Viviendo un sueño en una mentira [II]
¿Recordáis que os conté lo que me paso un día en el piso en el cual vivo? Bien, pues os deje a medias y creo que va siendo hora de que os cuente que paso a continuación...
¿Recordáis que os conté lo que me paso un día en el piso en el cual vivo? Bien, pues os deje a medias y creo que va siendo hora de que os cuente que paso a continuación...
Meli se había encerrado en su cuarto con Maika y Laila, no puedo contaros que hablaron ahí, pues muy a mi pesar no estaba delante y hablaban tan bajo que no podía escuchar al otro lado e la puerta, algo si estaba claro, iba a ser algo en mi contra, pues a partir de ese día, todas comenzaron a ser mas sueltas, iban por la casa en ropa interior, en ocasiones se dejaban la puerta del baño abierta o al menos sin cerrar con tranco, no sabia que pasaba, pero desde ese día parecían tener mas confianza en mi y eso realmente, me hacia la vida imposible, tenia que intentar no empalmarme delante de ellas y era realmente difícil ¿Como no va empalmarse un salido como yo si tiene a tres preciosidades caminando semi desnudas por la casa a todas horas del día? Podéis imaginar donde me pasaba la mayor parte del tiempo, en mi cuarto encerrado...
Una tarde, mientras estaba viendo la televisión en el salón, Meli se acerco a mí sentándose a mi lado, estaba algo sonrojada y muy a mi pesar quería hablar conmigo, no sabia por que pero me daba mala espina y me imaginaba que seria por lo sucedido.
-Gaby me gustaría hablar contigo sobre... Bueno, aquello...
-¿Sobre que? - pregunto simulando no saber de que me habla.
-Bueno, el día que corte con mi novio, te encontré... Tocándote y bueno, quería aclararte algo.
-Yo... - me corto antes de poder acabar de hablar.
-Espera déjame acabar, quiero decirte que no me importa, hasta los gays tenéis necesidades ¿No? Siento si he estado este tiempo tan esquiva, es solo que... Bueno, la única que había visto era la de mi novio y... Me sentí extraña...
-No pasa nada... - aliviado, así es como me sentía sin duda alguna, no me había visto mirar por el agujero de la pared y no venia a reñirme.
-Es una pena que seas gay... - en lo que decía eso se acercó a mi poco a poco ¿Que hacia? ¿Donde estaba la Meli recatada que yo conocía? Me la habían cambiado y para un salido como yo, es lo mejor que pueden haber hecho, volver a una monja una guarra integral, pero si ese salido tiene que fingir ser gay, es una tremenda putada - por que lo que vi me gusto demasiado- su mano bajo por mi pierna colocándose sobre mi polla, sus labios se juntaron a los míos, mi reacción hubiese sido seguirle el juego, pero dada mi condición, la aparte de golpe dejándola en el sofá tirada.
-Lo siento, no puedo- me limito a decir en lo que salgo corriendo a mi cuarto.
¿Como me puede pasar esto a mí? ¿Enserio? ¿No estoy soñando o algo así? Las cosas comienzan a complicarse de tal modo que quiero que esto sea un sueño un sueño del que voy a despertar enseguida, por que si no es un sueño, faltaba poco para el ''Apocalipsis''...
Desde ese día Meli estaba mas cariñosa conmigo, se juntaba mas y me tocaba cuando tenia ocasión, hasta me había dicho que me ''curaría'' ¿Acaso estaba enfermo? No, yo no estaba enfermo y de haber sido gay de verdad, tampoco lo estaría, pero ella si lo estaba... Y comenzaba a asustarme.
Poco después de eso, comencé a darme cuenta de lo que de verdad pasaba, también me lo contaron mucho después, así que os voy a contar cuanto recuerdo.
Meli, tras desahogarse de todo lo sucedido con su expareja, les contó con pelos y señales lo que me había visto hacer, divertidas, un día en el que yo había salido, entraron a mi cuarto en busca de ‘’porno gay’’ para hacerse a una idea de que era en lo que pensaba en esos momentos, Laila, haciéndose la graciosa, se sentó donde Meli le dijo que yo me encontraba en aquel momento, con tan mala suerte que se golpeo contra el cuadro que cayo y dejo a la vista el boquete por el cual me gustaba espiarlas, su sorpresa fue enorme y sus ansias de vengarse mas aun, entre las tres habían trazado un plan, a pesar de todo Meli si se sentía atraída por mi, por lo que le fue fácil zorronearme cuanto podía y mas, Maika y Laila se encargarían de calentarme tocándose y besándose ante mi y las tres, yendo apenas sin ropa, querían hacerme confesar, hacerme sufrir, demostrar que no era gay, pero puesto que huía cuando aparecían, les estaba costando demasiado. Yo, como un buen iluso, pensaba que me había ganado su confianza y en cuanto a Meli, su coño.
