Vuelta a casa

Cuando se acaban las vacaciones

Estás esperándome en Atocha, te veo a lo lejos, tu aún no me ves entre la gente, empiezo a correr y me ves, sonríes, sonrío. Nos abrazamos y por fin, nos damos un beso largo, con hambre y amor a partes iguales, me coges de la mano y vamos hacia el coche.

Ponemos rumbo a Las Rozas, estamos hablando de cualquier tontería, te acaricio el pelo, tu me acaricias la rodilla y tu mano traviesa empieza a subir, abriéndose paso bajo mi falda y tocando mi coño sobre las medias y las braguitas, notas algo de encaje y te gusta...

No hay tráfico y tu mano juguetona sigue subiendo hasta mi cintura, te ayudo y bajo las medias para que puedas acceder mejor y casi sin quitármelas del todo tu mano ya se ha colado por mis braguitas, notando mi coño suave, caliente y según bajas... húmedo. Tiemblo, me miras y empiezas a tocarme el clitoris, mis piernas se abren para facilitarte el acceso, tus dedos juguetones empiezan a meterse por mi coño y mi respiración se acelera... quiero tocarte pero me frenas, quieres que disfrute, cierro los ojos, me muerdo el labio con cada roce de tus dedos y gimo cuando los metes dentro de mi coño empapado...

Llegamos, aparcas el coche en el garaje y en el ascensor tus manos y las mías tienen hambre, el deseo nos puede, me acaricias, te acaricio, nos besamos, te muerdo, aprietas tu polla dura contra mi, resoplo...

Abro la puerta y te falta tiempo para sentarme sobre la mesa, me subes el vestido, me bajas las medias y las bragas a la vez y te recreas en mi coño, lamiéndome, oliéndome, respirándome mientras te desmayas los pantalones y los dejas caer... te abrazo con mis piernas y tu polla dura entra sin problemas en mi coño empapado, me embistes, gimo, me muerdes, me aprieto contra ti, te beso, jadeamos y de pronto te corres.

Siento como tú leche inunda mi coño y tu hambriento no quieres derramarla... sacas tu polla y bajas rápido a comerme el coño, que sabe a ti, a mí y a ganas de más. Te recreas, me lames y me muerdes, me follas con tu lengua y conforme mi respiración se agita empiezas a meter tus dedos, follandome el coño y empezando a jugar con mi culo...

Estoy muy cachonda, sé que estoy cerca de correrme, tú lo sabes, te incorporas para besarme sin dejar de tocarme con tus manos, mi respiración sigue acelerándose, gimo, jadeo, notas mi coño más y más húmedo, y de repente sacas el dedo de mi culo y me corro... vuelves a bajar sacando los dedos del coño y te comes mis flujos, para besarme una vez q me has vuelto a dejar limpia...

Subimos, esta vez tenemos tiempo, el deseo y el hambre dan paso a las ganas de dar placer a la otra persona. Terminamos de desnudarnos con dulzura, besándonos, redescubriendo nuestros cuerpos, acariciandonos, volviendo q excitarnos poco q poco, como si fuese la primera vez...

Nos tumbamos en la cama, me pongo sobre ti y empiezo a besarte, bajando lentamente por tu cuello, primero un lado y luego otro, mientras tú acaricias mi espalda y sientes en tu pecho como mis pezones se endurecen, sigo besando, lamiendo, mordiendo despacio cuando menos te lo esperas, gimes, te miro, sonríes y sonrío, volviendo a lo mío...

Ya voy por tu barriga, sigo bajando despacio, recreándome en cada cm de tu piel hasta que llego a tu polla, pero no me la meto en la boca, bajo hasta tus huevos y empiezo a comérmelos, lamiendo por debajo, tus ingles y finalmente tu polla, desde la base hasta tu punta húmeda, que aún sabe a mí. Me la meto entera en la boca, juego con mi lengua, succiono y empiezo a subir y bajar... siento como mi coño se empapa más y más, pero no quiero parar, continúo comiéndomela, degustándote, cada vez más rápido, siento que te mueves, coges el móvil y empiezas a grabarme, me excita y me espero aún más hasta que de repente tu leche inunda mi boca, tibia y deliciosa... sigo moviéndome, despacio hasta que deja de salir, me la saco poco a poco, te miro juguetona y me lo trago todo... después oigo el clic del fin de la grabación.

