Yo misma y mi amig@ especial

Ahora que emigrar fuera de España es algo cotidiano veo con cierto orgullo que fui una adelantada a mi tiempo, llevo en USA casi 8 años.

En mi caso fue por amor, conocí a mi marido cuando él estaba destinado en España, como no me iba a llamar la atención con su casi 1,90 de altura, su pinta de surfero que escasamente disimulaba el traje, la seguridad en si mismo, … fue un flechazo mutuo, como no se iba a fijar en mí, castaña, con culito respingón, unas tetas medianas que me permitían en mi época de fiesta ir sin sujetador marcando los botoncitos, la verdad es que antes igual que ahora hacemos una pareja de revista, desde el minuto 1 supo hacerme una chica feliz, es un encanto, atento, cariñoso, ameno, el sexo … seguimos el dicho americano “a day without sex is a day wasted” un día sin sexo es un día desperdiciado, lo disfrutamos.

De mis anteriores experiencias tenía dos cosas claras; me encanta el sexo y soy extremadamente difícil de satisfacer, raramente conseguía orgasmos pero a pesar de ello disfrutaba el sexo. Estar con un chico, empezar con besos, ir subiendo el tono, me encantaba comerles la boca con desesperación, siempre he disfrutado llevando la iniciativa en esa parte, las respiraciones entrecortadas, ummmm, no me cuesta reconocer que me ponía caliente que él chico tomase la iniciativa y dejara recorrer sus manos por todo mi cuerpo, como me ponía que me agarraran el culo, los más despiertos se percataban de que mis suspiros eran mayores cuando me amasaban bien las nalgas esos suspiros los tenía que contener cuando las dos manos agarraban mis nalgas y las separaban, uff, cuando me lo hacían notaba como me humedecía y cuando no me lo hacían … simplemente agarraba las manos del chico y me las llevaba yo a mi culo. Algo de lo que estaba realmente orgullosa era de mis pechos, mi talla de sujetador es 95B, con los pezones participativos y extremadamente sensitivos, solía ir sin sujetador cuando salía de fiesta, a pesar de la opinión general el escotazo que lucen algunas no es nuestra única arma, una camisa que deje notar unos pezones duros es suficiente para que algunos chicos no supiera donde tenía los ojos, me encantaba, cuando me los acariciaban bien simplemente mojaba mis braguitas, siempre me dio mucho morbo que me los tocaran por encima de la ropa y una vez al aire, con los pezones erectos era asignatura obligatoria que me los chuparan. Siempre me he gustado ir bien depilada, dejando los labios despejados y una pequeña tira de pelo sobre el monte de venus, mis labios son prominentes y acompañan a un clítoris un poco por encima de lo normal, suficiente para que al ver desnudas a mis amigas me acomplejara un poco cuando era joven, por suerte esa etapa pasó y de acomplejarme paso a ser una gran fuente de placer.

Como digo me encantaba el sexo y a pesar de que no era fácil llegar al orgasmo lo disfrutaba enormemente, ligar con un chico en la discoteca, calentarnos en cualquier rincón, salir con prisas para irnos a su coche, que grandes momentos he pasado en el asiento de atrás de los coches de muchos desconocidos, mmmm, que morbo me producía notar como lo que yo hacía provocaba la erección de los chicos, mmmm unos lo hacían simplemente con morrearlos otros necesitaban tocarme a fondo para ponerse a tono, otros agradecían que les acariciara el pene, todos disfrutaban haciéndome saber que se les había puesto dura restregándola contra mí y eso a mi me superaba, de manera inconsciente tendía a abrir mis piernas y rozarme contra su pene duro aun estando con ropa, a esas alturas solía estar empapada, mmmm, las pollas, hay más tipos de polla que de Donuts, pequeñitas, morenas, gruesa, rectas, largas, torcidas, rosadas, … mis preferidas las que son rectas y gruesas especialmente en la base. Aun a sabiendas de que normalmente haría que se corriera el chico antes de conseguir el ansiado orgasmo me encantaba follar, suena a viciosa pero me da igual, me encantaba tumbar al chico boca arriba, apoyar mis rodillas y sentarme sobre la polla, tomarla con mi mano y metérmela lentamente para comenzar a cabalgar hasta que el chico se “acabe”. Creo que soy bastante normal, lo más golfo … tal vez follar con dos chicos diferentes en el mismo día.

Todo suena bastante bonito la pega es “el chico de turno”, hay de todo, inexpertos, nerviosos, impaciente, egoístas, con una falta de sensibilidad hacia lo que queremos las chicas enorme, con poco aguante…. La inmensa mayoría no ve el momento de meterla dejando todo el juego sexual en nada

El día que conocía a Bob, me gusto desde el primer momento pero la primera vez que hicimos el amor me conquistó realmente, no tenía la pasión de los chicos españoles pero si la sensibilidad para llevarme al orgasmo desde el primer día, aunque a muchas chicas les cuesta reconocerlo a mi no me importa decir que el sexo oral que me practica me lleva a orgasmos con más facilidad que con la penetración con la que me es muy difícil conseguir uno de ellos, yo por mi parte me entrego para darle lo mejor, hacemos mil posturas cosa que a él le encanta y a mi me permite notar mi clítoris estimulado de manera continua.

Vivimos en Seatle desde hace años, él es técnico naval … seguro médico, buen sueldo que se convierte en muy muy bueno cuando tiene que viajar … aquí la vida puede ser cara si te gusta vivir bien así que al menos una vez al mes le toca embarcar durante una semana.

Yo trabajo en una clínica como dietista. La vida era genial … bueno casi … esa semana que él estaba fuera yo me aburría como las piedras, sola en casa, sin niños, es triste sentirse tan sola rodeado de casas pero aquí la gente es mucho menos sociable que en España, hacía shopping, iba al gimnasio a hacer algo de fitnes y al volver a casa aprovechaba a darme caprichos, comer helado darme largos baños en el jacuzzi … mi cuerpo acostumbrado al sexo diario se notaba extraño, tenso … aprovechaba esos baños para darme masajes relajantes, me acariciaba el pecho sin prisas, notaba como a pesar del calor del agua mis pezones se ponía duros, los enjabonaba generosamente, los cogía entre los dedos, los pellizcaba con cuidado, me apretaba las tetas una contra otra … abría las piernas para que los chorros golpearan suavemente mi clítoris, yo sola con mis chorritos de agua conseguía más orgasmos de los que me habían dado la inmensa mayoría de los chicos con los que había follado, con los dedos abría mis labios, acariciaba mi prominente clítoris que respondía con rapidez creciendo, erectándose, haciéndose muy sensible, a veces lo soltaba para coger mis nalgas con las dos manos y abrirlas como siempre me ha gustado que me hicieran y masajearlo con los chorros de agua, solía acompañarlo con algún dedo furtivo que introducía en mi culo. No se si era placer físico o solo morbo pero a pesar de no haber practicado sexo anal nunca disfrutaba con ese masaje. No tenía prisa, no tenía obligaciones, podía dedicarme todo el tiempo que quisiera y esos baños duraban mucho, era riquísimo pero al final me quedaba la sensación de vacío al ir a dormir sola sin Bob.

Uno de esos días en la clínica uno de mis compañeros, endocrino, llamo a mi gabinete para ver si podía ayudarle, tenía una paciente de Colombia que al no hablar perfecto ingles no podía ser atendida correctamente y al ser yo española quería que les sirviera de intérprete para poder diagnosticar.

Al entrar en su consulta quede sorprendida, yo como dietista acostumbraba a tratar con la típica americana entradita en carnes cuando no directamente obesa, la paciente, Marta, era la antítesis, morena, un poco más baja que yo, de ojos enormes, pecho generoso y curvas de las que a las demás nos hacen morir de envidia y por encima de todo, cuando vio que era española y podíamos hablar, descaradamente dicharachera, parlanchina, simpática, un vendaval ¡que alegría de sangre latina! Me presenté pero antes incluso ya nos habíamos caído bien.

Intenté ser lo más profesional posible al transmitir lo que se decían entre médico y paciente haciendo esfuerzos supremos para no escandalizarme ni en ocasiones reir a carcajadas al oir las vivas respuestas de Marta

esperaba asistir a algo relativo a tiroides, … pero no, ella me dijo, “Doctora,  trata tu de hacerle entender al doctor las cosas porque parece que mi ingles me falla en las cosas técnicas de mi profesión  …  Como le decía al doctor soy transexual, pero a diferencia de muchas otras disfruto y deseo mantener mis genitales, sobre todo porque es lo que me da de comer jajajaa (que amor de persona, tanta risa al lado de los siesos que me rodeaban), trabajo vendiendo sexo a hombres jajajaj (esta chic@ decía las cosas más burras siempre con naturalidad y siempre sonriendo o riendo) pero quiero que mi cuerpo sea aun más femenino, quiero aumentar el tratamiento de hormonas que sigo”, yo en mi vida había tratado con ningún transexual y jamas habría pensado que la paciente podía ser un@ de ell@s, parecía un mujerón, la hermana exótic@ de Sofía Vergara

Al traducir, el doctor demostró o estar acostumbrado a estas cosas o ser un gran profesional porque no movió una ceja, traduje nuevamente la respuesta de mi compañero a Marta,

… verás Marta el doctor comenta que debemos ser muy cuidadosos para cambiar el tratamiento que tu anterior doctor te había prescrito ya que aumentar hormonas te hará ser más femenina pero …., ¿Cómo decirlo?, ¿Cómo me había metido en este charco?, … que leches, me estaban alegrando el día …. El doctor dice que tal vez eso influya en tu trabajo, a más hormonas “menos virilidad”, no quería ser soez, el doctor opina que debes valorar ese cambio ya que debido a tu profesión la pérdida de virilidad puede afectarte negativamente.

