El mundo de Bumbo (2 de 11)

Bumbo es un negro que provoca una epidemia de sumisión

La maravilla de internet, esa red de caza donde caen los pececillos con tanta facilidad, hizo que Bumbo tuviese varias niñas curiosas para elegir, ya desde el primer día. Una de ellas le atrajo especialmente. Se trataba de Nina. Vivía cerca, era muy jovencita, muy guapa y muy tetuda.

Cuando llegó a la cita aquel sábado, Nina se sorprendió al comprobar que quien le abría la puerta era un negro brillante y musculoso.

-Pasa, bonita, soy Bumbo.

-Hola, pero yo venía...

-Lo sé, preciosa, v...

El mundo de Bumbo (1 de 11)

Bumbo es un negro que provoca una epidemia de sumisión

Tina y Tana eran aún adolescentes cuando decidieron unir sus vidas. Estaban muy enamoradas y adoptaron a un niño negro, Bumbo, que pronto llegó a convertirse en un hombrecito. Tina y Tana tenían al niño algo malcriado, y éste aprovechaba la situación para vivir lo mejor posible. Mientras, ellas se desvivían por su hijito y hacían lo que fuera necesario para mantenerlo feliz. Tina y Tana dormían juntas, en su cama de matrimonio, junto al cuarto de Bumbo. A él le gustaba levantarse a medianoche y acostarse en...

Ella es así

Escena corta de una sumisa perfecta

Tiene 18 años, es rubia, delgada, y parece muy seria. Es mi esposa. Yo tengo 55 y me gusta todo de ella. Se sienta a mi lado en el salón. Lleva un bonito collarín, que no es igual que los de las perras, pero los recuerda mucho. Junta sus brazos bajo las tetas, como abrazándose. El pequeño vestido abre su escote cubriendo apenas sus bonitos pezones. Lleva un tanga minúsculo que se puede ver por lo corto de la falda, y revela que su coño está perfectamente depilado.

Le aparto a un lado el tanga, mientra...

La genia

Una mujer que parece salida de un cuento oriental se pone a mis órdenes y mi mundo cambia.

Me llamo Esteban, tengo 52 años y a veces recorro los mercadillos ambulantes en busca de algún objeto curioso. Por unas pocas monedas, aquel día me llevé lo que parecía una réplica de la lámpara de Aladino. Una vez en casa, me dispuse a pulirla un poco con un paño, para sacarle brillo. Sé que parece una fantasía, pero la lámpara empezó a temblar y de ella salió una figura femenina animada. Por supuesto, me quedé atónito cuando además ella empezó a hablar.

-A sus órdenes, amo Esteban. Soy Amina, la gen...

Una, dos, tres, etc.

Soy Rebeca, tengo ya 20 años y me gustaría que me pegasen.

"Veinteañera necesita ser maltratada". Parecía un cebo para varones adultos desocupados, pero estaba en una web de anuncios genérica. No encajaba entre el resto, que ofrecían electrodomésticos, muebles o libros de segunda mano en mi provincia. Decidí probar. Por la hora del mensaje, acababa de ser publicado.

"Dame tu número de móvil y cancela el anuncio". En cuestión de segundos, recibí el número y el texto desapareció. Escribí al teléfono de la supuesta veinteañera.

-Explícate.

-Soy Rebec...

Vuelvo con ellas, etc.

Me planteé volver a llamar a alguna de las chicas del pasado, pero no acababa de dar el paso.

Lunes

Yo había entrado en una espiral de aislamiento, tras una vida de saltar de una pareja a otra. Ninguna me satisfacía por completo, y las iba dejando. Ninguna duraba más de dos años. Me planteé volver a llamar a alguna de las chicas del pasado, pero no acababa de dar el paso. Sin embargo, el mismo día me encontré con Izane y con Cuca, en momentos distintos. Izane seguía guapa y delgada. Llevaba de la mano a su hija, Tota, tan pequeña de talla como siempre, pero ya habían pasado cuatro años y era c...

Mascota secreta, etc.

La encontré llorando en la calle y la adopté. No hay ni rastro de su familia, así que se ha quedado conmigo. No sale nunca de casa.

Llevaba un tiempo con mi novia Mary y todo iba muy bien. Cada uno vivía en su casa, y follábamos siempre en la mía. Ella es ardiente y sabe complacer mis caprichos, así que yo no tenía ninguna queja. Sin embargo, me escamaba eso de que nunca fuésemos a su piso. Un día se lo dije, y ella se mostró algo esquiva, aunque acabó aceptando. Acudí una tarde y me abrió la puerta nerviosa.

-Hola, Carlos, cariño, pasa. Tengo que contarte algo.

La casa era preciosa, con un ambiente cálido y ordenado. En el...

Degeneración, etc.

Estaba esperando en el bar, cuando distinguí a las dos hermanas que llegaban ya, cogidas de la mano.

Soy Héctor y tengo 50 años. Llevaba unos meses con mi novia de 25 y ella ya estaba coladita por mí, así que había llegado el momento de hacer algunas variaciones en la relación. Estábamos en la mesa de un bar tomando unas cañas, como todas las tardes.

-Lola, yo sé que me quieres por encima de todo.

-Claro, cari. Haré cualquier cosa por ti.

-Pare empezar, estoy harto de la ropa que te pones a diario cuando quedamos. A partir de ahora, nada de pantalones. Llevarás faldas cortas. Tus piernas...

La negrita, etc.

Buena esclava negra. Urge venta. (Relato modificado).

Día 1

Una nueva ventana de publicidad saltó mientras miraba porno en internet. Como de costumbre, iba a cerrarla, pero me detuve unos instantes. Era una supuesta web de contactos eróticos, que presentaba mi perfil dado de alta, supongo que gracias a algunas cookies robadas. En teoría, decenas de mujeres estaban reclamando allí mi atención. Como no tenía nada que perder y mucho tiempo libre, abrí una solicitud casi al azar. Era una ficha escueta, en inglés, sin foto. Traducida, venía a decir: "Buena es...

Masocas locas, etc.

Está claro que sois tal para cual, con ese par de tetazas las dos.

Mantengo una conversación en un chat de internet con una niña de 18 años.

-Encantado, Fedra.

-Gracias, señor. Cuénteme un poco de usted.

-Soy buena gente, simpático. ¿No te importa que te triplique la edad?

-No, señor. Me gusta que usted sea mayor. Me siento mejor así.

-A mí me encanta que seas tan joven, mi niña. Así me siento más fuerte, más poderoso.

-Genial, señor. Yo necesito algo como eso. No valgo mucho, y si puedo servir para que usted se sienta bien, me siento re...