Ya eramos amigas, ahora serémos compadres

Les contaré como fui realizando mi sueño. Una tarde después de la partida de dominó, Juan estaba de lo más coqueto, durante la partida, mi esposo, bajo la mesa con el pie, llevó el mío a tocar el de Juan. Parecía un accidente y pareció no notarlo. Yo miré a mi esposo en tono de reproche.

-no mames Viejo, le dije por lo bajito.- él se sonrió y quitándose un zapato, volvió a tocar mi pie, hasta que consiguió quitarme el mío. Luego me empujo de nuevo a Juan y este, se movió de la silla, como alejándose para no dar lugar a malas interpretaciones.

Mi viejo, se estaba divirtiendo con el juego. Bueno de alguna manera ya se había quitado el calcetín y como lo hizo?, no lo se, pero cuando me di cuenta, estaba tocando el pie de Juan, como para que pareciera que era yo.

Juanito, finalmente, entendió que era un juego de mi parte y accedió a seguirlo.

Yo me estaba poniendo cachonda, pensando que pasaría si accedíamos y terminábamos en la cama. Lili, su esposa, era muy buena amiga mía y por supuesto que conocía mis fantasías, yo las de ella y alguna vez habíamos compartido la idea de "intercambiarnos a los esposos".

Ella me platicaba las buenas culeadas que le daba su marido, lo grande que la tenía y el placer que ello le daba. Mi marido no estaba tan de mal tamaño e igualmente me daba bastante placer cuando me tomaba en la cama.

Con un ligero codazo le indique a Lili lo que estaba haciendo con su viejo. Como buena pareja, mi marido justo en ese momento vió mi gesto con Lili y le sonrió con cortesía, bajo la mesa llevó su pie a la pantorrila y le rozó con delicadeza, Lili me miró como –qué onda guey?

Yo le dije que si y nuestras miradas se entendieron de inmediato, finalmente alguna vez lo habíamos comentado y todo parecía para que aquella noche, sucediera nuestra fantasía.

-quieren mas hielos muchachos? Les dije al momento que levantándome de la mesa le hacía señas a Lili para que me siguiera a la cocina.

Buscamos los hielos en la nevera y les pusimos un poco de éter, Preparamos cuatro tragos "bien cargados" y abriéndonos un poco los escotes regresamos de lo mas coquetas a la mesa de juego.

-Vamos a cambiar las condiciones del juego., les dije cuando ya habíamos terminado esas copas y Lili salía por otras con mas éter.

-Dominó "moonlight", es el nuevo juego. Apagué las luces y encendí todas las velas que tenía a la mano.

Vamos a hacer "intercambio de parejas" les dije, Me toca aprender las mañas de Juan y Lilia se va a mi lugar con mi marido.

Los hombres se recostaron un poco en la silla y ambas pudimos notar que los "efluvios" ya surtían efecto en sus bultos. Juan se tocó distraídamente el pene para acomodárselo

– mmm—pensé, en verdad será tan grande como dice mi amiga?

Lilia inició el juego con pericia. "cada 50 puntos, el equipo perdedor nos mostrará un poco de su cuerpo. Pero sin desnudarse, esto no es "strip-poker" es "Dominó-moonlight" y las mujeres ponen las reglas... estamos de acuerdo?

Mi marido puso el ejemplo: Yo pierdo los primeros 50 puntos, y se desabotonó tres botones de la camisa. –pareja? Le dijo a Lilia… estamos perdiendo, deberás abrir un poco la blusa.

Lili en todo recatada y como sumisa, se abrió de a poco la blusa, mostrando un hermoso brassiere y el tono canela de su piel que se le gusta tanto a mi viejo.

Seguimos jugando, ganando y perdiendo, abriéndonos las blusas, las camisas y hasta la bragueta de Juan estaba abierta cuando, después de 300 puntos ya todos alumbrados por las velas nos veíamos semidesnudos en la mesa de juego.

