Buscando mi récord en un día (pollas 1 a 7).

El reto consistía en follarme a más de 25 tíos entre las 00:00 horas y las 23:59 del Jueves 26 de Julio de 2.018. 24 horas para batir un récord. ¿Sería capaz de conseguirlo?

BUSCANDO MI RÉCORD DE POLLAS EN UN DÍA (Pollas 1 a 7).

Sabía que para poder alcanzar el número máximo de pollas en mis agujeros, debía estar las 24 horas del día muy activa, buscando rabos a todas horas y en cualquier sitio; ello siempre sin desatender mis citas previamente concertadas. Una vez decidida la fecha, le pedí a Nati (la madame que nos proporciona clientela) que me buscase algún grupo a partir de las 12 de la noche, para empezar el reto sumando tres o cuatro pollas como mínimo. Por suerte,...

Buscando mi récord de pollas en un día (Prólogo).

El reto consistía en follarme a más de 25 tíos entre las 00:00 horas y las 23:59 del Jueves 26 de Julio de 2018. 24 horas para batir un récord. ¿Sería capaz de conseguirlo?

BUSCANDO MI RÉCORD DE POLLAS EN UN DÍA (PRÓLOGO).

Cuando se publique este relato ya habré cumplido los 41 (el 10 de Agosto de 2.018), acumulando 25 años como prostituta, aunque lo que voy a narrar ahora ocurrió unas semanas antes de mi cumpleaños, el Jueves 26 de Julio de 2.018. En todo este tiempo ejerciendo la denominada “profesión más antigua del mundo” hay una pregunta que me han hecho muchos clientes de forma recurrente, y más aún cuando saben de mi larga trayectoria como puta: ¿a cuanto...

Saciando mi ninfomanía (4ª parte y final).

En busca de nuevas aventuras sexuales con que calmar mi insaciable ninfomanía, acepté la propuesta de un cliente de sex-shop de Joaquín para recrear escenas porno con él y con su esposa.

SACIANDO MI NINFOMANÍA (4ª parte y final).

No necesité mucho tiempo para aceptar la propuesta de Mariano, como así me dijo que se llamaba. Aunque llevaba toda la noche dale que te pego, lo cierto es que había salido en busca de aventuras y lo que me ofrecía aquel tipo era justo lo que necesitaba para poner colofón a la velada. Primero, en casa, había atendido junto a Susi a tres ejecutivos que nos había enviado Nati. A continuación, había hecho lo propio con dos italianos de turismo por Madrid co...

Saciando mi ninfomanía (3ª parte).

La noche se va calentando con nuevos e improvisados clientes a los que satisfacer en el sex-shop de mi amigo Joaquín, hasta que uno de ellos me propone algo especial con lo que tratar de saciar mi ninfomanía

Saciando mi ninfomanía (3ª parte).

Después de usar mi boca para limpiar su polla de restos de semen, se la coloqué dentro de sus calzoncillo de ridículos dibujitos, le subí los patalones y aborché la bragueta

  • ¡Ya estás listo para volver a casa con tu mujer! – exclamé con tono provocativo. Como le había prometido cuando estábamos dale que te pego, le entregué una tarjeta con mi número, por si quería volver a contratarme. *“Nunca se sabe donde puedes encontrar un cliente fiel que te proporcio...

Un trabajito muy especial (3).

Continúa el trabajito tan especial para el que fui contratada.

UN TRABAJITO MUY ESPECIAL (3ª parte).

Apenas se hubo cerrado la puerta de aquella estancia, me quedé sumida en cavilaciones trascendentales para mí: ¿qué era yo en realidad: una simple guarrilla adicta al sexo o una verdadera puta? ¿Ninfómana o prostituta? Desde que empecé a ejercer con tan sólo 16 años, nunca había tenido la más mínima duda al respecto. Mi madre y mi hermana se habían encargado de mi adiestramiento y siempre me dijeron que éramos putas. Ellas lo repetían con orgullo. Que te gust...

PUTA LA MADRE, PUTA LA HIJA (6ª parte).