Aún con el recuerdo de tu orgasmo, me coloco sobre tu cara, quiero q me comas el coño y que sientas lo cachonda que me pone comerte la polla. Así lo haces, empiezas a lamer despacio, respirándome y excitándome más, saboreándome, mordiéndome y follándome, cada vez más deprisa, metiéndome un dedito por el culo, lo q ayuda a que mi excitación aumente...

Me quito de tu cara y me deslizo por tu cuerpo hasta encontrarme con tu polla, que de nuevo dura entra sin problemas en mi coño mientras te beso y me saboreo. Empiezo a moverme despacio y noto en seguida que el orgasmo está cerca, me acaricias las tetas despacio, dejándome disfrutar y vuelves a coger el móvil, para empezar a grabar cuando estoy a punto de correrme, dos movimientos de cadera más y lo noto, intenso, recorre todo mi cuerpo, se endurecen mis pezones y se me pone la piel de gallina, mi cara se relaja, te miro y sonríes, dejas el móvil, sabes que quiero más y ahora necesito tu ayuda...

Me tumbas sobre tu pecho, nos besamos y te mueves mientras tu mano busca mi culo, metes el dedo y sigues moviéndote, gimo, jadeo, mi respiración se acelera aún más, sacas el dedo, casi grito de placer, cojo el mando muevo mis caderas cada vez más rápido y me corro, más intenso q antes y distinto, más largo... tú no puedes más y en mis últimos movimientos te corres, lo siento y me flipa... te beso, me quito con cuidado y salgo corriendo al baño... sabes lo que va a pasar ahora...

Me sigues a la ducha, entramos me retiras la mano del coño y empiezas a comérmelo de rodillas, de repente notas algo caliente, te separas y dejas que mi meada caiga por todo tu pecho, hasta tu polla, que vuelve a endurecerse de la excitación que te produce el poder que tengo sobre ti...

Termino, me limpias y me arrodillo, es mi turno. Te pones de pie, me miras y te sostengo la mirada, y empiezas a mearme las tetas, siento tu orina caliente que baja hasta mi coño y cuando estás terminando me meto la polla en la boca para limpiarte, me miras sorprendido porque no esperabas eso, pero me dejas hacer... estás tan cachondo que sabes que si sigo comiéndote la polla así te vas a correr, me lo dices y yo no paro, pero cuando te queda poco me apartas y continuas tocándote tu, de repente siento tu leche cayendo en mi cara y por mis tetas... te miro, cachonda, me ha gustado más que la primera vez y a ti también...

Antes el grifo y nos duchamos, sin dejar de tocarnos el uno al otro, sin que dejar que baje el nivel de excitación... seguimos hambrientos.

Salimos de la ducha y te vuelvo a llevar a la cama, esta vez te digo que te pongas a cuatro y empiezo a comerte el culo, lubricándolo bien con mi lengua y follándote con ella, gimes y jadeas, te azoto y lo haces aún más fuerte... me excita mucho, me meto uno de mis dedos en el coño y empapado lo meto en tu culo, que lo recibe caliente y apretado. Lo muevo en círculos y al poco trato de meter un segundo dedo que entra sin problemas... estás listo.

Cojo la caja, me pongo el cinturón y embadurno bien de lubricante mi polla y tu culo, me coloco detrás de ti y empiezo q meterte la polla, en cuanto pasa la cabeza embisto, de golpe, hasta el fondo. Gimes, te gusta, y empiezo a moverme, follándote, azotándote, golpeando tu culo en mi barriga... pero quiero verte la cara, así que saco la polla de tu culo, un escalofrío te recorre el cuerpo cuando lo hago.

Te doy la vuelta y me pongo sobre ti, volviendo a metértela hasta el fondo, está vez sin tener cuidado, y gimes de placer como no te había oído nunca, me muevo cada vez más deprisa, te aprieto el cuello y me miras, tus pupilas se dilatan, te gusta y sigo apretando un poco más mientras sigo follándote duro, tu polla babea como nunca, y de repente te corres sobre tu pecho, me muevo despacio hasta que terminas y saco mi polla de tu culo, me quito el cinturón y te limpio la leche, mientras tus manos buscan mi coño, empapado y empiezas a follarme, estoy tan cachonda que, en seguida, me corro y, saciados, nos tumbamos uno al lado del otro, nos damos un beso y sonreímos, satisfechos...

  • Bueno, ¿pedimos un Dicarlo?, digo entre risas.

Sonríes, asientes y llamamos.

La noche es larga, hay que recuperar fuerzas para seguir con el ejercicio... pero eso será otra historia.