Visitando al abuelo, yo Ivonne. 2

Vaya que los abuelos mayores son calientes, no puedo dejarlos así.

Visitando al abuelo, yo Ivonne. 2

A final de la semana

, me dijo el amigo del abuelo que quería que viera la casa. Nos pusimos de acuerdo para ir al día siguiente, después de comer tomé la cámara y me dirigí a la cita.

Al llegar a la casa solo estaba el amigo de mi abuelo. Me hizo pasar y empezó a enseñarme las diferentes áreas de la propiedad. Saque fotos de las habitaciones y luego fuimos a la sala a llenar algunos papeles. Tenía que preguntarle algunos datos; así que me ofreció un tequila para estar más a gusto y acepte. Sentada en el sofá platicábamos y llenábamos los formularios. Me había terminado ya dos tequilas y al escribir me sentí algo mareada. El señor sentándose a mi lado me preguntó si estaba bien.

  • Te pasa algo Ivonne?

  • Me siento algo mareada, pero será por el calor que hace… le dije al tiempo que abría un poco mi blusa. Estaba muy cachonda y el tequila había ya hecho lo suyo.

Moví el cuello de mi blusa de manga corta y el acercándose puso una mano sobre mis rodillas.

  • Es que hace mucho calor, déjame prender el aire acondicionado. Quieres?

Asentí con la cabeza y enseguida note el aire que comenzó a correr. Volvió a mi lado y poniendo de nuevo su mano en mi rodilla dijo:

  • Mejor así preciosa?

Cerré los ojos un momento disfrutando del aire y volví a notar su mano, que esta vez acariciaba mi piel. Quise apartarlo pero mi calentura quería que él siguiera.

  • Tienes una piel muy suave y bonita Ivonne…

Notaba su aliento cerca y con la otra mano comenzó a desabrochar los botones de mi blusa. Metió la mano dentro y sobaba mis senos sobre el brassiere. Me sentía muy caliente y fogosa, encantada de que el viejo estuviera a tope por mí. Solo debía soltarme y fluir.

Sacó la blusa de mi falda y me la quitó. Sus manos recorrían mi piel calentándome aún más. Luego se arrodillo frente mí y empezó a acariciarme los muslos, subiendo mi falda y ganando terreno hacia su objetivo, mi tanga. Empezó a tocarme sobre ella y noté como ya estaba mojada. No obstante estaba algo mareada, ese viejo me ponía cachonda. Hizo a un lado la tanga y sus dedos hurgaban sobre mi conchita, estaba tocando mi sexo!

  • Estas chorreando zorrita… me dijo mientras un dedo me alcanzaba a penetrar.

Apenas podía jadear, estaba embelesada; y él sabiendo que me tenía a placer, siguió tocándome notando como me abría y como estaba mi conchita empapada y dispuesta. El seguía entre mis piernas cuando sonó el timbre. Vi a los otros dos amigos de mi abuelo entrar en el comedor. No se sorprendieron al verme en el sofá con la falda subida, la tanga de lado y sin blusa, en ese momento lo supe. El tequila y mi cachondería se habían apoderado de mi, necesitaba seguir y dejar salir a la putita que llevo dentro.

  • Ya ven que preciosidad?

Se puso de nuevo frente a mí y me subió la falda a la cintura y me bajo la tanga, mientras los otros dos se relamían los labios y abrían los ojos disfrutando del espectáculo.

Volvió a colocarse en el suelo pidiéndome separara mis piernas y les enseñara mi sexo, lo abrió delicadamente con dos dedos mientras les decía:

  • Está empapada, está apretadita y caliente…

  • No se que tiene ese tequila… pero me tiene aquí abierta frente a ustedes… dije.

  • No te preocupes Ivonne, estamos felices de ver toda tu belleza al natural…

Me acaricio de nuevo con los dedos y suspire. Uno de los otros dos se sentó a mi lado y empezó a tocar mis tetas. Las sacó del fino y transparente brassiere y empezó a lamerlos, mordisqueaba mis pezoncitos mientras el primero entraba y salía de mi vagina lentamente son sus dedos. Busque al tercero y vi que se había sacado la verga y poniéndose cómodo en el sofá al otro lado, se la jalaba mirando todo mi cuerpo y lo que sus amigos me hacían.

  • Que buena estas Ivonne, que rica!; no esperabas esto cuando te pavoneabas delante de tres viejos verdad?...

  • No te lo esperabas, solo ibas de calienta pitos verdad Ivonne?... me decía otro sin dejar de tocarme.

