Visito a mi sobrino para que coma mi mierda

No creí tener a un sobrino tan pervertido y fetichista pero sobre todo tan sucio que disfrutara de mi excremento.

Hola a todos. Me llamo Isabel y vengo a compartir con ustedes lo rico que la pase este 9 de enero. Ya que tuve la necesidad de recurrir a mi sucio y pervertido sobrino Luis para que deborara cada cosa que saliera de mi cuerpo. Para los que son nuevos, los invito a visitar mi pagina para conocer más sobre mí y mis relatos. Como vengo diciendo actualmente, publico cada experiencia que suelo considerar divertida y muy excitante, al igual que fetichista. Me considero una mujer de mente abierta, por lo que me ah permitido disfrutar y sorprenderme con cada experiencia.

En fin, esto que les contaré sucedió este 9 de enero. La verdad no esperaba que mi día fuera a ser de esta manera y la verdad es que me gusto mucho y pude disfrutarlo como siempre.

A claro, esta no es ninguna continuación a otro relato, solo es otro momento más como muchos otros.

Todo empezó con una foto. Al tener que estar en casa, mi día no podía ser de otra manera más que trabajar en la computadora. No era tarde, eran las 12:20. Soy madre de dos chicos. Carolina y Jorge. Ambos estaban en sus cuarto por lo que no había mucho escándalo. Lo que era bueno para mi para mi concentración. Pero esa dicha concentración terminó cuando comenzó a doler el estomago. Por obvias razones fui al baño. Al llegar, me bajé el pantalón seguido el panty y me senté. El dolor no paraba y la sensación de hacer del numero dos parecía crecer. Pujé pero nada salía. Mientras mi cuerpo decidía cuando botar lo que tuviera que botar, vi mi teléfono. Abri mi facebook y vi las publicaciones. Anuncios, fotos, amistades, y entre ellas una foto de mi sobrino. Luis. Luis es un chico de 21 años. Increíblemente la relación que mantengo con él en secreto es fabulosa. Nunca creí que fuera alguien tan sucio y tan pervertido. Aparte de no ser feo, lo convierte en alguien atractivo para mí. Ver su foto, me hizo recordar a la ultima cosa que compartimos. (Relato en mi página). Sin duda ese día fue inolvidable. De la nada mi culo soltó un pedo acompañado de un trozo de mierda de aproximadamente cinco centímetros. La sensación de sacar ese pedazo de excremento fue muy rica. Sentirla suave y larga. Sin pensarlo y diría yo de manera automática, abri WhatsApp y le escribí.

  • ni te imaginas lo que estoy haciendo jeje, escribí junto con una carita.

Justo cuando bloqueé mi teléfono, apareció su notificación. “Luis”. Lo abrí.

  • sorpréndeme, contestó con una carita guiñando el ojo.

Reí. Me puse de pie. Tomé mi teléfono y fui a la aplicación de cámara. Lo coloqué en la caja de agua y le di tiempo de 10 segundos. Al comenzar, me di la vuelta y separé mis nalgas de modo que mi ano sucio se abriera un poco y estuviera listo para ser fotografiado. Al escuchar que la cámara había tomado la imagen, la revisé. Dios, las orillas de mi agujero estaban manchadas de mierda. Verme en esa posición me parecía sexy. A pesar de mi edad de 46 años, cuido mi cuerpo lo mejor que puedo. Como lo digo en todos mis relatos, hago ejercicio. Por lo general los sábados. Mi apariencia es llamativa diría yo. Soy delgada, tez blanca, cabello ondulado color negro, tengo trasero redondo y levantado, así como pechos firmes. Una vez vista la imagen. Se la envié y esperé a su reacción. Me volví a sentar y esperé. Un minuto después, sonó la notificación. Lo abrí.

  • “Que sabroso agujero”, escribió acompañado de 5 caritas con ojos de corazón y 5 lenguas.
  • ¿Se te antoja?
  • Mucho.

