La Boda

No podíamos cerrar el negocio para ir todos a la boda, entonces a mi madre y a mi tía se les ocurrió una idea genial...

Comenzaré este relato presentándome, mi nombre es Adrián tengo 23 años y vivo en un pueblo de Ávila donde trabajo en el restaurante familiar que regentan mi padre Antonio y su hermano, mi tio Jose Luis. El restaurante lo abrieron mis abuelos y sus hijos siguieron la tradición. En la cocina trabajan mi madre Teresa y Rosa la mujer de mi tio Jose Luis. También está con nosotros mi prima Judith, de 27 años. Judith nos ayudaba siempre a la hora de los menús pero hace 5 años perdió su empleo en una inmobiliaria...

De vuelta a la casa del pueblo con mi prima 2

Con mi prima a punto de sucumbir decido seguir presionando y su respuesta me deja helado, ya que en vez de acudir a mis brazos, comprende que ella también puede seducirme y usando sus artes femeninas, busca entonces que sea yo quien babee por ella… Y aunque no quiero, esa zorra consigue excitarme.

Reconozco que creí que esa noche acudiría a mi cama. Por eso me sentí defraudado cuando no llegó y me tuve que dormir con un calentón de los que hace época. Calentón que se incrementó a niveles insoportables cuando a través de las paredes la escuché masturbándose mientras repetía mi nombre. Asumiendo que mi prima deseaba que fuera yo el que diera el paso, me quedé en mi habitación con las hormonas alteradas al saber que si la quería totalmente entregada debía ser ella la que cruzara el pasillo tal y como le...

Mi hermana me seduce

Mi hermana se me insinuaba para cogérmela

Estábamos en la sala viendo televisor.

Nuestra relación solía ser como cualquier otra, jugábamos, peleábamos y hablando como cualquier par de hermanos, no sabría decir cuando cambio al ser ella la que lo inicio. Nunca la había visto como mujer, siempre fue mi hermanita sin ninguna idea pervertida.

Estábamos viendo un final de temporada, la parte donde los protagonistas estaban a punto de coger, pero se detuvieron porque alguien llamo a la puerta, ella pausa el video y me dice, mira como dejo a l...

Primer encuentro con mi prima Gemma XII

Tras estar con Lucia y Raquel la primera tiene algo de remordimientos así que voy con mis tías siempre con las ideas mucho mas claras y tenemos una invitada de excepción.

Los tres nos quedamos aun un rato más en el agua recuperándonos y poco a poco acercándonos a la orilla nos quedamos mecidos por las olas mientras todos disfrutábamos de la desnudez de los demás.

– Resulta que ahora me gustan los coños – susurro Lucia. – ¿Quién me lo iba a decir? – se preguntó ella a si misma mientras se sumergía en sus pensamientos. – Y las pollas – le respondió Raquel. – Las pollas enormes – le respondió de igual manera Raquel divertidamente morbos recordando en su fuero interno lo q...

Mi Hijo se folla también a su hermana

Una madre sigue contando lo que pasó en su familia después que su hijo la violara...

Este relato es la continuación de mi anterior relato titulado : MI HIJO ME VIOLO

Como ya os comenté al principio de mi anterior relato, cuando mi hija vio a su hermano pajeandose y me lo contó a mi, aquella pillada, tambien tendría consecuencias para ella y para toda la familia, incluido mi marido...

A veces las cosas se entrelazan de una manera totalmente imprevista y así fue en nuestro caso...

Una cosa llevó a la otra y esta a su vez a otra hasta vernos implicados todos los miembros de l...

Madre

Sus tetas brincaban con cada salto que ella daba sobre mi pene, que desaparecía en medio de tan deliciosa carne. Tenia toda la entrepierna mojada de sus fluidos, estábamos sudados, de tanto divertirnos.

Ella caminaba desnuda hacia mí, detrás de ella un caballo negro.Ella era Andrea mi amiga.

--¡Te amo! -- dijo casi susurrando.

Todos los que estaban en la cafetería del colegio estaban en sus asuntos, el tiempo se detenía entre los dos. Andrea se sentaba en la mesa, levantando su falda me mostraba su lindo coño de labios hinchados y húmedos.

Sus pies tocaban mi pene que sentia quería escapar de mi pantalón color marrón.

Sus labios pronunciaban esa frase que tanto deseo escuchar. Al mo...

Motivación extra

Una madre muy práctica, ayuda a su hijo a aprobar el curso, con consecuencias insospechadas para ambos

La familia Gonzo Giménez, está compuesta por 3 miembros, el padre, la madre y el hijo.

Sandro Gonzo es un hombre de 42 años, trabaja en una importante multinacional de mantenimiento en una de sus plantas de refino. Es un hombre corpulento, alto, fuerte, con el pelo corto. Tiene los ojos oscuros y es atractivo.

Viviana Giménez, es una mujer de 37 años, ama de casa. Es una mujer alta, que cuida su figura para verse atractiva para su marido, de buen cuerpo, con un culo prieto y respingón, una cintu...

Soy feliz como estoy ahora

Me llamo Laura y vivo una intensa relación de amor con mi hijo de tan solo 18 años

Me llamo Laura  tengo 38  años y hace un año enviude.

Soy enfermera ,tengo un hijo de 18 años y mi vida cambio de repente sin quererlo.

El aún estudiaba y después de arreglar los papeles me quedo una buena pensión aparte del sueldo que recibía.

De golpe llego la pandemia y la vida nos cambio a todos.

Mi hijo en casa encerrado y yo iba y venía del hospital descansando dos días para reponerme del intenso trabajo durante la semana.

El caso es que mi vida sexual nunca hab...

Infidelidad

Una madre lo que hace para la recuperación de un hijo

Infidelidad

Tengo 39 años, y después de toda una vida me he decidido  a ser una esposa infiel.

De mis amigas crei ser la única libre de tal circunstancia pero al final ya pertenezco al club.

No fue por culpa de mi esposo, solo mia, el pobre es un buen marido y nunca me ha faltado ni dejado con las ganas, aun hoy me avergüenzo tanto al sentir como me disfruta y yo a él, no es para nada el sexo o su falta o el aburrimiento o la rutina, nada que ver, todo es muy distinto a los a lo que les fu...

Cuando los hijos necesitan ayuda: Sexta Parte

Después del primer contacto serio con mi hija Raquel y de la sorpresa que tuve con mi sobrina Alba (relato spin-off "Cuando las sobrinas necesitan ayuda"... me veré envuelto en una fiesta con un final feliz.

Había pasado un mes desde que mi hija Raquel tuvo su primer contacto sexual medianamente serio conmigo. También habían pasado apenas solo unos días desde que mi sobrina Alba me confesó su gran problema y habíamos tenido una "sesión de ayuda" inesperada y sorprendente (de esta parte solo he publicado el primer relato, el segundo cerrará ese primer contacto).

Entre medias mi mujer había dado buena cuenta de mí siempre que tenía ocasión, pero cada tres o cuatro días... resultaba todo un poco soso. Mi hij...