Y llego orlando...

Segunda parte de "por primera vez tuve sexo con un amigo"... Orlando me dejò en el cuarto de su hermana para que me pusiera las prendas que yo quisiera...

Después de haber debutado con mi amigo (“por primera vez tuve sexo con un amigo”) y como les había prometido, aquí les cuento como siguieron mis encuentros y como llegué a hacerlo también con mi vecino que vivía enfrente de mi casa.

Tal como les conté en mi relato anterior, con Daniel habíamos vencido los temores y dudas de la primera vez y vivía esperando a que llegaran los días miércoles para tener nuestros encuentros sexuales. Debajo de la ropa normal de nene llevaba puesta mi tanguita, medias y sostén, al llegar a su casa, él me daba la ropa y zapatos de su madre, con lo que me terminaba de vestir y me maquillaba. A partir de ese momento ya era toda una niña muy caliente y dispuesta a disfrutar al máximo de sus caricias y besos… sus manos recorrían cada parte de mi cuerpo a medida que me iba desvistiendo hasta quedar solo con la ropa interior, medias y sandalias… me sentaba en el borde de la cama y me dedicaba a besar, lamer y chupar esa hermosa verga… me enloquecía sentir como crecía y palpitaba dentro de mi boca… después de saborearla un rato me acostaba sobre la cama y le ofrecía la cola… Daniel me sacaba la tanguita, me ponía un poco de crema y poniendo la cabeza de su verga en mi esfínter presionaba lentamente hasta tenerla totalmente metida y comenzábamos un movimiento coordinado, él empujaba hacia delante y yo hacia atrás… cada vez mas rápido, metiendo y sacando, aumentando cada vez más el ritmo hasta sentir su esperma caliente inundando mi interior… para mi era una locura de placer… durante tres o cuatro horas nos dedicábamos a coger hasta quedar agotados y particularmente yo con la cola ardiendo pero satisfecha por completo…

Durante el resto de la semana, cuando estábamos incluso con otros amigos, Daniel, cada vez que tenía la oportunidad, disimuladamente me tocaba la cola… él sabia que me gustaba sentir sus caricias y que no iba a decir nada por temor a descubrirnos… era como estar jugando al límite del peligro…poco a poco nos fuimos haciendo más osados y lo repetíamos mas seguido sin darnos cuenta que Orlando, mi vecino de enfrente, había notado algo y estaba continuamente pendiente de todos los detalles…

Así fue que un día, después que el grupo de despidió y que cada uno iba para su casa, me dijo que lo espere así volvíamos juntos.

Mientras volvíamos caminando me dijo que tenía que cortar algunos racimos de uvas y que si lo ayudaba para hacerlo mas rápido me daba algunos para mi…

Entramos a su casa, fuimos al patio y mientras yo miraba el parral él trajo un banco largo, lo dejó en medio del patio, se paró a mi lado y me tocó la cola…

Yo : Que estás haciendo? Que te pasa?

Orlando : Porque te pones así?... Yo vi en más de una oportunidad que Daniel te tocaba y no decías nada…

Yo : Vos estás soñando o ves visiones…

Orlando : No sigas tratando de disimular, te repito que los vi varias veces… además hablé con Daniel y él no lo negó, al contrario, me pidió que no lo comente con nadie…

Esas palabras me dejaron helada, no supe que contestar… lo que con mi silencio estaba confirmando lo que me acababa de decir y nuevamente se acercó y volvió a poner su mano sobre mi cola, debido a mi inacción, de solo tocarme pasó a acariciarme llegando a querer meter su mano dentro de mi ropa… Me hice a un costado para que no continuara…

Yo : Estás loco… para un poco… mira si llega a aparecer alguien de tu familia…

Orlando : Quédate tranquilo… sabes que mi papá viene tarde del trabajo y mi mamá con mi hermana están en casa de mis abuelos… así que estamos solos… nadie nos va a ver y yo no voy a comentar esto con nadie…

Me quedé mirándolo sin saber que decir… él se aproximo hasta estar nuevamente a mi lado, bajo su pantalón y sacó su verga, tomo mi mano y la llevó hasta ella… bajé la mirada y noté que era un poco mas grande que la de Daniel…fue guiando el movimientos lo masturbase… soltó mi mano dejándome que yo continuase sola y yo seguí un rato sintiendo como se iba poniendo cada vez mas dura… Puso sus manos sobre mis hombros y fue empujándome hacia abajo hasta quedar su verga frente a mis ojos…

