Viviendo en Pecado

Sus suegros no estan de acuerdo en que vivieran en union libre por ser pecado, hasta que su suegra llego a vivir con ellos.

Viviendo en Pecado

Cuando mi mujer y yo teniamos 23 años, decidimos irnos a vivir juntos sin habernos casado. Los padres de mi mujer pegaron el grito al cielo puesto que ambos eran de principios cristianos muy apegados, cuando supieron nuestras intenciones jamás estuvieron de acuerdo, además que por sus edades pensaban que no era correcto mi suegro tenia 63 y mi suegra 58 años empezaron a llamarnos a su hija y mi para decirnos que no hiciéramos eso, que eso era malo, que era como si estuviéramos "viviendo en pecado".y que si lo hacíamos ellos nunca estarían de acuerdo en nuestra unión.


Buenos después de seis meses de "vivir en pecado", mi mujer y yo éramos muy felices, nos llevábamos bien, trabajábamos mucho y disfrutábamos también.

A los siete meses de nuestra unión, yo encuentro a Katia mi mujer muy triste había recibido una llamada de su madre que estaba muy angustiada porque su esposo (mi suegro) había estado teniendo un romance fugaz con una secretaria mas joven de la iglesia en la que trabajaba, y aunque mi suegro le había jurado a mi suegra que esto no se repetiría ella estaba muy triste.

Yo trate de consolar a mi mujer y decirle que estuvieras tranquila que seguro había sido alguna aventura de su padre y que esto pasaría rapido. Esa noche tuvimos una buena sesión de sexo.

Una semana mas tarde, después de que Katia habido venido a la cama después de haber estado en el teléfono con su mama cerca de tres horas, ella me decía que su mama había dejado a su Padre y estaba en un motel en la ciudad intentando aclarar sus pensamientos. Mientras lavaba en la mañana Silvia (mi suegra) habido percibido el olor vago de perfume desconocido en las sabanas de la cama sucia. En una inspección detallada, Silvia había podido encontrar pruebas innegables de que un asunto reciente había sucedido.

Katia me dijo que su Madre habido confrontado a Juan (mi suegro) inmediatamente y su Padre había admitido que durmió con su joven secretaria en la cama marital en mas que una ocasión desde su primera infidelidad.

Silvia había inmediatamente empaquetado sus cosas en una bolsa y salio fuera de su casa para permanecer lo más lejos posible de su marido.

Yo me siento mal por oír de Katia tener ese tipo de dilemas, que yo había escuchado muchas veces de boca de mis amigos mientras crecíamos. Ella guardo silencio durante un rato en nuestra cama. Luego:

"Greg.." Ella me decía tímidamente

"Si?," Yo susurraba sin saber lo que me esperaba.

Después de unos pocos segundos Katia no respondió a mi respuesta inicial,

Entonces yo le preguntaba una y otra vez que quería antes de empezar a quedarme dormido.

Katia...Que ..Quiere.. hacer. usted!?"

"Bien Greg.." ella finalmente murmurada. "Yo estaba hablando con mama esta noche por teléfono y bien…"

"Yo no puedo creer que usted este preguntándome esto Katia," yo interrumpía, mientras ponía mi cigarrillo en el cenicero.

"Usted no me ha permitido finalizar..." Me dijo Katia.

"Es porque yo se exactamente que lo que usted va a decirme y la

respuesta es NO!" yo le decía tan firmemente como podía antes de quedarme dormido.

"Vamos Greg....ella no tiene ningún otro lugar a donde ir...todos nuestros parientes viven lejos de aquí y..." Ella decía, intentando ser racionalmente cortes y convincente.

"NO," Yo respondía, sabiendo completamente bien que ella ganaría con su argumento. Yo comenzaba a fingir estar quedándome dormido mientras Katia insistía

Finalmente, en algún momento Katia me había dicho, "Bien, si usted no me responde de nuevo yo pensare que su respuesta es 'Si'."

Sin poder dormir por las horas próximas o así, escuchando a Katia roncando junto a mi, Yo reparaba en la alegría satisfactoria de saber Silvia Hampton

Tendría que venir a vivir con nosotros. Esto no me enojaba, ella es una señora

muy dulce y ciertamente no merecia ser tratada tan mal durante estos años por su marido, pero la ironía de la vida no era realmente esta sino que:

Por meses ella había molestándonos a Katia y a mi, amenazándonos con el fuego eterno porque nosotros estábamos compartiendo la cama y un hogar juntos. Y ahora ella estaba teniendo que mendigar a su hija, quien había tenido que mendigarme para permitir que su Madre viniese a vivir con nosotros en nuestra casa de pecadores porque su marido le había sido infiel a ella.

OH, como disfrutaría recordando a Silvia cada día cuando despertase que casarse no es una garantía de moralidad.

