** Witch La Historia de Erick..... Cap III
Visiones, y más drama
Primero que nada quiero pedirles disculpas a todos ustedes por la tardanza.
Espero mis lectores no hayan desaparecido y sigan por ahí ansiosos de leerme.
Me desaparecí debido a un serio problema de salud que me impidio seguir con el desarollo de mi historia de verdad espero me puedan disculpar por eso....
Ahora espero disfruten esta nueva historia de Erick, no sean severos conmigo. Espero me disculpen si este relato no supera sus espectativas.
Les invito a que se mantengan en contacto conmigo fleewong23@gmail.com
Especial: Dedico este relato a una persona que ha estado a mi lado por todo el transcurso de mi enfermedad. Ese Amigo tan especial que encontre en esta pagina. Él me sugirio que lo mantuviera en el anonimato y así lo haré. Pero Tú sabes que esta publicación esta dedicada a tí....
Ahora si... Disfruten ;)
Capitulo III:
Erick salió del baño y se dirigió a su clase de Economía las clases de especialización (las de temática mágicas) aún no iniciaba, La clase de economía era en el aula 30 cercana a la de los Seniors que era la numero 32. Erick quería evitar a toda costa pasar por esa aula y encontrarse con Dimitri o peor aún con Antonella pero sabía que no tenía de Otra.
Erick tomo aire y emprendió su camino, camino lo más sigiloso y rápido que pudo y logro pasar el aula 32 desapercibido por los Seniors, sin esperar que en su aula tendría una no muy agradable sorpresa para él.
Erick
Dios, que sea esto una broma. Qué demonios hace Dimitri en mi aula de clases. Como desearía que mis amigos estuvieran acá.
- Señor Van Allen podría terminar de entrar y tomar asiento.- El maestro Diego Mongali es mi profesor de Economía aburrido y testarudo.
- Si Señor Mongali.
Todavía no puedo creer que Dimitri este en mi aula, desconocía completamente que llevara Economía. Supuse que los Seniors a estas alturas la tenían aprobada.
La verdad no le quiero dar ninguna explicación de lo que paso en su auto, es tan ridículo incluso para mí que haya actuado de esa manera.
Pero su presencia me distraía completamente observando su cuerpo tan divino, su cabello parecido al de un modelo de la revista de Fitness más famosa. No puedo creer que este tan enamorado de Dimitri. Y peor aún reconocerlo y saber que no puede pasar nada entre nosotros porque para él soy simplemente un compromiso con el Aquelarre.
Agradezco que el señor Mongali se encargó de despejar mis pensamientos, ya que se dirigían a un terreno tormentoso.
- Señor Van Allen es usted muy despistado. Le he pedido por Segunda ocasión consecutiva que continúe la lectura del párrafo 16 de la página 201 de su libro de texto.
mi libro ¿dónde carajos esta mi libro? - Señor Mongali de verdad lo siento, pero al parecer he extraviado mi libro.- detesto que todos me queden viendo y peor que se burlen de mí .
- Si en definitiva usted es muy despistado. Tendrá que buscar una pareja para continuar en clases o de lo contrario me veré obligado a expulsarlo de la clase del día de hoy.
Estaba súper avergonzado en el aula todos se están riendo de mí, lamentablemente ninguno de mis amigos lleva esta clase conmigo.
- Ok viendo que nadie quiere ayudar al Señor Van Allen yo decidiré, ¿Joven Rockefeller tiene problema en trabajar con el Joven?
- No señor, ninguno.
Y así ni más, tengo que trabajar con Dimitri este día no puede estar peor. No lo quiero ver y su simple presencia me altera.
Tomo su libro y leo el dichoso párrafo que el Señor Mongali ha insistido tanto, hago gesto de mover mi silla y regresar a mi puesto cuando Dimitri me detiene, sosteniendo mi muñeca de una manera agresiva.
- ¿A dónde crees que vas? Tenemos que hablar.
- Dimitri, suelta que me lastimas.
- Por favor, Erick quédate aquí.- Su petición fue casi en tono de súplica, me derrite ver la ansiedad en su rostro, correspondo a su petición y tomo asiento.
