Visitando a Carolina (2)
La visita a mi amiga Carolina junto con Mariela y como nos montamos una orgia con dos negrazos espectaculares.
VISITANDO A CAROLINA 2
Hola amigos, hoy les envió la continuación del relato que escribimos junto a mi amiga Carolina y como al invitarme a mí y a mi amiga Mariela a pasar unos días en su país, pasamos juntas unas muy calientes experiencias, llenas de sexo y placer.
Habíamos recibido la invitación a cenar de esos dos atractivos morenos dueños del hotel y con mis amigas nos preparábamos para asistir, eligiendo la ropa que nos íbamos a poner, decidimos estar bien sexys ya que como recordaran estabamos dispuestas a cogernos a esos dos machos y debíamos impresionarlos bien, Mariela se decidió por llevar un vestido corto y ajustado que dejaba notar sus grandes pechos y marcaba la pequeña tanga que llevaba, en cambio Carolina y yo nos decidimos por usar minifalda, muy cortas y ajustadas y arriba ella se puso una camisetita de tirantes y yo un top escotado que dejaba ver perfectamente el nacimiento de mis grandes senos, ambas no llevábamos sostén y como habíamos acordado, tampoco nos pusimos pantys, por lo que debajo, íbamos totalmente desnudas. Nos maquillamos y arreglamos muy bien y al llegar la hora bajamos, al entrar al salón ya había algunas personas y los hombres no pudieron evitar voltearse para vernos, incluso recibimos las miradas de algunas mujeres, enseguida se acercaron a nosotras Cesar y Lucio, los dos hermanos que nos invitaron.
Solo recibimos elogios de ellos en cuanto a nuestra belleza y nos invitaron unos tragos, de a poco fue llegando mas gente, otros hombres también se nos acercaban, pero los hermanos hacían lo posible por estar con nosotras, parecía que solo nos querían para ellos, la noche fue pasando, cenamos y nos divertimos y luego comenzó el baile, ahí también recibimos muchas invitaciones, aceptamos algunas y bailamos con varios hombres, pero siempre alguna estaba con Cesar o con Lucio y cuando bailábamos con ellos, hacíamos todo lo posible por excitarlos, algo que no era muy difícil de lograr, así fue pasando la noche y quedábamos pocas personas, se aproximaba el momento de concretar la situación, lo aproveche para hablarlo mientras bailaba con Cesar, nuestros cuerpos estaban pegados, sentía su dura erección contra mí y su mano rozaba mis nalgas
me encanta estar aquí contigo, me dijo
a mí también me agradas mucho, contesté
quisiera que continuáramos la noche en mi habitación, me dijo
estoy con mis amigas y también esta tu hermano, le dije
bueno, él también desea estar contigo y con tus amigas, pero ustedes son tres y nosotros dos, me dijo
a nosotras también nos gustan los dos y no veo cual sea el problema de ser cinco, podríamos estar todos juntos, conteste
¿Lo dices en serio?, preguntó sorprendido
Claro que sí, para nosotras esta bien, pero antes debes saber algo con respecto a mi amiga Mariela para que no haya sorpresas
No entiendo bien a que te refieres, me dijo
Bueno es que tal vez no las notado pero ella es una mujer diferente, muy hermosa y femenina, pero no es igual a Carolina o a mí.
Sí, lo he notado, pero no entiendo a que te refieres
Te lo diré directamente, ella no es mujer, es un travestí.
No te puedo creer, dijo, abriendo grandes sus ojos totalmente sorprendido
¿Aún quieres estar con nosotras esta noche?, pregunté
Es que es un hombre, no lo se, me dijo
Bueno mira, o es con las tres o con ninguna, así que ustedes eligen, si quieren gozar con tres hembras bien calientes como nosotras o quedarse con las ganas, solo por no vivir una nueva experiencia con algo distinto, pero seguro te perderías esto, y tome su mano y la deje deslizar bajo mi minifalda, acariciando mis nalgas desnudas y abriendo un poco mis piernas sus dedos rozaron mi conchita húmeda.