-muy bien les dije. Ahora todos con los ojitos cerrados, me refiero a los hombres, si los abren, su castigo será salir a la tienda por mas tragos y todo esto se echará a perder, así que mas les vale que no hagan trampitas.. de acuerdo chicos?.

Ambos "por supuesto que estuvieron de acuerdo Lilia y yo nos alejamos un poco para ponernos de acuerdo:

-amiga, le dije, tócale la picha a tu viejo y yo le beso la oreja al mío. Vamos a ver que sucede?

Dicho y hecho, Juan reparó de un salto y mi viejo se dejo hacer… Mira que cabrón, le dije. Y si fuera Lilia la que te lamía la oreja?.

-me dejaba!, contestó,.. por si no lo sabes, conozco perfectamente a mi mujer… y se que besos de esos, solo pueden venir de esos ricos labios.

Al mismo tiempo me tomó por la cintura, sentándome en sus piernas para meterme toda la lengua por la boca.

-mmfffssggh, qué haces amor?, no ves que tenemos visitas?, le dije mientras le tomaba una mano para ponerla en mis senos.

Ya lo se. Ellos lo saben, pero no importa, mírales, están de "noviecitos cachondos", me giró la cabeza para que viera como Lili desde la espalda le arrancaba el pene por sobre las truzas a su marido.

Yo se lo quería ver, pero no podía, pues solo lo masajeaba por sobre la tela, aunque una cabecita brillaba por sobre la orilla del bañador.

-Lilia, qué haces? Le dije en tono de reproche, no te puedes "fajar" a tu viejo enfrente de los anfitriones.

-ahh, no?, contestó, pero si tú te le sentaste en las piernas, porqué yo no puedo darle una "sobadita",,, ehhh?

-Porque estamos en un juego, no en la cama, le dije con seriedad y una coqueta sonrisa… Mira, continúe. Me abrí de piernas en la pierna de mi marido y me comencé a mover como "teibolera"

Arrastrando la vagina por su muslo hasta la rodilla. –esto es "cachondear" y no lo puedes hacer.!!!

Ah no?, me contestó y pasándose frente a Juan, se abrió el corpiño dejando al aire sus hermosos senos. Se le sentó en las piernas y llevándose la cabeza de Juan al busto, le apretó con esas hermosas masas de carne.

-Nos vamos a poner complicados en la sala, dijo mi marido, y nos vamos a tener que ir a la recámara, pero no se preocupen amigos, en ese sofá, Mi vieja y yo hemos hecho "de todo".

-momento.!!! Le dije, estábamos en un juego y ya ustedes todo lo que quieren es Sexo, como cualquier "machito común", les señalé con agresividad.

Aquí este Cabroncito, dijo que me conocía de todo a todo, vamos a ver si es cierto.

Me levanté de sus piernas y apagué todas las velas que me gustaron, menos unas cuantas, las suficientes para dejar que la penumbra fuera lo suficientemente seductora para el momento.

-Lili, ven cariño, vamos a prender a estos locos, a ver cuanto aguantan?, -ven preciosa, le dije invitándola con la mano extendida para que me acompañara donde estaba el estéreo.

En secreto le di instrucciones.

Puse algo de Jazz y comenzamos a bailar coquetamente mientras nos dejábamos las blusas y faldas por el suelo. Lilia se quitó el bra, pero con su largo cabello negro cubrió sus senos sensualmente.

Bailamos un poquito frente a ellos, nos tocamos con lujuria como viejas amigas. Nunca antes nos habíamos tocado, pero parecía que siempre lo hiciéramos, fue algo tan natural y sensual que nos fuimos a los besos.

Sentir la boca sin bigote de Lili, me hizo un extraño, pero cuando su lengua buscó la mía, me apoyé en su nuca y la atraje mas a mi.