Orlando : Vamos no seas así… ya rompimos el hielo… vos sabes y yo también que te gusta… Dale, abrí la boca… quiero sentir como me la chupas un rato…

No supe como hacer para negarme… le pase la lengua varias veces como saboreando un dulce y luego lo fui metiendo en mi boca… comencé a chupar, él con sus manos sobre mi cabeza iba marcando el ritmo…cerré los ojos y me dejé llevar, ya no solo chupaba, también se lo besaba, lo succionaba… el ritmo era cada vez mas rápido y sentía que me llegaba hasta la garganta pero no la dejaba de mamar... llegaron sus palpitaciones y explotó … un chorro caliente y abundante de semen llenó mi boca produciéndome arcadas haciendo que tragara una parte y otra parte logré escupirla…

Orlando : Nunca pensé que lo ibas a hacer tan bien… me gustó muchísimo… ven, límpiate… así nos sentamos porque tengo algo que contarte…

Yo : gracias… y ahora de que se trata…

Orlando : En verdad y para ser sincero tengo que decirte que si bien yo vi un par de veces que Daniel te tocaba el culo… nunca hablé con él…

Yo : Pero vos me dijiste que lo habías hecho

Orlando : Si pero no fue cierto… cuando vi un par de veces que te tocaba y vos no dijiste nada, me di cuenta que algo pasaba y estuve unos días buscando la oportunidad de estar solos para comprobarlo y veo que no me equivoqué… Ahora hay que pensar en como va a continuar esto…

Yo : que estás queriendo decir…

Orlando : Es simple… quiero gozar con tu cola… Quiero cojerte…

Yo : Vos estás loco…

Orlando : Vamos… No me vas a decir que con Daniel no lo has hecho… después de la mamada que me distes, yo creo que sì… hablemos sinceramente o realmente voy a tener que preguntarle a él…??

Me quedé pensando un momento… estaba en una situación  en que no podía terminar de asimilar todo lo que había pasado y no podía pensar claramente...

Orlando : Entendiste lo que acabo de decirte... Contéstame.

Y de golpe se hizo la luz… no se como ni de donde fueron saliendo cada una de las palabras que le dije… solo supe que la que hablaba ahora era Claudia y ella quería sentirse una verdadera hembrita… quería sentir ese pedazo de carne llenándole las entrañas hasta hacerla explotar…

Yo : Todo puede ser… pero primero se tienen que dar algunas condiciones…

Orlando : Las que quieras… Cuales??

Yo : Primero, lo haremos únicamente en tu casa cuando sepamos que vamos a estar solos y seguros de que nadie nos va sorprender… Segundo, esto va a ser un secreto y nadie se debe llegar a enterar… De acuerdo hasta aquì??

Orlando : Totalmente de acuerdo

Yo : Todavía no he terminado. Tercero, cuando estemos juntos vas a llamar Claudia y por último, como tu hermana tiene casi mi misma contextura física, vas a tomar “prestado” de ella sin que se entere algunas prendas para que yo me pueda vestir de nena… una tanguita, sostén, medias de nylon, una pollerita, vi que tiene una mini de jean que creo que me va a quedar, una remerita o blusa y… Que número de zapatos usa ella???.

Orlando : Creo que 36 o 37

Yo : Puede ser que me vayan… y un par de zapatos de taco. Cuando tengas todo esto y sepas que vas a estar solo me avisas, yo vengo, me visto y si hay algo de maquillaje a mano me pinto los ojos y los labios… Todo esto solo para vos… Además quiero que me trates con delicadeza y que cuando me vayas a penetrar lo hagas despacio y con cuidado… Estamos de acuerdo

Orlando : Si los zapatos de mi hermana no te van, mi madre calza un poco mas y esos si te pueden calzar, además ella tiene unas botas que me gustaría ver como te quedan… Por el resto, estoy totalmente de acuerdo con vos… Y ya que estamos, como para conocernos mas íntimamente, déjame que te acaricie un rato la cola…

Lo miré a los ojos, me paré de espaldas a él y fui bajando mi pantalón hasta deja la cola totalmente descubierta…  El me fue acariciando despacio, suavemente, un dedo comenzó a jugar con mi ano haciendo que me excitara cada vez mas… Me doy cuenta que se está moviendo… sin dejar de tocarme, con la otra mano baja el cierre de su pantalón y saca su pene semi erecto para comenzar a masturbarse mientras me dice que tengo un culo hermoso y que no ve la hora de penetrarme…

