Volviendo a ver a Fernanda

Habia salido por dos meses con ella, una chica de interesantes curvas. A ella le gustaba mucho el sexo, pero era bastante activa por un lado, y mezclaba la relación con planteos de porque no la llevaba al cine, o a otros lados. Yo estaba de novio en ese momento y ella era una "amante" para mi. Finalmente dejamos de vernos, porque era más el lío que la gracia.

Meses mas tarde, sin embargo, ya sin novia, estaba buscando una chica que tuviese ese toque sumiso que le da a una mujer un atractivo de adicional lujuria. Me acordé de ella, de su mezcla de energía sexual con demanda de que uno se ocupe de ella.

Y entonces, en una noche donde la mente y el cuerpo piensan en placer, le envie un mail. Habian pasado 5 meses , pero yo presentía, que ella habia quedado con ganas de seguir la cosa. Y no me equivoque, al dia siguiente habia contestado, señalando su alegria de que volviesemos a vernos.

Mi plan era simple, salir con ella, llevarla a cenar y beber, y hasta subir a su departamento, pero sin darle ni un beso. Ella vivia sóla, y yo sabía que iba a estar esperando mi acercamiento, mi contacto.

Nos encontramos y empezamos esas charlas del "tanto tiempo" y pronto estabamos en un bar, con un vino y algo de queso.  Note su asombro, cuando luego la lleve a la casa y no le propuse ir a otro lugar ni subir a tomar un café.

La llame luego una semana despues y le dije que se preparara una cena en su depto. Ella acepto, llegue y bajo abrirme. Estaba muy bien vestida, resaltando sus formas. Subimos y la mesa estaba preparada, con velas y un olor a comida rica asomaba desde la cocina. Me dijo que faltaban los ultimos detalles. Entro en la cocina y yo entre detras, la agarre por atras abrazando sus senos y aprestando mi cuerpo contra el suyo. Note como la sorpresa, y a su vez su deseo y su espera, solo le permitieron balbucear "que haces". La di vuelta y la bese en la boca profundamente.

"Bueno, servi la cena" , le dije.

"No...,pero ahora no puedo..", me dijo. "Me dejaste caliente"

Entonces me baje los pantalones dejando aflorar mi estaca, la agarre de la cabeza e hice agachar. "Entonces vas a chupar" , agregue.

La verdad que era barbaro, ver como me la chupaba con devocion, mire rapidamente que hubiese apagado las hornallas, y me concentre en gozar de su chupada mientras le daba indicaciones verbales y con mis manos sujentandola del pelo.

Pero no soy facil de acabar de chupada, y ahi estaba la carta que me tenia reservada. Pasaron los minutos y no me hacia acabar y yo ya queria pasar a otra parte del juego. Lo dificil era contenerme de cojermela ahi mismo. Le separe su cabeza de mi miembro y le dije:

"Veo que no sabes chuparla, al final sos como una nena". Vi su cara de verguenza ante mi afirmación, esto venía bien, yo queria que ella se me entregase y lo venia logrando.

"Veni para la pieza" le dije, y la agarre de la mano, la lleve y me sente en la cama , ella se sento al lado.

"Recostate arriba de mis piernas" le ordené, ella me miró sorprendida pero no dijo palabra y yo le acomodé su panza sobre mis piernas, le levanté la falda y le propiné una buena nalgada sobre su tanga de encaje que asomaba como pidiendo más.

"Que haces?" pregunto de nuevo balbucenado, y yo segui con las nalgadas a la par que le decia:

"Quiero que aprendas a chuparla, que me hagas acabar con tu boca y mientras no lo consigas no te parece que mereces sentir las consecuencias ? "

Y entonces paraba de pegarle, para acariciar sus partes intimas, mientras le decia que conteste, "Te parece bien que no sepas hacerme gozar ?"

Luego seguia con las nalgadas, hasta que ella dijo " Pero si lo que mas quiero es satisfacerte, ya voy a aprender a chupartela para que acabes, lo prometo"

Me encantaba , su voz entrecortada, demostraba que aquella mujer lo que necesitaba era eso, alguien que primero la domine, para luego recien darle placer.

Cuando me parecio suficiente, y ya no queriendo aguantar mi trozo al palo, la empeze a besar desaforadamente, la hize poner en cuatro y la penetré con todas las ganas. La muy guacha acabó  como una posesa, yo también grité de placer y caimos rendidos.

Pero solo un minuto, ahora queria la cena, y probar otras cosas con ella...

(Continuará)