Ambas somos menuditas y nuestros maridos muy altos. Bailamos suavecito y de alguna manera sin dejar de besarnos nuestros pubis se encontraron. Nos estábamos "empiernando" cuando Lalo comenzó a aplaudir llamando la atención.

-a ver "perras".!!!

-que no vinimos a ver un espectáculo de "jeans", dijeron que haríamos un juego, y si el juego es verlas besarse mientras nos la "jalamos", prefiero invitar a mi amigo a ver un video tres equis y nos vamos al Table a gastar la quincena.

Yo ya apretaba las nalgas de Lilia contra mí sintiendo su caliente y lisito pubis transmitiéndome calor y deseo.

-ta gueno pinche maricón, pero no tienes que llamarnos "perras"… para eso están tus amigas de la oficina. No tus viejas.

-tus viejas?, reculó Juan.-y desde cuando mi Lili es vieja de este gañán?.

-desde que me empujaste la mano para distraerlo y ganar la mano pasada, contestó Lili descubriendo su juego.

-ah, le tocaste a mi marido?, voltee en tono reprobatorio viendo fijamente a Lilia.

-bueno amiga, fue algo así como una pruebita, un rozoncito nada mas. Te diré que parece que está bien bueno "de aquellito", me dijo mientras me tocaba la entrepierna con fuerza pero invitadoramente.

-a ver, a ver, "perritas", en qué quedamos?

Van a bailarnos o a platicar?

-nos los vamos "a coger", les dije extrañada de mis propias palabras.

Tomé de la mano a Lili y nos fuimos a la mesa.

-con los ojitos cerrados niños, a ver si saben quién es quién?.-les indiqué al tiempo que me ponía detrás de mi marido indicándole a Lili que hiciera lo mismo.

-ojos cerrados "mirones de palo"

-y no has visto mi palo, contestó Juan.

-te callas pinche presumido, le calló Lilia poniéndole la mano en los huevos para hacerlo callar.

-si mi amor, pero no los aprietes tanto que los romperás… y luego?

-bueno, ya. A ver,! ojitos cerrados?

Me quité la tanga y se la puse de antifaz a Lalo, Lilia hizo lo mismo y nos pusimos a "cachondear" a nuestros viejos descaradamente.

Les quitamos las camisas y les bajamos los pantalones, una cabecita brillosa de excitación asomaba en ambos.

Sin señas, solo con el pensamiento, cambiamos de pareja, ellos parecían no notarlo, dejándose hacer todo lo que se nos antojaba, la música seguía por lo bajo y el ambiente estaba; a pedir de boca.

Ya frente a Juan, le acariciaba el pecho bajando mis manos hasta tocarle el miembro.

Me puse de rodillas y abriéndole las piernas pude darle un besito cariñoso.

-mmm, que rico sabor, pensé. Ya las gotas le fluían de a poco. Otro beso y lo relamí con la lengua.

Metí la mano entera bajo los calzones y sentí un par de huevos peludos llenarme la mano.

Abrí lo mas que pude la boca y me lo metí completito… no era tan grande como Lilia me había presumido.

-Lalo, laloooo…. Creo que tengo a tu mujer empalada, la mía no se la traga toda y esta golosa, ya se la metió hasta los huevos.

-pinche piruja, me espetó mi viejo, yo creí que eras tu la que me daba mordidas en el cabezón.

-mmghhssnff, no mi amor, como pude le contesté desenfangándome del vergón de Juan.

Es Lili la presumida, creo que se está espantando de lo que tienes para mi todas las noches.

-Oyeme Cabroncita.!!! Dijo Lili, pero que bien guardado te lo tenías, este pito no me cabe ní a la mitad.

-es que eres de boca chiquita mi amor, le dijo Juan al tiempo que me llevaba de la nuca a meterme de nuevo en su miembro,

-y de culo también vida mia, recuerda que nunca has podido metérmelo por la cola. Ja ja.-le dijo Lilia al tiempo que se oían sus relamidas y besos regodeándose de mi Lalo.