El primer par de días con Silvia eran un poco misteriosos. Ella estaba muy callada y retraída casi no intervenía en nuestras vidas, Pero me imagino que Silvia empezó a sentir algún nivel de obligación para con nosotros por lo que empezó a ocuparse de la casa limpiando, lavando los platos y lavando la ropa de Katia y la mía. En resumen todas las cosas que a Katia y a mi no nos gustaba hacer

Sumergirse en los quehaceres aparentemente daba a Silvia algo para mantenerse ocupada. Aunque cada vez que yo estaba cerca sentía como ella se intimidaba seguramente esperando en momento que yo le reprochara que ahora tenía que vivir con alguien que no quería por la necesidad de no estar sola en un hotel recordando la infidelidad de su marido.

E Incluso aunque la idea me cruzaba cada momento del día era mas agradable saber que ella estaba con el temor de que en cualquier momento le dijera algo y no sabia cuando. Por eso seguramente para relajar la tensión trataba de hacernos más agradable la vida a Katia y a mí ocupándose de las cosas difíciles.

Yo tengo que admitir, que era agradable llegar a casa sabiendo que la comida caliente estaría esperando en la mesa, o sabiendo que los platos serian lavados más que una vez a semana y que yo tendría calcetines limpios para ponerme cada mañana.

Katia, sintiendo el creciente nivel de comodidad con la nueva compañía empezó a sentirse más insegura cada día con la presencia de su mama


Estando en la cama con Katia una semana después de la llegada de Silvia,

Nosotros descansábamos ahí en la oscuridad haciendo una charla pequeña,

Intentando ver si nosotros podíamos tener un poco de sexo esa noche antes de dormirnos.

Habían sido seis días desde que nosotros habíamos tenido sexo, era la cantidad mas larga de tiempo sin sexo desde que vivíamos juntos, y yo podía decir que ambos necesitábamos rápido una buena sesión de sexo.

Katia y yo habíamos hecho todo lo posible para controlar nuestros crecientes impulsos, sabiendo que su Madre estaba durmiendo en la habitación, junto a la nuestra. Esta era la oportunidad de buen sexo desde que su madre había llegado a vivir con nosotros puesto que esta se había ido a dormir temprano.

"Cuanto tiempo piensa UD que ella permanecerá aquí? Katia me pregunto

inocentemente.

"No se...ella es su Madre amor...usted es quien la quería aquí," yo

Decía burlonamente

Después de una breve pausa, Katia respondido en un tono inocente que ella no sabia a donde esto conduciría. "Me siento tan estupida pero quiero que mama ya se vaya!"

"Usted lo quiere?," yo preguntaba. "Tiene ella que ver a un abogado aun?"

"No," Katia me dijo suavemente, preocupada porque su madre pudiera oír

desde la habitación próxima. "Papa tiene los abogados...el tiene todas

las conexiones...ella decía algo acerca de una separación legal...Yo no quiero que ellos se separen Greg,"

Ella agachaba la cabeza mientras yo la contemplaba y mientras ella guardaba silencio yo empecé a calentarme y guiando mi mano sobre su cuerpo en la oscuridad empiezo a calentarla, guiando mi mano sobre su cuerpo hacer meter mis dedos en su peluda raja

"No lo hagas ......Grez...Mama esta en la habitación próxima!" Ella susurraba suavemente, mientras empezaba a moverse bajo el toque de mi mano.

Metiendo mis dedos en su suave raja yo temblaba sintiendo como sus húmedos y mojados labios vaginales se contraían al toque de mis dedos, mientras su respiración se hacia mas pesada intentando decirme que parara con sus labios, su vagina absorbía mis dedos mas profundo dentro de sus paredes húmedas y aterciopeladas.

"No lo haga...," Katia susurraba silenciosamente.

"NO me hagas esto por favor....lo necesito," Yo susurraba en la oscuridad, metiendo mi dedo dentro de su coño caliente y rozando suavemente con mi pulgar su clítoris.

"Noooooo...oooohhhhhh...siissssssss," Katia susurraba, el aire dentro de

su pecho salía suavemente como desinflando un globo.

"Ella esta dormida amor," yo le aseguraba, sabiendo que Silvia se habido ido a la cama hacia 2 horas ya. "Aquí esta la almohada Querida....cuando...

grites... hazlo sobre ella."

"Yo... ahhhh... nosotros... no podemos... ahhh... aaahhhh... estar haciendo

esto... aquí... ahora..." Katia se quejaba.

Yo permanecía silencioso, tranquilamente junto a ella, continuaba estimulando su clítoris, mientras con mi otra mano acariciaba su cabello.

Katia cerraba sus ojos y aceptaba la caricia disfrutando del movimiento de mi dedo sobre su coño.

Poniéndose junto a mí, mentalmente luchando para que su cuerpo no dejara pasar lo que tenia que venir, Katia separo los muslos lentamente, otorgándome acceso fácil a jardín mojado.

