Siento si te hice daño.
Ser joven, inexperta y guapa, puede ser un gran problema si caes en las manos de un hombre sin moral.
Salí a la terraza del ático, deje que el frescor de la mañana me envolviese, se apoderase de mis sentidos, en esos momentos me sentía feliz, plena, mi vida era increíble y estaba viviendo una segunda juventud a mis casi cuarenta años, me quede mirando a no sé dónde, todo lo que veía era increíble, de fondo tenía una vista impresionante del océano Atlántico, ese día prometía ser único, la noche había sido maravillosa, mi pareja me había llevado de la mano conociendo cotas de placer que ni yo misma pensaba qu...