  • Que tetas más ricas tienes, deliciosas!...

Me mordía los pezones,  yo estaba cachondísima. Note una lengua áspera pero certera que pasaba por mi clítoris y lo succionaba. No podía evitarlo esos viejos me ponían a mil, era delicioso. El que se la jalaba la acerco a mi, mostrándome como lo estaba poniendo.

  • Se te antoja Ivonne?, porque no le das una mamada…

Agarrándome la cabeza empezó a frotármela por los labios, yo le besaba el glande hinchado, hasta que entreabrí un poco y empujo levemente metiéndola toda en mi boca.

  • Te gusta mi pija hermosa?, trágatela entera, es tuya cariño.

Me rendí a la calentura que me invadía y empecé a chupar con deseo esa vieja y venuda verga.

  • Así Ivonne chúpala así, que placer me das.

Tenia a los tres viejitos dándome placer, uno me chupaba la conchita, otro las tetitas y el tercero me ofrecía su miembro en la boca para que se lo mamara. No tarde mucho en sentir un orgasmo delicioso que me hizo arquear la espalda. El que estaba atendiendo mis tetas se sacó la pija para jalársela y alternaba entre mis dos pezoncitos chupándolos y succionando delicioso, mientras el segundo dejo de hacerme la concha y sacándose la pija, la paseo por mi húmedo sexo. Presionó y me penetró con su glande hinchado, me tomo de las caderas y empujo. Me la metió en dos ocasiones haciéndome chillar de placer.

  • Uff preciosa Ivonne que apretadita estas, que rico me aprietas bien la pija, este viejo te va a dar una buena cogida zorrita.

Iba de una verga a otra mientras mi conchita era penetrada sin piedad. Varias manos agarraban mis tetas pellizcándolas, sobándolas y dándome placer. Nunca había estado con un grupo de viejos, tan viejos. Me percaté de eso y volví a venirme, esta vez haciendo un squirt delicioso que los dejó empapados.

  • Si Ivonne, mójame la pija, así queremos verte acabar zorrita! -

Gritaba y jadeaba ya sin pudor alguno. Cuando me vine saco su pene gordo y otro lo sustituyó. Era más pequeña y delgada, pero me cogía más fuerte, la tenía bien tiesa. Note mi sabor en su pija cuando me la ofreció de nuevo a que se la chupara.

  • Así Ivonne, chúpamela como tu sabes -

Me agarro la cabeza y empezó a darme en la boca como se había cogido mi sexo. No paró hasta llenar mis tetas de su leche, que yo recibí mientras volvía a venirme. No se que me pasaba, sería el morbo de tener a tres abuelitos locos por mí o no se, pero vaya que estaba disfrutando como nunca.

Como una muñeca de trapo me sentaron sobre la última verga que me faltaba por probar. Me abrieron los muslos separándome las piernas. Me lamieron ambos mientras tenía toda la pija dura bien metida. Mire sus lenguas que iban desde mi vagina hasta los huevos del que me estaba penetrando y la escena me enloqueció. Así estuvieron varios minutos, me levantaron de nuevo y el que me estaba cogiendo se la jalaba mientras me ponían de espalda donde acabó derramando toda su leche. Sentía su semen caliente. Me pusieron a cuatro de nuevo y el que faltaba por venirse se puso detrás y agarrándome las caderas me la metió, me cogió por un par de minutos como un salvaje.

  • Ivonne, hacía años que no me venía así, eres una diosa -

  • Te gusta cómo te cogemos estos viejos? -

  • Sí, siiiiii, que rico!!! -

  • Dilo zorrita, di que te ha gustado como te cogimos.

  • Claro que me ha gustado, y mucho!

Caí al sillón exhausta y bien cogida por esos tres viejos.

Me pasaron mi ropa, me puse la falda y me estaba abrochando la blusa cuando oí al abuelo…

  • Estaba abierto y me pasé… Se quedó parado viéndome con la falda aun desabrochada y abotonándome la blusa.

Entro detrás de el que había ido al coche y sin ver al abuelo dijo:

  • Ivonne toma estas toallitas húmedas para que te limpies… entonces lo vio.

  • Que ha pasado aquí? – Preguntó mirándonos a los cuatro -

  • Abuelo!!!…

Continuará...

Gracias por todos sus comentarios y correos. Todos los que quieren las versiones extendidas y algunos ineditos recuerden que esta mi eBook. Espero sus mensajes.

Besitos

Dra. Tentación