Lástima que no estés aquí.

  • No tardaría en llegar.
  • Ni se te ocurra. Tus primos están aquí.
  • “Caritas tristes”

Cinco segundos después

  • Ven tú, entonces.
  • ¿Ir yo? Jajaja
  • Si. Toma tus cosas y ven. Son 20 minutos de camino. No es nada.
  • No lo sé. Ya casi comeré.
  • Aquí comemos.

Me quedé pensativa por unos segundos.

  • déjame salir del baño y te escribo.

Me limpié y salí. No suelo reaccionar tan rápido pero las ganas de estar con él y divertirme un poco eran muchas. No lo pensé más. Tomé mi bolsa, guarde mi computadora y avise a mis hijos que salía.

  • saldré!!! Regreso más tarde!!
  • Ok!!!, respondió Carolina.

Salí, subí al auto y me dirigí a su casa. En el primer semáforo, le escribí:

  • Voy en camino.
  • Perfecto, contestó.

Al llegar, me estacioné. Bajé y caminé a la puerta. Justo al levantar la mano para tocar, abrió la puerta. Tomó mi mano izquierda y me metió. Cerró y me besó tomándome de la cintura.

  • que bueno...que llegaste...ya estaba desesperandome
  • ¿Por...que?
  • ¿Porque tu crees?, ven.

Caminó guiándome tomada de la mano. Caminé. Atravesamos la cochera, el comedor, subimos las escaleras.

  • ¿tus papás?
  • No están.
  • Oh

Al llegar a su cuarto. Dio la vuelta quedando frente a mí y volvió a besarme. Sus manos me tomaron de la cintura por un momento y pasaron a mi culo. Lo apretó. Masajeó mis glúteos. Al tener puesto un leggin, sus masajes se sentían bien. Le permitía tomar bien mis glúteos. Subió sus dedos al resorte del leggin, luego de mi panty y metió ambas manos de modo que las palmas de sus manos rosaran la blanca piel de mi culo. Cubrió cada glúteo con sus manos y las apretó.

  • tienes un culo bien rico, tía.
  • ¿Si?, le pregunté riendo
  • Ajá

Bajó un poco de modo que los dedos de su mano derecha rosaran con mi sucio ano. Mordí mi labio inferior al sentir su ligera caricia. Al acercar un poco más su mano, logró llegar a mi agujero. Sin dudarlo lo comenzó a frotar con su dedo medio formando círculos.

  • aaahhh!!, gemí ligeramente.
  • ¿Te gusta esto?
  • ...Ajá

Que tocara mi orifico después de saber que había estado completamente sucio, me causaba mucha excitación.

  • puja un poco, me pidió en voz baja.

Pujé tal como me lo pidió. Al hacerlo, metió la punta de su dedo.

  • aaahhh!!!, gemí y di un lento respiro.
  • ¿Te gusta que te lo meta?
  • ...si
  • ¿Si? ¿Sientes rico?
  • ...si, respondí con tono de voz suave
  • Seguro olerá súper rico cuando lo saque.
  • ...no...lo creo, contesté mirándolo a la boca.

Al tener su dedo dentro de mi ano, lo comenzó a mover en círculo como si quiera estrechar mi agujero.

  • se siente húmedo y caliente, dijo.
  • ¿Si?
  • Ajá

Segundos después lo retiró. Sacó su mano de mi pantalón llevándola a su rostro. Pegó la punta de su dedo a sus fosas nasales y lo respiró. Verlo hacer semejante cosa, me generaba nervios, me excitaba mucho.

  • que rico huele. Mira, dijo, acercando su dedo a mi nariz.

Al pegarlo a mí, lo olfateé. Santo dios, obviamente olía mal. Olía a mierda. Y a pesar de eso, oler lo mal que estaba mi trasero, me gustaba y aumentaba mi nivel de excitación. Apartó su dedo de mi cara y lo metió a su boca.