Esta clase nunca termino, es algo completamente aburrido hablar de inflación y ese tipo de cosas, aun no entiendo de que servirá esto para ser unos buenos hechiceros. Desde que Dimitri me impidió moverme de sitio estoy extrañado de su comportamiento, bueno la verdad soy yo el extraño, como siempre estoy esperando que él actué o haga algo para arreglar todo cuando ni siquiera le sé explicar por qué salí corriendo de su auto. De reojo he observado que en ocasiones fija su mirada en mí, no le quiero devolver la mirada. Después de un tiempo nuestros compañeros se están quedando dormido. Uno que otro esta recostado encima de su pupitre, y en algunos casos se escucha un ligero ronquido jajaja eso me causa risa. Quien diría que estos alumnos aparentemente comunes y perezoso son algunos de los hechiceros más poderosos.
En cierto momento noto ansioso a Dimitri, un movimiento llama mi atención y al percatarme tengo una nota en una hoja blanca doblada a la mitad encima de mi cuaderno de notas. La miro dudando, Dimitri me invita a leerla
- ¿Por qué te fuiste? Y me dejaste en el carro, trate de alcanzarte pero no pude.
no sé qué responder, ni yo mismo entiendo porque salí corriendo. Lo que me llama la atención es su magnífica caligrafía, otro motivo para que me guste más. Me concentro en responder su nota y lo primero que se me pasa por la mente es Antonella así que decido usarla para librarme de esta.
- ¿Será porque no quería soportar a tu querida prima?
En parte es la verdad, desde que inicio el semestre y me tengo que topar con ella en los ratos libres ella siempre busca la manera de molestarme siempre habla mal de mí y me mira despectivamente. Algún día me cansare de ella y la pondré en su lugar.
Observo a Dimitri hacer un mal gesto, en su cara veo una molestia que se asimila a enojo pero casi de inmediato desaparece.
- Entiendo, no sé porque ella se comporta contigo de esa manera .
¿Qué? jajaja por Dios ¿es que no sabe que su prima siente cosas por él? Claro se debe de hacer el tonto, típico macho alfa se hace el que desconoce la situación para luego hacerse el importante.
- Dios, no me digas que no sabes el porqué. Es lo más absurdo que me has dicho en mucho tiempo. Bueno prácticamente tú y yo nunca hablamos así que es lo más absurdo que me has dicho desde que nos conocemos.
no pude descifrar la cara que puso Dimitri cuando leyó la nota ¿Enojo? ¿Dolor? ¿Rabia? ¿Decepción? la verdad es que no soy muy bueno descifrando los sentimiento de los demás, pero lo que hizo me dejo anonadado. Le prendió fuego a la nota. En un abrir y cerrar de ojos la nota se convirtió en cenizas lo que significó el final de la conversación.
El tiempo pasa lento a este ritmo moriré aquí mismo no quiero estar más al lado de Dimitri, desde que le prendió fuego a la nota ha estado más serio y no ha fijado de nuevo su mirada en mí. Creo que se molestó. Pero bueno es la verdad, y yo soy conocido por decir las cosas a como las siento y las pienso si a él no le gusta, lo siento mucho pero no voy a cambiar.
No es mi culpa que su querida prima le aleje a las amistades, bueno si es que me puedo considerar su amigo.
- Bueno alumnos para concluir la clase quiero que realicen un ensayo de 20 páginas del párrafo 27 y ya que el señor Van Allen extravió su libro de Texto trabajara con el Señor Rockefeller.
Obvio no, Dimitri estaba siendo muy pedante, no trabajare con él, eso no.
- No se preocupe profesor, de aquí al día de entrega ya recupere mi libro de texto no se preocupe.
No espere respuesta de ninguna parte, pero me quede en Shock cuando fue Dimitri quien habló
- ¿Tanto te molesta trabajar conmigo?- Me falta el aire, muero… Que mirada más fuerte, su Ímpetu en estos momentos me asusta. No se me ocurrió nada más que bajar la cabeza. Lo peor es que todos en el aula nos volvieron a ver.
- Tranquilo Profesor nosotros entregaremos la tarea juntos.
- Eso espero señor Rockefeller.
Estoy a punto de sufrir un infarto Dimitri habló con una seguridad, con tantos sentimientos expuestos en sus palabras que quede completamente anonadado. Dios me estoy perdiendo.
Salí rápidamente, no quería estar más en contacto con él. Su presencia me afectaba hasta el punto que me hacía daño.
- Hey, esperate. No muerdo.
No me volví hacia él, simplemente detuve mi caminar.
- Erick, ¿qué te pasa?
- Nada Dimitri nada.
