Yurena 6

YURENA – 6

Aquel domingo fue maravilloso, Erika me follo ya no sé cuantas veces, a cada una sentía más placer y mas deseos de tener algo metido en mi culo, deseaba ser follada constantemente.

Durante la semana me dedique a buscar algo que me ilusionaba desde que en mi mente salía mi faceta femenina, tener unas buenas tetas. Visite varias páginas webs, dedicadas a cirugía estética, implantación de mamas, reducción, etc. por mediación de internet solicite cita para una de ellas, me la dieron para dentro de un mes.

El sábado siguiente, en la salida de chicas, organizaron una pequeña fiesta para celebrar mi estreno, bailamos, bebimos y nos reímos al contar cada una su experiencia de la primera vez, en la discoteca, volví a encontrar a Maurice, me vio y se acerco a saludarme, yo le sonreí, me invito a bailar, en aquel momento sonaba una balada muy romántica, no recuerdo su titulo, pero me sentí transportada a un mundo maravilloso en sus brazos. Estuvimos bailando toda la noche, me preguntó que celebrábamos, le conté que las chicas me habían hecho una pequeña fiesta con motivo de que mi padre iba a ser nuevamente padre, su mujer estaba encinta y el acontecimiento se esperaba para dentro de tres meses, no podía contarle de que celebrábamos que me había estrenado como CD, seguramente lo asustaría, me gustaba.

Le di mi número de teléfono y quedo en llamarme para salir nuevamente durante la semana, me acompaño a mi casa y nuevamente se despidió pero esta vez no fue besándome la mano, me la cogió y se acerco a mi besándome en la mejilla. Sinceramente me ruborice. Al llegar a mi piso y tras cerrar la puerta, sentí que mi pecho latía muy acelerado, que me pasaba?

Cuando me acosté, tras el proceso de desmaquillarme etc. me metí en la cama y por primera vez saque de la mesa de noche aquel consolador que había comprado, lo lubrique y comencé a metérmelo por mi culo, al mismo tiempo que en mi mente aparecían las imágenes de Maurice sobre mi fallándome, mi primera masturbación con mi consolador, ya no recuerdo cuantos orgasmos tuve aquella noche pensando en el pero seguro de una cosa estaba, termine agotada y con el consolador en mi culo me dormí.

Durante la semana, solamente pensaba en Maurice, ¿Qué me pasaba?, nunca había tenido esa sensación, el sábado siguiente era festivo, las chicas decidimos reunirnos para descargarnos, montamos una pequeña orgia, fue en casa de una de ellas, yo por precaución,  siempre salía de casa como Pierre y me cambiaba en casa de Erika, a la hora señalada nos encontramos en el lugar de la cita, éramos 6 en un principio, nos dedicamos a comentar nuestros atuendos, que si una llevaba prótesis de goma, que la otra se había comprado unos sujetadores con relleno para mujeres a las que les habían operado del pecho, otras se ponían calcetines enrollados etc. había para todos los gustos, cuando llego el momento nos reunimos en el dormitorio, y nos fuimos desnudando, únicamente quedamos con los sujetadores puestos, eso nos daba mayor seguridad de sentirnos chicas, una a una, se fue acercando a la compañera que tenía más cerca para acariciarle su pene, formando una cadena, yo acariciaba a la que tenia a mi derecha y ella a la que tenia a la suya así formamos un circulo, luego cuando ya estaban nuestros penes morcillosos, cada una fue introduciéndose en la boca el de la compañera de su derecha, ofreciendo el suyo a la que tenía a su izquierda, formamos una rueda, tras la mamada correspondiente sin llegar a eyacular, cada una escogió su pareja para descargarse, primero haría de activa y luego de pasiva, a mi me escogió Mirna, ojos negros, piel morena por los rayos UVA pelo negro, 1,68 toda depilada, al escogerme, se me acerco, me dio un beso con lengua y me tiro sobre la cama, me mando abrir las piernas, ella se acerco, con un bote en la mano, me extendió por el ano la crema para la penetración, se puso frente a mí, de rodillas, puso mis caderas sobre sus piernas, mi esfínter quedaba exactamente a la altura de su pene, un pene de 22 cm en plena erección, apunto su glande hacia mi agujerito y de un solo golpe, me lo metió hasta la mitad, sentí una pequeña molestia que ceso en cuanto comenzó a moverse, me gustaba tener el culo ocupado, gozaba a cada movimiento, mientras ella me enculaba, yo acariciaba mi pene tratando de mantenerlo en plena erección pero sin eyacular, sus movimientos eran cada vez mas rápidos, yo notaba como se hinchaba dentro de mi golpeando las paredes de mi intestino, en eso dando un agudo grito se descargo completamente, dejándome mi querido culito lleno de su rica leche. Al sacarlo me lance sobre él y me lo metí en mi boca para limpiarlo, que rico estaba, con mis labios lo apretaba, tratando de sacarle las últimas gotas que le quedaban colgando, me levante le di un beso en la boca y la invite a ponerse de rodillas a cuatro patas, me puse detrás de ella, ella separo sus nalgas dejando a la vista su esfínter semi preparado, lo embadurne con la crema dilatadora al mismo tiempo que mi pene, apunte sobre la diana y dispare, el cañón de mi pistola, entro de pleno en su culo, lo hice con tal violencia que perdió el equilibrio cayendo de bruces sobre la cama, la agarre de las caderas y la levante comenzando el mete y saca correspondiente, mis movimientos eran violentos, estaba tremendamente excitada, no era capaz de parar aquel impulso que me obligaba a ser una bestia en celo como si en ello me fuese la vida, ella se quejaba de dolor yo sentía que mis huevos chocaban con los suyos ya vacios pero los míos tenían la suficiente capacidad como para dejar preñadas a mas de una, si pudiesen quedar preñadas, cuando llego el momento de descargarme mi eyaculación fue tal, que rebosaba el culo de Mirna, bañándole sus piernas. Al terminar me dijo.