.qué ricas mamadas da tu vieja "compadre", se la traga todita.

-espera que te de una sopladita.!!!, te vas a volver loco.!!! Le contestó riéndose por lo bajo.

-quieres una sopladita mi amor?, le dije a Juan que sin saber lo que vendría dijo entrecortado. Siii.!!! Dame lo que quieras. Mamadora de porquería, dame lo que quieras.

-muy bien le dije, te la voy a soplar.!!! Hazte para acá.

Y jalándolo a la orilla de la silla, le quité los bañadores y me puse a mamarle los huevos con toda la saliva que podía echarle.

Pinche Lili, le dije con la cara brillante de saliva y huevos, porque no le dices a tu viejo que se rasure?...

Le voy a decir, no sabía lo rico que saben los "huevos depilados", este Lalito, está de lo mas lisito y rico, me voy a meter un guevo en la boca nomás de puro gusto.

-aaaaggghhhh, supe que lalo ya tenía un huevo en la boca de Lilia, es de lo mas característico, ese quejido lo conocía muy bien.

-mira amiga, te encargo a mi viejo, no lo vayas a lastimar que lo quiero para muchas noches mas.

-te diré que le gusta; mientras te juegas el huevo en la boca, dale unas "buenas jaladas" y luego te subes para que pruebes sus jugos, que son de lo mas rico…. Andale.!!! Hazme caso.!!!

Sabía que lo iba a hacer, y me dediqué a Juanito, quería una "sopladita"… y se la iba a dar.!!!

Un poco por el asco de aquellos peludos huevos, pero con la fantasía de "soplármelo", comencé a llenarlo de saliva, desde la raíz hasta la base de los huevos, luego cuando ya lo tenía bien embarrado de saliva, le pasé un dedo por el ano.

-eh, eh, eh, qué te pasa amiga que soy "machito".

-a si?, a poco? Y calado?

-no, bueno, pues…. No terminó.!!!

Ya me había metido la verga hasta el fondo, estoy seguro que podía sentir la base de mi garganta en su glande. Pues reculó mas y levantó las nalgas para atravesarme la campanilla, Yo sabía ese truco y cuando se levantó… un dedo se le fue a los intestinos.

-ahhhh, cabrón.!!!

-compadre.!!!

-compadreeee.!!! Tu vieja ya me rompió el himen del culo, me metió un dedo hasta el fondo.

-mmmm, compadre, y espera que meta la mano completa… querías una "soplada"?, no es cierto?... ahora te la aguantas.!!!

Juan tenía una verga menor que la de mi Lalo, por eso me la engullí todita, me llegaba mas allá de la campanilla, pero no era tan gruesa como la de mi viejo y podía respirar teniéndola bien adentro.

Con la ensalivada que le había dado. Tenía suficiente lubricación como para intentar un segundo dedo en Juanito, empujé un poco y ..

cedió, un hábil giro de mano y dos dedos se hacían funda en su pene. Ahora yo tenía el control. Ya verás juanito, -pensé.

Mi mano era el control del pene que me llenaba de sabor la boca.

Un empujoncito de dedos y juanito se levantaba metiéndomela hasta la raíz, una giro como limpiando las paredes del intestino, y unas belicosas gotitas de semen se escapaban del pito para darle sabor a esta deliciosa mamada.

Con dos dedos metidos hasta los nudillos, le rascaba la próstata, a cada jalón unas gotitas se me iban adentro, mmm, delicioso, hacía tanto que no mamaba penes sin vasectomía que había olvidado el sabor fuerte y ocre de la "lechita masculina".

Me estaba dando el gusto que quería, Juan aprendió muy bien y me llenaba de leche, gota a gota, mientras se espesaba y calentaba a cada empujón que le daba dentro de mi.

-Maria, maría si sigues así, te voy a ahogar en lechazos, me dijo con voz entrecortada.