Hay muchas cosas que le quería decir pero no tenía como, empezando que tampoco era el lugar correcto para hacerlo. Y tampoco iba a decirle es que no soporto que tu prima me trate mal y que tu desconozcas el porqué de su actuar.
Seguimos caminando en silencio, nos dirigíamos al cafetín estaba buscando desesperadamente encontrarme con mis amigos o ya por ultimo con Antonella para que Dimitri me dejara en paz.
En un momento escuchamos que alguien nos seguía y venia gritando, pero no puse atención pero luego alguien se acercó y me detuvo, coloco su mano encima de mi hombro.
Al momento que volví a ver y Deas Loveit estaba detrás de mí Dimitri hizo un gesto que me dejo extrañado, tal y como si su presencia le molestara.
- hola, Erick pensé que no me habías escuchado.- luego se volvió en dirección a Dimitri.
- Hola Dimitri.
Dimitri solo respondió con un simple Hola. Raro comportamiento dado que son los mejores amigos del mundo, bueno según Instagram.
- Ah, hola Deas, ¿Cómo estás?- Tenía que dejar mis análisis para después.
- Bien gracias. ¿Estás bien?- Me extrañe ante su pregunta.
- Si, ¿Por qué la pregunta?
- Ah no por nada. Toma. – Si y aquí estaba mi libro de Economía. “ No estás loco Erick” , me dije a mi mismo.
- Ah Gracias Deas, estaba teniendo severos problemas en recordad donde había dejado mi libro, y más con algunas tareas.- Ante esto Dimitri puso los ojos en blanco.
Deas extendió su mano para entregarme el libro, al momento de que roce su mano experimente una nueva visión, Dios que demonios me pasaba con estas visiones.
Experimente todo desde los ojos de un desconocido, como si mi cuerpo se metiera dentro del cuerpo de un extraño, aún no sabía a quién pertenecían estos recuerdos.
La visión ante mis ojos se desarrollaba en una casa, o cabaña no estoy seguro donde estoy, hasta cierto punto era algo tenebrosa, el clima esta tétrico afuera llovía, una tormenta feroz atacaba sin piedad, No entiendo porque en todas mi visiones tenía que estar involucrada estas situaciones tan agobiantes, en la visión yo o mejor dicho la persona por la que estaba experimentando los recuerdos, estaba encima del cuerpo de una mujer que yacía sin vida en medio del gran salón. Yo lloraba incontrolablemente.
- “Deas, promete que no harás nada.
- Madre no me pidas eso – ¿Qué? Wow wow que fuerte estaba viviendo el justo momento de la muerte de la madre de Deas.
- Deas escucha, la profecía que compartiré contigo es importante.
- Madre, ¿qué profecía?
- No hay tiempo para eso en Degrassi entenderás todo. Ahora escucha claramente que te lo repetiré una sola vez: “De Ámsterdam surgió quien a los de Argentum destruirá y en Italia marco el inicio del final” “A él hay que volver, lo reconocerán al final porque sus cabellos de plata y ojos color avellana revelaran la verdad”.
Deas busca a la persona que describe la profecía él es especial, encuéntralo protégelo y sobre todo aléjalo de los Rockefeller uno de ellos marcado con la estrella querrá acabar con él o ella solo con el simple hecho de conocerlo.- ¿Qué? ¿Quién es esa persona y porque hay que protegerla de los Rockefeller? ¿Se referirá a Dimitri?”
- Mamá como haré para saber quién es… Madre respóndeme.
Y así el último suspiro de la madre de Deas abandono su cuerpo, luego brillo y su espíritu abandono este mundo. Deas lloro por tanto tiempo y juro matar a los Argentum.
Wow desperté luego de experimentar la visión y me encontraba en la enfermería de la academia con un Deas preocupado y un Dimitri nervioso. ummm Extraño.
- ¿Qué paso?
- Te desmayaste, de nuevo- Esta vez fue Dimitri quien hablo.
- Oh entiendo. Llamaron a Triniti. Me quiero ir a mi casa.
- Yo te llevo.- nuestras miradas (La mía y la de Dimitri) se dirigieron asombrados a Deas.
- Jamás, Erick se ira conmigo.- Me sorprendió la manera en que hablo Dimitri, con un enojo tremendo.Hay no, demasiada testosterona para mi gusto.
- Quietos vaqueros, me iré solo.