  • no sabe nada mal
  • ¿Te gusta como sabe?
  • Mucho, tía. Creo que cuando cagas es cuando sabe mejor.

Reí ante su encantadora respuesta.

  • Me encantó la imagen, por cierto.
  • ¿Si?
  • Si. No me esperaba eso.
  • Eso creí.

Lo miré a los ojos sonriendo, y dije:

  • acuéstate.
  • ¿Dónde?
  • En el suelo.
  • ¿Aquí?
  • Ajá

Se rió y se recostó.

  • creo que esto te agradara.
  • ¿Que cosa?

Me quité mis zapatillas, me bajé el pantalón junto con con el panty. Estando completamente desnuda de la cintura hacia abajo. Caminé a él, y me detuve colocando mis pies aun lado de su cuerpo a la altura de sus hombros y me agaché casi dentándome sobre él, de modo que mi culo abierto quedara justo frente a su cara.

  • dios santo!!! Mira esto!!, dijo sorprendido y excitado.
  • ¿Te gusta la vista?
  • Me encanta!!!, contestó acariciando mis glúteos.
  • Ven, pon la nariz aquí dije, tocando mi ano con mi índice derecho.
  • Lo que tu digas

Se inclinó un poco y colocó los orificios de su linda nariz justo en mi maloliente agujero.

  • está bien puesta, ¿verdad?
  • ...Ajá.

Sin decir nada más, di un respiro y pujé fuertemente dejando que un gran pedo saliera disparado directamente en su nariz.

  • aaahhh!!! Huelelo!! Anda!!
  • Dios!!! Que rico pedote!!!
  • ¿Te gustó eso?
  • Si!!!, contestó respirando varias veces mi ojete.
  • ¿A que olía?
  • A tu rica mierda!!
  • Y eso te encanta, ¿no es así? Maldito asqueroso!!
  • Si!! Me encantan tus pedos, tía!!! Quiero otro!!
  • Ay!! Solo era ese!! Lo tenía atorado!! Pero creo que puedo darte otra cosa que tal vez te guste!!
  • ¿Tu hermosa mierda?
  • Ajá!! ¿Quieres?
  • Si, si quiero!!
  • Ok

Apreté mi ojete y pujé sin conseguir nada.

  • tu ano se ve increíble, me alagó.
  • ¿Tu crees?
  • Si. Es perfecto.
  • ¿Te gustaría lamerlo antes de que...
  • Aaahhh!!! Si, así!!!

Mis palabras fueron interrumpidas con su lengua al incrustarse en mi sucio agujero. Me gustaba como nuestras mentes perversas y repugnantes estaban tan conectadas que no había la necesidad de pedirle nada.

  • que sabroso anote!! Te sabe riquísimo!!!
  • ¿Si? ¿Te gusta como sabe?
  • Si, tía!!! Te sabe increíble!!!
  • Aaahhh!!! Sii!!! Come!!! Come mi rico ano!!! Es todo tuyo!!, lo insitaba mientras su lengua entraba y salía.
  • Si!! Te lo comería todos los días!!
  • Sería súper rico eso!!!

Con su lengua escarbando mi agujero, pujé muy fuerte logrando que un pedo saliera chocando en su dulce y suave lengua.

  • aaahhh!!! Que rico!! Comételo!!! ¿Te gusta?
  • Eres la mejor, tía!! Me encantan tus ricos pedos!!!
  • ¿Quieres más? ¿Ah?
  • Si!! Dame!! Dame más!!
  • ¿Te gusta como soy? ¿Te gusta que sea una puta puerca?
  • Sii!!! Me gusta!!

No podía negarlo, por muy sucio que era, para mi era de lo más delicioso lo que él se atrevía a hacer. A probar mis apestosos pedos.

Mientras seguía comiendo mi culo, vi que su entrepierna estaba levantada formando un gran bulto.

  • Quiero verte la verga, sácatela!!, le rogué muy excitada.
  • Claro, claro!!

