Melisa (8): Salvavidas.
Pensándolo bien, la imagen de Fabricio como soltero atormentado por la lujuria es muy interesante...
Desde que había empezado a comparar a Marco y a Fabricio, Melisa se enteró que algo estaba cambiando en sus sentimientos, de todas formas calló, no pudo decir algo sobre ese tema, y siguió quedándose en la cabaña, pasó la primer semana sin que lo que aquella noche se repitiera, no era porque no quisieran, de hecho los dos se morían de ganas en las noches y al menos melisa conoció allí los beneficios de liberar la ansiedad en la ducha y lo mágico de sus dedos, aunque no tenía el mismo efecto que las caricias...