Marta volvió a reír abiertamente, con lo tímidos que son por aquí para expresar alegría, me lo estaba pasando pipa, Doctor, por eso no se preocupe, con el tratamiento actual mi virilidad no tiene pegas, hasta el momento no ha tenido pegas para “atender” a cuantos clientes lo soliciten, verá el otro día empezó a contar me“cogí” a 3 hombres  ….. la interrumpí, Marta, no creo que el doctor necesite detalles “laborales” tan detallados, jajaja más risas, esta chic@ era un encanto, no perdía la alegría ni cuando la interrumpían, … y a pesar de ello, continuó Marta, los días que no he tenido clientes debo masturbarme para relajarme y poder dormir más comod@.

Ahí me falló la profesionalidad, puse cara cubista, boca abierta, ojos de plato … traduje como pude a mi compañero y mientras el terminaba de anotar hice repaso mental express a mi experiencias, Bob cumplía en la cama, teníamos sesiones de sexo largas pero una vez se corría la cosa acababa, necesitaba un buen tiempo para recuperar dureza, hacerlo por segunda vez en el día requería abor por mi parte para entonarle y horas de descanso, los chicos anteriores, si había habido alguno que más por vicio que por otra cosa había conseguido darme sexo tres veces en una noche, pero lo de Marta …. No creo que tuviera problemas en aumentar hormonas, …. La conversación se fue haciendo más técnica, tipo de hormonas, ….

Al terminar ambos agradecieron mi ayuda, me despedí cortésmente de Marta y me marche a mi consulta para recoger el bolso y marcharme a casa, había pasado mi jornada y me iba con la sonrisa en la cara y bastantes pájaros después del “show” de Marta en la consulta. Al salir por la recepción volví a coincidir con ell@ ya que la habían entretenido pidiendo datos del seguro.

Como no podía ser de otra manera haciendo gala de su carácter de vendaval volvió a darme las gracias, sonriendo, … un encanto, la comenté que no dudara en pedir que me avisaran cada vez que fuera a consulta para ayudarla, ahora la sorprendida fue ella que no estaba acostumbrada a un trato tan cercano desde que llegara a USA .. pero entre latinas y chicas la cosa era más sencilla, no sabía como agradecérmelo, entre esos agradecimientos que me brindó tome uno sin pensar, me dijo que si alguna vez necesitaba charlar con una amiga, tomar un café, …. Y la verdad con Bob embarcado agradecí enormemente una oreja amiga, charlar, distraerme … quedamos para ir a tomar un café en el inevitable, Starbucks del inevitable centro comercial, aquí esa es la dinámica de vida, casi todo lo social acaba en un inmenso mall.

Como todo por aquí te obliga a ir en coche, cada una fue por su lado y nos encontramos allí, ¡qué diferentes son los caracteres de los latinos y los de los Americanos! Nos habíamos visto solo media hora antes pero al vernos nos saludamos como si hiciera años que no nos viéramos, dos besos, risas, alegría …. ¿Cómo no aceptar una invitación de alguien con un carácter tan parecido al mío cuando vivía rodeado de gente que semejaban pequeñas islas?

Dejando a un lado el carácter lo cierto es que destacábamos, las americanas en general o están estupendas de la muerte o se abandonan totalmente y afortunadamente digo como dietista que abundan más las segundas que las primeras, Todas de piel blanquita, abundan las rubias, …. Frente a ellas allí estábamos Marta y yo, una morena y otra castaña, ella veintipico y yo treintaipocos, alegres, risueñas, con curvas, sin aspecto de caballos como suele ser habitual por aquí, bien arregladas, …., Marta prefería no llamar la atención en exceso para evitar pegas debidas a su condición sexual, prefería no lucir vestidos, faldas, ropa excesivamente ceñida, …. Una pena porque aparentemente luciría muy bien, ese día lucía unos simples vaqueros, una blusa blanca, unos zapatos con un tacón no excesivamente llamativo, su bolso, … yo lucía mi “uniforme” de trabajo, falda larga pero suelta, blusa, … y los eternos tacones, tanto Marta como yo solíamos usarlos para no descolgarnos mucho en altura de nuestras “vecinas” en eso claramente nos superan, por otro lado no se me escapaba el hecho de que en mi trabajo venía muy bien que la chica entradita en carnes que buscaba una dietista encontrara una que fuera su ideal de buen físico, delgada, fitnes, … y yo adornaba eso con un envoltorio que permitiera verlo sin renunciar a un aspecto profesional, …. Funcionaba.

Nos sentamos, nos armamos con nuestro café con nata y vainilla y ya puestas a saltarnos dietas dejamos que a la mesa llegara algún muffin … y dimos rienda suelta a los bichos dicharacheros que llevábamos dentro.

Por prudencia traté de no tocar de entrada temas relativos a su condición para no herir su sensibilidad, ¡que tontería! Bastaban 5 minutos de charla con Marta para darse cuenta de que estaba orgullos@ de ello,  me contó mil anécdotas que le habían ocurrido gracias a su falta de destreza con el idioma, no recordaba reir tanto desde hacía …. La verdad es que no lo hacía desde la última vez que había visitado España.

Siguió relatando cosas que empezaban a caer en el ámbito privado, no se si ella tenía más ganas de hablar que yo de escuchar o al revés pero al final el oído amigo que yo esperaba tendría que esperar a otro día y ser yo ese día su oído amigo. Todo un placer.

Había nacido en Colombia, familia humilde que poco a poco comenzaba a ver mejorar su futuro, … al llegar a la adolescencia sacó  a la luz lo que siempre supo que llevaba dentro, su parte femenina, descubrió que a diferencia de sus amigos también le atraían los otros chicos … y hay cosas que la sociedad no termina de digerir, burlas, alguna intimidación, no quiso extenderse en esa parte, acabó cambiando de escuela, vocación, … empezó a cursar cursos de interpretación ¿no es el sueño de la mitad de las adolescentes? Gente más abierta de mente en ese ambiente tanto en alumnos como en profesores, comenzó en esa época a travestirse, dejarse el pelo cada vez más largo, maquillarse, … feminizarse.

Los cambios no pasaban desde luego desapercibidos para su entorno que los observaban en muchos casos con curiosidad, otros con desprecio, otros con algo de envidia y un sin número con interés, comenzó a disfrutar del sexo en ese ambiente abierto, debido a su aspecto ambiguo tenía éxito con chicos y con chicas, algo impropio de su condición disfrutaba con ambos sexos y en todos los roles.

Indiscreciones, comentarios maliciosos, … empezaba a entorpecer nuevamente su entorno lo que no pasó desapercibido para una de sus profesoras, americana de Seatle expatriada gracias a que su marido trabajaba en una empresa de seguridad de esas imprescindibles en la Colombia de esos años, la acogió como si fuera parte de su familia, gracias a ellos abandono un camino que con seguridad la llevaría a un mal final, le dieron la posibilidad de respetarse a si misma, de disfrutar de la vida, cariño y el apoyo económico para iniciar su ansiado tratamiento hormonal, por desgracia las cosas no son eternas y debido a la bonanza colombiana la empresa de seguridad empezó a ser menos importante por los que sus “protectores” decidieron emigrar a la desgraciadamente convulsa Venezuela, en un último esfuerzo ante la evidencia de dejarl@ desprotegida en un ambiente “caníbal”  consiguieron por medio de amigos, empresas de amigos, … que obtuviera la ansiada “verde” que le permitía la residencia en el más llevadero USA.

En USA encontró un ambiente mucho más tranquilo, comenzó a trabajar duramente pero se estrellaba con dos muros, uno el idiomático que poco a poco iba superando aunque para ciertas cosas no le viniera mal una ayudita como la mía y otra la hipocresía de la sociedad muy abierta aparentemente pero que para muchas cosas seguía cerrada a personas de su condición sexual. La solución, la que habían elegido muchas de sus iguales, recurrir a la prostitución, por suerte ella no tuvo que pasar las calamidades de un sinnúmero de otras chic@s, una agencia de contactos de muy alto nivel se hizo cargo de representarla, acudía a alguna fiesta como acompañante, visitaba a sus clientes en hoteles lujosos, …. En fin, completamente alejado de la parte sórdida del negocio, ganaba una cantidad insultante de dinero, lo contaba sin ningún recelo, ell@ no veía nada malo en ello y oído de sus labios yo tampoco conseguí ver algo excesivamente negativo en ello.

La charla era tan animada y me encontraba tan a gusto que la indiscreción salió de mi boca sin pensar en lo que decía, … ¿y tu pareja que tal lleva que te dediques a esto? … mierda, ¿Cómo podía ser tan burra? … por un momento noté un deje de tristeza para dejar paso a una respuesta franca, … ¿pareja? No hay pareja, las ha habido pero han durado poco, es difícil para cualquiera asumir que mientras uno está trabajando en la oficina tu pareja está teniendo sexo con otros, por mucho cariño que haya es difícil mantener los celos a raya, la sociedad, … , Marta dudo,… y … si para cualquiera encontrar la pareja perfecta es difícil para alguien con tantas peculiaridades como nosotr@s más aun, en otra muestra de su energía vital, volvió a dar un giro al tono de la conversación, empezó a bromear, decía que era muy exigente … vuelta a mis pájaros ¿exigente? Sería como todas, ¿o no?

