Asuntos familiares 5 y final

Desenlace de esta historia de amor filial. Al fin sabremos que fue de los dos desaparecidos.

Hacía un año que había vuelto a casa de mi madre. Nuestra vida era feliz. Al menos por mi parte tenía a dos mujeres entregadas a mí por completo. Y creo que ellas estaban satisfechas de mi rendimiento. Nunca durante aquel tiempo ninguna de las dos mostró deseo alguno de buscar otro hombre fuera de casa, lo cual por mi parte no habría supuesto ningún problema.

No nos habíamos impuesto ningún tipo de exclusividad, así que si alguno de los tres hubiese deseado buscar fuera de casa una pareja, los otros d...

Asuntos familiares 4

Nuevas sorpresas y cambios en la vida de nuestros personajes

Hacía ya un mes que Eva se había largado sin más. Por suerte entre el trabajo y mi hermana Sara estaba tan ocupado que me iba olvidando de ella si que la herida doliese demasiado.

Las mañanas las pasaba muy atareado y por las tardes solía recibir la visita de Sara, a veces acompañada de mi madre. Cuando venían las dos, pasábamos la tarde charlando mientras disfrutábamos de un café o una copa de vino. Cuando era sólo Sara quién venía, solíamos acabar follando. He de reconocer que deseaba sus...

Asuntos familiares 3

Hay novedades en la vida de nuestro protagonista. Algunas agradables y otras no tanto.

Después de la comida del sábado y toda la actividad sexual alrededor de la misma, la semana transcurrió con relativa calma. Todos retomamos nuestras actividades rutinarias y el ambiente en casa parecía de lo más normal. Llamé a mis padres un par de veces para ver cómo se encontraban y Eva y yo hicimos el amor casi todos los días.

Habíamos descubierto que el intercambio de parejas era algo que añadía morbo e interés a nuestra relación. Lo comentamos una noche después de cenar tranquilamente relajados e...

Asuntos familiares 2

Segunda parte de este relato en que se mezclan el incesto y el intercambio de parejas

Llegó el sábado y tanto Eva como yo estábamos excitados con la idea de la comida con mis padres. Compré una botella de vino para la comida y salimos a la hora del aperitivo. Mi padre estaba ya atareado con la parrilla en el jardín. Mi madre preparaba la mesa y con la ayuda de Eva acabaron en un momento. Mientras tanto yo preparé unos vermuts y algo de picar. Hacía buen tiempo, así que habíamos llevado los bañadores por si acaso.

Las mujeres no tardaron en entrar a cambiarse mientras mi padre y yo char...

Asuntos familiares

Probando el intercambio de parejas, un matrimonio acaba en el incesto

Este relato había sido ya publicado. Pero después de repasarlo me di cuenta de que se habían escapado demasiados errores así que lo borré. Por lo visto me había olvidado de revisarlo. Pido perdón por ello. Además recibió bastantes peticiones de una segunda parte que en aquel momento no estaba programada. Después de darle unas cuantas vueltas he decidido continuarlo. Eso sí, no sé todavía de cuántos capítulos constará.

Así que os dejo el primer capítulo como recordatorio (ahora si, revisado) y el segun...

Una temporada en el campo 4 y final

Capítulo final de esta historia de incesto

Volví a casa de vuelta después de una semana. Estaba eufórico. Mi libro al fin avanzaba dejando atrás el bloqueo y había tenido todo el sexo que pudiese desear.

Dejé el coche en el garaje y subí a casa. Mi madre me esperaba. Estaba en el salón viendo las noticias cuando abrí la puerta. Se levantó de un salto y vino corriendo a saludarme. Se abrazó a mí con fuerza y nos besamos en la mejilla. Después, sonriente, se separó para mirarme.

―Mira que guapo vienes. Te sienta bien el campo.

―Anda...

Una temporada en el campo 3

Sigue el sexo campestre y familiar

Llegamos a la granja y descargamos los sacos en el granero. Cuando acabamos, mientras Pili guardaba el tractor yo me acerqué a la casa. Mi tía esperaba en la puerta. Había oído el sonido del tractor y esperaba.

―¿Qué tal, Nesto? ¿Tu prima ha abusado de ti? ―preguntó con una sonrisa que podía significar muchas cosas.

―Hola Pilar. Se ha portado muy bien ―contesté siguiéndole el juego.

―Pues venga. Ahora te puedes asear un poco y dedicarte a lo tuyo. Si no va a parecer que te explotamos ―dijo...

Una temporada en el campo 2

Siguen las aventuras sexuales de nuestro novelista en la granja

Tras una cena amena como siempre que estaba en la granja, me retiré a descansar. Algo me decía que tendría visita. O tal vez alguien esperaba que la visitase. Lo qué desconocía era si la madre o la hija. O tal vez las dos. En cuanto a la hija suponía que me recibiría con los brazos, y las piernas, abiertos. En cuanto a la madre me sentía descolocado. Su lenguaje gestual me decía que tenía ganas de un buen polvo. Pero temía entenderla mal y meter la pata. Eso habría sido una catástrofe. Así que decidí dejarl...

Una temporada en el campo

Un novelista en crisis creativa vuelve a la granja en el campo donde se crio

Como siempre, los personajes y las escenas son fruto exclusivamente de mi imaginación. Espero que os guste.

Ese año había sido un tobogán de sensaciones. Había terminado mis estudios de derecho, me habían publicado mi primera novela y me habían encargado una segunda. Estaba claro que no iba a ejercer como abogado, pero mi carrera como escritor estaba despegando. La vida parecía ser un camino de rosas.

Mis padres estaban divorciados desde hacía ya casi cinco años, pero su relación era buena y la...

Fin de año 2

Continua la historia de incesto desde la perspectiva de la madre.

Al día siguiente me despertó un rayo de sol colándose por una rendija de la persiana. Sentía la cabeza algo embotada y me costó ubicarme. Recordé lo que había pasado la noche anterior como si fuese un sueño, una especie de recuerdo lejano en el tiempo. Pero no. Había sucedido hacía apenas unas horas. De repente me sentí muy mal. Me había portado como una puta con mi propio hijo. ¿Cómo iba a mirarlo a la cara a partir de ahora? No sabía cómo enfrentarme a él. ¿Qué pensaría de mí? Sin duda, que era una puta s...