"De tal palo, tal astilla: puta la madre, puta la hija", es lo que escuché en el velatorio de mi abuelo de boca de las beatas del pueblo en que nació mi madre. Iba a demostrarles lo que una auténtica puta es capaz de hacer.

PUTA LA MADRE, PUTA LA HIJA (6ª parte).

Salí de la Iglesia apresurando el paso. Tenía tal urgencia por fumarme un cigarrillo que, ya en la calle, me abrí paso entre un grupo de mujeres que se arremolinaban en torno a la puerta de la Iglesia, sin caer en la cuenta de que podían ser las mismas que unos minutos antes cotorreaban sobre nosotras en los aseos. Entré en el bar que había justo enfrente, me acerqué hasta la máquina de tabaco y me dispuse a sacar un paquete de Marlboro. Palpé los bolsillos...

Puta la madre, puta la hija (5ª parte)

"De tal palo, tal astilla: puta la madre, puta la hija", es lo que escuché en el velatorio de mi abuelo de boca de las beatas del pueblo en que nació mi madre. Iba a demostrarles lo que una auténtica puta es capaz de hacer.

PUTA LA MADRE, PUTA LA HIJA (5º episodio).

Sorprendido por mi reacción, Ramón permanecía inmóvil, buscando en mi madre co

ntestación a mi actitud directa y descarada. Mamá sonrió con picardía y le dio una respuesta: cerró la puerta del retrete y echó el pestillo. Entretanto, yo había comenzado a menearle la polla, disfrutando a tope de pajear el rabo del padre de mi hermana Alicia. Ni en mis más calenturientas fantasías habría imaginado algo así, entre otras razones porque su identidad habí...

Mi sobrina (8).

Mamen y yo continuamos con el adiestramiento de mi sobrina Bárbara, decidida a convertirse en puta.

MI SOBRINA (8ª parte).

Para que mi sobrina no advirtiera que Mamen había descubierto su verdadera identidad, me apresuré a disimular antes de que que entrase en el salón y pudiese ser testigo de nuestra breve charla sobre ella, de forma que empujé a Mamen sobre el respaldo del sofá, separé su torneadas piernas embutidas en el ceñido traje de látex, y metí mi cara entre sus muslos.

  • Ya estoy aquí – dijo Baby anunciando su llegada y extendiendo la caja que le había pedido que bajase.
  • Muy...

Puta la madre, puta la hija (4ª parte).

"De tal palo, tal astilla: puta la madre, puta la hija", es lo que escuché en el velatorio de mi abuelo de boca de las beatas del pueblo en que nació mi madre. Iba a demostrarles lo que una auténtica puta es capaz de hacer.

DE TAL PALO TAL ASTILLA: PUTA LA MADRE, PUTA LA HIJA (4ª parte).

  • ¡Uff, primo! ¡Tienes buena polla! - exclamé tras dar un par de chupadas. Era uno de esos rabos que me gustan especialmente. No demasiado largo, pero gordo y circuncidado.
  • Seguro que se lo dices a todos … - dijo bromeando.
  • ¡Jajaja! - reí sin dejar de meneársela – Llevas razón, primo. A todos mis clientes les digo que tienen buen rabo aunque sea mentira. Pero en tu caso es que tienes buena polla – concluí para, de inmediato, volv...

Puta la madre, puta la hija (1ª parte).

"De tal palo, tal astilla: puta la madre, puta la hija", es lo que escuché en el velatorio de mi abuelo de boca de las beatas del pueblo en que nació mi madre. Iba a demostrarles lo que una auténtica puta es capaz de hacer.

DE TAL PALO, TAL ASTILLA: PUTA LA MADRE, PUTA LA HIJA (1ª parte).

RESUMEN DE ANTECEDENTES:

Me llamo Carolina y tengo 36 años. A los 16 años descubrí que mi madre y mi hermana se dedicaban a la prostitución. Fue mi propia hermana, Alicia, quien me introdujo en el sexo. Gracias a ella perdí la virginidad, descubrií los placeres del sexo y fui seducida por el sugerente mundo de la prostitución (todo esto se narra en la serie ”Tres putas en casa”.) Me convertí en la puta del colegio, cobrando...