Después de la metedura de pata anterior preguntando lo que no debía y comprobar que ella ni se inmutaba mi curiosidad femenina se impuso al mínimo de cortesía para evitar molestar. Pese a encantarme el sexo y tener una mentalidad relativamente abierta me encontraba completamente fuera de lugar, la escuchaba hablar de su “trabajo” pero no imaginaba realmente como se desarrollaba, ¿curiosidad profesional? Jaja, ni de coña, ¿ganas de cotillear? Un poco, ¿curiosidad y … morbillo? Me temo que si.

-          Perdona Marta si te hago alguna pregunta indiscreta …

-          Jajaja, indiscreta, guapa echo de menos las preguntas indiscretas y de las otras, desde que estoy aquí es difícil encontrar gente sincera sin miedo a hablar a preguntar, a …

Que alegría encontrar esta disposición a las confidencias a tener ganas de tener amigas, …

-          Hablas de tu trabajo como el que habla de la oficina, pero, ¿no me imagino …?, esto, el servicio que ofrecen las chicas standard lo entiendo pero ¿los clientes cuando están contigo …?, mierda era una adulta hablando con alguien con un desparpajo muy superior a la media, sin pelos en la lengua y era incapaz de preguntar si ser soez, ¿Qué coño buscaban sus clientes en una chic@ como ella?, ¿Qué clase de clientes tenía?, ¿Qué le pedían?, …., afortunadamente ella entendió lo que no sabía verbalizar y me atajó contestando antes de que pudiera terminar.

Entre sonrisas, sin disimulo y guiñando un ojo

-          Ms doc, como me empezó a llamar,  me da miedo contarte cosas, se te ve tan linda y mimosa que temo pervertirte con mis cochinadas

Vamos que debía tener aspecto de mojigata para sus ojos, si no fuera porque no se adivinaba maldad me habría sentido insultada, así que la animé a que largara, ¿Qué es eso de quedar como una “mimosa”?

Empezó

¿Qué crees que buscan los hombres en mí? Rápidamente se autorespondió, en la prostitución normal buscan aquello que no encuentran en su día a día, buscan una chica más guapa que su mujer, buscan sexo sin preocupaciones, buscan prácticas que en casa significarían el divorcio, buscan el morbo de saber que hacen algo deshonesto ,…. En el caso de los clientes de las travestis buscan lo mismo con la diferencia de que el morbo es superior y las posibilidades … en fín, imagina.

Hay tantos tipos de clientes como clientes o aun más porque los gustos de cada cliente varía con el tiempo y la experiencia, muchas veces atiendo hombres que por morbo, por aburrimiento de chicas normales, por equivocación, por … en muchos casos identidad sexual no asumida prueban por primera vez, a ellos les vuelve loco estar con una chica preciosa, femenina y con algo extra respecto a las chicas normales, lo más habitual es que se limiten a comportarse con nosotras como lo harían con una mujer normal pero acercándose casi con miedo a la parte masculina que mantenemos, les gusta mirarla, cuando vencen el temor inicial tocan, jajaja, suelen tener tanta excitación y nervios que suelen aguantar poco, momento en el cual las dudas, el arrepentimiento les asalta y casi saltan de la cama como si esta quemara, es una putada porque me dejan caliente y a medias, la inmensa mayoría repite y poco a poco van animándose a masturbarme, después se animan a hacerme sexo oral, …. Y todos acaban penetrándome …. Con más tiempo muchos de ellos se atreven a dar el paso más complicado y me piden que sea la parte activa de la pareja …. Cuando llegan hasta ahí se caen todas las barreras y los juegos son …. Puedes imaginar cualquier cosa que seguro la he hecho

Procuraba escuchar serenamente pero …. ¿Qué tipo de café había tomado? Me notaba agitada al escuchar a Marta, empezaba a estar nerviosa, … joder, estaba húmeda, ante la sonrisa pícara de ell@ crucé los brazos en un sutil intento de tapar la marca que los pezones estaban haciendo en mi camisa, será cabron@, me está poniendo nerviosa solo con contar por encima lo que hace, no me extraña que me vea una mojigata … , para no parecerlo tanto continué la frase que ella había dejado en el aire

Sssii, siii, claro, … esto…, ya me imagino que harás de todo supongo que hasta tríos, parejas, … mierda ¿Qué coño estaba diciendo?

Ella empezó a reir de nuevo,   ¡vaya! Resulta que ms doc es muy curiosona, jjajaja, hizo ademán de responder …. Pero … el caso es que como estábamos hablando en español creíamos tener la intimidad total, pero uno de los “vecinos” de la mesa de al lado parecía muy muy interesado así que por si acaso la lengua de Cervantes era amiga suya … la pregunta se quedó en el aire, cogimos nuestros bolsos y nos marchamos, casi lo agradecí, no entendía porque me había excitado.

Andábamos por el centro comercial de camino a los coches ... dos mujeres solas, con dinero, ganas de charlar, tiempo libre y en un sitio repleto de tiendas … el camino al parking se fue alternando con vistazos a algún escaparate, comentarios sobre compras y al final claudicamos, entramos en tiendas y nos entregamos abiertamente al shopping.

De la primera tienda salimos con 1 bolso nuevo cada una, daba gusto ir de compras con alguien tan coqueta como Marta, a mi marido le quiero mucho pero verle poner caras a los 10 minutos de entrar en cualquier tienda hace que ir de compras con él no sea lo mismo, sin embargo ella se podía tirar media hora viendo como lucía ante un espejo con todos los bolsos de una tienda y luego tirarse media hora comentando como me quedaban a mi cuando me los probaba, en la siguiente tienda nos comportamos como dos simples adolescentes, bisutería, pulseras, prendidos de pelo, collares … nos probamos una cantidad ingente, nos mirábamos en el espejo, Marta se soltó un par de botones de la blusa para ver como le quedaban los collares, dejando a la vista un sugerente escote, al encargado de ir mostrándonos modelos se le empezó a ir la vista, en fin todo muy normal, hay que reconocer que se veía muy sensual, no hacía falta una cinta métrica darse cuenta de que el pecho de Marta era sensiblemente mayor que el mío, ¡hay que joderse! Una tan orgullosa de sus tetas y al ir de compras el dependiente se fija en las de una chica con pene, ¿envidia? Seguro que un poco. Cuando llego mi turno de probarme la autoestima volvió a su ser, el dependiente dejaba escapar miradas a mis pezones marcados en la blusa, algo es algo, aunque prefería no pensar  porque se me habían puesto duros.

Paseando cargadas con las bolsas casi nos vimos obligadas a entrar en Zara, blusas, pantalones, botas, ¿por donde empezar? Como solo dejaban pasar tres prendas al probador por persona y como aunque yo era un poco más alta éramos de complexión similar aprovechamos para pasar cada una con sus 3 prendas pero probándonos las nuestras y las de la otra …. Fácil …. O no tanto, empecé yo probándome una blusa, como no había sitio en el probador para las dos y las bolsas de lo que ya habíamos comprado teníamos que ir probándonos de una a una, la otra mientras tanto esperaba dentro, ¡que buenas amigas!, me quité mi blusa y la colgué al mismo tiempo que caí en la cuenta de que no tenía sujetador y Marta era una chic@ especial, la pedí perdón pero ella alegre como siempre dijo que no me preocupara, que estuviera a gusto … la verdad es que me había cortado un poco … pero el morbo … allí estaba con mis tacones, con mi falda, con las tetas al aire, con Marta mirando con cierta fijación y yo con los pezones tiesos.

Jajaja, Marta volvió a reír, ¿tienes frío? Note el color en mi cara sin mirar al espejo, ¿Por qué coño estaba excitada?, ¿sería imaginar las escenas que debía hacer Marta con sus clientes?, ¿sería que la ausencia de mi marido y el sexo diario me tenía hambrienta? …. Desde luego el que Marta mirara más de lo imprescindible a mis pezones no ayudaba, ver escapar algunos brillos a sus ojos tampoco … imagino que para romper un poco la situación trató de alagarme

-ms doc, tienes unas tetas muy bonitas

-gra gracias

Como pude me probé la camisa, mmmm creo que me queda algo grande, parece un saco, Marta muy mañosa recogió un poco la blusa en mi espalda para ver si así mejoraba y la verdad es que ni con esas, al sentir su mano en mi espalda sentí un escalofrío que es imposible que ella no notara …  visto que esa a mi me iba grande, Marta directamente la descartó para ella.

