Simplemente Marisa
Siempre me sentí atraído por Marisa, la hija de mi jefe y la directora del proyecto en el que trabajaba, siempre la miraba cuando pasaba cerca de mí y realmente me moría de ganas de cogerla.
Siempre me sentí atraído por Marisa, la hija de mi jefe y la directora del proyecto en el que trabajaba, siempre la miraba cuando pasaba cerca de mí y realmente me moría de ganas de cogerla.
Yo sabía por medio de compañeras de trabajo que Marisa se daba cuenta de mis miradas y siempre se quejaba con ellas de mi conducta, decía que acaso el no sabe que soy una mujer casada.
Pero me mantenía siempre muy cerca de ella por lo que yo suponía que tanto no le disgustaba mi acoso. Un viernes despué...