En la terminal
Rafael, una persona con poderes para leer e influir en las mentes de los demás, espera en la terminal del aeropuerto cuando una jovencita se sienta delante de él.
El servicio de megafonía de la terminal avisa de que el avión tendrá un retraso de 45 minutos por avería. La gente suspira enfadada y resignada. Muchos de ellos hablan, otros miran sin mirar, otros leen revistas o libros. Yo también leo, aunque no necesito ni libros ni revistas.
Me llamo Rafael y desde que nací tengo el don de leer e influir en las mentes de los demás. No sé por qué, pero sé que me gusta. Estoy cómodamente sentado pasando de mente en mente de cada pasajero que espera conmigo el...