Volví a quitarme la blusa y otra vez me sentí ¿desprotegida? Supongo que algo de eso habría, Marta las miraba con poco disimulo, probé la siguiente blusa, esta era perfecta, femenina, entallada, … quizá demasiado para ir sin sujetador como a mi  me gustaba. Marta, picante volvió a preguntar,

ms Doc ¿otra vez con frío?

me sentí avergonzada, orgullosa de mis tetas, excitada por la situación, ella continuo

Es perfecta para ti, pero creo que no vas a poder llevarla así, sin sujetador o a más de un doctor en la clínica le va a dar un mareo

Jajaja, reimos juntas, agradecí su frescura, la verdad es que era demasiado provocativa llevarla así, me encantaba y por supuesto iba al montón de lo que me llevaba, ya más relajada después de las risas seguí probándome el resto de blusas … hasta agota todas …. Turno de Marta cambiamos los papeles, ahora me tocó sentarme a mi, ella se colocó ante el espejo y a diferencia de mí tuvo la delicadeza de preguntar a sabiendas que si ella no había puesto pegas antes tampoco lo haría yo ahora, ¿Por qué iba a haberla? Toda la vida había ido de compras con amigas, siempre nos habíamos metido juntas en los probadores, nos habíamos visto completamente desnudas y jamás había habido ningún problema … siempre me fijaba en como quedaba la ropa en mis amigas pero nunca en mis amigas, lo mismo les ocurría a mis amigas, no nos vamos a alterar por estar medio desnudas en el probador …. Mierda todo eso me sonaba ahora a falso, estar con las tetas al aire en aquel probador diminuto, atestado de ropa y bolsas, con calor, con Mart@, sabiendo lo que era, a que se dedicaba, …. , me había puesto inquieta.

Allí andaba yo con mis pensamientos hasta que Marta me sacó de ellos, se quitó con naturalidad la blusa, lógico pensé yo lo hará mucho con sus clientes mientr …. Mierda otra vez empezaba a imaginar cosas que me ponían nerviosa … Ella quedó con el sujetador …. Intenté hacer como siempre, fijarme en la ropa, … al llegar a la camisa que me había gustado hizo lo mismo que yo, probarla sin sujetador, … al quitárselo pude ver bien sus tetas … no me extraña que los hombres no la quitasen los ojos de encima, eran mayores que las mías, no eran melones, eran … del tamaño perfecto para su cuerpo … estaba frente a mi con sus tacones, sus vaqueros, su cintura estrecha, las tetas al aire, los pezones …jajaja, no lo podía creer, era mi turno

Marta ¿tienes frío?

Tenía los pezones duros, apuntando hacia arriba, … mierda me estaba fijando descaradamente en sus tetas … y ella se estaba dando la misma cuenta que yo lo había hecho cuando me las miraba ella. Había visto desnudas a un montón de amigas, cosa que nunca me había provocado ningún tipo de sensación, jaja, había visto más tetas que la mitad de los tíos y … la verdad es que Marta era de lejos la que tenía las tetas más bonitas de todas, increíble teniendo en cuenta su condición, pero claro con operación y prótesis cualquiera puede, …

Marta tienes un pecho espectacular, el cirujano que te operó debía ser un genio porque por más que las miro no veo ninguna cicatriz.

Ella fingió ofenderse, oye de operaciones nada, esto es a base de purititas hormonas, toca toca, cogió mis manos para llevarlas a su pecho para acabar apoyándolas con todo el descaro sobre sus tetas … me quedé tan descolocada que sin pensar hice lo que me decía, comprobé sus tetas, eran suaves mmmm, calientes, apreté un poco y comprobé que allí no había relleno artificial, eran tersas, duras, notaba en mis dedos sus pezones duros … noté como mis pezones estaban nuevamente erectos y sentí la humedad de mi sexo, el tacto de su piel me provocaba escalofrío, no era capaz de separar mis manos de sus tetas, las notaba vivas … habría dado cualquier cosa por juntar mis tetas a las suyas para rozarlas, …. ¿joder que me estaba pasando? Nunca había tenido ningún sentimiento lésbico ….

Al final conseguí separar las manos después de un tiempo injustificablemente largo, mi agitación no se calmaba y lo peor fue ver a Marta menos fresca que antes, la ví un poco cortada, …

No se como pero acabamos saliendo de aquel maravilloso probador, salimos de la tienda con sensaciones extrañas, … pero ambas nos encontrábamos en la gloria …. La siguiente tienda nos volvió locas, llegamos al probador cargadas de faldas, al menos en este caso era más amplio y nos los podíamos probar al mismo tiempo.

… las dos de pie, sin parar de charlar, como yo iba con falda fui más rápida que ella, quería ser la primera en probarme una falda negra que me tenía que hacer un culo de escándalo, ella mientras se fue quitando los tacones para seguir con sus vaqueros, gané fui la primera, allí estaba yo con mi blusa, mis tacones, en braguitas de cintura bajita …. con humedad en las braguitas … me gire para coger la falda de la percha y pude ver como Marta miraba mi culo, no quise prestar atención, me puse la falda … Marta pareció dudar a la hora de despojarse de los vaqueros … la animé vamos, no seas tonta que nos tenemos que probar mucha ropa ….

Verás es que …

Nada de “es que …”  no vamos a andar ahora pidiéndonos permiso –atajé-

Aun después de haberlo dicho, ella dudo, se fue quitando el pantalón de espaldas a mi … llevaba unas braguitas parecidas a las mías suficientes para ver que tenía un culo llamativo, antes había visto su cintura estrecha, ahora su cadera ancha, su culo respingón, sus nalgas se veían prietas …. se giro y … la verdad es que me pillo desprevenida, me quede parada mirando como sus braguitas blancas tapaban su sexo, pero eran incapaces de hacerlo pasar desapercibido, se adivinaba que se lo había colocado todo lo atrás que podía para disimularlo pero no era suficiente, se veía extraño, estaba abultado, se adivinaban varios volúmenes, testículos, pene … pero no se distinguían claramente, a pesar de que su pene estaba en reposo y ocultado por sus braguitas se veía un paquete … digamos que no todos los chicos de los que he conocido íntimamente se veían tan … presentes.

Con toda la normalidad que se podía, Marta se volvió a poner los tacones para ver el efecto real de las faldas, nos las íbamos probando, comentábamos, nos las cambiábamos.

Tanto probar, tanto movimiento de ropa, más tranquilidad, Marta me ayudaba a abrochar algún botón, yo la ceñia alguna falda un poco grande, una se probaba una falda y levantaba el culo ante el espejo para ver como quedaba, la otra dejaba escurrir su falda por sus piernas para probar la siguiente, … Marta miraba mi culo, ella se agachaba para coger una prenda … yo intentaba que no se notaran los pezones en la blusa …. En fin lo normal J … o casi, volvía a estar tensa, volvía a estar húmeda, mis braguitas volvieron a delatarme, no me hacía falta mirarlas para comprobar esa humedad, para comprobar que mi “pezuña” era evidente y mi desarrollado clítoris se adivinaba tras la fina tela …. esto no se le escapó a Marta, lo miró con inquietud, nerviosa … y yo … me quedé sin aire …. Mi vista se clavó en su braguita, lo que hasta hacía segundos era un paquete notable pareció despertar de su letargo, asistí en vivo a su erección, era incapaz de retirar la vista, no era dueña de la situación, Marta tampoco, en segundos vi como de entre esos volúmenes indeterminados uno comenzó a crecer, el bulto de su braguita iba cambiando de forma, de volumen, la tela cambiaba su textura, de algo dulce y suave estaba pasando a algo firme y tenso por intentar contener lo que crecía tras ella, su pene iba creciendo y rápidamente escapó de la prisión a la que Marta lo había condenado en un intento por ocultarlo todo lo atrás posible, ahora era claramente distinguible tras la tela, lo ví crecer, lo vi endurecer, asistí sorprendida a su desborde por encima de la gomita de su braguita baja para continuar hasta alcanzar su tamaño completo bajo su blusa, … la braguita pensadas para cubrirnos a nosotras no parecían lo mejor para tapar volúmenes prominentes, ante el abultamiento respondieron separándose de su pelvis dejando hueco entre ellas y la piel de Marta … siempre me ha gustado poner a los chicos calientes, he visto crecer unas cuantas pollas pero nunca había visto una erección como aquella, habían bastado unos pocos segundos para que pasara de un tranquilo letargo a una erección en la que a pesar de la tela que la cubría era visible la textura de su miembro, se adivinaban pliegues, gruesas venas, … y un tamaño … impropio … siempre he pensado que mi marido estaba bien dotado y Marta a juzgar por el volumen debía igualarle, pero destacaba más aun teniendo en cuenta la diferencia de alturas, la proporción era …. ¡joder que situación!... Marta había perdido su locuacidad, tímidamente pidió disculpas,

Verás, es que un@ … hacía mucho que no veía a una mujer desnuda, y bueno … tu …

Nnno, noo, no te preocupes Marta, eso es natural ….

¿natural? Y una mierda era natural, para empezar me sentía ridícula, desde el principio había imaginado a Marta como una mujer con pene a la que le gustaban los hombres, había aceptado que era una amiga con algo diferente pero ni por asomo se me había pasado por la cabeza que a ella le pudieran excitar las mujeres y para seguir tampoco era natural que por el hecho de verme en braguitas se pusiera cachond@, con Bob, con parejas anteriores había ido de compras cien veces, me habían visto cambiarme, quedarme en braguitas … alguno había tonteado … a alguno se le había puesto morcillona, incluso con alguno había follado en un probador, pero eso … joder si podía ver hasta las palpitaciones de su polla … y ese volumen … a pesar de no poder verlo claramente porque su braguita lo impedían era al menos respetable. ¿Cómo iba a ser natural? Yo que nunca había sentido nada al ver a mujeres me había excitado con el hecho de ser observada por Marta y por verle sus tetas desnudas, había mojado mi braguita por estar las dos en braguitas y ahora viendo esa polla tras la braguita …. Desde que conocí a mi marido no había vuelto a ver ninguna ….