-mira papito.!!! Eso es lo que quiero, dame de tu leche espesa y caliente, le dije soltándole el culo y subiéndome en él para plantarle un profundo beso de lengua.

Llevaba la boca llena de su semen y se lo deposité en la boca, le mordí los labios y le embarré hasta el cuello de todo lo que le había salido mientras me lo culeaba.

-ves a qué sabes papá?, por eso nos gusta tanto a las mujeres… me alejé para ver la cara de desagrado en Juan cuando supo cuán acre era su sabor

Sabía que eso iba a pasar y gocé el momento de desagrado en su rostro.

Pero ahora te vas a ir a lo mejor de mi… papacito.. te voy a dar tu premio por darme a probar lo mas secreto de tu cuerpo. –le dije.

Me llevé la otra mano a la boca y escupí descaradamente en ella, antes que hiciera nada, se la puse en el pingón y la llené de suficiente lubricación como para que probara mi caverna.

-verás papito de lo que soy capaz, vas a conocer a una hembra de verdad.!!!

Cerré sus piernas y le apreté la verga como para anticiparle lo que vendría.

Me levanté de puntitas y lubricándome el ano con sus jugos y mi saliva, me le fui sentando lentamente.

Si podía con el grueso priapo de mi viejo, esto sería juego de niñas.!!!

-compadre, compadreeee.!!! Gritó el chismoso de juanito.

-creo que me voy a culear a su señora.

-aggghhh …. Mmmm.- fue todo lo que pudo decir.

Aflojé el ano y me pasé la cabeza "pa dentro"

Cuando me la tenía por la mitad, apreté lo mas que pude las nalgas y le dí su "abrazo de bienvenida".

-compadreeee.!!! -no pudo decir mas.!!!

Me senté con fuerza en su verga y me apreté lo mas que pude.

Levanté las rodillas para abrazarlo con las piernas y me introduje el pito lo mas profundo en mis entrañas.

-préstame tu mano papito.-le dije mientras con la fuerza de mis piernas le apretaba por la cintura y me inclinaba de espaldas.

-acaríciame aquí.!!!.-le dije llevándole la mano a mi clítoris. –te voy a dirigir.-le dije, mientras apoyándome en el suelo, toda vuelta a él, le mostraba mi depilada vagina.

-quiero que sientas tu pene dentro de mi.

-anda, no seas tímido, méteme un dedo.!!!

No hacía falta lubricación alguna, yo goteaba a chorros, le llegaba por la vagina a los huevos y bajaba por su tronco permitiéndome "sentarme completamente" en su verga.

-juanito, metió un dedo en mí, luego dos… los llevada adentro, muy adentro, afuera, hasta afuera, al tiempo que me balanceaba incrustándome en él.

-asiii, papito, asiii.!!! Vendrían los orgasmos.

Haciendo una arco empalada en su pito, podía moverme con libertad llevándome lo mas dentro que podía aquella deliciosa verga.

Sus dedos jugaban en mi cuevita y daban placer total al clítoris.

-Cabrón, decía juanito cuando llevando tres dedos a mi vagina, así podía sentir la fuerza de su verga llenándome los intestinos, podía verme totalmente arqueada y mis senos bailando cono locos con la cintura que le estaba dando.

-me avisas cuando vayas a terminar papá, le dije como si no supiera que ya pronto vendrían los chorros de semen a llenarme por el culo.

-te aviso, te avisooo, ya , yaaaaa

Sentí como su verga se engrosaba para partirme en dos, y en un hábil movimiento… me giré.

"plop", se escuchó claramente, indicándole a todos que me acabada de separar.

Me vine sobre la verga y metiéndole tres dedos por el ano, le "rasque" los intestinos para hacerlo explotar con fuerza.

Un trago, otro largo trago, uno mas… las erupciones de semen me llenaban tanto la boca que tenía que tragármelo todo para no ahogarme en mecos.