Para este momento sus piernas ya habían sido separadas tanto como podía, su cabeza estaba cubierta con la almohada dejando ver solo su cabello marrón.

Yo me inclinaba sobre ella y soportaba mi peso sobre mi codo derecho, lentamente sintiéndome cada vez mas caliente como Katia estrujaba mis dedos entre sus muslos.

Mirando como la cara de mi mujer estaba disfrutando de todo esto, yo sonreía yo me la hubiera podido coger en ese momento, pero yo quería un poco mas de tiempo quería verla retorcerse bajo mis caricias. Con todas las caricias que le estaba dando empecé a escuchar unos crujidos en el piso debajo de nuestra cama claro con los movimientos de Katia, con mis caricias, así que yo empuje mis dedos mas profundo dentro de su raja. Los crujidos que estaba escuchando que pensé eran de nuestro piso no estaba ya tan seguro que provinieran de este, preparado para penetrar a Katia, yo comprobaba que no era nuestro piso el que estaba dando esos chasquidos, quitando mi mano de su raja, yo miraba su cara retorcerse en la almohada, viendo como mi mujer había iniciado su viaje al universo sexual, supe que Katia no era consciente de los sonidos que yo estaba escuchando. Tratando de contener un poco mi respiración, tratando de descubrir de donde venían los chasquidos yo comprobaba que los sonidos venían del otro lado de la pared, Seria Silvia que estaba escuchando?

Finalmente reconozco el crujido del suelo que escuchaba y era el de la habitación de al lado. Acercando la almohada mas a los oídos de Katia, impidiendo aun mas que escuchara algo, yo estaba convencido de que la mama de Katia estaba escuchando descaradamente lo que su hija y yo estábamos haciendo.

Yo oia el crujido del suelo otra vez en el mismo lugar, no se si esto fue la causa o pura coincidencia, mi pene se endureció aun mas pensado que Silvia Hampton podía estar curioseando como yo me cogia a su hija, entonces tomando mi verga entre mis manos la ponía en la entrada de la raja húmeda de mi mujer y fácilmente la deslizaba dentro de ella como una roca dura.

"Por favor....por favor...por favor sea tan silencioso como usted

pueda....Greg....por favor," Katia susurraba distantemente, sus dedos me arrastraban por la cintura, empujándome mas contra ella.

"Usted es una ricura Katia.. Si usted quiere que me la coja…yo me la voy a coger… si usted quiere verga… yo le voy a dar verga." Yo le decía más para que escuchara su madre, que ella, si era que Silvia estaba escuchando.

Sintiendo mi verga completamente dentro de la raja de Katia, yo la agarraba por las caderas y se la metía tan duro como podía, forzándonos a ambos a jadear en voz alta tan fuerte, cuando mi verga llegaba hasta el fondo de su matriz, yo sabia que con todo este juego yo expulsaría mi leche guardada por seis días en cualquier momento y podía hacer disfrutar mucho a Katia

Abriendo aun mas las piernas de Katia, yo pasaba la cabeza de mi verga directamente por su clítoris, deslizándolo sobre el, causando los jadeos y gemidos aun mas fuertes, ella mordía la almohada tratando de amortiguar el sonido de su satisfacción. Con mi verga completamente dentro de ella yo aceleraba el ritmo de los movimientos hasta que la cama estaba claramente crujiendo bajo nosotros, yo sabia ahora que seguro Silvia claramente podía escuchar lo que estábamos haciendo desde la habitación próxima.

Mirando sobre mi hombro mientras me cogia a Katia, yo imaginaba a Silvia del otro lado de la pared, titubeando quizás mientras escuchaba como penetraba a su hija. Sabiendo que Katia estaba a punto de terminar acelere mis empujes con más fuerza hasta el fondo de su raja, en ese momento Katia estallo, como si hubiera quitado el corcho al champán:

"SSSIIIII... SSIIII... OOOHHH... OOOHHHH... GGGAWWWDDD... SSSIIIII,"

Katia jadeaba y su aliento estaba justo sobre mi pecho.

Cuando ella involuntariamente clavo sus uñas dentro de mis nalgas, mi leche salio disparada de mi verga, chorros de mi semen pringaban las paredes de su raja caliente, mezclándose con sus jugos, AHHHHHHHHH … AHHH!!!

Nosotros lentamente intentamos recobrar el aliento y relajarnos uno junto al otro. Haciendo una charla pequeña siento como mi cuerpo se va dirigiendo hacia el sueño. Yo juraría que yo oía crujir el colchón de la cama de Silvia suavemente, como si ella también se estuviese acostando en ese momento. Sonriendo ampliamente con somnolencia, Katia me miraba y me besaba ligeramente la mejilla" Porque esa sonrisa tan grande, es por mi causa?