El verdadero problema llego la noche en la que Maika llego ilusionada por haber sido ascendida en el trabajo, todo eran risas y diversión, yo llegue algo mas tarde y prácticamente a la fuerza me obligaron a unirme a la celebración, bebí y bebí obligado por ellas, no recuerdo mas, pero para mi pesar, hay un video de aquella noche que será lo que os narre a continuación.
No era el único bebido, todos lo habíamos hecho, yo me encontraba tirado en el sofá, riéndome solo, no recuerdo por que y dudo que lo haga, Maika llevaba la cámara en la mano, esta se mueve bastante por lo que se intuye rápidamente que había bebido bastante, se acerca a mi con esta y me enfoca a la cara, demasiado cerca, supongo que no se Daria cuenta de ello, se escuchan las voces de Laila y Meli, deben de estar a su lado aunque no se las ve.
-Y aquí tenemos al hijo de puta que nos espiaba en la ducha… ¿No eres gay verdad? Admítelo ante la cámara.
Como un estúpido me sigo riendo, no respondo a nada, seguramente ni si quiera supiera que estaba rodeado por tres mujeres borrachas y alcoholizadas.
-Hay que reconocer que el muchacho los tiene bien puestos, ¿Cuánto tiempo lleva aquí? Y todas le tomábamos por gay- se escucha la voz de Laila.
-Pues yo quiero polla – dice Meli para sorpresa de todas.
La cámara se gira, apunta hacia mi entrepierna, en la cual Meli se pelea con la cremallera para bajarme los pantalones, Laila y Maika se empiezan a reír y Laila comienza a ayudarla hasta que lo consiguen, no me opongo en ningún momento, tampoco puedo, a saberse que tenia en la mente pues aun me reía, consiguen liberar mi polla y Meli la agarra con una mano comenzando a lamerla con cierta ansia, realmente me pareció una guarra en ese video, ella se avergüenza por completo, era una venganza contra mi, pero todos hicimos el ridículo a causa del alcohol, no se como y realmente no se como, por la cantidad de alcohol que llevaba en el cuerpo, mi miembro responde ante los lametazos de la suave lengua de Meli y tras un rato se alza duro e imponente. Se ve la mano de Laila acercarse a tocarla, como si fuese algo desconocido para ella.
Maika y Laila se hablan en susurros, no se distingue bien que dicen, pero enseguida colocan la cámara sobre el televisor, apuntando directamente hacia nosotros, sabia que ellas dos tenían bastante experiencia en cuanto los puntos donde la cámara se veía mejor, me había encontrado alguno en su ordenador cuando se lo pedía por cualquier motivo, les gustaba grabarse y por lo visto, habían decidido intentar chantajearme con un video porno, sin darse cuenta de que ellas saldrían y serian reconocidas también, por lo que el video no surtiría efecto alguno.