Era espeso y muy caliente, con el mas fuerte sabor que haya probado antes, pareciera que hacía mucho que no explotaba este cabroncito, estaba lleno de sabor.

Cuando noté que estaba por terminar, hice un anillo con mis dedos y le exprimí hasta la última gota.

Me paré y busqué a Lilia para besarla y transmitirle ese sabor tan penetrante.

Ella estaba sentada de espaldas en las piernas de mi marido, metiéndose el tolete por la vagina con los ojos desorbitados por el tamaño de mi viejo.

-lo sabía, le dije, eres una mentirosa… Verga!!!, verga esa que te estás metiendo.

-puta madre amiga, y todo esto te da todas las noches?, no mames.!!! Porque no me lo habías presentado antes?

• y espera que te lo meta en el culo.!!!

• en el culo?, ni madres, ni lo sueñes.!!! Me rompe para no cagar en diez días.!!!

Me senté en las piernas de ella y abrazándola con ternura le metí la lengua junto con el semen que le había guardado de su marido.

Ella intentó negarme el regalo.

-jamás se ha comido ní una gotita mía, escuchamos al marido, diciendo en tono de queja.

-ya está aprendiendo juanito, ya está aprendiendo.

Agarré la cabeza de Lili con fuerza y le metí semen, saliva, lengua y todo sin dejarla respirar siquiera.

-pinche mala amiga, ahora va a querer que se la mame todos los días.- reclamó.

-y que vas a hacer’- contesté.

-se la voy a mamar todita, está bien rica, dame mas… y me llevó a besarla con mas ganas, mientras nuestras lenguas se encontraban en abrazos cálidos y húmedos.

Ahora verás que no todo lo malo es tan malo. –le dije.

Me baje de ellos y me fui directamente a su vagina. Lalo le seguía dando "pa dentro" con fuerza y tino.

-a ver mi amor, ábreme las piernitas.

Mientras separándoselas iba acercando mi lengua al clítoris.

Había poco espacio, pero su botón de amor, estaba enorme por la excitación.

Le mamé cuanto pude y puse una mano en los huevos de mi marido para llevarle el ritmo.

-dale mi amor, dale una buena mamada, parece que este biscocho se está secando.- me dijo tomándome de los pelos y apretándome a él, a ella, como sea.!!! Yo me hundía en sus muslos y me mamaba sus jugos.

-qué crees?, el muerto revivió, escuché a juanito poniéndose atrás mío.

-no te atrevas a cojerte una vieja enfrente mío.- le dijo Lilia a su marido, que ya tomaba posición en mis nalgas.

Yo estaba en la mejor postura que podía desear. De cuatro patas mamándome a mi amiga y esperado una acometida con ganas.

-con ganas, papá,- le dije a Juan.

• méteme ese pito, con ganas.

-vete por la vagina, que está toda mojada para ti.!!!

Sentí un empujoncito y la cabecita me entró.

Luego me arreculé y me fui de espaldas sobre esa espada de placer.

Abrí como pude las piernas y me llevé los huevos a la base del sexo.

Lo tenía todo dentro, un poco flácido, pero ese no sería problema. Introduje un dedo en la vagina y la estreches se notó.

Me mamaba a Lilia, ella se cojía a mi marido y Juanito frente mismo a su esposa, me daba por atrás.

Era un cuadro del que hubiera querido una buena foto para el club de swingers.

Juan empezó a tomar velocidad y me llevaba a Lilia con todas sus fuerzas.

Mi marido ní se movía, recargado de espaldas lo mejor que podía, disfrutaba la apretada vagina de "la comadre". Le sostenía por las tetas, estrujándoselas de vez en vez.

Esa leche es mía,- le dije a mi viejo cuando sentía que empezaba a derramarse. Y así me lo dio.

Sacó la verga en un instante y yo la tenía hasta la mitad gozando sus explosiones, los jugos de Lilia y las embestidas de Juan.

