Poema para gilda

El personaje de mi novela Relatos eróticos morbosos, Gilda, fue creado a partir de un contacto, una preciosa chica inglesa. Uno nunca sabe si las fotos enviadas corresponden a un perfil falso y lo que pretenden es sacarte dinero o es una mujer real. Yo preferí creer en su realidad.

POEMA PARA GILDA

Hilda, Hilda,

mujer maravillosa,

cuerpo de diosa,

carita de ángel,

boca sensual,

ojos de mar,

melena de amazona,

dulce sonrisa,

pícara jovencita,

diosa del amor.

Adoro tus pechos,

dunas deslizantes

para el sediento

caminante

ansioso, galante,

que anhela besar

el dulce pezón,

almibar y miel,

fuente del placer.

Adoro ese ombligo

refugio, abrigo,

en el largo camino

hacia tu pubis,

escondido, placent...

Relatos eróticos morbosos 7

Nuestro personaje se las ingenia para no tener que volver a utilizar el miembro dolorido, pero tal vez se esté metiendo en camisa de once varas y acabe por tener que utilizarlo sí o sí. Dos vidas se han encontrado por casualidad (aunque tal vez no haya tanta casualidad como parece) veremos qué pasa.

Nos sonreímos. Me sentí como un hombre con múltiples personalidades. El hombre que había sido, con un pasado irrecuperable, el hombre que había espiado a mi “ex”, un pervertido, un monstruo. Y ahora el hombre nuevo que pugnaba por salir, un hombre enamorado de una prostituta. Todos ellos eran falsos, artificiales, aún no había encontrado al hombre que yo realmente era. Por un momento me sentí muy triste y deseé morir. ¡Lastima que la hemorragia se hubiera cortado!

No podía hacer otra cosa que hablar,...

El diario de johnny 2

Sus comienzos como gigoló son tan inesperados como agradables. Aunque resulte inverosímil pensar que en aquellos años pudieran existir gigolós como el nuestro, la etapa del destape fue de alguna manera tan delirante como esta historia.

EL PUB DE PACO/CONTINUACIÓN

Fue entonces cuando se me acercó una chica a la que tampoco conocía. Con todo desparpajo me pidió que bailara con ella. Estaba sonando una canción lenta y todo el mundo aprovechaba para arrimarse y sobarse con esmero. Recordé haberla visto con el anfitrión de la fiesta o alguno de sus amigos. Podría muy bien ser su novia. Me juré ser discreto. Cumplí mi juramento, pero no así ella que enseguida se arrimó todo lo que pudo dentro de un espacio físico que no presentaba obstácu...

Historias de zoilín, el pajarito cantor

Es una historia humorística, erótica sí, pero sobre todo humorística. El narrador es Johnny, el mismo del diario de Johnny, pero unos años más tarde, ya hecho todo un gigoló profesional, y quien le cuenta la historia es Anabel, una prostituta con la que llegará a vivir en pareja.

HISTORIAS DE ZOILÍN- EL PARAJITO CANTOR

Cuando Lily se encontró a Zoilín, el pajarito cantor, en su camino, yo aún no había sido captado por mi dulce panterita para el duro oficio de satisfacer a las mujeres a cambio de un módico estipendio ( díganme ustedes si no es módico cualquier precio por llegar al éxtasis, subir al séptimo cielo y bajar, sin verse obligados a degustar el alimento para jilgueritos de plástico de las compañías aéreas). Por tanto lo que les voy a contar no procede de cosecha pro...

Relatos eróticos morbosos 5

Nuestro personaje es un poco gafe, vamos que cuanto más alejados de él mejor. Todo le sale mal, rematadamente mal, pero no hay mal que por bien no venga, Gilda disfruta del mejor polvo de su vida.

Tengo los ojos cerrados, por eso no puedo verla, para eso está la imaginación. Me abre la boca con las dos manos y casi percibo cómo se agacha sobre mi cabeza. Puedo ver sus pechos perfectos, tan blancos como el resto de su cuerpo, con esos pezones armonizando con el perfecto tamaño de sus tetas, son como botones rosados de una flor exótica. Y cuando sus labios rosados, carnosos, sensuales se acoplan a mi boca, como una ventosa siento rozar sus pezones contra mi pecho, mi pecho lobo donde brota la pelambrer...

