Y si pierdes se la mamas en el salón de clases
Apostó, perdió y Dianita paga su apuesta
Todo inició platicando con una compañera de salón, de las pocas mujeres apasionadas al futbol, el gran clásico se venía y ella y yo somos de equipos contrarios, así que un día estando en su casa haciendo tarea salió el tema del partido entonces le dije.
Y piensas apostar algo??, o no crees en tu equipo????
no lo sé, es que el equipo no ve bien. Pero está bien apuesto $100.
-jaja, no, es el clásico y debe ser algo que no olvides, mira si ganas te daré $2000 te parece??????
-me encanta la idea, así si apuesto, pero y si pierdo????
-Mira próximamente será cumpleaños de Eleazar y le prometí un gran regalo, si pierdes la apuesta se la mamas en el salón.
Lo dudo un momento, de hecho en un principio había dicho que no pero a la mera hora acepto pensando que ganaría los $2000. El sábado llegó el juego y con ello un gran nerviosismo, como lo dijo ella su equipo no tenía una buena racha y fue dominado y vencido claramente por mi equipo. Al finalizar el juego le mandé un mensaje por mi celular.
"Eleazar ya tiene regalo de Cumpleaños".
El lunes en la escuela platicamos como lo haría, sería el miércoles que no tendríamos una clase y tendríamos el salón sin maestro una hora aunque no sabíamos si lo tendríamos sin compañeros o tendría mucho "público", durante esos días le dije a Eleazar que en verdad no olvidaría su regalo.
Llegó el miércoles y con ello la hora libre que teníamos, ella iba vestida con un pantalón negro entallado que dejaba ver sus largas piernas y ese maravilloso culo que tiene, una blusa rosa con un escote discreto pero con algunas transparencias que la hacían muy sexy, además de dejar claro que no llevaba nada abajo, esperamos unos minutos haber si se salían mas compañeros, pero parecía que sabían lo que pasaría porque no se salían del salón, así que con un gran público inició el show .
Me acerque a Eleazar con ella y le dije "Tu regalo de cumpleaños", ella se acerco y rápidamente, antes de que él pudiera meditar lo que pasaba se sentó en sus piernas y comenzó a besarlo, al principio el no entendió lo que sucedía pero después el le contesto el beso, así estuvieron besándose mientras ella le llevaba sus manos a través de sus pechos y nalgas, ahora se remarcaban perfectamente sus pezones a través de su blusa, se veía que ella también lo disfrutaba.
Mientras tanto alguien ya había cerrado la puerta del salón y todos ponían atención al espectáculo, ella metió una mano de él a través de su blusa y el podía ahora tocar sus bubíes sin nada de ropa que lo impidiera, ella comenzó a tocar el bulto que tenía él en el pantalón, movía su mano en círculos mientras no dejaba de besarlo ahora él sacó su mano de la blusa para tratar de desabrochar el pantalón pero ella no quería, después de mucho batallar se pudo aunque ella se par ó y no lo dejo hacer más.
Ella se hincó en medio de sus dos piernas y desabrocho su pantalón, bajando el sierre con la boca de manera muy sexy. Él traía un boxer pegado y ella comenzó a lamerle el pene por encima del boxer como si fuera una paleta, quitó el boxer y ahora lamía su pene directamente de arriba a abajo hasta que se lo metió en la boca y jugaba con su lengua, lo metía y lo sacaba con mucha experiencia mientras se ayudaba con su mano, así estuvo un tiempo.
El solo disfrutaba y de vez en cuando le tocaba las bubíes por encima de la playera de pronto sucedió lo inesperado, se acerco su mejor amigo de ella le pidió que levantara la cola y quedaba de a perrito dándonos la espalda y su amigo le bajó el pantalón que ya tenía desabrochado dejando su culo en una tanga negra a la vista de todos, ella solo se reía mientras seguía mamando, era un show increíble para todos, así estuvo jugando con el pene de Eleazar hasta que el pidió terminar.
Se paró y comenzó a masturbarse él cada vez más rápido hasta que termino dándole toda su leche en la boca y parte en sus labios y nariz, ella no lo enseño y después lo trago para terminar su faena limpiando el pene de mi amigo con la lengua. Alguien le prestó unas servilletas y se limpió la cara, a petición de todos nos enseño las bubbies y con eso terminó el regalo de Eleazar, que después me dijo fue el mejor que le hicieron para su cumpleaños.