Para que hable al momento que trate de ponerme en pie no pude, mis piernas no me respondieron y en un mini segundo estaba en los brazos de Dimitri, salvándome de un golpe directo contra el piso.
- No sé qué quieres, que siempre te intentas desmayar para caer en mis brazos- Claro Dimitri estaba bromeando tenía una sonrisa pícara en su rostro que lo hacía parecer perfectamente bello .
- Ya cállate.- Le di un pequeño golpe en el hombro. Me sentí rojo como un tomate, odio que mi rostro me traicione.
- Bueno vamos te llevare a tu casa.- Y me cargo en sus brazos. No sé si es que Dimitri se esmera en confundirme, en el aula de clases estaba distante, pedante y odioso y ahora era un completo amor. No sí, estoy completamente seguro que Dimitri es bipolar.
- Claro que no. Me voy a ir solo.- Intente luchar para que me bajara de entre sus brazos pero obviamente no dio resultado.
- Erick, obedece.- Sentí un calor fuerte reposando en mi cara, en mis ojos, en toda mi cara. Luego simplemente desapareció. Dejando perplejo a Dimitri. Extrañado.
- ¿Qué paso? ¿Por qué tienes esa cara Dimitri?
- No por nada tranquilo.
Adore el trayecto desde la enfermería al auto de Dimitri más porque todos los alumnos que nos topábamos se quedaban sorprendidos y anonadados, hubo un momento de triunfo interior cuando nos topamos con Antonella, Le hable a Dimitri para que no se percatara de ella y cuando pasamos a su lado ella se escondió al lado de un casillero. Luego hice un gesto no muy decente con mi dedo medio de mi mano derecha. Es que ver su cara roja de enojo me llenó de un tremendo regocijo.
Nos encontramos con Priscilla en el camino al estacionamiento, estaba asombrada primero por verme en los brazos de Dimitri, paso sin decir ni una palabra un buen tiempo, analizando la situación. Luego me aclare la garganta para que hablara y quitara su cara de tonta. Bueno al final del encuentro gesticulo solo para mí “ Luego hablamos, quiero detalles ” morí de risa.
Al llegar al automóvil de Dimitri, él con mucho cuidado me deposito en el asiento del copiloto abrochando mi cinturón de seguridad, estaba perdido en sus emociones, colocando toda su atención al camino que teníamos que recorrer hasta mi casa.
Antes de que llegáramos a casa y nos despidiéramos Dimitri me detuvo
- Hoy iniciaremos tu entrenamiento.
- Bueno, como quieras.
- regreso a las 16 hrs.
Dimitri, aun no entiendo cómo me pude gustar tanto. Tampoco el por qué actúa tan extraño, tiene demasiadas actitudes que me confunden. LA verdad es que ya quiero descubrir que tanto esconde y todos los misterios que mis visiones encierran.
El lugar exacto donde encontrare mis respuestas es en el estudio. Así que al llegar a mi casa me dirijo directamente ahí.
El estudio de Triniti es una habitación extraordinaria, inmaculado mármol blanco funciona de piso y todos los muebles son tan antiguos y perfectos. Todo el lugar encierra un misterio, y una sensación de estar siendo observados espero poder hacer mis investigaciones sin tener problema alguno.
Bueno, la investigación no me dio los resultados esperados no pude obtener nada nuevo. Algunos libros están escritos en idiomas que no conozco y no entiendo absolutamente nada de esto.
- Joven Erick
escucho que golpean la puerta del salón, inmediatamente mi subconsciente guarda todos los libros dentro de las gavetas del escritorio gigante de Triniti
- Si Alexa - Era la encargada de limpieza.
- Joven tiene visita. Lo esperan en el Salón Principal.
- Ok. Gracias
Así que Dimitri ya está acá, creo que Él me ayudará en mi búsqueda de conocimientos.
Antes de llegar al Salón Principal, pasó por mi alcoba y me cambio mi atuendo. Un pantalón para hacer ejercicios y una camisa holgada, no sé qué haremos pero me imagino que pasare mucho tiempo en el suelo.
Al salir de mi habitación y buscar mi camino al salón una voz perturba mi tranquilidad, esa voz la conozco perfectamente pero es imposible que este en mi casa.
Al llegar a los escalones, la veo. Me encuentro completamente con Antonella sentada en uno de los muebles. Completamente hermosa con un atuendo que no me extrañaría que hubiese sido extraído de la revista Vogue.
- ¿Se puede saber qué haces en mi casa?- la presencia de ella me saca de mis casillas.
