollo, el vientre abultado y los senos incipientes.

Hasta ese momento los dos habíamos estado más o menos en un mismo nivel. No cuando ella estaba con sus amigas o yo con los míos que jugábamos a despreciarnos el uno al otro. Pero sí cuando estábam...

Escapada a la montaña con mi madre IV

El día anterior había sobrepasado una barrera que ni en mis mejores sueños había conseguido. Hoy tenía que poner toda la carne en el asador, pero no estaba seguro de conseguir avanzar más hacia el objetivo de follarme a mi madre

Era la mañana siguiente y hacía un día de lujo. Nada más levantarme me asomé por la ventana y vi a mi madre en la terraza del jardín desayunando. Hacía bastante calor, por lo que salí simplemente con shorts. Recordemos que no había llevado calzoncillos, así que mi polla iba balanceándose, cosa de la que mi madre obviamente se dio cuenta, ya que sus leves miradas la delataban.

-Hola guapa ¿qué tal? -dije yo acercándome a ella-.

-Pues bien hijo ¿qué tal has dormid...

Antes de que pudie...

Yo te cuido

El confinamiento pone al límite a un hijo que está obligado a convivir con su madre.

*Este relato se lo dedico a Xio, que además de ser una de mis autoras favoritas y admirarla mucho, se ha comportado conmigo de manera exquisita y solidaria en estos tiempos oscuros para mí. No sé si es un buen relato, pero está hecho con cariño.

Yo te cuido

—Es, simplemente, una incapacidad transitoria para realizar cualquier tipo de movimiento voluntario—explicó el médico—. Tiene lugar entre el estado de sueño y el de vigilia.

Lorena y su hijo le observaban atentamente, intentando...

Me convertí en esclava de mi hijo parte 1

Este relato nos lo ofrece una paciente con una curiosa historia, si queréis la segunda parte ya, habladme en doctorhawerson@gmail.com y si no dejad comentarios opinando y lo dejaré pronto por aquí... Recordad que siempre podéis pedirme ayuda o consejo que sin duda os lo prestaré

Muy buenas Doctor, me siento para contarle mi historia. Antes de empezar decir que el Doctor Hawerson me ayudó en mi caso y su ayuda prestada fue genial, además que es muy picaro y divertido jijijijiji, pero bueno, les dejo con el relato.

Soy Ana, una mujer de 38 años, grandes tetas pero bien firmes, culo recto, muy mona de cara según me dicen, amable, cariñosa e.... infiel. Mi marido se llama Jose (42 años) es un hombre de pene normal, aburrido, desatento y muy amargado. Tenemos un hijo, Luis, tiene...

Una temporada en el campo 4 y final

Capítulo final de esta historia de incesto

Volví a casa de vuelta después de una semana. Estaba eufórico. Mi libro al fin avanzaba dejando atrás el bloqueo y había tenido todo el sexo que pudiese desear.

Dejé el coche en el garaje y subí a casa. Mi madre me esperaba. Estaba en el salón viendo las noticias cuando abrí la puerta. Se levantó de un salto y vino corriendo a saludarme. Se abrazó a mí con fuerza y nos besamos en la mejilla. Después, sonriente, se separó para mirarme.

―Mira que guapo vienes. Te sienta bien el campo.

―Anda...

Vacaciones Húmedas I

La climatología, el corazón roto, los pocos amigos de la playa y el aburrimiento de pasar las vacaciones solo con sus padres, hacían intuir a Dani, que estas no serían unas vacaciones para ser recordadas precisamente.

Eran las nueve y media de la mañana y la lluvia golpeaba con fuerza en los cristales del coche familiar. Salímos de Madrid con el cielo nublado y ahora caía un auténtico aguacero, era uno de los primeros días de septiembre.

Habíamos parado en un pequeño restaurante de la provincia de Cuenca, a mitad de camino entre Madrid y nuestro destino, nuestro apartamento en Cullera. Siempre parabamos allí a desayunar y estirar las piernas, porque el local era limpio, el trato exquisito y sobre todo por la tortil...

Madre no hay más que una

Me follo a mi madre

Mi familia estaba compuesta por mi madre y yo. Nadie más, ni padre, ni hermano, ni tíos, nada. Mi madre era hija única, engañada por un hombre que criaba a su hijo sóla, hasta hace unos años contaba con la ayuda de mis abuelos, pero cuando ellos se fueron estuvo sola con un niño. Por suerte pudo contar con la ayuda de sus amigas, que la llevaban de fiesta de vez en cuando. Yo era un joven de 18 años por aquel entonces, de cabello ondulado y algo largo, con barriga y con una seria obsesión por el porno, lo v...

Diario de confinamiento (5)

Cuatros días locos en los que el deseo y las caricias crecen y crecen

Jueves 2 de abril

Jueves por la mañana. Siempre me levantaba yo primero. A eso de las 9 aparece Sonia y me quedé duro cuando la vi. Estaba en bombacha y corpiño, pero el corpiño era súper transparente y se le traslucían por completo los pezones.

-          ¿Qué pasa? Me dice con una sonrisa

-          Nada, nada, digo mirándole las tetas

-          Ya me las viste, y me las tocaste, ¿un corpiño semi transparente, te afecta? Dice Sonia

-          No es que… decía tratando de...