Realmente me hacían aquello contra mi voluntad, Meli chupaba mi polla, yo apenas sentía nada, creo, pues mi cuerpo no daba signos de placer, pero realmente cuando recuerdo las imágenes del video, se me pone dura y el placer que siento al imaginarme nuevamente la boca de Meli en mi polla es intenso. Me desnudan entre Maika y Laila, enseguida me he quedado en bolas y ellas no tardan en desnudarse también, ayudan a Meli que parecía no querer sacarse la polla de la boca, abren un poco el sofá cama para tener sitio todos y comienza el show, ya había recuperado un poco la consciencia y no me encontraba en mi mundo de colores, sentía algo en cuanto a lo que me hacia Meli y había comenzado a soltar suaves gemidillos de placer que salían sin control de mi boca, Maika y Laila se estaban besando y tocando a mi lado, aquello era algo subreal, se me ve girar la cabeza y verlas, el rostro de sorpresa que pongo es bastante llamativo, con cierta cara de depravado meto una mano entre las chicas tocándole a Maika los pechos, la cual parece no importarle y se deja tocar, cada vez siento mas a Meli, y por ello me doy cuenta de que me voy a correr, el placer me recorre de arriba abajo y sin previo aviso, me corro en la boca de Meli, todo lo que tenia acumulado sale disparado y mancha a la dulce muchacha que se aparta al sentir el sabor en la boca, en su rostro y en sus pechos quedan rastros de mi lefa, Laila se aparta de Maika y se acerca a Meli, comienza a lamerle la corrida aprovechando para lamerle los pechos y besarla, pronto se salen del plano de la cámara por lo que no se bien que hacen, pero en imágenes borrosas en mi mente recuerdo ver a Laila entre las piernas de Meli, si intentas atar cabos es de suponer que había comenzando a lamerle el coño cual perra en celo, hacia ya tiempo que me suponía que Laila quería hacerle algo así a Meli, no me extrañaría que estuviese aprovechándose de la situación. En mi rostro se ve que quiero dormir y quizás lo hubiese hecho al quedarme solo de no ser por que Maika decide que ella también quiere diversión, se coloca sobre mi apoyándose en mi abdomen, se la escucha decir algo relacionado con el bisexualismo, al ver el video, me aclaro que tanto ella como Laila eran bisexuales o al menos se habían tirado a algún tío en su vida, siento el generoso culo de Maika frotarse con mi polla, esta se mete con facilidad entre sus ricos cachetes, ha apoyado sus manos en mi pecho, se escuchan los gemidos de Meli en la cámara, es lo que mas se escucha, Maika comienza a besarme el cuello, quiere excitarme y que se me ponga dura nuevamente, y no tarda en conseguir que recupere esa dureza que creía imposible, se ve que estoy flipando, como para no, me costaba demasiado entender que pasaba, hasta ahora me cuesta saber que paso. Maika se alza un poco y mete su mano entre sus piernas, de repente baja de golpe y suelta un gemido sonoro, no es difícil entender que se la ha metido entera, había entrado a la primera en su ano, comienza a cabalgarme con algo de torpeza pero por nuestros rostros, aquello daba un inmenso placer.
Laila y Meli regresan al plano de la cámara, besándose, se tumban a nuestro lado y a mí apenas se me ve por estas, están una encima de la otra, besándose, se ve como Maika me cabalga cada vez con mas y mas rapidez, estoy seguro de que esa noche, los vecinos lo fliparon… Es el turno de Laila de disfrutar, hace que Meli se recueste con la cabeza a la atura de mi culo, quería estar cerca de Maika, se abre de piernas y prácticamente se sienta sobre el rostro de Meli, tras decirle un par de instrucciones, Meli comienza a chuparle el coño tal y como le han dicho, lamiendo el clítoris lento y aumentando el ritmo, bajando de vez en cuando y penetrando con la lengua hasta donde llegase, por la cara de Laila no lo estaba haciendo mal, esta se acerca a Maika y comienzan a besarse mientras yo doy por culo a la muchacha.
No se bien cuando recupere el control, pero durante un rato, conseguí cambiar a Maika y colocarla a cuatro patas, viéndose en la cámara como mi polla sale y entra de su ano dilatado, el placer aumenta, solo de contaros el video ya me estoy poniendo cachondo, imaginarme ese jugosito culo, agarrado a él y perforándolo con las ansias con las que lo hacia… Laila se había tumbado delante de Maika y esta le estaba chupando el coño de esa forma especial que ella sabe hacer y que consigue que Laila grite cual perra en celo. Meli se acerca a mi y comienza a jugar con mis huevos mientras sigo perforando a Maika, la saco de su ano, se escucha a Maika gritar cuando intento hacer algo, gritar que no, que parase, pero por lo visto, cegado por el placer, la ignoro y de repente la penetro por el coño sin control alguno, cuando vi el video, me explicaron que no era que no quisiese ser follada o que fuese virgen o algo así, simplemente es que no llevaba condón, pero nada mas metérsela comenzó a gemir y a gritar de placer que poco tardo en dejar de importarle aquello, me besaba con Meli mientras Maika intentaba chuparle el coño a Laila entre gemidos.
