El ejercicio del amor
Un gimnasta defraudado necesita desfogarse en el gimnasio para olvidar cualquier reminiscencia de su novio infiel. El tiempo le ayudará a arrinconar ese recuerdo, a mejorar su musculatura y a entablar nuevas relaciones.
El gimnasio estaba a pleno ritmo la tarde en que Daniel entró a desfogarse con el ejercicio. Era un lugar que visitaba asiduamente, y su cuerpo fornido y bien definido lo atestiguaban, pero normalmente lo visitaba por las mañanas. Si había ido a un horario anormal para él era por el reciente suceso que había tenido que soportar: su novio, Andrés, le había dejado sin apenas darle ninguna explicación sobre por qué o cuándo había tomado esa decisión. Aquel mazazo le había dolido como si un árbol hubiese caído...