- Al fin el gatito saca las garras, ya decía yo que toda esa fachada de “niño bien” era solo para atraer la atención.
- Antonella al grano, ¿Qué haces en mi casa?
- ¿Es que de verdad no lo sabes?
- ¿Saber Qué? ya me estoy cansando de hablar.
- Bueno te lo diré una sola vez y espero te quede claro. No te quiero cerca de Dimitri no sé qué es lo que quieres pero escogiste a la persona equivocada.
- ¿Es en serio? Te atreviste a venir a mi casa a decirme eso.
- mmmmm como sea. Ya estas advertido no me hagas usar mis poderes en ti.
- Hey, vete a otro lado con tus amenazas. Largo
- Tranquilo, me voy de aquí. Espero te haya quedado todo claro. Detén ese show barato que te traes con Dimitri.
Antes de responderle se fue dejándome con la palabras en la boca. ¿Qué le pasa? ahora si no me cabe duda que ella es enamorada de Dimitri. De verdad me toma demasiada importancia como si fuese una amenaza. ¿Qué planes tendrá con él?
Bueno después del horrible incidente de toparme con Antonella, decidí acudir de nuevo al estudio de Triniti a seguir investigando, no quería pensar en Antonella y en sus tonterías, hablando de Triniti ¿Dónde estaba? llevo demasiado tiempo que no tengo noticias suyas. Sin pensarlo le envíe un mensaje de texto a su móvil sin respuesta.
a eso de las 16:20 pm Dimitri aparco su auto en la entrada de mi casa, yo estaba en el Salón Principal esperando su llegada. El timbre sonó 2 veces al aparecer Alexa la despache indicando que yo atendería.
Al abrir la puerta me encontré con un Dimitri despampanante en un short azul y una camisa Polo roja completamente más elegante que mi vestimenta para hacer ejercicios.
- Wow, hola Erick me sorprende que seas tú el que abra la puerta. ¿Me estabas esperando?- Tenía en su rostro esa sonrisa toda coqueta que tanto me gustaba de él.
- No, en lo absoluto – pensé decirle que esperaba que Antonella regresará, pero su sonrisa paralizo mi cerebro.
- Bueno, ven vamos acompáñame a un lugar.
- Espera, pensé que hoy entrenaríamos. Desde que Triniti me indico que me ayudarías a entrenar ni una sola vez lo hemos hecho.
- Tienes razón- Se quedó callado un momento ensimismado en sus pensamientos – te propongo algo ¿Qué te parece si practicamos o mejor dicho te doy una breve introducción y luego vamos a dar una vuelta?
- Ummm okey vamos al patio.
No lo puedo creer, de verdad esto parece una broma, prácticamente Dimitri me invito a un cita, bueno aunque solo sea a dar una vuelta para mí es una cita. O bueno la verdad pueda estar exagerando
- Hey, Erick aquí. Quieres poner un poco de atención.
Uff creo que me despegue mucho tiempo del suelo.
- Dimitri lo siento, ¿Puedes repetir?
- Ok, pon atención. Haré un hechizo para controlar el viento ok.
- Ok, ¿cómo se hace?
- Tienes que ponerte de pie, concentrarte, sentir la brisa a tu alrededor y repetir: Ventus me
Me quedé asombrado como el viento arremolinaba alrededor de Dimitri y como este con mucha elegancia lo conducía con sus manos. En un momento, dirigió toda la ráfaga contra un árbol de Cereza haciendo que todas sus flores cayeran sobre la grama del jardín creando un espectáculo maravilloso.
- Wow, Dimitri eso fue asombroso.
- ¿Te gusto? Hay más cosas que te pueden gustar- lo dijo con una sonrisa coqueta, ay como odio que juegue asi conmigo
- Si mucho, deja de ser tan engreído. gracias.
- jajaja tranquilo son bromas inofensivas..
- eso espero
- Bueno ahora arreglemos ese desastre. flores feretro evaporence
Y en un Santi Amen todas las flores que estaban regadas por todos los confines del jardín trasero de mi casa se evaporaron desapareciendo en el acto.
- Wow me sorprendes, yo también quiero poder hacer esas cosas.
- Con el tiempo aprenderás mi querido Santa montes. Bueno por el momento vamos a dar una vuelta.