No lo pensé dos veces… me arrodillé frente a esa hermosa barra de carne que me estaba haciendo perder la cabeza… la masturbe un poco saque mi lengua y lamí su glande, ya tenia liquido pre seminal, la metí todo lo que pude a mi boquita sintiendo como rápidamente iba creciendo y poniéndose dura, sin lugar a dudas era mas grande que la de Daniel… en ese momento pensé que me iba a doler cuando me penetre… pero no me importaba, la idea de tenerla toda adentro me ponía aun mas excitada… ya ninguno de los dos quería seguir esperando…

Me tomó de la mano y me llevó hasta la pieza de sus padres… haciéndome acostar, terminó de sacar mi ropa, tomo un pote de crema que había sobre la mesa de luz y se untó el pene y mi ano… abrió mis piernas y se ubico en medio… se inclinó y sentí su cabeza golpear la puerta de mis entrañas y comenzar a ejercer presión. Sentí como se iba abriendo paso en mi, como centímetro a centímetro esa barra de carne caliente me iba llenando por completo… el dolor era fuerte pero lo podía soportar, la excitación era mucho mas grande y sabia que, después que mi esfínter se dilatara y se acomodara a su invasor, iba a llegar el placer y el momento de gozar…

Y ya teniéndolo todo dentro de mí, inició un movimiento de sube y baja lento pero continuo,  salía y volvía a entrar… así estuvimos un rato hasta que el ritmo se fue haciendo cada vez mas frenético… gemíamos los dos al mismo tiempo estábamos al borde del éxtasis… yo me sentía en el paraíso, veía luces y estrellas y pedía más y más… y con ese último empujón profundo y potente, un fuerte gemido sale de su boca y se descarga por completo en mi interior… una… dos…tres veces lo siento palpitar y con cada una un chorro de esperma caliente baña mi interior… y junto con él y sin tocarme siento que yo también estoy acabando…

Apoyó todo su cuerpo sobre mi y permanecimos un momento en esa posición… estábamos agitados, rendidos de placer… poco a poco fue perdiendo rigidez hasta que la saco… se recostó a mi lado y continuó acariciando mi cola…

Orlando : Que rico que estuvo todo esto… tienes una cola liadísima, redondita, bien paradita, casi mejor que una mina… ya te estoy imaginando vestidita de nena toda para mi… espero que sea pronto…

Nos quedamos un momento más recostados recuperándonos del momento vivido… luego nos levantamos, fui al baño para higienizarme un poco y vestirme… cuando salí él ya se había acomodado sus ropas... me acompañó hasta la puerta y nos despedimos esperando pronto volver a tener una tarde libre.

Entré a mi casa caminando despacio, sentía la cola ardiente, no era un dolor fuerte pero si me incomodaba para caminar… En mi cabeza daban vuelta las imágenes de lo vivido en estos últimos meses, el primero fue Daniel y ahora se sumaba Orlando… iba a tener que acomodar mis cosas si se mantenía esta situación… tenía dos vergas a mi disposición para poder gozar como una perrita… y un ultimo pensamiento fue tomando forma en mi mente: Podría en alguna oportunidad tenerlos a los dos juntos????

Pasaron algunos días, ya no tenía ninguna molestia… el miércoles Daniel no pudo quedar libre para nuestros encuentros y las hormonas nuevamente empezaron a trabajar, el deseo de disfrutar sus caricias, de verme vestida y de sentir su herramienta dentro de mi era cada vez mas fuerte…

El día jueves por la tarde me cruzo con Orlando y me dice que mañana viernes su madre iba a estar en la casa de su abuela y que su papa la pasaría a buscar a la nochecita después del trabajo y que su hermana se iba a la casa de una compañera por lo que no volvería hasta el otro día por lo que podríamos estar solos durante toda la tarde…

Yo : Recuerdas las condiciones que habíamos hablado… pudiste conseguir la ropa???

Orlando : No vas a tener problema, entras al dormitorio de mi hermana y elegí vos lo que te gustaría ponerte, si los zapatos no te van, te probas los de mi mamá y lo que hay de maquillaje está en el baño… te parece bien??