No sabíamos como reaccionar, por suerte, notamos como el probador de al lado era ocupado por lo que volvimos  a poner los pies en el suelo, sin hablar, torpemente, tensas, nerviosas, terminamos de probarnos las faldas y salimos de la tienda ….

¿Qué decir?, ¿Qué hacer?, me sentía mal al notar que perdía una amistad incipiente, notaba que sus pensamientos eran parecidos, no debía permitir que unos impulsos absurdos me hicieran renunciar a una amiga tan necesitada … había que romper el hielo

¡vaya con Martita! Así le decías al doctor que no tenías problemas de hormonas.

Ella agradeció horrores que rompiera la situación.

¡qué bobas! Nos reímos como chiquillas

Entre el café, la charla, las compras, las “sorpresas” se nos había ido la tarde tan rápido que no nos habíamos enterado.

¿volver a casa?¿a una casa vacía sin mi marido?, ¿a cenar viendo la tele?, joder si se me había hasta pasado la hora de mi baño “relajante”, con lo bien que me habría venido…

Marta, parecía ir un paso por delante,

oye Doc, hoy no tengo “trabajo”, me lo estoy pasando genial, poder hablar toda una tarde sin usar el dichoso ingles me está sentando estupendamente y me ha abierto el apetito, ¿te apetece que cenemos juntas?

¿me habría leído el pensamiento?, ¿para que hacerse de rogar?

Claro, ¿Cómo no?

El sitio es lo de menos, la comida, ¿Cómo no? Hamburguesas talla USA y unas cervezas para hacerlas más llevaderas.

Charlábamos sin parar de las compras, ropas, Colombia, España … dejábamos a parte temas más jugosos pero cuando en la mesa apareció la segunda cerveza vacía la lengua se empezó a soltar.

-          Marta, perdona por lo de antes, simplemente me sorprendió …

-          Todo lo contrario Doc, discúlpame tu, mi reacción … tampoco me la esperaba … debí decirte que al igual que mis “iguales” me encantan los hombres, me encanta que me posean, … pero disfruto más mi faceta “activa” a diferencia de mis congéneres, como has visto, la hormonas son incapaces de doblegar mi virilidad … y las mujeres … tal vez sea porque no recurren a mis servicios … pero no puede evitar que a veces saquen de mi esas “reacciones”

-          … Si te digo la verdad, hasta me ha hecho gracia, ahora entiendo lo que decías en la consulta de tus hormonas …

-          A veces es una tortura, dulce pero tortura al fin y al cabo, me siento muy suci@ por no poder controlar esos instintos …

-          ¿sucia? Deberías sentirte afortunada por disfrutar de esa manera, ya quisiera yo … , mierda ¿Qué hacía otra cerveza en nuestras manos? … me empezaba a encontrar deslenguada… mi curiosidad iba en aumento y mi cortesía iba a menos, me animé a cotillear, … al otro doctor le has dicho que atendías a varios hombres en un día si hacía falta  ¿pero …?

-          Doc la curiosidad mató al gato, dijo riendo, ya sabes hay hombres que ya saben lo que buscan, han vencido sus miedos y disfrutan del sexo con chic@s como yo, para ellos me visto sexy, no me da miedo lucir faldas como las que hemos comprado junt@s aunque se note en ellas mi sexo, lencería de la que las tiendas no se atreven a poner en el escaparate, les desnudo, les lamo, los sobo, me desnudan, juegan conmigo … mi virilidad jaja en este negocio es un plus, muchos se sorprenden cuando al desnudarme se encuentran con mi pene ya erecto, lo normal es que ellos sean más lentos que yo …. Y  …. Casi siempre menos dotados, dijo guiñando un ojo, me encanta que toquen mi pecho y eso les lleva a muchos a verme como más mujer que otra cosa y se animan a usarme como tal, me penetran … y yo disfruto más que ellos, es increíble que me paguen por disfrutar, lo malo es que mi profesión es el sexo, lo ejercito mucho, conozco mis límites … y por “desgracia” mi aguante es mucho mayor que el de mis clientes, cuando eyaculan normalmente se acaba ahí la cosa y yo tengo que quedarme “fría” no piensan en que mi excitación es enorme, con algunos si la ocasión se presta a ello me quito el calentón masturbándome delante de ellos, muchos me ayudan e incluso a pesar de ellos estar satisfechos me echan un cable con la boca, normalmente me piden que me derrame sobre ellos ….

No me podía creer lo que estaba escuchando, ¡que puta! mi Marta a pesar de su aspecto era el perfecto putón, disfrutaba más que sus clientes, sus clientes …. La verdad es que después de haberla visto esta tarde en el probador, era un animal sexual … lo que contaba… la homosexualidad vista así ¿realmente lo era? … imaginarlo … ¿húmeda? No, estaba empapada, me notaba espírica, no me importa decir que tenía el clítoris a tope y que el roce con mi braguita mojada …. En ese momento me sentía una auténtica guarra feliz

… otros clientes, con más experiencia no tienen límites, unos días reciben otros dan y en el extremo esta mi tipo de cliente favorito, que adora mi cuerpo femenino, mis tetas, me agarra el culo, … pero que en el fondo entienden que la parte viril de la relación es mía, me dejan hacer, se comportan como mujeres, no en el sentido de afeminados, no, es distinto … cuando les beso sus movimientos, la manera en que se colocan es la propia de las mujeres y la mía … gozan cuando me practican sexo oral, la mayoría se olvidan de su propio pene y cuando les penetro … su comportamiento …. Me rodean la cintura con sus piernas, se les ponen los pezones duros y por suerte al no excitar directamente su pene aguantan un poco más dejando que muchas veces pueda correrme al mismo tiempo que ellos o poco después. ….

No daba crédito a lo que oía jamás había pensado como podrían ser esas relaciones con transexuales y allí estaba escuchando con pelos y señales de boca de una de ellas cuan cerdos y viciosos podían ser los hombres …. Marta hablaba de ello como el que habla del tiempo, para ella era natural, pero para mí … sentía arder mi cuerpo … humedad, excitación y unas ganas muy difícil de contener de bajar mi mano, tocar mi botoncito y dejar correr el orgasmo que desesperaba por salir

… desde que era muy joven he  tenido la extraña capacidad de que mi pene se erectase tantas veces como quisiera y eyacular muchas veces, tanto es así que los días que no trabajo o no trabajo todo lo que quisiera tengo problemas de erecciones inoportunas que debo calmar al llegar a casa para poder descansar.

Dicho esto lo adornó todo con una sonrisa y una cara angelical impropia de semejante zorra

Las cervezas se habían acumulado en exceso, prueba de ello era la barbaridad que acababa de relatar Marta y el hecho de que lejos de provocar desprecio, repulsa o cualquier otra cosa en mí solo producía morbo, excitación, …

Se me soltó la lengua

-          Y hoy Marta, con la visita a la clínica, la tarde de compras ¿has trabajado?

-          Mala, mala, mala!!! dijo riendo, no, no lo he hecho y ya has visto lo que ha pasado en el probador

-          ¿y ahora como estás? dije sonriendo

-          Mucho peor que en el probador porque además de excitad@ veo en los ojos y la respiración de la doctora que no soy la única caliente

Me puse muy roja, … y sin esperarlo, al ser descubierta … empapé mi braguita, cerré los ojos e intenté disimularlo pero Marta … en fín no soy tan buena actriz para disimular tanto, lo noto, la oí decir con voz queda ¡joder! Mientras suspiraba profundo

Volvió a aparecer el camarero con otras dos cervezas, necesitaba calmar mi espíritu después de eso, enfriar mi mente y dar tranquilidad a mi vejiga, dichosa cerveza, me levanté para ir al baño y Marta me imitó.

Un sitio pequeño, publico, tuvimos el suficiente sentido común para entrar cada una a un aseo, mientras recuperaba la paz de mi vejiga J escuche lo mismo en el aseo de Marta, me imagine el espectáculo de una chica preciosa, con su blusa anudada enseñando el ombligo, con sus tetas asomando por el escote, de pie, con los pantalones simplemente desabotonados y con una polla como la que su braguita me había dejado imaginar asomando de unas braguitas sobrecargadas de trabajo para contener su preciada carga, meando como lo haría cualquier hombre … mierda, no podía aguantarlo, mi mano no dudo en tocar mi sexo arrancándome un profundo orgasmo … me adecenté rápidamente y salí de nuevo al salón.

Marta apareció segundos después, con cara sonriente e inocente, ¿Qué tal doc te he oído suspirar? Dijo mientras giñaba un ojo.

¡será guarra!, me encantaba

¿tu que tal Marta?, ¿has suspirado? Ahora la que guiñaba el ojo era yo

No doc, prefería venir a estar contigo en la mesa, el “suspiro” lo tendré que dar después para dormir tranquila, tal vez hoy necesite suspirar varias veces.

Hay que reconocer que a esas alturas ya hablaba tanto la cerveza como nosotras

¡Qué pena Marta! Me habría encantado oírte “suspirar”

Pero ms doc, fingió escandalizarse.

