Volver a creer 26

Manejé hasta la bodega donde se encontraban mis amigos esperándome, llegué de muy mal humor y por error me desquité con ellos.

–Que pasa que esperan andando a trabajar –dije molesta

Solo me miraron y nos subimos a la camioneta para ir a cerrar unos negocios, en todo el camino me la pasé callada mi mente no dejaba de pensar en las palabras de Josué me daba coraje pensar que pudiera intentar algo con Yaz y aprovecharse de la situación tan difícil que ella estaba pasando, sin pensar solté un golpe con coraje al volante de la camioneta que iba manejando yo y los chicos me miraron asustados.

– Hey fabi que pasa esta todo bien? –preguntó Elisa

–No es tu asunto Elisa. –dije molesta pero al momento me arrepentí de haber dicho eso ellos no tenían culpa de nada –lo siento chicos he tenido un día muy difícil me duele un poco la cabeza y ustedes no tienen culpa de nada.

–Tranquila fabi nosotros entendemos no hay problema. –me sonrió Luis

Seguimos el camino en completo silencio al llegar al lugar le pedí a Luis que el se encargara del negocio ya que no tenía ganas de aguantar los cumplidos de los socios de mi madre, el aceptó y los chicos lo acompañaron, yo me quedé en la camioneta y decidí llamarle a yaz.

Llamada:

-Fabi que pasa todo bien? -dijo yaz del otro lado de la línea.

-Si todo bien amiga, mas bien llamaba para saber como estás tu te sientes cómoda ahí? –pregunté mucho mas tranquila al escucharla.

-si Fabiola estoy bien, me siento muy cómoda de verdad que ya no te preocupes.

-Ok Yaz ya entendí -reí -bueno entonces ya sabes cualquier cosa que necesites solo llámame, si tengo tiempo en estos días voy a visitarlos de nuevo cuídate

-Ok fabi nos vemos tu también cuídate

-Adiós yaz -me disponía a colgar pero ella habló de nuevo.

-Fabi gracias por preocuparte te quiero mucho.

-No agradezcas nada Yaz -suspiré -yo también te quiero amiga.

Colgué la llamada y me asusté al escuchar en los asientos de atrás la voz de Elisa

–Amiga? –preguntó con burla –por dios Fabiola a ti te gusta esa chica no lo niegues ella es todo pero menos tu amiga

–No digas tonterías Elisa no sabes de lo que hablas –dije haciéndome la molesta.

–Vamos fabi no tiene nada de malo, estás en todo tu derecho de rehacer tu vida, eres joven –dijo regañándome –además a esa chica solo basta ver como te mira para saber que esta perdida por ti

volteé a verla sorprendida por lo que acababa de decir.

–Eso no es cierto Elisa –dije dudosa –ya no quiero hablar del tema, no se que les hace pensar a ti y a mi madre que a mi me gusta Yaz, es una tontería

–Como digas Fabiola yo solo digo lo que veo, y la verdad que desde hace mucho no te había visto sonreír como lo haces cuando estas con ella.

–Eso no quiere decir nada Elisa, ella es mi amiga siempre lo fue y así seguirá siendo. Ya no quiero hablar de eso que ya vienen los chicos y no quiero que ellos también piensen cosas que no.

No contestó nada ya que en ese momento los dos chicos se subieron y arranqué de regreso hacia la bodega, al llegar y no tener mas pendientes decidí ir a mi casa y darles la tarde libre a los chicos los cuales se pusieron felices al saber. Salí de ahí y manejé hasta mi casa, cuando llegué mi madre no se encontraba en la casa por lo que decidí recostarme en mi cuarto, entré a mi recamara y lo primero que vieron mis ojos fue la foto de Estela que tenía al lado de mi cama en la pequeña mesa, la tomé y me dediqué a mirarla por unos minutos y las lagrimas salieron sin permiso

–Mi amor no sabes cuanta falta me haces de verdad que te necesito a mi lado –dije hablándole a la foto –la verdad que no se que me pasa últimamente con Yaz, cuando estoy con ella y la veo así tan vulnerable después de lo que ella pasó con Andrés siento la necesidad de cuidarla y estar cerca de ella para que nadie mas la lastime pero siento que te estoy fallando mi amor perdóname –dije comenzando a llorar mas –mi madre y Elisa dicen que me devolvió la sonrisa pero yo no se que pensar no se que debo hacer

En ese momento entró mi madre a mi cuarto y al verme en ese estado se sentó a mi lado y me abrazó tratando de tranquilizarme y lo logró, cuando me calmé ella me habló

–Hija me duele mucho verte así entiendo lo que te duele pero hay que seguir, a ella no le gustaría verte así.

–Lo se ma, es solo que no quiero fallarle, de verdad tengo tanto miedo de fallarle

–Si tu no logras salir adelante y tratar de por lo menos ser feliz ahí si le vas a fallar hija, entiende que ella te amaba y tanto era su amor que dio su vida por ti para que pudieras vivir seguir adelante, si tu no superas esto y te dejas caer ella habrá dado su vida por nada.

