Morbazo en un tren
Relato corto de un encuentro furtivo en un tren.
Con 25 años me pasó algo muy morboso en un tren. Para quienes no me recuerden, mido 180, normal de cuerpo con algo de vello y no estoy mal de cara. El caso es que me mandaron a hacer una auditoría a Sevilla y tomé el primer AVE de la mañana. En la cola de entrada al tren éramos varios los ejecutivos que, seguramente, no pasaríamos en la ciudad más que unas horas y volveríamos en el día.
Me fije en todos, pero me llamaron la atención aquellos que eran más mayores que yo, sobre todo un tío que rondaba l...