Me encantaba esta desvergonzad@

No seas falsa Marta, me has contado como te dedicas casi a violar hombres y ahora te extrañas ahora de que quisiera escucharlo …

Pero ms doc, he visto que llevas anillo de casada, eres mujer …

Entre los vapores alcohólicos me resultó hasta ingenioso contestar:

Casada si, y por eso soy incapaz de mirar a ningún otro hombre, pero tú … y si soy mujer, ¿no te gusta?, ¿te doy envídia? …

Acercó su boca a mi oído, ms doc, cuidado con lo que deseas. Las mujeres me gustan tanto como los hombres pero por desgracia ellas no suelen contratarme y … aproveche para posar la mano sobre su pantalón … puta …. Estaba excitada, noté su erección, el alcohol nos estaba soltando, ella bajó con disimulo su mano sobre mi falda, tanteando con discreción, no me avergüenzo, me corrí solo con su contacto

¿Qué coño hacíamos en un restaurante aún? Pagamos con prisa, pedimos que nos llamaran a un taxi para no conducir y nos marchamos a mi casa …

Borrachas llegamos, borrachas entramos riendo …

Ms doc que bonita casa …

Falsa, la casa te la trae floja

Mmmmm, no, la casa me trae al fresco, pero floja???? Jajaja, se reía

Me acerque, no me hacía falta palpar su vaquero para ver que era cierto.

¿una copa?, ¿un jacuzzi …? Me aceptó las dos cosas

Acompañe a Marta al baño donde estaba el Jacuzzi, me quité mi falda y mi blusa y con mis tacones y mi braguita salí a preparar las copas … de vuelta … estaba Marta “vestida” igual que yo, se había quitado el vaquero, la blusa y el sujetador, estaba de pie, con sus tacones y su braguita…. La imagen era turbadora …. Aquel paquete dentro de esa braguita, mi mente estaba confusa …. Al verme entrar con las tetas al aire y con mis braguitas dio muestras de su condición de animal, según avanzaba hacia ella notaba como nuevamente su paquete cobraba vida.

¿y ahora que? La pregunta duró en mi mente lo que tardé en estar junto a ell@, nos miramos y nos dimos un profundo beso, largo, húmedo, … mis pezones cobraron vida … y los suyos … también los noté en mi piel, noté como se erectaban, acerqué mis tetas a las suyas, busqué con mis pezones los suyos …. Sus tetas … ahora las podía ver en toda su magnitud al compararlas con las mías, eran bastante mayores que las mías, los celos que me había provocado antes comprobar que un transexual tenía mejores tetas que las mías eran historia, porque ahora me estaban dando un placer indescriptible, las notaba duras contra las mías, al restregarnos notaba sus pezones rozar mis tetas y los míos las suyas, la sensación de estar teta contra teta nos estaba excitando a marchas forzadas.

Marta demostró desde el mismo comienzo una sensibilidad mayor que la de nadie a la hora de saber como dar placer, sus besos no cesaban, sus manos no paraban de acariciar, cara, cuello, tetas, pezones, chupaba mis pezones de manera insistente. Por mi parte por la novedad, por que me gustaba, ¿Qué más da? No dejé de hacer lo que a mi me gustaba que me hicieran, era la primera vez que comía unas tetas pero me pareció de lo más excitante …. Notar sus pezones … la dureza …. Besar el lóbulo de sus orejas ….

El calentón no menguaba y Marta bajó sus manos hasta mi culo mmmm lo agarró con fuerza, atrayéndome hacia ella. Al tocarla noté su polla contra  la parte baja de mi abdomen … dura … caliente …. Separó mis nalgas con sus manos, apoyo su polla contra mi con más fuerza, noté mi clítoris a punto de reventar, me separé de ell@ lo suficiente para comprobar el espectáculo, la polla que antes en el  probador asomó por encima de su braguita para esconderse bajo su blusa ahora aparecía solo tapada por la braguita que no conseguía ocultarla en toda su longitud, por encima de la gomita sobresalía, gruesa, palpitante, dura, … yo estaba desbocada … mirándola a los ojos acerté a tomar su braguita por arriba y deslizarla suavemente hacia abajo, dejándola caer hasta sus tacones … la visión … al mirar para abajo vi nuestras tetas casi rozándose, mi braguita empapada, los zapatos de tacón de las dos, su braguita sobre sus zapatos, su polla … por primera vez la veía, estaba completamente depilada, era larga, venosa y gruesa, las había probado más largas, algunas más gruesas pero desde luego esta era de las mayores que había visto, estaba tensa, con el glande brillante de lo tenso que estaba, sus testículos, compactos acrecentaban la sensación de, me había enamorado de su miembro, la tome con mi mano, iba temblorosa, hacía años que solo tocaba la de mi marido, por absurdo que parezca no tenía la sensación de estar engañándole con otro hombre, aun hoy tengo mi conciencia tranquila con ello, al tocarla, comprobé la dureza, increíble, mi marido no conseguía esos niveles, el tacto … tuve la sensación de mover algo pesado, serio … denso … me sorprendió, nunca había tenido una sensación parecida, el grosor … mi mano tomo la punta, mis dedos no la abarcaban completamente, fui desplazando mi mano por su polla suavemente, sin soltarla … en la base mis dedos se separaban aun más …. Miré a Marta, había cerrado los ojos al notar mi tacto, su cara reflejó tensión, placer, … solte por un momento mi presa, lo justo para acariciar sus testículos, mmm prietos, húmedos …. Al sentir su polla abandonada por un segundo Marta abrió los ojos, puede ver el vicio en ellos, volví con mi mano a intentar abarcar su polla y comencé un suave masaje, la empecé a masturbar con mucha suavidad,  su polla lo agradecía con leves pulsaciones … Marta me regaló un profundo beso mientras deslizaba sus manos por mi cintura hasta alcanzar mi braguita, suavemente las deslizó hacia abajo, noté como caían hasta mis tobillos, su mano inquieta buscó mi sexo depilado, al tocarme sentí un escalofrío de placer, acaricio mis labios, suspiré cuando rozó mi clítoris erecto.

Al notar el contacto Marta se retiró para verlo , igual que había hecho yo, su cara se transformo, se ilumino.

Mmmmm, ms doc, parece que no soy la única bien dotada, nunca antes había visto un clítoris así, me sentía alagada, con dulzura separó mi mano de su polla para a continuación arrodillarse, su cara quedó a la altura de mi sexo, sin darme tiempo a reaccionar, sin dejar siquiera que retirara las braguitas de mis zapatos, agarró mis nalgas con ambas manos y llevo su boca a mis labios, mi clítoris … cuando me pongo cachonda crece, algunos chicos me han dicho que parecía una pequeña polla, mide unos 3 centímetros y como dije es mi mayor fuente de placer, me corro si lo excitan con la lengua, con la polla, … lo que compensa mi dificultad para correrme con la penetración. Demostró una sensibilidad impropia de alguien que disfruta de los hombres, con su lengua fue dando masajes circulares, rozando mis labios, con la lengua los apartaba para masajear los labios menores, de vez en cuando los abandonaba para dar besos en los labios y cada vez más cerca del clítoris, su lengua lo acariciaba furtivamente para volver a los labios, el juego, los amagos, me estaban superando, notaba como me estaba mojando, Marta en lugar de cortarse vio en ello un aliciente y se empeño aun con más fruición, mis flujos se mezclaban con su saliva, con la humedad el masaje … era sonoro … súbitamente asaltó mi clítoris haciendo que de forma inmediata sintiera llegar el orgasmo, no paraba de lamer mi clítoris duro, y el orgasmo fue largo, muy largo, mis piernas flojearon pero Marta me tomó más fuerte del culo para ayudarme, noté como empapaba la boca de Marta … lejos de frenar con sus manos abrió mis cachetes dejando expuesto mi culo …. ¿es que nunca pararía aquel orgasmo?.... conseguí reponerme lo suficiente para poder desprenderme de la braguita que aun permanecía en mis tobillos e impedía que separara las piernas, libre de impedimentos abrí las piernas facilitando el trabajo de Marta, estaba tan caliente que con mis manos agarré su cabeza para presionarla contra mi, no quería que se separase un solo milímetro, me sentía realmente sucia. Marta no pareció intimidarse, su lengua era experta en encontrar puntos placenteros, se movía en círculos por toda la zona, yo ya no sabía ni donde estaba lamiendo semejante puta, por momentos sus lengüetazos se ampliaron al perineo, ni siquiera yo sabía que tenía tan sensible esa zona entre la vagina y el ano … mmmm … con el culo abierto y lamiendo esa zona mi cuerpo volvió a descontrolarse, volví a notar como la empapaba la cara, a ell@ la daba igual …

Por un momento decidí cambiar las tornas, estaba siendo egoísta, separé su cara y la ayudé a alzarse ante su cara de desconcierto, eso duró poco, el tiempo que yo tardé en volver a besarl@, noté el sabor a mí en su boca, que placer, volví a tomar su miembro con mi mano, ¡joder! Yo pensaba que ya no la podía tener más dura … me arrodille … con ese miembro delante todo parecía diferente, era grande, era impropio de un cuerpo tan menudo, derrochaba virilidad, pocas de las pollas anteriores soportaban la comparación, era la más varonil de cuantas había visto … la punta aparecía húmeda, se escapaba alguna gota ocasionalmente,  encendiendo aun más a la zorra en la que me estaba convirtiendo, allí rendida de rodillas, la tomé con las dos manos, junte los dedos de ambas para así poder abarcarla entera y comencé a masturbar muy lenta y suavemente, su propio líquido preseminal servía de lubricante, solté las manos para volver a agarrar nuevamente, esta vez una mano sobre la otra en un vano intento de cubrir toda su longitud, aun quedaba un buen trozo al descubierto, continué  masturbando subiendo el ritmo poco a poco, podía oir claramente los gemidos de Marta, excitada, mirando la escena desde arriba, bajó una mano para acariciar mi cara y manosear mi boca mientras se llevaba la otra a su pecho, comenzó a amasarse con fuerza sus tetas, pellizcaba los pezones … su polla volvía a derramar líquido preseminal …. Yo no podía aguantar más la tentación, mi boca tomo su polla, tímidamente, anteriormente había tragado sables importantes, pero este … mmm …

Mis labios abrazaron suavemente su glande, caliente, palpitante, mojado, grande … fui bajando muy poco a poco, haciendo un gran esfuerzo para abrir la boca tanto como pudiera y evitar que mis dientes rozaran tan deseado miembro.

