Cortos de Crow: Todo negro

Y en el final de los finales.

Un filoso estrépito incrustándose en mi cabeza, las manos aferradas al volante, la espalda amalgamándose al asiento y vueltas, cientos de vueltas. Todo da vueltas. Grises, líneas, rostros, vidrios, chispas, hierros retorciéndose en cada golpe, tormenta sanguínea salpicando la visión. Mierda.

¿Antes del último suspiro toda la vida desfila ante nosotros? Lamento noquearles tal mito; antes de que una guadaña inesperada me acaricie con su filo de una vez y para siempre, debo confesarles que eso es una gra...

El Naufragio del Te Erre

El naufragio del barco que contiene a los autores y lectores de este sitio podría ser el comienzo o el final de algo. Quién sabe. Versión extendida.

El naufragio del Te Erre

Un zumbido agudo perfora mis oídos ¿Quién soy? ¿Dónde estoy? ¿Estoy? Desde el piso de madera húmeda y resbaladiza, levanto lentamente el párpado superior derecho que tiembla de dolor y el pigmento negro del iris refleja lenguas y espirales de fuego. Un movimiento casi imperceptible en ese ojo resulta de la combinación de dos movimientos, una brusca contracción del globo ocular sucediendo a una dilatación más lenta del mismo. Las pupilas se ajustan gradualmente al estallido de...

El Ocaso de Caro

Cuando el deseo puede más que cualquier cosa. Cuando el infierno está a solo veinte centímetros. Reeditado. Rehecho.

Hoy algo se extiende en toda su dimensión y lo tiñe todo de grises y humedades convirtiendo en otoño a la primavera. Hoy el cielo y su inmensidad se derrama entre lloviznas y sombras sobre una ciudad que nunca duerme.

Carolina está sentada en el bar de una esquina, ajena al gentío y su bullicio, lejana, entreverada en una maraña de recuerdos. Observa a través de la ventana como la  garúa suspendida en el aire se adhiere a los adoquines de las calles, a los sacos de los transeúntes, al ir y venir de lo...

Una cogida con alas y sin piernas

"Un espectáculo dantesco" fue su título original, publicado en el año 2005. Corregido.

- Esto es un espectáculo dantesco- exclama Victoria a la salida de uno de los mejores restaurantes de la ciudad, frunciendo el ceño y llevando una mano hacia su nariz. Se aferra a mi brazo, apoya su rostro sobre mi hombro y observa con desprecio como cinco niños menores de doce años se trepan a una montaña de bolsas de basura en busca de lo que sería su cena. Apresura el paso para alejarse lo antes posible de aquella imagen que tanto le molesta y en su apuro clava uno de sus tacos aguja entre dos baldos...

El amante perfecto

Cerrar los ojos y perderse en uno mismo.

Cierra los ojos.

Un derrame de silencio. Un tic tac cercano y dos latidos en sus respectivas profundidades hasta que caen los párpados. Se detienen los relojes, quedamos suspendidos entres las sombras de este rincón.

Mis manos se deslizan suavemente sobre la piel tostada de una mujer sentada en el borde de su cama matrimonial. Sus ojos se aprietan y muerde su labio inferior en el afán de contener la cadena de explosiones que van creciendo en su interior. Tiembla desde dentro hacia fuera, desde e...

Un día menos en este puto infierno

Todo puede pasar en los baños de una cárcel. Todo. (Reeditado)

Respiren, ¡un día menos en el infierno!

La luna se derrama sobre los muros húmedos de la “fortaleza” y la noche dicta supremacía a fuerza de sombras y finales. La felicidad es una palabra sin significado dentro de estos muros, una sensación ajena, utópica, tan lejana como el horizonte, aquella línea olvidada que dividía al cielo de la tierra, los sueños de las realidades. Esa carencia llamada infelicidad se encarga de acariciar las lágrimas del dolor o los puños del resentimiento y desfiguran aún má...

El filo de las drogas, su herida y el abismo

Les contaré sobre un chico abocado a los abismos y una chica con alma de rescatista. Dicen que él era poseedor de la mirada más triste y que ella se reflejó en sus ojos para mostrarle que existían luces fuera de las sombras. Dicen. (Reeditado)

Les contaré sobre un chico abocado a los abismos y una chica con alma de rescatista. Dicen que él era poseedor de la mirada más triste y que ella se reflejó en sus ojos para mostrarle que existían luces fuera de las sombras. También dicen que ella le enseñó que no existe “lo más importante que aprenderás en la vida es simplemente amar y ser amado” y él la amó con toda su alma pero eso no fue suficiente.


Ella se llamaba Pamela pero he decidido llamarla Pam simplemente porque la chica de Jim M...

A Trazada

Un homenaje construído de latidos y trazas al escritor y amigo.

Así nos has dejado

acongojados

atónitos

sin maestro

en silencio.

Dicen que una parca

te arrebató la última palabra

Dicen que oscura

su sonrisa te tiño de negro

con qué guadaña

con qué filo

van a cortar tus trazos

de fino uso

de sangre fuego

si eternizados quedan

en todos lados

en nosotros mismos.

Dicen que has desaparecido

que la innombrable

te ha llevado

a los aposentos

del final de...

Ángeles caídos

Dos hermanos, un amor eterno. Reeditado.

Ángeles caídos celebrando la total ausencia del padre

El fin de la obediencia divina

De los límites cercando al libre albedrío.

Los fantasmas de la noche

Chamanes de la profunda negrura

El brillo del pálido fuego en las pupilas mar adentro

Dulce amanecer nefasto

Aliento oxidado

Equilibrio sobre el filo.

Apreté su entrepierna

Y mi muerte sonrió.

  • ¿Qué le ha sucedido?

-Nada.

  • ¿Qué hace con el cuchillo?

**...

Cortos de Crow: En el nombre del padre

Quince golpes de inocencia perdida. Reeditado.

Era yo y no lo era

Era ella primavera

y allí estaba sin desearlo

con aliento azufre y brea.

Aún permanecen los estertores de las imágenes que se arrastran bajo el fuego de los flashes. Aún el negro invade al blanco salpicándolo de rojo. Aún las marcas atraviesan el cuerpo y el alma. Y la inocencia taimada en un derrape de locura se recuesta sobre el mármol frío de lo roto. No sonríe, aún le duelen los labios, las piernas, el amor, los brazos, la sangre, los besos, la espalda, los d...