Bueno hay que reconocer que estoy emocionado con la idea de salir con Dimitri, así que nos dirigimos a la salida de mi casa. Obiamente no puedo ir así, me dirijo rapido a mi cuarto a cambiar mi atuendo.
- Vamos en mi auto- Ofreció Dimitri, yo dudo demasiado de mi comportamiento dentro del auto de Dimitri, así que cambie de idea.
- Caminar un poco no nos vendría mal. A 2 bloques se encuentra un Starbucks sería genial que nos quedáramos ahí.
- Ok como desees.
Caminar junto a Dimitri es toda una experiencia, es genial tener la oportunidad de verlo desde distintos ángulos, su rostro es tan perfecto. Me encanta que sea él quien dirija la conversación, aunque no ponga mucha atención en la misma y me concentre solamente en él.
Llegamos a Starbucks hoy está más o menos concurrido el local, nos encontramos con varios conocidos de la Academia que se quedan extrañados ante la escena de un Dimitri sentado en una mesa conmigo comiendo un croissant como si nada. Estaba incomodo, todo el mundo quedaba viendo como si fuésemos 2 extraterrestres. Dimitri es un excelente observador ya que descubrió que me sentía incómodo.
- ¿Incómodo con tanta atención?
- Algo, estoy acostumbrado a pasar desapercibido.
- Oh lo lamento por incomodarte.
- Tranquilo, tú no los puedes controlar.
- Bueno si tienes razón.
La conversación fue muy animada, me gustaba disfrutar de estos momentos con Dimitri, él es súper divertido y autentico, adoro sus chistes aunque sean pésimos me rio principalmente de los gestos que hace al momento de contarlos. Hablamos de toco un poco, de sus vacaciones y de todos sus amigos pero por algún motivo no hablamos de Deas, me dio a conocer detalles muy interesantes de sus padres y de toda su familia. Lo que más me llamo la atención fue cuando hablamos de Antonella, Dimitri hablaba de ella con una profunda adoración, con una ternura inmensa, prácticamente sentí celos de que ella despertara esos sentimientos en él, siendo ella toda una bruja, literalmente. Me dijo que Antonella era huérfana, que sus padres murieron cuando ella era una bebe y que desde entonces sus padres se han hecho cargo de ella.
- Wow con razón entiendo porque es tan cercana a ti.
- Si, así es pero desde hace un tiempo ella a cambiado mucho.
- ¿Y eso? ¿Por qué?
- No lo sé la verdad.
- ¿No sabes o te haces el desentendido?
- No lo sé la verdad, ¿Por Qué? ¿Tú sí?- me dejo fuera de juego con su pregunta, la intensidad de su mirada reducía la valentía que tenía para decirle que Antonella está enamorada de él. Vamos que toda la academia lo sabe.
- No lo sé ¿Por qué debería saberlo?
- No, solo decía. No estés a la defensiva.
- jajaja no lo estoy. Tranquilo
Prácticamente ya habíamos consumido todos nuestros productos y ya estoy perfectamente listo para irme cuando Dimitri sacó a relucir un tema que estuve evitando por todo este tiempo.
- No me has contado nada acerca de ti. Toda la tarde hablamos de mí, Erick.
- ¿Y qué quieres saber? ¿Pregunta?- Que no saque lo de las relaciones o algo así, please.
- Erick me da algo de pena, pero bueno estas en todo tu derecho de no responder. ¿Eres Gay?- ¡Que! ¿no es evidente?
- Si lo soy.
- Ah, entiendo. ¿Y por el momento no te gusta nadie?- Mmmm que pregunta más pretenciosa.
- No. Nadie- Odie tener que sonrojarme cuando le respondí esa pregunta .
- Ah, es que….
Antes de que Dimitri pudiera decir algo un joven llamado Patrick Buenaparte, que era el jugador estrella de nuestro equipo de Futbol Americano se aproximó hasta nuestra mesa e interrumpió nuestra conversación.
- Hola Dimitri, ah excelente compañía. Joven Van Allen un gusto verle.- Tomo mi mano e hizo gesto de besarla antes de que Dimitri se la arrebatara y preguntara algo molesto
- ¿Qué quieres Patrick?
- Ya lo debes de saber. Estamos próximos a celebrar la fiesta anual de bienvenida y ya que los he encontrado acá y juntos, que mejor no pudo ser así les entrego sus invitaciones a la fiesta. Espero asistan. Bueno los dejo para que continúen en su plática jajajaja.- Algo no estaba bien, no me agrado para nada el énfasis con el que se expresó Patrick.