Marta dejó hacer, abandonó mi cara para amasarse las tetas con las dos manos

Trataba por todos los medios de ir introduciendo más polla en mi boca, me sentía superada, … traté de ayudarme con una mano, combinando la mamada con masturbación, intenté con la mano bajarla un poco para hacer más cómoda la felación pero  simplemente aquello estaba vivo, su resistencia a doblarse hacia abajo era absurda, temí incluso hacerl@ daño, desistí y puse mi alma en la felación, por momentos fui mejorando la profundidad, cuanto más bajaba más me animaba, lo estaba haciendo bien, aceleré la paja, y Marta recibió el exceso de excitación enérgicamente abandonó sus tetas para agarrar mi cabeza y de manera inopinada ayudar a introducir su polla en mi boca, sentí una pequeña arcada, jamás había tan suciamente, nunca había sentido mi boca tan llena, me estaba sintiendo usada y lo estaba disfrutando … por mis muslos corría abiertamente el flujo que manaba de vagina, imitando lo que a mí me gustaba pasé la otra mano tras Marta para agarrar una de sus nalgas … al hacerlo noté como su polla vertía más liquido en mi boca …. Ella agradeció el gesto, solté la mano con la que la estaba pajeando y la llevé a la otra nalga, las empecé a masajear, a separar, … Marta soltó sus manos de mi cabeza, estaba como un animal poseído de excitación, subió una de sus manos a su pecho para sobarse impúdicamente y bajó la otra a la polla para continuar masturbando como yo lo había hecho, liberada no dejé de profundizar en cada mamada, cada vez que retiraba mi boca para volver a metérmela más profundo podía ver su polla completamente brillante por mi saliva, envalentonada, con sus nalgas separada dejé escapar uno de mis dedos a su culo mmm que agujero más cálido, al meterlo pude notar la tensión que la base de la polla ejercía en las paredes de su ano, las palpitaciones …. Marta aceleró la paja, lo hacía violentamente, yo aceleré la mamada….

Note como su culo se contraía sobre mi dedo, escuche a Marta gemir dejando traslucir algunas notas varoniles en su voz, su polla comenzó a convulsionar y de repente note el calor de su semen, por suerte tenía en la boca solo el glande, notaba como su polla lanzaba el semen violentamente, Ella continuaba pajeandose y continué masajeándole el ano, con la excitación su boca escapó de la calidez de mi boca, su eyaculación no se detuvo, continuo soltando groseros chorros sobre mi cara y mi pecho, eran chorros abundantes, calientes, espesos, no se cuantos salieron pero me parecieron muchos, mi cara  estaba empapada, mi pecho salpicado y mi boca llena … no sabía que hacer, yo seguía muy cachonda, marta me ayudo, se arrodillo frente a mí y me dio un profundo beso, sabía que yo aun tenía su semen en la boca y pretendió arrebatármelo, lo defendí, nuestras lenguas lucharon por el, se resbalaba por la comisura de nuestros labios, sentía mi clítoris reventar, al comprobar que mi boca había quedado limpia Marta puso su empeño en recoger lascivamente con su lengua el semen que bañaba mi cara y el que había caído en mis pecho, que zorra, con que dedicación se aplicó a recoger lo que había caído en mis pezones.

De rodillas, completamente cachonda y con Marta que acababa de eyacular me sentí frustrada, como con cualquier hombre, una vez se corrían … ¿Qué hacía Marta? Seguía chupándome las tetas, se había movido ligeramente para ponerse a cuatro patas sobre sus rodillas y manos, acercó una de sus manos a mi vagina y empezó a introducir dedos, acariciar mi botón … mmmm …. Desde mi posición la veía con el culo en pompa, las caderas muy marcadas …. Mmm …. Hija de puta …. Sabía lo que hacía, el orgasmo llego y lo prolongó de manera increíble, chupando con fuerza mi pezón

Recuperé un poco la respiración pero Marta no por ello desistía, imaginé que trataba por todos los medios de hacerme disfrutar, parecía egoísta por mi parte, con las manos la tome de la cara para darle un profundo beso de agradecimiento, poco a poco se fue incorporando …. Me separé un poco …. ¡Que puta viciosa era! … no pretendía agradar simplemente volvía a estar cachond@, tenía la polla como una piedra y quería seguir disfrutando, ¿Cómo era posible? Mi marido necesitaba bastante tiempo para recuperarse …. Marta …. No estoy segura siquiera de que se le hubiera bajado …. Si hubiera tenido sentido común habría puesto freno pero … yo estaba completamente descontrolada … Marta …. Directamente estaba encelada.

Su boca dejó solito a mi pezón para buscar mi sexo que después del orgasmo recién pasado perdía volumen … segundos duro esa flacidez, con su boca volvió a ponerlo a tope, lo chupaba sin miramientos, alcanzó sus 3 cm de largo en medio suspiro, notaba como las sangre que lo inundaba daba grandes pulsaciones, Marta debía notarlo porque acompasó su lengua haciendo que mis piernas se ablandaran nuevamente, no se cuantos orgasmos llevaba desde que habíamos empezado esta locura … Marta seguía a lo suyo … ajena  al hecho de que yo hubiera tenido desde que entramos en casa más orgasmos de los que había tenido nunca en una sesión de sexo …. ¡joder como me estaba chupando! … por un momento lamenté no ser hombre, si un “pequeño” clítoris lo chupaba así ¿Qué haría si yo tuviera una buena polla? … tanto trajín empecé a notar mi botón excesivamente sensible e intenté liberarlo … me costó separar a Marta, parecía que hubiera alcanzado su presa y no quisiera soltarla, … la alcé para encontrarnos las dos arrodilladas frente a frente … su boca … estaba empapada de mí … sus ojos eran vicio puro … llevó mis manos a sus tetas, las tenía duras, húmedas y con los pezones apuntando al techo haciendo juego con su polla, la tenía increíblemente tensa, con los testículos muy apretados, con la cabeza babeante …. Sin soltarle las tetas y haciendo malabarismos, andando sobre mis rodillas conseguí colocarme tras ell@, apoyándonos una en la otra nos pusimos en pie para quedar frente al espejo

Viendo nuestra imagen, éramos el colmo del morbo, una chica castaña, desnuda, con tacones, abrazando a la morena que tenía delante mientras le daba la espalda, un poco más baja aun subida en sus tacones, con el baño repleto de ropa femenina por el suelo, con las braguitas de una revueltas con las de la otr@, con la chic@ especial justo frente al espejo, con mirada lasciva, los pezones duros y la polla erecta … mmmm …. Mierda, la imagen consiguió alterarme de nuevo ¿en que clase de viciosa me estaba convirtiendo? En mi posición de control empecé a manosear groseramente sus tetas, atropelladamente la daba besos y pequeños mordiscos en el cuello, yo pegaba mi cuerpo desnudo al suyo, apretaba mis tetas con fuerza contra su espalda, mi coño empapado a sus nalgas … y ell@ …. Llevó una de sus manos a mi culo y con la otra empezó a pajearse …. de la punta de su polla no paraba de caer líquido …. Giró su cuello todo lo que pudo para unir nuestras boca, besaba con una pasión desconocidas en ningún hombre.

