Tres generaciones incestuosas V
Nuestros amigo disfruta de las mujeres de la casa
Nos despertamos a media mañana. Tenía una resaca muy grande. Me dolía la cabeza, Parecía que me iba a explotar.
Mi madre dormía plácidamente a mi lado.
La desperté rozando mi dura polla por su desnudo culo.
Buenos días mamá, tengo un regalito para ti. Le dije a su oído.
Buenos días cariño, ya veo que te pone muy contento levantarte a mi lado. Dijo mi madre mientras se daba la vuelta hacia mi.
No comenzamos a comer la boca. Yo tocaba sus tetas, hasta que llamaron a la puerta...