Yo : Me parece perfecto… no veo la hora que llegue mañana…

Orlando : A mi me pasa lo mismo… quiero verte totalmente hecha una nena… Te espero a eso de las dos de la tarde así tenemos mas tiempo… Hasta mañana…

Esa noche me di un buen baño y aproveché para rasurarme el poco bello que tenía y me fui a dormir…

Durante toda la mañana del viernes estuve pensando solo en la lujuriosa tarde que iba a pasar junto a Orlando… Después de almorzar algo, di vueltas por la casa mirando en el reloj lo lento que pasaban los minutos… faltaban unos minutos para la hora que habíamos acordado y no quería ir antes por temor a que no estuviera solo…  salí y me senté al lado de la puerta mirando hacia la casa de Orlando, y como si nos hubiéramos puesto de acuerdo, veo que él se asoma y me hace señas para que vaya, le aviso a mi madre que me iba con los chicos de la barra y cruzo la calle… él me deja entrar y ni bien cierra la puerta pone su mano en mi cola acariciándome y dirigiéndome al dormitorio de su hermana… entramos, abrió la puerta del placard y uno a uno los cajones, mostrándome lo que había en cada uno… diciéndome que eligiera lo que me guste, que frente al dormitorio está el baño y que allí iba a encontrar el maquillaje… y que ahora me dejaba sola para que me pruebe, escoja la ropa interior que quisiera usar y que me cambie tranquila.

Me acerqué a mirar la ropa interior… encontré tangas mas chicas y más atrevidas de la que yo tenía, también encontré los brasier haciendo juego con las tangas… me hubiese gustado probármelos todos, pero me decidí por un conjunto blanco… estaba como en las nubes… rápidamente me desvestí y lo primero que me puse fue la tanguita, me miré en el espejo y vi como mis nalgas de devoraban la tanga, me puse el brasier y algo de relleno… en el otro cajón estaban las medias de de nylon, negras, blancas y natural… y también vi que había un portaligas blanco y uno negro… opté por las medias de color natural y el portaligas blanco… la sensación al sentir las medias fue indescriptible… tardé un poquito para lograr ajustar los broches del portaligas  y que no se suelten… miré los zapatos y no dudé en un par de sandalias de taco no muy alto de color beige, aunque me quedaban algo ajustadas no tuve mayor dificultad para ponérmelas… me dediqué  a caminar un poco por el dormitorio para  acostumbrarme y ver si podía desplazarme, descubrí inmediatamente que me era fácil dominar los tacos sin inconvenientes, no aguanté la tentación  y me paré nuevamente ante el espejo…los tacones no sólo me daban algo mas de altura, también hacían más largas y estilizadas mis piernas, obligándome a mantener una posición erguida lo que hacía que mi cola  se levantase mucho más.

Abrí la otra puerta del placard y fui mirando las blusas, vestidos y polleras, nuevamente no sabía cual elegir… estaba viendo una pollerita corta escocesa gris con líneas verdes y rojas, tipo colegiala, cuando Orlando me dijo que estaba ansioso por verme, que no me demore mucho… No dudé más y me la puse, me queda ajustadita y llegaba apenas hasta el borde de las medias… para completar la vestimenta me puse una blusa blanca, abotoné los primeros botones y terminé haciendo un nudo con las puntas… estuve mirándome durante un par de minutos, me veía sexy, provocadora… con una sonrisa en los labios salí del cuarto y me dirigí al baño para maquillarme… me pinté los ojos con una sombra gris azulada, algo de rimel a las pestañas y finalmente el lápiz labial rojo y me cepillé el pelo para darle un toque más femenino… cuando contemplé mi obra, el espejo me devolvió la imagen de una colegiala bien putona a la espera de su hombre…

Salí del baño caminando lo mas femeninamente que pude fui en su búsqueda… el sonido de los tacos hizo que se diera vuelta para verme… caminé hacia él muy lentamente contoneándome cadenciosamente… su mirada recorría de arriba abajo toda mi figura… un cosquilleo recorrió todo mi cuerpo… fue una sensación sumamente excitante, algo que no se puede explicar, me detuve frente a él y le pregunté si le gustaba lo que estaba viendo… su mirada clavada en mis ojos,  puso sus manos en mis caderas y las fue deslizando lentamente hasta llegar a mi rostro… tomándome suavemente arrimó sus labios a los míos y me dio un beso largo y profundo que me dejó casi sin aliento… cuando nos separamos, sin emitir una sola palabra comencé a tocar su miembro… me deslicé hasta quedar arrodillada, él me miraba y me dejaba hacer… bajé su pantalón y su ropa interior… su delicioso miembro quedó ante mis ojos… lo toque, lo envolví con mi mano y lo masturbe un poco… saque mi lengua y lamí su glande, él comenzó a dar pequeños gemidos… me agarré a sus muslos y apoyé la cabeza de su pene en mis labios… muy despacio fui metiéndomela en la boca … una y otra vez, moviendo la cabeza de atrás para adelante… cada vez con mas avidez… sabia que dentro de poco lo iba a tener entrando en la colita y esa idea me excitada aun mas.