Soltó mi trasero y pasó sus manos a adelante para desabrochar su cinturón . Al ver que no podía bien, decidí ayudarlo.

  • déjame ayudarte

Me incliné un poco hacia adelante y desabroché su cinturón, luego su botón y bajé su cierre. Abrí un poco y metí la mano para sentirlo.

  • wow!! Esta dura!!
  • ¿Te gusta?
  • Si, mi amor.
  • ¿Puedo sacarla?
  • Claro que puedes.

Sentir su verga lo dura que estaba fue maravilloso. Pero fue mucho más cuando la saqué de su bóxer. Puse mis dedos sobre el resorte de su ropa interior y la bajé haciendo que su verga saliera de un salto tambaleándose de un lado a otro.

  • Dios mío!!!, dije sorprendida al ver su miembro completamente erecto y largo.
  • ¿Te gusta?
  • Me gusta, si!!

Solo verla se me hizo agua la boca. Con el solo hecho de verga no tenía la menor duda de que quería chuparla y probarla. Agarre su tronco con mi mano derecha y comencé a jalarla suavemente.

  • que rica!! Esta muy dura y caliente!!
  • Si la jalas mucho me harás venir, tía!!
  • No, mi amor, tendrás que aguantar!!

Aunque deseaba tenerlo en mi boca, el día no era para mi sino para él. Así que me enderecé, agarré mis nalgas y las separé.

  • saca la lengua y ponla dura, le ordené.

Retorciendo la cintura para verificar que cumpliera con mi orden, flexioné mis rodillas y dejé caer mi culo procurando que mi ano aplastara su dura lengua.

  • aaahhh!!! Que rico!!

Era increíble la sensación de su dulce lengua al adentrase en mí conforme el peso de mi trasero caía sobre él.

  • Tu lengua es tan rica!! Me gusta!! Podría estar así por horas!! Tenerla metida en mi rico culo!! ¿Te gustaría?
  • ...ajá, respondió entre dientes al no poder contestar bien por mi culo.

Con su lengua incrustada en mi sucio ojete, comencé a brincar haciendo que cada vez que cayera sobre él, su lengua se metiera más y más.

  • ¿Te gusta que brinque? Apuesto a que si. Eso querías lo más seguro. Tener tu puta lengua en mi sucio ano, ¿no es así?

Sin esperar a que respondiera, continue hablando mal y sucio.

  • mira, tu verga sigue estando parada. Significa que disfrutas esto. Y disfrutarás más lo que está por venir.

Al terminar de hablar, pujé mi ano.

  • ¿Sientes eso?, ¿sientes mi mierda a punto de salir? Anda!! Tócala!! Toca mi caca con tu lengua!!

Pujé y apreté.

  • aaahhh!!! Mi ano aprieta tu lengua, que rico!!

Volví a pujar nuevamente con fuerza logrando que mi excremento sacara su lengua y quedara justo como si fuera un tapón en mi trasero.

  • dios!! Esta a punto de salir!!, dije.
  • Que rica mierda, tía!! Te vez bien rica así!!
  • ¿Si? ¿Te gusto así?
  • Me encantas, mejor dicho!!
  • ¿Que quieres que haga ahora?
  • Que la pujes en mi boca!!
  • ¿Eso quieres?
  • Si!! Hazlo!!, finalizó tapando mi entrada anal con boca bien abierta.

Al ver que estaba totalmente decidido a aceptar mi excremento, pujé. Un hilo de mierda con textura blanda salió de mi agujero y cayó dentro de su rica boca. Dios, mi caca era muy suave que me agradaba como salía de mi culo.

  • que rica me sale!! Disfrútala!! Cómela toda, mi amor!! Come mi sabrosa caca!!

