Zorra ejecutiva (2)
Sigue su trato con F. que le llevará a compartir una sesión con un amigo de la infancia de éste.
No cabía en mi del asombro... no podía imaginar que un hombre tan dulce en apariencia, se estuviera portando así conmigo. El problema, o quizá no, era que me gustaba, Me gustaba mucho, y no recordaba haberme sentido nunca tan excitada. Me fui al baño para ducharme, y con cierto reparo introduje una especie de boquilla en mi ano. Lógicamente estaba preparado, pues no se salía y permitió que llenara mi esfínter de agua templada. Era una sensación incómoda. Cuando consideré que era suficiente, cerré el g...