No pude decir nada me había quedado sin palabras

–Ella siempre estará en tu corazón hija eso nadie lo va a cambiar y la persona que algún día te vuelva a enamorar lo va a entender, eres muy joven y con una vida por delante mereces ser feliz. –volvió a decir mi madre

–Te amo ma te amo mucho –no pude decir mas y la abracé llorando otra vez.

–Yo también te amo hija y me gustaría verte feliz de nuevo mi amor.

–Algún día lo seré ma lo prometo.

–Animo mi amor –me dio un beso en la frente –hija me contó Gonzalo que hoy estabas de mal humor con ellos.

–Bueno no fue contra ellos, cuando llegue a la bodega iba de muy mal humor y cometí el error de desquitarme con los chicos pero les pedí disculpas

–Y yo podría saber cual fue el motivo de que estuvieras de mal humor? –preguntó mi madre curiosa

–Si.. discutí con Josué -–dije recordando las palabras de mi hermano y me llené de coraje de nuevo –es un idiota pensé que era diferente.

–Porque dices eso hija que hizo? –dijo sorprendida

–Me dijo en mi cara que no va a descansar hasta llevarse a la cama a Yaz –dije enojada –se atrevió a decírmelo en mi cara puedes creerlo?

–Y tiene algo de malo? –cuestionó mi madre mirándome de manera extraña –digo los dos son mayores y saben que es lo que hacen

–Pero Josué no pude hacer algo así madre entiende no puede jugar con ella –insistí

–No entiendo cual es tu molestia fabi, si ella quiere seguirle el jueguito a tu hermano esta en todo su derecho es libre

–El problema aquí es que no quiero que le ponga una mano encima carajo! –dije levantando la voz y poniéndome las manos en la cara con coraje.

–Tanto te costaba decirlo hija? porque no aceptas que son celos.–dijo mi madre con una sonrisa

–No lo voy a aceptar por que son celos de mejor amiga es solo eso y nada mas –dije tratando de convencerme mas a mi misma.

Mi madre soltó una carcajada y yo la miré con molestia.

–Claro hija como digas.. espero que cuando te des cuenta no sea demasiado tarde –se levantó y caminó hacia la salida del cuarto –saldré de nuevo con Lucía te veo en un rato hija te amo.

–Si ma con cuidado.

Salió mi madre de la recamara y me dejé caer en la cama viendo hacia el techo, mi cabeza estaba hecha un lio y mientras seguía pensando mi celular sonó y lo contesté sin ver quien era

Llamada:

-Diga -contesté

-Fabi soy Karla que tal como estás?

-Hey Karla muy bien y tu que tal? -dije sorprendida por su llamada

-Muy bien fabi en estos momentos estoy fuera de la casa de tu papá junto con Brenda, hace un rato me encontré a tu padre y me comentó que yaz se iba a quedar un tiempo con ellos y vine para platica un momento con ella.

-Si así es Karla en estos momentos debe de estar ahí en la casa

-No y es por eso que te llamo estoy aquí y nadie me abre la puerta y pensé que aun podría estar ella contigo

-No la verdad es que no pero dame unos minutos y llamo a mi padre y le pregunto

-Ok te espero entonces

-Si claro ya te llamo.

Colgué la llamada para luego iniciar otra con mi padre

-Hola pa

-Hija me da gusto escucharte

-A mi igual me da gusto escucharte, papá donde estás en estos momentos –pregunté nerviosa

-Salí a comer con unos amigos por que pasa algo? -preguntó

-No pa está todo bien, y Yaz se quedo ahí en la casa?

-Si hija, Josué y Yaz se quedaron platicando cuando yo me fui hace algunas horas

-Ah ya, una pregunta pa, la llave de repuesto sigue escondida en donde mismo? –pregunté

-Si hija por que

-No nada mas, le iba a comentar a Yaz por si algún día ella tiene que salir –mentí

-Si hija dile para que ella sepa donde está.

-Ok pa nos vemos luego cuídate

-Ok hija adiós.

Colgué la llamada y me sentía muy nerviosa y molesta, llamé a Karla y les dije que iba para allá que por ningún motivo se movieran de ahí, a lo cual ella aceptó un poco extrañada, salí hacia mi coche llena de rabia y me encontré con mi madre que estaba por irse y cuando me vio así se acercó a mi

–Hey fabi hija que tienes está todo bien? –preguntó

–Eso es justo lo que voy a ver –dije y me subí a mi carro arrancando a toda velocidad dejándola ahí parada

Manejé lo mas rápido que pude mi mente imaginaba un millón de escenas que podía encontrar en esa casa y cada vez mi coraje aumentaba mas, llegué a toda velocidad a casa de mi padre me bajé del coche dejándolo mal estacionado y caminé hasta donde se encontraba Brenda y Karla esperándome, cuando me vieron en ese estado intentaron preguntarme si algo pasaba pero las ignore, abrí el portón de la casa y caminé hasta donde se encontraba escondido el repuesto de la llave y entré muy rápido y Brenda me jaló del brazo y me habló antes de que yo siguiera caminando.