Cinco centímetros aproximadamente eran los que había sacado mi culo sucio. Me excitaba escuchar boca masticar mi mierda. No creí que mi sobrino fuera a ser tan pervertido y tan fetichista a ese nivel. Quería admirar como consumía mi mierda, así que me di la vuelta y me arrodillé dejando su cabeza entre mis piernas. Lo miré. Su boca no para de moverse. Masticaba una y otra vez.

  • Mastícala bien, corazón, le ordené cariñosamente tocando su pelo.

Estar tan cerca de él, me hizo viajar en el fuerte y apestoso aroma de mi mierda.

  • rica, ¿verdad?, le pregunté sonriendo.

Simplemente asintió con la cabeza.

  • ¿Quieres más?

Afirmó nuevamente con su cabeza.

  • claro que si, mi amor. Toda la que quieras, dije.

Sin moverme a ningún lado, pasé mi mano derecha a mi culo y metí mi indice llevándolo hasta el fondo. Dios, estaba tan sucio adentro. La mierda que había salido, había dejado pequeñas partículas de caca en mis paredes anales. Al tener el dedo completo dentro de mí, mi punta podía tocar la poca o mucha que aún estaba atorada.

  • aun tengo más y está atascada ahí adentro, le dije.
  • Que rico, sácatela y dámela!!
  • Espero poder sacarla.

Empujé mi dedo e intenté atrapar mi mierda pero más que eso, solo escarbaba más. La textura de mi mierda parecía merengue por lo que no era posible sacarla como si fuera un duro pedazo. Al contrario, ensuciaba más el dedo. Y era casi seguro que saldría cubierto de excremento.

  • dios, creo que saldrá muy sucio.
  • Que rico, ¿te gusta tocarte adentro?
  • Si!! Se siente rico!!
  • Sácate el dedo y dame!!

Retiré mi dedo lentamente manchando mi tubo anal de caca. Al sacarlo podía imaginar lo manchado que saldría. Una vez fuera, lo pasé adelante.

  • dios, dije sorprendida por lo sucio que estaba.
  • Que rico se ve.
  • Abre la boca, le pedí.

Una vez abierta, metí mi dedo y lo puse sobre su lengua. Él sin mayores complicaciones cerró la boca con mi dedo adentro y comenzó a lamerlo y a chuparlo. Sin dejar de ver su semejante perversidad, mordí mis labios conteniendo la excitación que me causaba. Era increíble lo que hacía. Comer mi mierda. Su lengua vagaba por todo mi dedo. Procuraba limpiar cada milímetro.

  • ¿Está buena?, le pregunté

Saqué mi dedo de su boca resbalandolo por sus labios para que contestara.

  • si, muy buena!!
  • Parece que necesitas bajar todo eso, ¿no?
  • Si...¿porque?
  • Bueno...tengo un poco de mi agua, no se si quieras.
  • Si, si quiero!!
  • ¿Si?
  • Si.
  • Ok

Me pise en cuclillas y puse mi vagina cerca de su boca. Separé mis pliegues.

  • abre, le ordené.

Justo al hacerlo, dejé que mis orines salieran. Un pequeño chorro muy fino salió de mi concha generando un charco dentro de su linda boca.

  • trágala

Lo hizo.

  • deja que tu boca se llene.

Una vez logrado que su boca se llenara de mi orin, le pedí una cosa más.

  • Cierra la boca y lávate los dientes.

Cerro su boca y comenzó a hacer buches y gárgaras.

  • ahora traga.

Un bulto se formaba en su garganta en cada trago.

  • eso es!! ¿Te gustan?
  • Si, tía!!
  • ¿Que tal saben?
  • Amargos pero muy ricos.
  • ¿Te gustaría beber más?
  • Si.
  • Ok. Abre.

Volví a separar mis labios vaginales y comencé a orinar por segunda vez. Al no tener ya mucha, pujé un poco liberando un pedo al mismo tiempo.

  • Ups!!,

Tragó lo que oriné y acercó su boca a mi ano para lamerlo.

  • aaahhh!!!

Se detuvo y pasó a mi vagina para a tacar mi clitoris.