"SI," yo respondía, diciendo una pequeña mentira.


Temprano en la mañana siguiente después de que Katia ya se había ido a su trabajo, yo me levantaba en calzoncillo e iba a loa cocina por un vaso de jugo, estaba sacando el jugo de la refrigeradora cuando escucho abrirse la puerta del la habitación de Silvia, en ese momento lo sucesos de la noche anterior vinieron a mi mente y mi verga empezó a ponerse dura.

Tomando un poco mas de jugo yo pensaba de que hablaría con Silvia, sabiendo que la noche anterior ella probablemente escucho toda cogida que le había pegado a su hija, mientras esperaba aparecer a la señora dentro de la cocina, sentí un profundo alivio cuando escuche la puerta del baño cerrarse, Silvia iba a bañarse. Eso me relajo un poco.

Fui entonces hasta el vestíbulo junto a la puerta de la habitación de mi suegra, me quedaban unos minutos antes de tenerme que alistar para ir a trabajar. Viendo que la puerta de su habitación estaba abierta una inquietud llego a mi cabeza, escuchando como el chorro de la ducha empezó a caer decidí que tenia como 10 minutos para comprobar si lo que había pensado la noche anterior era cierto. Entre en la habitación de mi suegra, sobre la cama había una bata de seda muy conservadora, luego me dirigí hacia la esquina de la pared desde donde creí escuchar los crujidos. Poniendo mi pie sobre la madera del piso "creeeeeeekkk"" sonó. Mientras el sonido resonaba en mi cabeza comprobando que era el mismo de la noche anterior, otra cosa llamo mi atención, agachándome hacia el piso para investigar veo unas hebras de cabello rubio igual al de mi suegra teñido, mientras me inclinaba a recoger los pelos, noto algo mas, habían también unas pocas hebras de pelo pubico rizado del mismo color que el otro. Esto fue como un mensaje directo a mi pene que empezó a ponerse duro, pero de repente yo oía la ducha detenerse, entonces soltando la evidencia de nuevo en el piso, rápidamente salí de la habitación de mi suegra.

En las próximas dos semanas yo notaba como los roces entre madre e hija empezaron a surgir, yo lo único que pude hacer es tratar de permanecer lejos de estos roces entre ambas.

        • Cuando sus roces empezaron a ser mas frecuentes mi mujer constantemente venia a mi intentando ver mi posición al respecto, yo siempre trataba de darle la razón para mantenerla contenta. Esta de mas decir que con toda esta tensión yo empecé a beber un poco mas de lo normal.

Uno de los pleitos mas grande entre ambas empezó cuando Katia venia a casa muy tarde después de salir con sus compañeras de trabajo a divertirse un poco. Mi suegra dijo que permanecería despierta para hablar con su hija, cuando mi mujer llego empezaron las discusiones aquello parecían juegos artificiales, yo estaba acostado en mi habitación escuchando desde mi cama todo aquello. Mi mujer en su borrachera le dijo a mi suegra que quizás mi suegro le había sido infiel por sus majaderías y presiones constantes durante tantos años, y que ella no se sorprendía de que su padre hubiera encontrado a una mas joven y bonita con quien pasar mejor su tiempo. De mas esta decir que mi suegra se enojo tanto por sus palabras que termino bofeteando a mi mujer. No me gustaba estar escuchando todo esto pero definitivamente no tenia que intervenir ellas deberían arreglar sus problemas solas. Así que mas bien trate de dormirme, esperando que Katia llegara a la cama. Acostada junto a mi yo podía ver su mejilla aun roja. Katia y yo no habíamos tenido sexo en una semana desde la noche en que yo escuche a Silvia curioseando. Pero sabía que esta no era la mejor noche para intentarlo. Así que yo fingía dormir cuando escuche a Katia preguntando que pensaba sobre eso. Aunque en realidad yo pensaba que Katia había sido muy dura con su madre al decir que prácticamente mi suegra había conducido a mi suegro a la cama con otra mujer.


Nosotros nos turnábamos y salíamos con nuestros compañeros en diferentes ocasiones así que yo le dije a mi mujer el día siguiente que saldría con mis compañeros de oficina a tomas algo y que no me esperara despierta, ella estuvo de acuerdo.

Eran las 10pm y estaba con mis compañeros Juan y Carlos, habíamos ido a comer y decidimos tomarnos unas cervezas en la Barra de un bar Familiar. Estábamos ya planeando irnos a nuestras casas cuando con la débil luz del lugar noto una cara familiar en el otro lado de la barra.