Al abrir el sobre con mi nombre Sr. Erick Van Allen me quede sorprendido al ver una invitación, un rectángulo de color marfil con un antifaz turquesa de tamaño mediano en la esquina superior izquierda, desvié la mirada y me encontré con Dimitri abriendo su sobre y extrayendo su invitación, aunque su antifaz era rojo. Eso me extraño un poco.
- ¿Por qué la diferencia de los antifaces?
- Ah, indican el grado de importancia que te otorgan.
- ¿Ah? ¿No entiendo?
- Ok…. Hay 4 colores diferentes verde, rojo, azul, turquesa. En dependencia del color de tu antifaz así te clasifican, El antifaz turquesa quiere decir que serás uno de los invitados principales o popularmente dicho “Invitado de Honor”.
- Yei, que lindo gesto- Yo estaba súper feliz y emocionado, pero el rostro de Dimitri estaba sombrío .
- Dimitri, ¿Qué Pasa?- Estaba súper concentrado en sus pensamientos que no se percató que le hable. Lo saque de su trance colocando mi mano encima de la suya. Eso le llamo suficiente la atención para centrarse completamente en mí.
- Prométeme Erick que pase lo que pase no iras a esa fiesta.- ¿Qué?
- ¿Por qué no debería de ir?- esto me estaba inquietando.
- No te lo quería decir para no incomodarte pero bueno, desde que entramos en una de las mesas detrás de nosotros esta Antonella con todo el comité de la escuela.Me imagino que ya sabes que ella es la presidente, también es la encargada de realizar la lista de invitados para la fiesta anual. Así que algo me suena muy mal de todo este asunto.
Me quede pensando por un instante en todas sus palabras. Y varias dudas se instalaron en mi mente, ¿Por qué Antonella quisiera invitarme? ¿Qué tal si es alguna trampa o jueguito? Pero bueno sentado no averiguaría nada, así que me puse de pie y gire sobre mi asiento para encarar a Antonella pero Dimitri me detuvo en el acto.
- Ni se te ocurra.- que me haya detenido fue la chispa que encendió todo el TNT que había en mi interior.
- Ya estoy cansando que siempre te pongas a la defensiva con ella, Déjame en paz.
Me deshice de su agarre y camine directamente a la mesa de Antonella, debido a la posición de la misma todos los que estaban sentados vieron lo que sucedió con Dimitri y como le di la espalda para venir a encarar Antonella.
- ¿Ahorra cuál es el juego?- le pregunte, haciendo énfasis en el sobre con mi invitación .
- Ay Erick deja el drama simplemente es la invitación a una fiesta. No creas que no sabemos que eres el Nieto de una de las Ancianas de nuestro Aquelarre, tenemos que ser respetuosos de eso.
- A la mierda tu excusa barata Antonella, que te quede claro que no caeré en tus jueguitos absurdos.
Estaba súper avergonzado por la manera tan poca de mí que me exprese enfrente de todos los que estaban en la mesa de Antonella, los demás clientes estaban atónitos por nuestro espectáculo. Antonella no respondió lo hizo Patrick acercándose de una manera muy sugerente a mí.
-Wow este bello gatito saco sus garras a jugar, Tranquilo. Tú solo asiste a la fiesta y todo saldrá bien, tus amigos están invitados para que veas que las intenciones de Anto son buenas.
Lo deje hablando solo, di media vuelta y salí del establecimiento. Me enoje aún más con encontrar a Dimitri en nuestra mesa sentado como si nada estuviera pasando. Bueno, sé que no tendría por qué enojarme pero detesto que se haya mantenido al margen.
- ¿Nos vamos?- hablo a mi espalda.
- Es obvio- respondí yo no muy amable la verdad.
Toda esta situación me abruma. Dimitri está a 10 pasos de distancia, agradezco que mantenga su distancia porque sería capaz de descargar todo mi enojo contra él. Estamos a punto de cruzar la calle para llegar a mi casa, cuando me detuvo.
- ¿Erick promete que no iras a esa fiesta?
- ¿Por qué no iré? Si no voy le daré gusto a Antonella y es algo que obvio no lo voy a permitir, además irán mis amigos así que tranquilízate ok.
- Bueno no digas que no te lo advertí.
No dijimos más caminamos hasta que llegamos a mi casa. él abordo su vehículo y desapareció en el horizonte.