Aire de noche
La noche puede traernos muchas sorpresas.
Desde su cama aún le llegaban las extrañas notas. Melodías indescifrables que llevaban hasta el fondo de sus genes los ritmos de la noche. Y se escapó.
Tuvo la sensación de que se elevaba unos centímetros por encima de la cama, sin cables, ni trampa ni cartón que lo sujetasen. No había ventana, no había puerta que detuvieran al ser que llevaba dentro i que le había robado el alma. Saltaba terrazas, literalmente volaba las cortas distancias que separaban tejado y tejado. La luz pálida de la luna...