El gran teatro erótico del mundo 3

Sigue la escena en ese hipotético teatro que es imposible que exista en la realidad porque así no se habla en nuestros teatros, y es una pena. La escena erótica pone los dientes largos a cualquiera.

ESCENA TERCERA-SEGUNDA PARATE O CUADRO SEGUNDO DE LA TERCERA ESCENA O COMO QUIERAN LLAMARLO

Nuestro personaje cruje el bacon entre sus dientes con una mano y con la otra consigue sentar a la dama en sus rodillas. De esta guisa parlotean un buen rato.

-Pero mujer, siempre pensando lo peor. Nadie es reprimido hasta que se demuestre lo contrario. Los dos hemos tenido ocasión de demostrarlo y bien que lo hemos demostrado. La verdad, si te soy sincero, cariño, es que no las tenía todas conmigo. Ni un...

El diario de johnny 1

Johnny es el nombre de guerra de un gigoló un tanto peculiar. La historia se desarrolla durante los años que van del final del franquismo hasta que aparece el terrible SIDA en España. Todo lo que sucede es pura ficción, muchas veces delirante. No obstante dicho periodo, que vivió el autor es real.

CAPÍTULO I

LILIAN

Me encontraba en la bañera de mi apartamento, la cabeza sumergida bajo el agua y conteniendo la respiración todo lo que me fuera posible, como si quisiera batir algún record del mundo. Filtrado por el agua me llegaba el sonido, lejano, como desde otra dimensión, de las variaciones Golberg de Bach. Era una costumbre adquirida tras la dura ruptura con mis padres y mi familia en general. Por una de esas extrañas carambolas que a veces tiene la vida habían logrado enterarse de...

Relatos eróticos morbosos 5

Menos mal que nuestro protagonista se toma las cosas con calma y con humor, porque la escena que se narra en este episodio es para poner los pelos de punta, especialmente los del vello púbico.

Hay algo que no deja de rondarme la cabeza. Esto no puede ser verdad, yo no  tengo tanta suerte, nunca la he tenido y nunca la tendré. ¿A qué viene esto? Busco en Internet y encuentro a Gilda, aquí pasa algo raro, mi nariz de informático, de hacker en ciernes me dice que esta mujer no es trigo limpio. Y rápidamente me vienen a la cabeza aquellas llamadas tan extrañas al fijo, cuando aún estaba casado. Nadie contestaba, pero a veces me parecía escuchar una respiración al otro lado. ¿Y cuando me las quisieron...

Relatos eróticos virtuales (sexo con humor) 3

Nuestro personaje, un divorciado estandar diría yo, sigue cabezón, erre que erre y no cesará hasta conseguir una cita "real" a través de las páginas de contactos. Sus historias son tan delirantes como reales. Nunca, nunca creí que esto pudiera ocurrir, o tal vez solo me ocurra a mi.

EL INFIERNO DE LOS TIMADORES

En Internet, visto lo visto, debe haber más timadores por metro virtual que en la sección correspondiente del infierno. Es curioso, pero antes de que comenzara mi aventura apocalíptica en las páginas de contactos, cayó en mi mano una curiosa novela, un best-seller, sobre un timador arrepentido que luchaba contra una caterva de timadores, muy astutos y peligrosos. La novela negra está muy bien, la leí casi de un tirón. Entonces poco podía imaginar que yo iba a ser el timado...

Relatos eróticos morbosos 4

Nuestro hombre busca compensar sus celos de la forma más universal que se conoce, disfrutando él para olvidarse de que ha disfrutado ella. Tiene una suerte loca al encontrar a Gilda, una joven prostituta, pero esto es solo el comienzo, porque habrá sorpresas.

EL HOMBRE DESESPERADO

He llegado. Llamo al timbre. La voz de la mujer es agradable. Subo, mentalizado de que esa debe ser también mi noche. Me abre la puerta. Había imaginado que mi mala suerte me conduciría hacia la mercenaria más fea, más vieja. Pero no, he tenido suerte, es una preciosidad. Carita de ángel, de ángel perverso, o más  bien un poco picarona, sensual. Ojos grandes, claros, no sabría si verdes o azules. Nariz perfecta, boca sensual de labios gordezuelos y muy pintados, en rojo, un rouge...