Unas vacaciones muy masculinas (3)
Tras un gratificante y caliente encuentro con los dos hermanos cubanos me preparo para recibir como se merece al hombre de mi vida... mi padre. Pero, como siempre, nada sale como lo esperamos.
UNAS VACACIONES MUY MASCULINAS.
Capítulo 3: Sexo, sorpresas y un pasado por relatar.
Saqué el pene de Álvaro de mi boca totalmente dolorida porqué deseaba contemplar en toda su plenitud ese maravilloso y apetecible ejemplar de falo sin circundar de unos 25 centímetros de altura y un grosor considerable que me había convertido en el animal que todos llevamos dentro y la belleza desnuda y salvajemente atrayente de su propietario mientras unas ganas de reír enloquecidamente recorrían mi or...