"Santo Cielo" Exclame mientras tomaba lentamente un trago de cerveza, "Es mi suegra"

Eran las 10.45pm y mi suegra Silvia estaba sentada en la parte del restaurante con un señor como 5 años mayor que ella (ella tiene 58 años), tenia una bolsas de compras, y hablaban tranquilamente. Mi suegra con aquel señor, seria que había decidido iniciar de nuevo su vida y había escogido a este viejo para empezar. Pensé que como mi suegra había tenido un pleito con mi mujer la noche anterior y como sabia que Katia estaría en casa toda la noche, había decidido salir a distraerse haciendo lo que hacen las mujeres – compras- y estaba pasando el tiempo con este señor para llegar a casa cuando mi mujer seguro ya estuviera dormida.

Viendo como el señor que estaba con mi suegra se levantaba y dirigía al baño de los hombres, algo me impulso a levantarme y dirigirme a donde estaba ella sola por un momento.

"Creo que alguien anda un poco extraviada, o quizás necesita una buena charla" le decía mientras me colocaba frente a ella en la mesa donde estaba. Aproximándome un poco mas veo la expresión de sorpresa en su cara cuando se da cuenta de mí presencia ahí.

"Pienso que no debería sorprenderme de verlo Gregory aquí en la barra" decía mi suegra tratando de ser cortes.

"No, el sorprendido soy yo de verla aquí," le decía mientras le preguntaba si podía tomar una silla para sentarme.

"Claro lo que pasa es que no estoy sola, estoy cenando con un amigo de la iglesia". Decía mi suegra

"OK, esta bien no se preocupe no voy a estar mucho, menos interrumpir su compañía señora, me imagino que debe estar muy ocupada con su amigo".

. "Yo no soy que clase de mujer Grez... Yo pensé que usted debería saberlo"

Respondió mi suegra seriamente.

"Claro que lo se señora, no se ofenda, simplemente fue una expresión inocente"

"Esta bien Grez, "dijo mi suegra cambiando su expresión seria a una mas amable.

Nosotros nos miramos torpemente unos segundos antes de que varias palabras salieran de mi boca " Yo ahh.. pienso que usted esta fuera de casa por el pleito que tuvo ayer con mi mujer.

Por la expresión en la cara de mi suegra podía adivinar que había dado en lo cierto.

"Pero no se preocupe ella estará dormida cuando lleguemos ahora a casa", esto provoco una pequeña risa que rompió la tensión entre ambos. Mirando mi reloj le digo "En este momento debe estar acostándose ya mi mujer"

"Probablemente pensado donde estaremos los dos" dijo mi suegra.

"Mire Suegra" le decía mirando directamente a sus ojos, tratando de ser tan franco como podía, "Yo no quiero meterme en sus problemas con mi mujer, pero francamente yo pienso que mi mujer fue muy grosera con usted"

Silvia mi suegra, mirándome decía "Gracias Greg, pero yo me siento, me siento,,,", y empezaron a llenarse sus ojos de lagrimas, suavemente yo tomaba su mano y trataba de consolarla.

"Suegra, usted podría tener al hombre que usted quiera en esta habitación", mirándola a los ojos llorosos, " Yo puedo imaginar lo duras que fueron las palabras de mi mujer ayer,, es que a veces Katia puede ser muy grosera y no mide lo que dice."

"mire suegra" le decía tomando fuerzas antes de que su amigo volviera "Yo tengo una idea"


Estacionando mí carro en la oscuridad frente al parque cerca de donde vivía, yo miraba como otro auto se estacionaba detrás del mío. Sentía mariposas revoloteando en mi estomago de la excitación que sentía en ese momento.

Bajando de mi auto y cerrándolo con llave, me dirigía al carro de atrás el de Silvia hampton, mi suegra, y subía en el

"Ahora.. Que es lo que usted tiene en mente Grez, "Me decía mientras dirigía su carro hacia la parte atrás de nuestro apartamento "yo no estoy segura de lo que usted quiera hacer"

Lo que pensaba había estado en mi mente desde el día que la había escuchado espiándonos a mi mujer y a mí, y sabiendo que mi suegra estaba muy débil emocionalmente por sus problemas maritales y con mi mujer, yo pensaba que mi idea podría funcionar.

"mire suegra yo pienso que la mejor manera de demostrar a su hija que se equivoca con lo que le dijo es demostrándoselo con hechos, ella piensa que usted en una mujer fría y amargada, incapaz de satisfacer a un hombre, demuéstrele que no es así, haga que la vea con nuevos ojos.

"Yo estoy dispuesto a ayudarla, yo le ayudare a que le de una lección a su hija (mi mujer), estoy dispuesto a hacerlo si usted lo quiere"

Mi suegra respondió "Esta loco Grez, como se atreve, soy su suegra, una mujer de mi casa, decente,"

"esta bien señora, yo solo quería ayudarla, pero si usted no lo acepta, nada puedo hacer", Mi suegra miraba escuchaba callada mis palabras durante varios minutos. Una expresión de duda y miedo estaban en su cara.