Entonces se fue a hablar con su hermano, y yo me acerqué a mis amigas y le conté la conversación que había tenido con él, enseguida volvieron juntos
las esperamos en nuestra habitación en 15 minutos, dijo Lucio
no saben como las vamos a coger, mi dijo al oido Cesar
Las que los vamos a coger somos nosotras, me van a pedir por favor que pare de cogerlos, te lo asegure, le contesté.
Salimos del salón disimulando que nos íbamos y pasamos por nuestra habitación para luego dirigirnos a la de ellos, al golpear nos abrió Lucio, entramos y Cesar se me acercó y me dio un fuerte beso en la boca y su mano apretó fuerte mis nalgas, luego hizo lo mismo con Carolina y finalmente acercándose a Mariela, la miró y le dijo, veremos si eres tan buena como dice Angela y también la besó intensamente en la boca. Al tiempo que Lucio nos abrazaba a Caro y a mí, recorriéndonos con sus manos enormes, la música empezó a sonar y todos bailábamos y refregábamos nuestros cuerpos, de a poco fuimos sacándonos la ropa, al levantar nuestras faldas y ver que con Caro no teníamos nada debajo, los machos se pusieron muy calientes y no se detuvieron hasta desnudarnos, solo Mariela conservó su pequeña tanga, luego nosotras también desnudamos a esos dos negrazos, los sentamos en el sillón y allí quitamos su ultima prenda, la que liberó dos enormes vergas, eran impresionantes, ya estaban muy duras, las dos eran muy largas como de 25 cm, la de Lucio un poco mas delgada y la de Cesar era realmente gruesa, las tres nos arrodillamos frente a ellos y comenzamos a mamarlos, nos peleábamos por devorar sus vergas, dejé que mis amigas se comieran esas vergas y yo alternaba con cada una lamiendo y chupando esos dos tremendos pedazos de carne caliente.
Mis amigas se las devoraban, Carolina tragaba la verga de Cesar y Mariela la de Lucio, a ambas le costaba hacerlo por su tamaño, los machos disfrutaban y le pedían que se las comieran, que las tragaran todas, algo que ellas no podían hacer por completo, entonces Caro dijo que la única que podía tragarse cualquier verga completa era yo, que era la mayor devoradora de vergas que había, entonces los machos me desafiaron a que lo hiciera, que querían verlo, me puse frente a Lucio y lo empecé a lamer, moje bien su pija con mi lengua y luego la fui chupando despacio, primero su cabeza, luego mas de su tronco, subía y bajaba por su verga, la pajeaba y chupaba mas, la comía un poco mas, ya tenía tres cuartas partes de su verga en mi boca, casi hasta mi garganta y la chupaba mas y mas, el macho gozaba , la hundí un poco mas y di otro bocado y sus huevos chocaron contra mis labios, me la había tragado toda, la saque un poco y volví a tragármela, dejando hundida en mi boca un momento para luego sacarla por completo.
Ahora es tu turno, le dije a Cesar, que era la de mayor tamaño, sobre todo por su grosor, pero nunca se me resistió una verga así que iba a continuar hasta lograrlo, le di el mismo tratamiento que la verga anterior, la moje con mi lengua y la fui chupando despacio, tragándola poco a poco, abrí bien mi boca, que se estiraba al máximo y Cesar gozaba como loco con su verga en mi boca, que ya se alojaba hasta mi garganta, pero aún quedaba un pedazo fuera de mi boca, di otro bocado y entró algo mas, tome aire, abrí bien mi boca, di un bocado y tragando mi boca chocó contra su pubis, su enorme vergajo se alojó dentro de mi garganta, hice esfuerzos para no ahogarme o tener arcadas, la saqué un poco y volví a tragármela toda, todos en la habitación estallaron en aplausos y gritos, diciendo que me la había comido toda, que era la mayor tragavergas del mundo y otras cosas, nos divertimos mucho con eso y seguimos.