-pero mira que Cabrones me salieron estos.!!!

Se quejó Lilia al sentirse privada de los lechazos del pito que hace unos segundos le invadía completita.

-pero mira que Cabrones.!!!

Y yo?, a mi qué me va a tocar?

Te va a tocar esta---mamacita--- dijo Juan, separándose de mi y sobre mi espalda le metió media verga en la boca a su mujer.

Se pajeó para completar la puñeta y explotó completamente dentro de la boca de su señora.

-mmm, ,- mgmmmghhh, massss, massghmmm.

Lilia se la estaba tragando toda.

Y con sabor a mi mejor amiga, dijo--- mmmggh

Me está gustando ese sabor.!!!

Explótame todo dentro pap mmmghhhh

Como desmayados y completamente exhaustos, los cuatro nos rodamos por la alfombra a sentir cada cual lo mejor de aquellos lujuriosos momentos que recién vivimos.

Así pasaron unos minutos cuando noté que Lilia, se jugaba con los dedos por dentro y fuera de su sexo.

-qué te pasa amiga?, no terminaste?

-no "Pendeja", qué esperabas?, si justo cuando me venía me quitaste a tu viejo para mamártelo solita.!!!

-amiga, pero todo tiene una solución, permíteme.!!!

Y tomando una de las velas que mejor parecía un pene, la apagué y la moldee un poco aprovechando el calor de mis manos.

-ni creas que me vas a convencer con "juguetitos", ni creas que voy a dejarme… aaagghh.!!!

Ya la tenía ensartada y hábilmente le acariciaba el clítoris con mi lengua.

-puta madres, eso es rico.!!! Acercó la mano y me empujó un poco mas dentro de ella.

-hay cabrón, no se me hubiera ocurrido,

-métela mas, dale vueltas, mámame el coño.!!!

Me dirigía como una posesa.

Nos rodamos, mejor dicho, la rodé de costado para, girándome Lilia pudiera mamarme la choca si así se le antojaba, y justo fue lo que hizo.

Le daba placer con la vela y con mi boca, ella correspondía mamándome fuertemente con lujuria completa.

Me giré un poco mas y ella quedó sobre mi.

Eso me permitió mamarla ampliamente y mover la vela en las direcciones que bien conocía le causaría mayor placer.

-dale, dale, rico, métela, métela mas, dale vueltas.. estaba completamente enloquecida.!!!

Mi marido se acercó por lo bajo, para mostrarme que también estaba listo.

Lo invité a unirse y arrodillándose junto a mi, me llevó la verga a la boca.

En un juego que las circunstancias lo iban permitiendo, saqué la vela y discretamente le abrí a las nalgas a Lili.

Ella estaba en lo suyo y jamás notó las intenciones de su pareja amiga. A mi Lalo le encanta el culo

y el apretado ojete de Lilia no se le iba a ir esa noche, lo ví en sus ojos y estuve de acuerdo.

Mojé lo mas que pude el vergón de mi viejo y con suavidad pero hábilmente le abrí las cachas del culo.

Lalo se apuntó con seguridad y… zaz.!!!

La cabeza estaba dentro,

-pero que puta madre.!!!! Gritó fuera de si Lili, si el de mi marido no me cabe por la vagina, menos ese pedazo de mierda que me quieren meter por la cola… no mamen.!!!

No mamen!!!

Pero el daño, estaba hecho… ya entrando el cabezón, lo demás era cosa de paciencia.

Yo me apliqué a la mamada de clítoris, Lili se fue sobre mi chocha como para apagar sus quejidos.

Los tres ganábamos todo.

-oye compadre, en serio no te habrías culeado a tu vieja?, está mas apretada que una mano desesperada haciéndose la paja en el metro.

-qué, queeee? Dijo el compadre levantándose de un salto, ahora si me van a convertir mi mujer en una verdadera puta. Jamás me había querido comer el semen y ahora se la están enfilando por el mismisimo culo… de no creerlo.!!! En serio.!