"Grez, usted es mi yerno, como podría, además ella se enteraría"

"No Ella no se dará cuenta cerraremos la puerta con llave, ella solo podrá escuchar como su madre no es lo que ella cree, demuéstrele que usted no es lo que ella dijo." "Esta bien Greg, pero recuerde que lo hago nada mas por eso, esto no tiene que ver nada de atracción sexual entre nosotros yo soy su suegra y usted es el marido de mi hija"Situando mi mano caliente en el muslo de mi suegra Silvia, yo le daba una sonrisa de confianza.

"Ahora suba y vaya a su cuarto y abra la ventana de su habitación, yo entrare por ahí para que mi mujer no sospeche. Espereme en la cama.. en la oscuridad yo la quiero ahí"

Mi suegra tenía una expresión de ser incapaz de hacer aquello, saliendo del auto, subió al apartamento, yo inmediatamente por las escaleras de la parte de atrás esperando que estuviera abierta la ventana de su habitación y no se echara para atrás.

La ventana estaba abierta, eso es!, me impulse y entre por ella no haciendo demasiado ruido para que mi mujer no sospechara. Estando en la habitación oscura yo descubría la figura de mi suegra sobre la cama frente a mí.

Perdido por la emoción del momento, yo evite pensar en todas las implicaciones que podría tener esto. Mirando a mi suegra boca sobre la cama, con la luz que entraba por la ventana, yo podía ver sus ojos fijos en la nada, una actitud distante, pensando seguramente en lo que iba a hacer. Sin pensarlo mas me quite mi camisa y me acosté junto a ella en la cama, estaba completamente vestida, soltando mis pantalones yo los bajaba completamente, quedándome completamente desnudo junto a la madre de mi mujer. Mire como mi suegra empezó a desbrochar los botones de su blusa con dedos que temblaban tímidamente.

"Pare suegra" le decía silenciosamente, acercandome mas a ella "yo quiero desnudarla"

Acercando mi mano a sus piernas yo siento la textura de sus pantyhose, mientras las acariciaba despacio, acercándolas a mi, ella simplemente temblaba al recibir mi caricia sobre sus piernas, llevando luego mis manos a sus blusa yo quitaba cada botón lentamente, cada vez que quitaba un botón yo sentía su sedoso sostén contra mis manos. Sentirla temblar junto a mi me excitaba mucho mi verga estaba dura, el ultimo botón de su blusa fue quitado, yo la abría y situaba mis manos sobre su pecho, sintiendo sus calidos pechos presos bajo el sostén, yo deslizaba mi mano sobre este sintiendo como poco a poco sus pezones se iban endureciendo, bajo el tejido sedoso. Amasando sus ricas tetas yo acercaba mi boca a su cara y le daba un caliente beso en su labios que estaba ligeramente separados, en ese momento ella empezó a besarme también, siento como sus manos me empiezan a tocar y como una de ellas torpemente sujeta mi verga que estaba dura como una roca. Yo me coloco sobre ella mi peso sobre su cuerpo mientras con mis manos acaricio sus tetas mi boca busca su lengua que responde con gran ardor y excitación. Mi verga quedo sobre su raja exactamente encima de su falda.

Una vez que sus pezones estaba bien parados mis manos siguieron bajando acariciando su vientre, hasta que mis dedos chocaron contra el dobladillo de su falda., yo agarro y recojo su enagua la envuelvo sobre sus piernas para pode sentir sus muslos con la palma de mi mano, con la falda levantada yo resbalo mi mano debajo directo entre sus piernas, mis dedos sentían la suavidad de la seda de su calzón, lo corro un poco y mis dedos sienten su raja aquella húmeda y caliente raja que podía sentir estaba lista para algo grande y duro como mi verga.

.

Yo acercaba mi boca a su oído y la incitaba a que levantara las caderas para bajar fácilmente su calzón y tener a mi disposición su ardiente y madura raja

Impulsivamente ella las levanta y me da fácil acceso para bajar su calzón, uuhhh que delicia, ahora mi mano podía tocar libremente aquella rica y húmeda raja de mi suegra, yo miro en la oscuridad el área que su raja que a sido descubierta veo su blancura, su raja era grande y peluda para ser una mujer de 58 años, sus pelón eran marrón igual que los de su cabeza una rica mata de bellos pubicos cubría aquella raja tan deseada por mi. Poniendo mi verga en la entrada de su ardiente raja, de esa raja que estaba desesperada por sentir mi verga, yo la meto despacio sintiendo como va abriéndose paso dentro de ella, que caliente, que estrecha esta la raja de mi suegra. Yo metía mi verga lo mas profundo que podía sintiendo el choque de nuestros cuerpos al pegar mis huevos contra su raja, mi suegra excitadísima por tener mi grande y dura verga dentro de su interior que la estaba matando se placer gimió:

"Greeeggggggg"… su voz era ronca y sensual muy distinta a la normal que siempre había escuchado. "ahhhhhhh…. Usted es muy bondadoso… Gregg… Ohhh… gracias… ahhh… por favor….ahhh.. a sido ..tanto tiempo sin verga…" ella gemía.