Con suavidad, sin dejar de besar, me fue moviendo hasta ponerme delante de ella, las tetas tocándose y su polla … apoyada en mis abdominales … yo no quería terminar el beso … ella menos aun …. No quise dejarle la iniciativa otra vez … me alcé todo lo que pude sobre mis tacones, tome su polla con una mano apuntándola a mi vagina …  y me fui dejando caer, la humedad de mi sexo hacía que mi interior fuera ajeno al tamaño de la polla que lo penetraba, noté como me iba llenando, como puede me deshice de mis tacones para quedar un poco más bajita que ell@ y conseguir metérmela entera … al llegar al fondo … me sentí plena …. nuestras caderas estaban completamente pegadas, nuestros cuerpos unidos, nuestras manos abrazaban nuestros cuerpos desnudos nos tomábamos de las caras, el cuello para no dejar escapar ese beso…, las tetas aplastadas … notaba sus pezones en mis pechos, las bocas unidas, con lentitud infinita Marta comenzó a mover su cadera, muy poco a poco, milímetro a milímetro, como si temiera que si se separaba más no volviéramos a juntarnos, poco a poco fue aumentando el movimiento pero con la misma lentitud, estuvo minutos en ello hasta conseguir que cada penetración casi sacara su polla de mí antes de volver a introducirlo muy despacio …. nunca paraba, mi cadera empezó a cobrar vida, se acompasó a sus movimientos, igual de lentos, igual de tensos, nuestros labios seguían pegados, nuestras tetas aun se aprisionaban unas a otras, poco a poco  empezó a acelerar sus movimientos y mi cadera copió sus vaivenes, al entrar completamente en mí empujaba su cadera con fuerza contra la mía haciendo que mi clítoris estuviera contínuamente estimulado … me corrí, me corrí como no recordaba haberlo hecho nunca siendo penetrada, Marta no necesitó 1 hora de bombeo para que me corriera, no necesitó follarme con violencia, le bastaron 5 minutos de bombeo suave, apasionado, caliente, besando … mmmm …. Sentí flojear mis piernas, pero Marta me sostuvo, el orgasmo fue prolongado, Marta no paraba de bombear … y yo sudaba …. Ardía …. Marta estaba empapada en sudor del esfuerzo, de la excitación, las penetraciones cobraron ritmo, mis manos bajaron a su espalda y las suyas a mi culo …. Dios …. notaba como todos sus músculos se tensaban para follarme … sus manos no paraban de amasar mi culo, abriendo las nalgas …. Volvi a correrme … Marta parecía no tener fin … cada vez follaba con más fuerza, con cada penetración me iba moviendo hasta llegar a pegar mi cuerpo al espejo, mis movimientos se vieron impedidos pero ella no pareció reparar en ello … ya no me penetraba, me embestía … empecé a sentirme usada …. me sorprendió otro orgasmo … Marta dejó que disfrutara de él completamente, cuando notó que el punto álgido había pasado separo nuestras bocas y salió de mí … me sentí vacía …. Esa sensación duró pocos segundos, lo que tardó en voltearme, apoyar mis manos en el espejo, ponerse tras de mi, separar mis piernas y con cuidado tomar su polla con la mano para acercarla nuevamente a mi vagina e ir metiéndola lenta pero imparablemente hasta el fondo … ell@ tenía todo el control y no se quien disfrutaba más con ello … al estar yo descalza y ella con tacones tenía ese plus de altura suficiente para poder penetrar completamente, de forma inmediata el bombeo se hizo intenso, sin concesiones … la muy puta se estaba empleando a fondo … me agarraba de la cadera para penetrar con más energía, no dejaba un milímetro de polla fuera … yo notaba como las envestidas eran fuertes, impropias de alguien de su tamaño, cada vez más fuerte, notaba como mis pies se descargaban en cada empuje, me levantaba ligeramente en cada envestida … su ritmo se volvió frenético, notaba su respiración, su tensión … tuve un nuevo orgasmo mucho más intenso que los anteriores y de repente note como su cuerpo explotaba dentro de mi, nuestros movimientos eran desacompasados mis piernas flaqueaban y sus movimientos eran estertóricos, notaba sus convulsiones, sus jadeos, notaba las pulsaciones de su polla soltando su semen dentro de mi …. vencid@s, agotadas, sudorosas …. Finalmente todo movimiento se detuvo, Marta aun seguía dentro de mi …. Me alcé y gire lo suficiente para darnos un beso, noté la satisfacción en sus ojos … notaba como su polla perdía vigor dentro de mi … finalmente salió de mí dejando un enorme vacío, su polla se veía chorreante de mis flujos y de su semen, ya flácida pero aun así atractiva … de mi sexo escurrían los restos de pasión.

Miradas, caricias en las manos, … cada una con sus pensamientos mientras el jacuzzi se llenaba … sinceramente no se que pasaría por su mente, por la mía … ¿Qué coño había hecho? Había tenido sexo extramatrimonial, con alguien desconocido, con alguien que se dedicaba a la prostitución, CON UN TRANSEXUAL, había practicado sexo oral y se habían corrido en mi boca, no contenta con ello había continuado con ello y me habían penetrado sin ningún tipo de protección y para colmo se había corrido dentro de mi, como podía ser tan estúpida … medio suspiro después mi mente dio otro giro, había vivido otra cara de mi sexualidad, había disfrutado con un cuerpo femenino, con otras tetas, había compartido la mejor experiencia sexual de mi vida con una criatura única, me habían hecho sexo oral hasta hacer que tuviera orgasmos gloriosos y me habían follado como nunca lo habían hecho, me había corrido con la penetración y había descubierto que encima era multiorgásmica, … ¡que coño había valido la pena!

Opps el jacuzzi estaba lleno, eche sales dentro me metí e invité a Marta a imitarme, la vi entrar, su cuerpo era … precioso … sus tetas … y su polla ahora en reposo colgando en ese cuerpo de mujer … tumbadas juntas empecé a hablar

• ¿Qué tal estás?

• ¿sinceramente? Como hacía años que no me encontraba

• Pero Marta, esto para ti es tu día a día, ¿no?

• No, ms Doc, mi día a día es una locura sexual, lo disfruto, lo vivo, gozo de hombres todos los días, muchos días gozo con varios, cada cierto tiempo tengo sexo con alguna pareja, normalmente atiendo al hombre y en contadas ocasiones a la mujer …. Pero es solo sexo … sin conexión … contigo … me he sentido yo mism@, sin condiciones, sin disfraces ….

Nos callamos, ¿Qué responder? Nuestra conexión era plena, la verdad es que no hacía falta comentar nada, simplemente nos cogimos de la mano … nos relajamos en nuestro baño de burbujas.

Físicamente agradecí la paz, el relax, notaba como mi cuerpo perdía tensión por minutos …

Media hora?, 45 minutos?, la verdad es que no tengo ni idea de cuanto estuvimos en remojo, no quería que se acabara, al salir nos secamos, parecíamos dos chicas, dos amigas, …

-¿Por qué no te quedas a dormir esta noche?

Vi la luz en sus ojos, vi que no quería que esa noche acabara por nada del mundo, …

De la mano, desnudas, fuimos a la habitación, del cajón saqué ropa para las dos, camisones sencillos, ligeros, …

Ella ocupó el lugar de Bob en la cama, las dos en silencio sobre la cama, abrazadas, nos dimos un beso profundo cada una agradeciendo a la otra la experiencia, nos acariciamos  …  su cuerpo reaccionó,  vi como su camisón comenzó a tensarse por el movimiento de su pene … su mirada pedía perdón por la reacción de su cuerpo … la visión era extraña, impropia, su virilidad no encajaba bajo el camisón, ¿perdón porqué? ¿por demostrar nuevamente lo que yo le atraía? ¿Por qué su cuerpo se mostrara libre frente a mi? …

No hacía falta más preámbulo, me incorporé, aparté su camisón lo suficiente para dejar libre a su pene, puse una de mis piernas a cada lado y me dejé caer sobre ell@, nuestros cuerpos parecían conocerse desde siempre …

Con marta tumbada boca arriba y yo sentada sobre ell@, empalada, simplemente comencé a cabalgar, sin más, sin caricias, sin ninguna distracción, ni siquiera nuestros cuerpos estaban desnudos, las dos con camisón, su polla dentro de mí. No hizo falta una hora, no necesitamos cambiar posturas, cabalgue con fuerza, con ganas, con desesperación, con ansia … los orgasmos llegaron a la vez … su calor me inundó esta vez para no dejarme vacía, sin salir de mi quedamos dormidas, con su polla dentro de mi, con mis piernas abrazando su cuerpo, …

De eso hace dos años

Nuestras vidas han continuado, nuestra amistad tres semanas al mes también … y nuestro amor … continua vivo aun, pero solo una semana al mes L, compatibilizamos nuestra relación con su trabajo, durante esa semana descansa de clientes y nos tenemos la una a la otra, la pasión no se nos acaba y como cada vez nos conocemos más el placer simplemente nos domina, con mi marido la vida es maravillosa, esas 3 semanas al mes al salir del trabajo voy a tomar un café con mi amiga Marta, luego voy con Bob el resto de la tarde y noche, seguimos teniendo sexo, delicado, sigue dándome el sexo oral con el que tanto hemos disfrutado y yo a él el sexo que le hace sentir pleno, todo delicado, amorosamente, con cariño, los fines de semana hacemos como cualquier pareja comidas y cenas con nuestros amigos, alternamos, una vida feliz … una semana al mes, la que mi marido está fuera vivo la pasión, el desenfreno, el amor loco, sin freno, la pasión latina, me siento mujer al notar como mi transexual me usa, me da placer, disfruto dándole lo que nadie más puede darle, es el “hombre” de mi vida y me siento con ell@ más mujer de lo que nunca me he sentido … ahora eso si, somos más cuidadosas con nuestras relaciones, debido a mi estado hay que ser menos apasionadas y bruscas al hacer el amor … Bob está muy contento ante mi pronta maternidad … aunque a pesar de que él espera otra cosa yo tengo la absoluta seguridad de que el niño tiene 0% de posibilidades de salir rubio como Bob, la genética dice que saldrá castaña como yo o moreno como el padre.