Vivir con mi padre 3
Hola lectores volví después de mucho tiempo, aquí está lo que esperaban de esta historia espero que les agrade.
El podía haber aprovechado la situación pero como buen caballero no lo hizo se dio vuelta y siguió para hacer lo que tenia que hacer, yo Sali de la ducha envuelta en un tohallon, y con mis pensamientos a mil, que debía hacer si el me vio desnuda que habrá pensado, lo habre excitado, me ve como una nena todavía, cuantas preguntas sin respuestas, el dia transcurrió normal cada quien con sus que haceres y llego la noche cuando regreso a casa mi padre estaba como siempre cuando hace calor, en bermudas asi que yo dispuse a ponerme comoda me saque casi toda la ropa y me quede en interiores y una remera larga, como yo tenia la costumbre de sentarme en el sillón con los pies arribas y cruzados, y la remera no era tan larga se podía observar mi tanga tranquilamente, maldición esa noche llevaba una blanca de algodón, la cual se había pasado un poco de mis flujos, que con la mano trataba de estirar la remera para que no se notara, le pregunte si lo ayudaba con la mesa y me respondió que no hacia falta, la comida estaba en la mesa asi que nos sentamos a cenar y hablamos de mis estudios y de su trabajo paro nada, terminamos y le dije que yo lavaría los trastos y cuando termine de hacerlo le pregunte si podíamos conversar, me respondió que si con todo gusto.
El se sento en una punta del sillón dejándome lugar para sentarme pero yo me recosté apoyando mi cabeza sobre sus piernas y las mias colgando del pasamanos del sillón, a lo cual mi tanga quedaba totalmente expuesta a su gusto, fue algo inconciente.
H- de que quieres conversar Natu
N- te puedo hacer una pregunta pero debes ser totalmente sincero conmigo.
H- si hija te dire y sere sincero
N- lo que viste hoy que te pareció
H- a que te refieres?
N- no te hagas el tonto papa, a el tema de la ducha, que te parece mi cuerpo
La pregunta lo dejo un poco incomodo, pero como tenia mi cabeza apoyada en sus piernas podía sentir su polla media adormecida, me la empece a imaginar como seria, debería ser hermosa, ya que había tenido una hija como yo (jajaja modestia aparte), tuve que insistir para que me respondiera hasta que al final lo hizo.
H- es el cuerpo mas hermoso y apetecible que he visto, le has ganado a tu mama a tu misma edad.
N-pero sabes algo no es justo tu me viste desnuda y yo no a ti, las muejres mueren por ti y me pregunto que tienes que seduces a tantas.
H- no lo se hija en cuanto a la seducción, y no me parece justo que me veas desnudo ya que soy tu padre.
N- desde hoy cambiaremos las reglas, cuando estemos solos andaremos desnudos los dos asi no habrá mas puerta que nos divida.
Me levante enseguida y con unos movientos sensuales comencé a desnudarme primero la remera y me ponía de espalda mostrando mi tanguita, mientras aprovechaba para sacarme el sosten, y por ultimo como hacen las striper para sacarme la tanga, estaba totalmente desnuda y porque no reconocerlo excitada también, una vez desnuda me abalance sobre el con mis piernas en arcajada entre sus piernas y mis pechos a la altura de su rostro abrazando su cabeza y poniéndola entre mis tetas, le rogara que también hiciera la mismo, después de unos minutos me retire e intente sacarle l bermudas, hubo una resistencia pero lo logre, quede asombrada por la hermosa polla, no muy grande pero gorda y divina, de un tamaño normal, en mi cabeza rondaba el pensamiento de lo bien que debería usarla.
Estaba tan mojada que con un solo movimiento entro dentro de mi coño sin ningún problema, mi suspiro al llenarme la cavidad fue grandioso, el me pregunto si me había hecho daño y con la cabeza respondi que no, mientras gozaba de esa hermosa polla dentro de mi, era tanta mi excitación que comencé a moverme como loca, en un momento abri los ojos y vi como mi padre también estaba gozando de follarme.
En tan solo cinco minutos me hizo tener dos orgasmos divinos, lo prohibido me excitaba mas, mi cuerpo segui pidiendo mas y mas, pero en un momento me detuve porque parecía que iba a acabar, asi que me baje rápido y continue con mi boca en su pene hasta que salió un rico y calentito semen que inundo mi boca, el cual no desperdicie ni una sola gota del néctar que me había proporcionado mi padre.
Después de un rato y ninguno de los dos decía una palabra, solo atine a abrazarlo y le susurre al oído que este iba a hacer nuestro secreto, que yo estaría a su disposición cada vez que quisiera hacerlo, esl primero dijo había sido maravilloso pero que había sido una locura lo que habíamos hecho y que no debía repetirse, en ese momento le di un beso en la boca, lo cual fue extraño para mi ya que fue como darle un beso a mi amante y no a mi padre, mi cabeza era un lio de emociones, pero de algo estaba segura, ese hombre me protegería y me seguiría amanado como lo hacia siempre.
Cada cual se dedico a hacer lo suyo hasta que llego la tarde yo volvia de la calle en una tarde totalmente calurosa, asi ni bien entre me saque la mayoría de la ropa quedándome en solo mi tanga, entre a la cocina y mi padre estaba preparando la merienda, lo rodee con mis brazos por su espalda, apoye mi cabeza sobre su nuca y con mis manos comenze a acariciar todo su pecho, el no se negaba a esto, intente meter mi mano bajo su bermuda pero me paro segui con mis carias y besos en el cuello, se dejaba hacer hasta que un momento volvi a intentar meter la mano y esta vez no hubo resistencia, no lo podía creer un hombre de casi 50 años que hacia no mas de 4 horas me había follado, estaba nuevamente excitado y erecto, mi padre parecía un semental, asi que baje nuevamente su bermuda y me arrodille frente a el, introduje su polla en mi boca, mientras el me acariciaba la cabeza, en un momento me levanta me da vuelta quedando el detrás me mi y con un solo movimiento corre mi tanga y me introduce su polla en mi vagina, que placer era sentir esa sensación de que ese hombre del cual había nacido me estaba haciendo sentir cosas maravillosas, sus movientos fueron incrementando hasta que un momento la saca y siento sobre mi espalda baja algo calentito que comenzó a bajar sobre mi tanga y mis nalgas, había acabado afuera, se recostó unos momentos sobre mi espalda abrazandome y me sentí totalmente amada y protegida.
El solo susurro sus incandecentes palabras fueron hija me volves loco pero no debemos hacer esto, me di vuelta y le dije que hay de malo papa mientras nadie lo sepa, yo sere tu hija, tu amante, tu confidente, y cuando te veía con otras mujeres mi celos me cegaban y no quería darme cuenta de que el hombre que amaba estaba aquí.