Big D y su gran pandilla de negros asquerosos
Despues de haber sido atacada por unos jovénes maleantes negros estos me llevaron hacia su jefe
Habían pasado más de tres semanas desde el ataque de aquellos jóvenes negros y ya no se habían parado por el consultorio. Mi esposo había contratado una niñera por lo que ya no tenía que llevarme a mi hijo al trabajo. Al consultorio le estaba yendo muy bien. Cada día llegaban muchos nuevos pacientes y era mucho más recomendado por ellos mismos a amigos o familiares. Muchos de los que acudían a consultar no tenían prácticamente nada, lo hacían más bien para tratar de coquetear conmigo, en su mayoría los que...