–Hey hey fabi que pasa que tienes por que estas así que esta pasando. –preguntó muy confundida por mi actitud desesperada

–Necesito comprobar algo Brenda por favor déjame ir –dije soltándome de su agarre

Subí las escaleras sin poder evitar que Brenda y Karla me siguieran, cuando abrí la puerta del cuarto que era mío tiempo atrás, me encontré con la escena que mi mente había imaginado millones de veces cuando venía en camino para acá, era mi hermano y Yaz desnudos en la misma cama que al abrir la puerta tan bruscamente se levantaron asustados cubriéndose con lo que estuviera a su alcance, yo solo miraba la escena con rabia y coraje, no tenía ningún derecho a reclamar nada pero me sentía traicionada nuevamente, miré a Yaz por ultima vez y salí de ahí limpiando las lagrimas que se me habían escapado.

Brenda y yaz se quedaron completamente mudas solo viendo lo mismo que yo, bajé de ahí y salí rumbo a mi coche y estaba por subirme cuando la camioneta de mi madre se estaciono y se bajó mi madre corriendo al verme peor que antes.

–Fabiola que pasa por que estas así que sucede –preguntó mi madre angustiada

–Nada madre, es solo que me he dado cuenta demasiado tarde –dije llorando y ella me abrazó sabiendo a lo que me refería

Me solté de su abrazo y me limpie rápidamente las lagrimas por que en ese momento salió Brenda y Karla que se miraban completamente confundidas pero no decían nada, el ambiente estaba muy tenso y nadie hablaba hasta que salió Josué pidiendo hablar conmigo yo lo miraba con rabia y dolor pero acepté, nos alejamos de ahí un poco y el empezó a hablar.

–Fabiola lo que viste arriba no fue nada –antes de que terminara de hablar le solté un fuerte golpe en la cara y calló al piso dolido

Mi madre y las chicas rápidamente se acercaron evitando que yo lo pudiera golpear nuevamente pero yo estaba completamente cegada y sin importarme la presencia de los demás le grité.

–Ni un puto día y cumpliste lo que dijiste no? te dije claramente que no te metieras con ella, te lo advertí Josué te dije que no jugaras con ella porque estaba pasando por un momento muy difícil y tu te aprovechas de eso –grité con furia.

–Yo no la obligué a nada Fabiola yo te dije que no haría lo que ella no quisiera y por lo que pasó ella también quería lo mismo –dijo riendo.

–Eres un.. –trate de acercarme a golpearlo nuevamente pero me lo volvieron a impedir

–Tranquilízate por dios Fabiola –me dijo mi madre

Miré a mi madre y me solté de su agarre y corrí hasta mi coche y me subí pero no pude evitar que Brenda se subiera a mi lado y arranqué a toda la velocidad de ahí, cuando ya se me hacía imposible manejar me estacioné en un lugar de la ciudad y golpee demasiadas veces el volante hasta que Brenda me tomó las manos y me detuvo.

–Fabi fabi ya tranquila por favor te vas a lastimar.

–Para que me seguiste Brenda quería estar sola no quiero ver a nadie –dije enojada

–Estas muy mal y no te voy a dejar sola –habló con mucha preocupación –que pasa fabi puedes contar conmigo

–Le dije a Josué le advertí que no se metiera con ella y el me dijo que no descansaría hasta tenerla en su cama y no paso ni un solo día y mira lo que pasó.

–Pero porque te pones así fabi es lo que no entiendo, además si Josué se acostó con ella fue porque ella también quería fabi ellos son ya mayores para saber lo que hacen, Yaz no es una niña para que la cuides ella sabe perfectamente lo que hace.

–Tu no entiendes nada Brenda  –dije con fastidio.

–Dime que es lo que no entiendo? si no me lo explicas como lo voy a saber

–Ya no tiene caso Brenda por favor ya no me hagas hablar. –dije limpiándome las lagrimas

De un momento a otro Brenda puso una mano en mi mejilla acercándose poco a poco a mi y me besó, beso que correspondí pero al darme cuenta que estaba haciendo me alejé rápidamente de ella evitando su mirada.

–Que estas haciendo Brenda –pregunté sin verla

–Solo quiero demostrarte que te sigo amando a pesar de todo fabi.

–No debiste besarme Brenda no le puedes hacer eso a Karla.

–Fabi, Karla y yo ya no estamos juntas desde hace algún tiempo, sabe que sigo amándote y ella esta saliendo con alguien mas

La miré sorprendida me costaba creer en sus palabras.

–Vámonos de aquí fabi a un lugar donde podamos hablar mas cómodas necesitamos hacerlo.

arranqué el carro manejando hasta mi casa sin saber lo que estaba apunto de suceder.

wattpad: FerAguilar390