Ahora con Carolina nos montamos sobre los dos machos, ellos estaban sentados en el sillón y nosotras los cabalgábamos fuerte, mientras Mariela alternaba entre las dos parejas, comiéndonos las conchitas o las vergas que nos penetraban, esas enormes vergas nos llenaban por completo y nos daban mucho placer, mi amiga gemía fuerte y gozaba, estaba a punto de un orgasmo, en cambio yo gozaba la cogida, lo llevaba a mi ritmo y no dejaba que ninguno de los dos acabara, mi amiga explotó de placer, dando fuertes gemidos, Mariela se encargaba de beber su orgasmo hundida entre sus nalgas y las bolas de Lucio, comiéndolos a ambos, terminando su orgasmo, Carolina se bajo y junto a Mariela comenzaron a mamarle su verga, Cesar quería llevar el control, por lo que cambió de posición y me puso en cuatro patas sobre el sillón, cogiéndome por detrás por mi concha, escuché a Lucio gemir fuerte y como su verga estallaba en chorros de leche que se desparramaban por las caras y bocas de mis amigas que la bebían con deleite, hasta exprimirla por completo.
Cesar aumentó sus embestidas y ahora me deje llevar por el placer, me cogía fuerte y duro, su pija dura e hinchada anunciaba su orgasmo, me clavó profundo y acabó fuerte inundándome de su leche caliente y llevándome a un orgasmo intenso, que compartí con él, su verga convulsionada, me daba sus ultimas gotas y mi concha la apretaba, gozándola toda. Me di vuelta y tome su verga para limpiarla toda de mis jugos y su leche, Caro su unió a mí para hacerlo, mientras Mariela se ocupaba del otro macho, las dos vergas pronto recuperaron su erección, entonces deje a Carolina con Cesar y me uní a Mariela con Lucio, era hora que ella pudiera gozar también, así que me dedique a excitar bien al macho, hice que Mariela devorara su verga
te gusta como te la chupa, le dije
ella es una verdadera hembra caliente, se come toda tu pija
¿Te hace gozar, verdad?, ahora disfrutaras de sus tetas
hice que Mariela pusiera sus enormes tetas alrededor de la verga de Lucio y lo pajeara fuerte con ellas, ella lo hacía y la chupaba también, él gozaba
viste que buena hembra es mi amiga, como te hace gozar, seguro quieres disfrutar su culo, le dije
párate Mariela, muéstrale tu culo, ella se incorporó y poniéndose de espaldas, corrí su tanguita y le mostré su culito
Mira que buen culo, que ricas nalgas, ¿quieres cogérselo?
Si, me encanta, dijo excitado
¿Quieres tu verga dentro de ese culo?, Entonces cógetela.
Lucio se incorporó totalmente caliente, puse a Mariela en cuatro contra el sillón, quité su tanga y su verga saltó semierecta, al verla, el macho dudó un momento, pero no le di tiempo a reaccionar, tomé su verga y se la chupe fuerte y luego abrí el culo de mi amiga y le dije que se la cogiera, que ella lo deseaba, la excitación que traía pudo mas y apuntó su enorme verga al agujerito de mi amiga y la penetró, ella dio un grito, lo detuve un momento y luego lo hice continuar, fui regulando la penetración para que ahora Mariela la gozara, ella gemía y él la cogía fuerte y profundo, el culo de mi amiga se devoraba cada vez mas esa gruesa verga y la disfrutaba toda.