-          Yurena, nadie me ha dejado el culo tan lleno como tú, eres una maquina, debías de vender tu semen a un banco, te harías millonaria.

-          Chica, perdona, pero tenía tanto acumulado que si no me descargaba reventaba. Estoy deseando encontrar a alguien que me llene el mío, no sabes las ganas que tengo de tener una polla en mi culo a diario.

-          Eso es fácil, pon un anuncio ofreciendo el culo, seguro que encuentras a alguien.

-          Si pero vete a saber quién es, puede que te dejen el culo roto o peor, te dejan el SIDA u otra enfermedad, y hacerlo con preservativo no es lo mismo, no sientes como su chorro apaga el fuego interior.

-          En eso tienes razón, es preferible hacerlo con uno de confianza aunque sea pocas veces pero con la seguridad de que no te deja ninguna ETS.

Durante el resto del día, nos fuimos turnando las parejas, al final cada una había metido su pene en el culo de las otras cinco todas habíamos follado y todas nos habían follado.

Las semanas fueron pasando, un día suena el Teléfono:

-          Diga?

-          Yurena, soy Maurice, acabo de llegar de viaje, quieres cenar esta noche con migo?

-          Hola Maurice, que alegría me das, pensé que te habías olvidado de mi.

-          Como puedes pensar eso, todo este tiempo he estado pensando en ti, no sabes las ganas que tengo de estar aunque solo sea un rato contigo, salgo nuevamente de viaje dentro de 4 días. ¿Aceptas mi invitación?

-          Claro, dime donde y a qué hora y allí estaré.

Me dio el lugar y la hora, avise a Erika, para informarle de mi cita y decirle que me iría a su casa a mudarme de ropa, no me puso pegas.

A la hora convenida y en el lugar señalado aparecí, allí estaba Maurice esperándome, cogió mis dos manos me acerco hacia él y me dio un beso en la boca, luego nos metimos en su coche momento que aproveché para darme un buen morreo con lengua, fue tal que notaba que mi pene se estaba mojando haciendo lo mismo con mis bragas.

Me llevo a un restaurante muy coqueto, yo tome un pescado a la plancha y él una carne también a la plancha, regado con un buen vino de Borgoña, y de postre unas fresas afrodisiacas. Luego fuimos a bailar a un pub, solo música romántica,  lo que nos permitía estar pegados el uno al otro, yo notaba cada vez que me abrazaba como algo duro crecía entre sus piernas, los dos estábamos excitados. Cuando salimos me dijo que me llevaba a mi casa y así fue, al bajar del coche le dije.

-          Quieres subir a tomar la última?

No puso reparos, me agarro por la cintura, ayudándome a subir las pocas escaleras hasta el descansillo, tomamos el ascensor, al llegar a mi piso y tras entrar en mi casa, cerré la puerta y me lance a su cuello, el me abrazo y nos unimos en un beso nuestras lenguas buscaban dentro de las bocas de cada uno su pareja. Entonces me separe y le dije.