  • sii!!! Así!!! Que rico!!

Dios su lengua no tardó en generarme ese placer tan fabuloso que tanto me vuelve loca de placer. Mientras lengüeteó mi delicado punto, insertó dos dedos en mi ano llevandolos hasta el fondo para luego rascar mi interior.

  • aaahhh!!!! Siii!!!
  • Puja tu culo, tía!!
  • Ajá!!

Al cumplir con su orden, rascó mi interior tocando mi excremento. Rascaba como si quiera sacarlo. Dios, era genial lo que me hacía.

  • puja, puja fuerte!!!

Pujé con todas mis fuerzas hasta expulsar esa mierda junto con sus dedos.

  • sigue!! Lame!! Lame mi clitoris!!, le rogaba con necesidad.

Con mis dedos estire mi piel y mis pliegues hacia arriba para descubrir mi clitoris.

  • lame ahí!! Please!!

Sin hacerme esperar su lengua atacó con locura mi lindo punto al grado de llenarme la mente y mis sentido de un extremo placer.

  • aaahhh!!! Sii!!! Que rico!!! Lame, mi amor!!! Sigue!!! No pares!! Me gusta!!! Me gusta mucho!!!
  • Ven, dijo.

Me hizo aun lado, se chupó los dedos que habían estado en mi trasero y los limpio con su boca. Me levanté, y al estar parada frente a él, me penetró la vagina con esos dedos y comenzó a sacudirlos causándome esa sensación tan maravillosa

  • Aaahhh!!!

Sabía como hacer sentir bien a una mujer. Tocaba mi punto interior. Ese que al tocarlo causa en mi esa sensación de querer orinar. Mis ojos se entrecerraban y mi boca se mantenía abierta. Parecía ser una boba frente a él.

  • Se siente rico, ¿no es así?
  • ...ajá, contesté como una tonta.
  • Te vez hermosa!! Me encantas toda!!

Solo lo veía. Estaba navegando en un expendido viaje lleno de placer. De la nada mi cintura y mi pelvis comenzaron a balancearse de adelante hacia atrás. Quería más.

  • Más rápido!!
  • ¿Así?, me preguntó sacudiendo como un loco.
  • Aaahhh!!!! Mierda!!!

Lo miré. Mis ojos se cerraban impidiendo que lo viera claramente. Se acercó y me besó. Me jaló el labio inferior.

  • aaaaaaahhhhhhh!!!!!!!!, mi boca liberó un fuerte gemido acompañado de un fuerte chorro saliendo de mi vagina.

Dios, había tenido un squirt. Mis muslos temblaban y mis piernas perdían fuerza. Gritaba como una niña chiquita llorando. Era fabuloso. Su mano seguía sacudiendo y mi vagina aun botaba como me estuviera orinando en su mano. Dios el placer era extremadamente increíble.

  • eso!! Sácalo!!! Saca todo lo que tengas!!!
  • Sii!!! Aaaahhhh!!!! Pa..ra!!!

Tan fuerte fue el squirt que hizo que mi ano pujara logrando que expulsara varias porciones de mierda.

  • mírate!! Dios!! Te estás cagando parada, que rico!!
  • ¿Ah?, pregunté estúpidamente.

Retiró su mano, subió ambas manos a mi rostro y cubrió mis mejillas con ellas para luego darme un besó.

  • eres perfecta, tía.
  • Y tu, dije cansada y respirando lentamente.

No me importó que su boca apestara o tuviera el sabor de mi mierda. Lo que me había hecho me tenía rendida a él y a todo lo que me obligara hacer. Una hora de extrema feticheria fue lo que duró nuestro encuentro y de el cual no me arrepentía.

Después de ese beso decidimos no continuar por temor a que llegaran sus padres. Ambos nos vestimos y me fui lo más rápido posible. Durante el camino reflexioné sobre todo lo que eh hecho y de lo que no creo darle un alto. Al menos de por ahora.