Se acercó para gozar del espectáculo, mejor dicho, del culo abierto de su mujer.

-Mary, debes aplicarte un poquito mas allá debajo,- me dijo Lalo, este culito está imposible de horadar y tienes que relajarlo para mi.

Lalo se apoyaba con todo el cuerpo y todo lo que conseguía era ver como su pene se doblaba y el culito no cedía por mas fuerza que incrustara,

-mmm, - verás, lo voy a domar.

Y aplicando la vela a la entrada vaginal, una buena mamada y apoyándome en sus caderas le ofrecí una mejor perspectiva a mi hombre.

-pero si que estás loca, -decía Lili entrecortada, si crees que me voy a dejar coger por ese vergón y además intentas con la vela por el otro orificio. Aaaahhhhhgggg,- y se fue contra mis labios vaginales a mordidas.

-espera babosa que me estás mordiendo, pero Lili no hacía nada por evitarlo, mas me mordía, mas apretaba la vela contra la hendidura vaginal.

-no mamen, se quejó el compadre, me la van a dejar partida por la mitad, solo le van a quedar las orejas para coger, ja ja , y dicho y hecho.!!!

La vela se fue al tope. Mi marido se fue a fondo, la putisima de Lili me pegó una mordida que me dolió por semanas,

Pero el hoyo? - - - estaba hecho - - -

-la mierda mas grande, pero que rico oooo, se siente de lo mejor, métela mi cabrón, métela toda, así papito, métela bien, hasta los nuevos.!!!

La vela seguía ahí y mi marido ya había pasado el límite, ahora se movía rítmicamente, y la putisima de Lila, también.

-augghhh, siento como me llenan las tripas, me llega al punto "G", está de lo mas putisima madre que haya sentido antes

-dale mi Cabrón, dale "pa dentro"

• me siento tan mujer.!!! Asiii, papito. Asiii.!!!

Ya bien incrustada, nada mas podía pasar.!!!

Nada mas?, - -- -JA- - - mi marido es un macho de recursos, acto seguido se la metió completa, la cogió por las caderas y se vino de sentón con ella encima.

Véngase compadre, venga a gozar de su mujercita, que ya está justo a punto de ser perforada por dos apetecibles vergas.

-eeehhh,?, qué les pasa?, acaso creen que no hay mas mujeres como para que dos pitos se metan por ahí?.

Pero sus palabras no iban con sus actos.

Se tiró de espaldas y abriéndose de piernas, se ofreció completita a su marido.

-ven, papá, vengase con su bebita.!!!

Quieres sentirme como virgen?, como la primera vez?

Se recostó sobre el pecho de Lalo y se abrió la vagina con cuatro dedos.

Juan comenzó de rodillas pero intentaba conservar el equilibrio sobre el vientre de su mujer, yo al verle tan complicado, le tomé la verga y la enfilé a su callejón.

-par de cabrones, eso es lo que necesito.!!! Un par de cabrones que me quiten las ganas de ser perforada… aquí, aquí, los quiero sentir a ambos,- a grito pelón, Lilia se ofrecía a la doble perforación.

El cabrón de mi marido, estaba hasta la raíz metido en el ano, y el compadre por sobre la fina piel que separa ano de vagina, rozaba el glande de Lalo, creándole un infinito placer.

Yo corrí por la cámara de video para filmarlo todo. No se repetiría ese momento en al menos una semana. La misma que la pobre de Lili necesitaría para sentarse de nuevo… ja ja ja.

-Leche, quiero leche, necesito que me apaguen las entrañas con leche caliente.!!!

Los hombres le daban profundo con todas las ganas que da una nueva posición.

Primero se vino Lalo, pero no se salió, Juan le daba masaje y le exprimía la verga desde dentro.

Cuando el compadré terminó… Lilia era un mar de gritos y gemidos lujuriosos.