No se por que no me corro aun, supongo que por que había eyaculado en la cara de Meli hacia poco, seguía con el metisaca sin control cuando decidimos cambiar la postura, Maika se tumba y Laila se pone encima suyo comenzando a hacer un sesenta y nueve, Meli se ha colocado a su lado, abierta de piernas mientras me pedía que la follase como yo solo sabia, no lo pensé dos veces, enseguida me coloco ante Meli y la penetro de golpe como si nada, esta muy dilatada, normal, no me extrañaría que se hubiese corrido ya hacia rato alguna vez, Maika y Laila quedan en segundo plano, no se las ve bien con nosotros delante, alzo la cadera de Meli y esta me rodea con las piernas cruzándolas en mi espalda, mis movimientos eran fuertes y certeros, con una intensidad alta, no recuerdo bien que sentía, pero si mi rostro y es n rostro que solo siento cuando el placer me inunda, esa sensación de subidón que sientes antes de soltar toda la lefa cuando llegas al orgasmo, esa sensación, pero sin acabar, esa sensación infinita de estar en la cima de todo, así me sentía, la pobre Meli se estaba llevando todas mis corridas sin duda alguna, vuelvo a correrme, dentro de la joven esta vez, vaciándome por completo en su interior, no soy el único que llega al orgasmo en ese momento, pase semanas con las uñas de Meli marcadas en la espalda a causa de su orgasmo.
Meli esta agotada, se esta durmiendo, se queda en el sofá, colocada de lado en posición fetal, de entre sus piernas chorrea un pequeño chorro de lefa que cae al sofá, cierra los ojos, parece dormida, por lo visto yo quería mas, necesitaba descargar una vez mas y mi objetivo fue el coño de Laila justo cuando Maika se lo lamia con ganas, estoy seguro de que no lo vio venir, ninguna de las dos lo vio venir, Laila suelta un intenso gemido al sentir mi polla entrar dentro de ella, no lo dudo, ni si quiera pregunto, comienzo a mover la cadera entrando y saliendo casi por completo de su coño, siento la lengua de Maika también en mi polla, aun continuaba lamiéndole el coño a su amante y por ello, lamia mi polla cuando quería, estaba seguro de que al menos para Laila y para mi, el placer en esos momentos era demasiado intenso, Maika no tenia una polla dentro, pero la lengua de su novia la hacia gritar de placer, esta vez no ardo nada en correrme, tras unas fuertes embestidas, me corro en el coño de Laila, apenas sale lefa esta vez, estoy literalmente vacío y se nota que en un rato mi polla estaría mas fofa que al principio, estoy exhausto, pero no me van a dejar parar, aun tienen que llegar ellas al orgasmo me hacen saber mientras se colocan la una sobra la otra, abrazándose y besándose con las piernas bien abiertas, sus coños están unidos, juntos, meto la cabeza entre las cuatro piernas y comienzo a lamer de arriba a bajo para abarcar ambos coños, aprovechando de vez en cuando la cercanía de sus clítoris para lamer ambos a la par con agilidad en la lengua, sus gemidos se escuchan bien, lo que me hace suponer que mal no hice mi trabajo en esos momentos, tardan un rato en correrse, Maika antes que Laila, cuando Maika se corre comienza a lamerle los pechos a Laila con ganas para ayudarme a que esta llegase al orgasmo, llega, estamos los cuatro demasiado exhaustos, la cámara se quedo grabando hasta quedarse sin batería, pero lo máximo que se ve es a los cuatro dormidos en aquel sofá cama.
A la mañana siguiente me lleve una buena bronca por haber fingido siendo gay, pero la verdad, algo tuve que hacer bien esa noche de la cual no recuerdo mas que imágenes borrosas, por que decidieron dejarme quedar a cambio de que cerrase el agujero de mi cuarto.
quizás no tenga mucho mas que contaros, aun vivo con ellas, Maika y Laila se casaran el próximo verano, estaba claro que eran la una para la otra, Meli ha encontrado otro novio, pero esta vez no es tan fiel como antes, ha aprendido la lección, ¿de que le sirve ser fiel si el otro no lo es? Y esta vez tiene claro, que si la van a dejar pronto, al menos ella también habrá disfrutado, para mi suerte, conmigo, solemos vernos una vez a la semana a escondidas para follar como locos pero quizás eso os lo cuente otro día, ¿Yo? Sigo como siempre, viviendo en un piso con tres chicas cachondisimas a las que tengo el gusto de haberme tirado… A la vez.