Los deje disfrutando y volví a ver en que estaba Carolina, ella estaba sobre el piso y el macho sobre ella cogiéndola fuerte, me puse sobre ella llevando mi concha sobre su cara, sentí como su lengua se hundió en mi interior y Cesar incorporándose un poco, pero sin dejar de cogerla, me besaba y acariciaba mis pechos, mi amiga gozaba, ahogando sus gemidos en mi rajita mojada, Cesar la embestía fuerte y duro, haciéndola acabar fuerte, en ese momento Lucio le hablaba a su hermano, le decía el rico culo que se estaba comiendo, lo apretado que era y como Mariela lo cogía, entonces Cesar decidió probarlo, y se puso sobre Mariela, que ahora se arrodillo sobre el piso y Lucio sentándose en el sillón, le dio su verga para que lo mamara, mientras Cesar se acomodó por detrás de Mariela
parece que mi hermanito te lo dejo bien abierto, comentó Cesar
si, me encanto, dijo Mariela
pero yo te lo voy a abrir mas todavía con mi enorme verga, le dijo
si, cógemelo todo, deseo sentir toda tu verga adentro de mi culo, pidió Mariela
Cesar tomó sus caderas, apoyo su verga en la entrada de su culo y le dio una embestida, la verga se alojó en parte dentro del dilatado culo de mi amiga que gimió fuerte, mezcla de dolor y placer, otra embestida y media verga se hundió en su ano, ella se devoró la otra verga y ahogó su grito, Cesar la embistió otra vez mas y más verga la penetró y empezó a cogerla fuerte, entrando y saliendo del culo de Mariela, que al mismo tiempo se comía toda la otra verga, viendo como ella gozaba con Caro nos unimos en un 69 tremendo, chupándonos y cogiéndonos con nuestros dedos, sentimos los gritos de los dos machos y de Mariela, que llegaban al clímax, Mariela estallaba por su culo, Cesar la penetraba profundo y regaba con su leche el culito de mi amiga, al tiempo que Lucio tomaba su cabeza y la hundía contra su verga que inundaba la garganta de mi amiga, las acabadas fueron tan abundantes que Mariela desbordaba leche por su culito y su boca.
Con Caro comenzamos a chuparla y a los dos machos también, pero Mariela tenía el culito convulsionado y su verga enorme muy dura, por lo que me ocupé de ella, ante la mirada sorprendida de los dos hermanos, que nunca habían visto una cogida así, yo cabalgaba a Mariela y nuestras tetas enormes se rozaban, ambas gozábamos, luego deje mi lugar a Carolina sobre la verga de Mariela, para que ella también gozara, y lo hizo llegando a un fuerte orgasmo, mientras yo me pajeaba fuerte viéndolas, Mariela se dio vuelta y se puso sobre mí cogiéndome fuerte y haciéndome acabar también, para finalmente casi al punto del orgasmo, ella sacó su verga y se pajeó sobre mi, Caro se puso sobre mis tetas y la leche de ella nos alcanzó a ambas, sus chorros caían sobre nuestras caras y tetas, nos dio hasta la ultima gota y luego entre las tres nos limpiamos bien con nuestras lenguas de todos los rastros de nuestros jugos.
Toda la escena, puso a nuestros machos de nuevo a mil, pero necesitábamos relajarnos un poco para seguir, así que les propuse ir al jacuzzi. Aceptaron y los cinco nos metimos desnudos, ellos ya tenían sus vergas duras, por lo que enseguida ya estabamos todos excitados de nuevo.
Estábamos los cinco en el jacuzzi, desnudos, besándonos y acariciándonos, los machos ya tenían sus vergas muy duras, Mariela se puso de espaldas sobre Cesar y se fue sentando sobre él, su cuerpo se hundió en el agua y se fue clavando en su verga, su cara expresaba el gozo que sentía al hacerlo, él le tomaba las enormes tetas y ella subía y bajaba sobre su sexo, yo hice sentar a Caro y a Lucio sobre el borde del jacuzzi y comencé a mamarlos a ambos, me devoraba la verga y hundía mis dedos en la rajita de mi amiga, y luego la mamaba a ella y lo pajeaba a él, ambos gozaban de mi boca y lengua, hice que mi amiga se diera vuelta y dejara su culito en pompa, Lucio se ubicó detrás de ella, pajeaba su dura pija entre sus nalgas, la coloco sobre sus labios y la penetró profundo, Carolina gimió de placer, él tomo sus caderas y la embestía con fuerza, entrando y saliendo de su concha mojada.
