Una visita conyugal... muy especial.

Aquel hombre de prisión, me estaba enloqueciendo de placer, al grado de desear a verlo... cada vez que me lo pidiera.

Una visita conyugal… ¡muy especial!

Jamás habíamos recibido un mensaje como el que esa mañana llegó a nuestro correo, reconozco que hacía tiempo no sentía esa adrenalina cuando está una por hacer algo diferente, algo que nos hace sentir un hormigueo en el estomago.

  • ¡He leído todos tus relatos!  Soy un hombre maduro, educado, de edad madura, estoy pagando una pena en un centro de readaptación. Llevo varios meses tratando de imaginar cómo eres en realidad, estoy dispuesto a darte una buena grati...

Mientras el me cogía... mi esposo miraba.

Lo que sucedía era demasiado morboso, Arturo me cogía mientras Mario mi esposo, se masturbaba mirando la leche de mi amante en turno, escurrir por mis piernas.

Mientras él me cogía… mi esposo miraba:

Hacía tiempo que habíamos dejado de lado las aventuras sexuales, todo en común acuerdo, aunque tengo que confesar que yo… no lograba encontrar la plena satisfacción sexual. Me daba pena decírselo a Mario, sin embargo, una buena tarde fue el mismo quien decidió que debíamos volver a las andadas.

-- ¡Quiero hacerte una propuesta!  Siéntate aquí a mi lado y responde con sinceridad.  ¿Extrañas los encuentros sexuales?

-¿Por qué lo preguntas?  ¿A caso…...

Las huellas de una noche de sexo:

Verme vestida de rojo, fue algo nuevo, tanga roja,zapatillas rojas y el babi doll rojo, como Adrian dijo, invitas a darte una buena cogida.

Las huellas de una noche de sexo con un maduro:

Después de mi última aventura sexual, no pasa día que no regresen a mi mente los momentos que pase con Fernando, pero lo más excitante sin duda es recordar la noche que logre cumplir una de mis más íntimas fantasías, ser una verdadera puta en ese paradero de camioneros.

En días pasados había tratado de convencer a Mario que fuera el quien me llevara a ese paradero, sin embargo se ha negado a aceptarlo incluso la última ocasión terminamos molestos...

Los juegos sexuales de don Fernando.

¡creo que este es el momento ideal de ver lo que hay debajo de ese hermoso vestido! ¡desnúdate Sonia, solo déjate puestas las zapatillas!

Los juegos sexuales de don Fernando:

Hacía mucho tiempo que no sentía esa extraña sensación de vacío en el estómago, las piernas me tiemblan y mis manos están sudorosas, como consecuencia de los nervios,  apreté con fuerza el brazo de Mario quien se apresuró a cuestionarme.

-¿Sucede algo Sonia?  ¡Te noto muy nerviosa!  ¿Quieres que regresemos a casa?

--No, solo estoy un poco nerviosa, pero creo poder controlar la situación, sigamos adelante.

Mario miro el número de aquella casa,...

Alquilame a tu esposapor una semana II.

El final de la semana llego y la sorpresa que me tenian resulto ser una descomunal verga.

Alquílame a tu esposa por una semana  II.

Me sentía verdaderamente en un mundo diferente, salir a la calle vestida con ropas muy sugerentes y en una ciudad donde nadie me conocía, era algo que me hacia querer no despertar de ese sueño, al subir al auto de José, la falda se subió dejando al descubierto parte de la tanga, cuando trate de bajarla un poco José se apresuro a decir lo siguiente.

  • No lo hagas Sonia,  así estas perfecta.

Solté la falda y me resigne a ir enseñando el triangulo d...

Alquilame a tu esposa por una semana:

Jamas en mi vida imagine pasar toda una semana con un desconocido, y mucho menos cogiendo a diario con diferentes hombres.

Alquílame a tu esposa por una semana:

Miramos el mensaje que nos llego y nos quedamos sorprendidos por lo que nos pedían.

  • **¡Hola!  El motivo de mi mensaje es para pedirte que me rentes a tu esposa por una semana, si aceptas… tendrás que convencerla para que acepte ser obediente en todo, para ser mas claros mi deseo es que tu esposa me complazca en todo durante una semana, no se trata de BDSM, no, simplemente tiene que ser servicial, un poco de sumisa, pero sin cosas raras, y si mucho sexo, si...

Penetrasiones profundas con un maduro:

El roce de sus vellos, me hacian enloquecer de placer.

Estábamos a tan solo una calle de llegar a casa de Alejandro, me sentía sumamente nerviosa; sentía las miradas de los hombres recorrer mi cuerpo y desnudarme con la mirada, el vestido que llevaba puesto de color amarillo en corte circular y strapless, apenas cubría lo necesario, las zapatillas blancas de tacón de aguja y de 14 centímetros de alto me daban un toque de sensualidad, ¿debajo? Solo llevaba una diminuta tanga de color blanco, al frente en forma de corazón, las delgadas tiras que la sujetaban a mi...

El tio solteron de mi esposo.

Cuando escuche a las tias y a mi suegra comentar cosas del tio Fabian, senti la curiocidad por descubrir tan callado misterio.

El paseo en motocicleta.

Mientras mas nos acercábamos a nuestro destino, el calor se hacia mas sofocante, pasaríamos el fin de semana en casa de la familia de Mario, se reunirían para celebrar una fiesta, y así pues no podíamos negarnos, al llegar todo mundo se saludo con alegría, yo me sentía un poco extraña pues había a algunas personas que todavía no conocía muy bien, entre ellos el tío Fabián. El es el hermano menor de mi suegra, un señor muy educado y culto, hacia años que no lo miraba la familia...

Laura simplemente Laura.

Aquella mujer me convencio, y termine entregandome a ella en un momento de deseo, gracias Laura.

Laura.

Mis pasos me llevaron al lugar donde conocería a alguien muy especial, Laura, una señora de 45 años, que sinceramente parecía tener 10 años menos; entre a ese establecimiento mire las prendas del aparador, había algunas que se miraban de una tela exquisita al tacto, sin embargo no podía darme el lujo de comprar algo tan elevado en costo, así que me conforme con lo que podría comprar… ¡señora! ¿Me puede mostrar estas en color negro? En talla mediana por favor.

La señora tomo una prenda y m...

Un viejo muy morboso el final.

La segunda noche fue en realidad mas de lo que imagine, 5 hombres maduros y aquel chico, me llenaron de su leche, fue genial quede satisfecha con tanta leche en mis orificios.

Un viejo muy morboso. El final.

Por la mañana despertamos, mi cuerpo aun sentía la refriega de la noche anterior, me incorpore y tome mi ropa, justo cuando me disponía a vestirme apareció Rubén en la habitación que nos dio para descansar. Apenas me había puesto unas pantaletas me dijo de forma tajante.

Nada Sonia, quítate esa prenda, este día caminaras por la casa así desnuda, al natural, solo llevaras puesta esta prenda.

Me quite las pantaletas y las arroje a mi maleta, me amarre el mandi...