-          Maurice, no puede ser, no quiero hacerte sufrir, yo no soy lo que tú quieres.

-          Si, eres lo que quiero, Pierre, lo sé todo sobre ti, eres un CD, tu padre se caso con una alemana, y viven en Alemania, están esperando un hijo y tu iras a pasar las navidades con ellos. Quieres tener unas buenas tetas y te gusta que te follen, yo puedo darte todo eso y más.

-          Pero como sabes todo eso, quien eres en realidad?

-          Soy el hombre que te hará feliz y cumplirá todos tus caprichos, es lo único que tienes que saber sobre mí, si tu quieres yo haré que se cumplan tus deseos, pero a cambio tienes que obedecerme, no te are daño ninguno, solamente are que seas feliz.

Aquellas palabras me dejaron completamente desconcertada, quien era Maurice, únicamente sabia su nombre, que podría ser falso, su número de teléfono, que se dedicaba a Impor-Expor y que tenía un Citroën C6.

-          Sé que todo eso te sorprende, no es necesario que me des una contestación ahora mismo, piénsalo, yo salgo de viaje en cuatro días a mi regreso te llamare para hablar sobre el tema y si estás de acuerdo tu vida cambiara completamente a mejor. Ahora tengo que irme, me pondré en contacto a mi regreso.

Abrió la puerta y marcho, yo me quede obnubilada realmente no sabía lo que había pasado, trate de reponerme, esa noche no pude dormir sus palabras me venían a mi mente, ya cansada el sueño me gano y me quede dormida sobre la cama, ni siquiera me había cambiado.

Al día siguiente me metí en Internet a buscar alguna pista, lo único que tenía era su nombre, a que se dedicaba y la matricula de su coche, empecé por esa pista. Busque en todas las bases de datos por el número de matrícula, la respuesta siempre era la misma NO EXISTE ESE NUMERO, tal vez sería un numero fantasma, de esos que utilizan los servicios secretos para no ser localizados? O todo sería un sueño.

Toda aquella conversación me había dejado desconcertada, no podía conseguir más datos sobre Maurice, si quería saber algo más sobre él, tendría que esperar a su regreso y tratar de sonsacarle algo. Un día recibí un mensaje en mi móvil que decía. “Cariño, no trates de averiguar nada, nada vas a encontrar, confía en mí. Te quiero. Maurice”

A los quince días recibí una llamada de Maurice, me citaba en el restaurante donde habíamos cenado aquel día, quería saber una respuesta.

Acudí a la cita, nerviosa, era un domingo, fui como Yurena, al llegar, el se levanto, se acerco y trato de darme un beso, lo rechace.

-          Maurice, yo no aguanto esta incertidumbre, tu sabes todo de mí y yo no sé nada de ti, quien eres en realidad, no puedo darte una contestación a ciegas, sabes que yo te quiero pero me tienes en ascuas, si quieres que te conteste tienes que confiar en mí sino todo se acabo.

-          Yurena, yo también te quiero, lo único que te puedo decir que no es nada ilegal, yo me dedico a ayudar a las personas que quieren cumplir sus sueños, no soy un extraterrestre ni un Ángel del paraíso, soy un hombre de carne y hueso que te quiere y quiere ayudarte, lo único que puedo decirte es que tengo un don que es saber escoger a las personas que en realidad necesitan mi ayuda y sin ella no conseguirán ser felices, ten confianza en mí y te aseguro que serás una de las personas que mas disfrutara de la vida.

-          Y que garantías me das de que se cumplirán mis deseos, que seré una de esas personas.

-          Si no logras ser feliz en el plazo de dos años, todo lo que consigas hasta la fecha económicamente será valorado y se multiplicara por 1.000, es decir si tú no te encuentras feliz dentro de dos años, se pondrá un precio a tus deseos no conseguidos y conseguidos ese precio se multiplicara por mil y ese valor se te dará a ti o a la institución que tu designes, me explico si ese valor intrínseco se calcula en 100.000€ se dará a la institución que quieras 100.000.000,00 de €  y tu volverás a tu trabajo actual y a tu vida cotidiana, a mi no volverás a verme  y nuestra relación se terminara.

-          Ahora si me permites, quiero invitarte a cenar, tal vez sea nuestra ultima cena, aunque yo no lo deseo, quiero cenar muchas veces y el resto de mi vida junto a ti.

CONTINUARA