"Ahhh, suegra.. ahh cuanto tiempo sin verga?" yo le preguntaba mientras mas fuerte le metía mi verga dentro de su raja.

"seis años…." Gemía mi suegra mientras jadeaba más fuerte.

Yo no podía creer que una mujer, especialmente una señora tan sensual y deseable, podía haber estado tanto tiempo sin sexo. Mis sospechas originales se confirmaban era una mujer insatisfecha por eso sus enojos y disgustos,. Y lo había comprobado cuando al tocar aquella raja al inicio estaba tan caliente y mojada, ahora sabia que estaba despertando al sexo una mujer muy ardiente y lo sentía al ver como ella desesperadamente disfrutaba con mi verga en su raja, su lujuria había sido despertada y sabia que ella ahora trataría de satisfacerla cada vez que pudiera. Yo seguía penetrando a mi suegra con un rico ritmo que la hacia gemir y retorcerse de placer, yo no podía creer lo caliente que era esta mujer en la cama. Mientras me la cogia mis pensamientos me decían que seguramente esta no seria la ultima vez que me cogeria a mi suegra.

La cama empezó a crujir con todos nuestro pensamientos de lujuria bajo nosotros, yo sacaba y metía mi verga dentro de mi suegra y ella gemía fuertemente con cada embestida. De repente un ruido mi suegra apreto sus manos en mis hombros, suplicándome para que parara un momento.

"Que es eso?" yo susurraba.. "yo oí algo" ella silenciosamente respondía, temblando debajo de mi. Poniendo más atención y con mi verga dura y gruesa dentro de la raja de mi suegra escuche…al final le susurre:

"Es su hija suegra, ella debe haberse despertado y esta escuchando como su madre se esta cogiendo a algún señor" dije satisfecho

Mientras decía esto metía y sacaba lentamente la vera de la raja de mi suegra.

Ahora sabiendo que mi mujer estaba escuchando a su madre con un hombre, yo agarraba mi verga y la metía lo más profundo dentro de la raja de mi suegra, sacudiendo mi pene dentro de ella, con otra mano agarraba sus nalgas y juntaba su cuerpo más junto a mi.. Vi una mueca de dolor en su cara al sentir como mi verga la llenaba completamente. Entonces acercando mi boca a su oído susurre:

" Ahhhh AHHHH Suegra … su raja se siente tan buena…" yo jadeaba suacimente" "En lo mas profundo yo sabia que usted es una puta sucia hambrienta de verga… justo como su hija"

Yo sentía como sus mejillas se ponían rojas, me imagino que nunca le habían hablado sucio durante el sexo, a pesar de su vergüenza ella se movía mas duro incitando a que me la cogiera con mas ganas, moviéndose mas cuando seguí con mis palabras

" Le gusta sentir la verga grande y dura de su yerno en la raja suegrita?" yo jadeaba en su oído

"Si," respondió suavemente.

"Yo no puedo oírle Silvia...verdad que le gusta mi verga joven y dura en su raja suegra" yo le insistía.

"Si," ella respondió, un poco mas alto.

"Como?", yo le preguntaba incitándola

"SSSSIIIIII," Ella finalmente respondía lo suficientemente alto para que yo pudiera escuchar y alguien mas en la casa, mientras sus brazos se colgaban alrededor de mi cuello y clavaba sus uñas en mi espalda.

Tomando mi mano izquierda yo la acerca a sus nalgas y las acariciaba, con mi dedo índice yo bajaba hasta el hueco de su culo, yo siento como este se frunce al contacto con mi dedo, mientras seguía empujando con mas fuerzas mi verga dentro de su rica raja, luego subo mi dedo y lo humedezco con sus jugos vaginales, uuh que y lo vuelvo a acercar a su culo, hundiéndolo lentamente dentro de el, yo siento como su aliento se detiene al sentir esta nueva sensación.

"A usted nunca se la han metido en el culo, verdad suegrita?" yo le decía al oído, " Usted nunca ha tenido una verga grande y dura dentro de ese culito tan apretado verdad suegrita?"

"No" respondía mi suegra

"No," Yo oía Silvia susurro distantemente.

"Bien entonces quizás a usted le gustaría mi joven verga en ese apretado culito que tiene suegra"

"OOOOHHH, "ella gemía en mi oído

"Yo apuesto a que su hija debe estar escudándonos suegra, escuchando como su madre es cogida por algún hombre, quizás hasta se este masturbando escuchándonos suegrita, justo como usted lo hacia la otra noche suegra cuando yo me cogia a su hija"

"AHHHHH,… AHHHH" Ella gemía retorciéndose debajo de mi, sentía como si alguien hubiera llenado su raja con carbones calientes, ella se retorcía cada vez mas, apretando su vagina sobre mi verga como tratando de sacarme toda la leche para apagar el fuego de su raja.