Nuevamente la introduje bien profundo hasta casi tocar la garganta, la aprisionaba con los labios y la succionaba haciéndolo gemir de placer… me detuvo en señal de que estaba por venirse… tomándome por los hombros me hizo levantar, soltó la pollera dejándola caer y me llevo hasta la cama, me acosté boca abajo abriendo las piernas… lo que tanto había estado esperando durante toda la semana estaba por llegar…tomó por los lados la tanga y fue tirando hasta sacarla por completo, buscó el frasco de crema y se ubicó entre mis piernas, primero lubricó mi ano y luego su pene… tomó una almohada y doblándola al medio la puso bajo mi estomago, con esto mi cola quedaba levantada y lista para recibirlo… la punta de su herramienta tocó la entrada de mi ano, respiré profundo y trate de relajarme todo lo posible...

Comencé a sentir la presión de su glande y como, con mucho cuidado para no provocarme dolor, se iba introduciendo dentro de mi… despacio, lentamente, hasta que sentí su pubis pegado a mis nalgas… con todo el peso de su cuerpo sobre mi cuerpo  comenzó a lamer y darme mordiditas en el lóbulo de mi oreja… mi respiración se fue agitando… con ese trozo de carne sentía mis entrañas completamente llenas… estaba totalmente entregada…

El se quedó quieto por un momento esperando a que mi esfínter se acomodara a su invasor…

Poco a poco fui moviendo mi culito… endureciendo mis  músculos apretaba y soltaba diciéndole que estaba lista para gozar como su mujer…

Lentamente lo fue retirando, hasta casi sacarlo por completo para entrarlo nuevamente… ya no me pude contener y fui yo quien empezó a subir y bajar la cola tratando de acoplarme a sus movimientos…

Orlando : Así es como te gusta???...

Yo : SSiiii… seguí… más rápido… dame más…

Colocó sus manos en mis caderas y me apretó para que yo no me moviese… la sacó totalmente para penetrarme varias veces solo con la cabecita y a continuación, con todo el peso de su cuerpo buscar una penetración profunda y continuó haciéndolo a ese ritmo por unos minutos… yo no daba más… estaba desesperada… mi excitación era tremenda, me retorcía, gemía, gritaba  y pedía mas al mismo tiempo…

Yo : Por favor detente un momento… sácamela…

Cuando así lo hizo, no le di tiempo a nada… lo empujé y me puse sobre él dispuesta a cabalgarlo…dándole la espalda, levanté la cola, tomé su pija con la mano y la acomodé en la entrada de mi culito y fui bajando hasta sentir sus huevos pegados a mi… me movía en círculos y empecé un sube y baja cada vez mas frenético… él gemía y bufaba… me tomó de las caderas y me llevó a cambiar nuevamente de posición… me puso en cuatro estilo perrita y volvió a entrar en mi, ahora los dos estábamos tremendamente excitados… el ritmo era mucho mas rápido y profundo… haciendo presión con su mano sobre mi espalda me llevo hasta quedar mi pecho apoyado sobre la cama… El mete y saca volvió a ser frenético, estábamos llegando al climax… yo gemía como loca y pedía mas y mas… lo sentí ponerse tenso… apretó con sus manos mis nalgas… me clavó su verga hasta lo más hondo de mis entrañas y sentí explotar su verga y dejando  su leche caliente dentro de mi cuerpo y exploté yo también…

Estábamos rendidos, exhaustos… me dolían las piernas y sentía arder y palpitar mi ano… nos quedamos recostados un momento buscando recuperarnos…

Orlando : Tienes un culo delicioso… nunca pensé que iba a disfrutar tanto y nunca pensè que ibas a ser tan putita…

Yo : Siii… yo también disfruté mucho… me encanta tu verga y me encanta la forma en que me has cogido…

Orlando : Espero que volvamos a repetir…

Yo : Cada vez que podamos… además vi que tu hermana tiene otras prendas que me gustaría probarme… y volver a ser tu nena.