Con el vestido de mi suegra arrollado a la cintura yo sentía cada vez mas sus ricos movimientos, sacando mi verga de su raja la grito boca abajo para poder metérsela desde atrás, sus nalgas de señora se veían tan excitantes que mi verga se ponía aun mas dura, y así acomodándola se la metía hasta el fondo de su raja desde atrás, uuuhhhh!!, mis bolas chocaban contra sus nalgas en cada embestida que le daba. Sintiendo como se retorcía con cada clavada que le daba de nuevo volví en cuerpo de mi suegra boca arriba, mire su cara sus ojos estaban completamente abiertos, sus mejillas rojas, su boca era una mueca de placer que gemía cada vez mas, se notaba que esta vieja estaba disfrutando como hacia mucho no lo hacia con su viejo marido, y ahora era clavada por su joven yerno, aquella mujer respetable y decente que pronto estaría divorciada. Yo cada vez escuchaba más fuertes sus gemidos de placer y alegría esta mujer esta muy feliz de estar sintiendo mi verga hasta el fondo de su raja caliente. Entonces sacando de nuevo mi verga la pondo en la entrada de su raja y de un solo golpe se la dejo ir hasta el fondo, metiéndosela tan profundo como podía, su cuerpo se convierte en un una corriente eléctrica, empiezo a sentir como le estaba sacando todos los caldos a esta vieja mujer

"Déme sus caldos suegra, vengase para mi, quiero sentir como me empapa la verga con sus jugos", le decía mientras me la cogia mas fuerte.

"SSSIIiiii….AAAAAHHHHHHHH….OOOOOHHHH…mi querido GGGGGGRREGGGGGG……me estoy.. AHHHHH… "mi suegra decía mientras empezaba a convulsionar sacudida por sus orgasmos,

Yo podía sentir como cada músculo de su cuerpo se contraía, incluyendo su vagina que masajeaba ricamente mi verga dentro de ella. Mientras ella seguía convulsionando yo sentía como mis bolas se comprimían queriendo expulsar toda la leche contenida dentro, acelerando mis movimientos siento como los chorros de leche empiezan a salir de mi verga, "uno, ahhhhh… dos… AHhhhh.. tres… ahHhhhhh!", fueron varios chorros de semen caliente que fueron directamente a llenar la caliente raja de mi suegra.

Mientras terminaba como la mas rica venida que había tenido, saco mi verga de la raja de mi suegra, y subiendo mas sobre ella la coloco entre sus tetas, sobre esas ricas tetas que tenia, ella agarra mi verga aun dura con sus manos la sujeta fuerte, viendo como mis 18 cm. de dura y joven verga húmeda están

sobre sus manos, la mira como pensando cuanto placer le dará en un futuro esta misma verga, la acaricia y contempla con deseo.

"la próxima vez que me la coja suegra usted deberá estar completamente desnuda, quiero sentir su calido y rico cuerpo completo para mi" Haciéndole saber que tenia intenciones de seguir cociéndomela y esta no seria la ultima vez que lo haríamos. Ella instintivamente acerco su boca a la punta de mi verga y con sus rica y caliente lengua limpio los restos de semen que tenia."Ahhh que rico sentía "como pasaba su lengua sobre mi verga. Esta mujer definitivamente era una vieja muy caliente.


En los siguientes 10 minutos procedí a ponerme la ropa, me despedí de mi suegra con un ardiente beso en su boca, y salía de la habitación por la ventana mientras ella desde la cama me sonreía acariciando sus ricas tetas.

Quince minutos mas tarde yo abría la puerta de nuestro apartamento, haciendo el suficiente ruido para que mi mujer escuchara que apenas acababa de llegar., paso por el vestíbulo y contemplo la puerta del cuarto de mi suegra cerrada, siento un pequeño zumbido en mi verga al recordar que hacia unos pocos minutos en esa habitación me había cogido a mi suegra, una vieja súper caliente y con muchas ganas de mi verga.

Llegando a mi cuarto abro la puerta y contemplo a mi esposa sobre la cama, quien me pregunta" Como te fue amor?"

Mientras me quitaba mis ropas respondí "Excelente",

Ella me abrazo mientras me acostaba a su lado, pienso que tenía gansa de preguntarme si había escuchado algo raro cuando llegue pero creo que resistió las ganas.

Entonces apretándose más a mí empezaba a besarme mientras con su mano acariciaba mi verga que al contacto empezó a ponerse dura de nuevo. Sabia que tendría que darle a mi mujer una dolis de lo que hace unos minutos había tenido mi suegra en su raja.