Me di vuelta y me acerque a Mariela, que seguía cabalgando fuerte a Cesar, lamí sus pechos, mordí suave sus pezones excitados y duros, ella gozaba mucho y pedía mas, el macho hundía toda su verga en su interior y yo me devoraba sus enormes pechos, llevándola a un orgasmo fuerte, su culito acababa y exprimía la verga que lo llenaba, la que no aguantó mucho, ya que Cesar dio un grito, clavó a Mariela contra su verga y seguramente inundaba en leche su interior, mi amiga se movía en círculos sobre él, gozando y exprimiendo al macho que le daba tanto placer. Volví con Caro en el preciso momento que ella le pedía que la cogiera por el culo, comencé a lamérselo, hundí mi lengua en su interior, la penetré con mis dedos y la fui preparando, saque la verga de Lucio de su concha y la pase por su culito, mojándolo con sus jugos vaginales, cuando la sentí lista, apoye la verga sobre su culito y le dije que la penetrara, él lo hizo lento y despacio, mi amiga sintió el dolor, pero lo soportaba, la verga se deslizó mas en su interior, yo estimulaba su conchita con mis dedos, ella se relajo y permitió que la enorme pija se alojara toda en su culo, ella gemía fuerte de placer y él le daba duro y fuerte, clavándola profundo, hasta hacerla acabar, Carolina se convulsiona y gozaba de su orgasmo, mientras su macho le daba mas fuerte y alcanzaba el suyo también, al hacerlo, sacó su verga del culo de mi amiga y comenzó a lanzar gruesos chorros de leche sobre su espalda y sus nalgas, hasta vaciarse por completo.
En ese momento siento como unas manos me toman por mis pechos y una verga dura se apoya sobre mis nalgas, era Cesar que me besa y me dice que era mi turno, así que me recuesta sobre el borde con mi culito hacia arriba y comienza a comerme mi concha excitada, siento como su lengua me recorre de arriba a abajo, pasa por mi ano y vuelve sobre mi conchita, luego siento como me apoya su verga caliente, pasándola por mis nalgas y refregando mi raja mojada, y me penetra de un golpe, gimo fuerte y gozo con la embestida pidiéndole mas, me da mas duro, me clava profundo su tremendo aparato, en eso Carolina se sienta delante de mí y abre sus piernas ofreciéndome su deliciosa conchita, me hundí en ella, comiéndosela toda, Cesar seguía cogiéndome fuerte y ahora la sacó de mi conchita y la dirigió a mi ano, presionó un poco y entró, me dolía debido a su tamaño, presionó otro poco y mi culito relajado empezó a ceder, sentí la cabeza de su verga deslizarse en mi interior, me dolía pero lo gozaba, lentamente me penetró mas profundo, me dio unas embestidas, entrando y saliendo, mi culito se abrió mas y permitió una penetración mas profunda, ya gozaba como loca y totalmente caliente me clavé contra su verga, y otro empujón y la tuve toda adentro.
Comenzó a cogerme fuerte, entrando y saliendo entera de mi culo, mientras me devoraba la concha de Caro, al lado mío, Mariela lo mamaba a Lucio, Cesar me embestía mas fuerte y rápido, me hacía gozar, me llenaba con su enorme pija, toda enterrada en mi culo, yo lo abría y cerraba apretándolo, exprimiendo su sexo caliente, mi excitación hacía que me comiera fuerte la concha de mi amiga que no tardó en acabar en mi boca y al sentirla mi culo explotó de placer, acabando y convulsionándose, junto con mi conchita que explotaba en jugos y mi macho que al sentir su verga apretada por mis convulsiones, estalló en una catarata de semen caliente que inundó mis entrañas, llenándome por completo, Carolina se encargó de limpiar mi culito lleno de leche y la verga de Cesar, mientras que Lucio excitado por la escena y la gran mamada de Mariela, acababa en su boca y su cara, desparramando toda su leche por sus labios y sus tetas, mi amiga se encargó de dejársela bien limpia.
Descansamos todos un rato en el jacuzzi, pero luego deseábamos mas y nos fuimos a la habitación, donde había una gran cama y un enorme sillón enfrente, Mariela se ubicó en el sillón conmigo y deje que Caro se fuera con los dos machos a la cama, ella se recostó y ambos pusieron sus vergas a los costados de su cara para que se las chupara, las tomó con sus manos y las fue chupando alternadamente, incluso las juntaba y las mamaba o lamía a ambas a la vez, veíamos a nuestra amiga gozar y con Mariela nos besábamos y ella acariciaba mi concha y yo sus tetas o pajeaba su verga, ahora Carolina era cogida por Lucio y chupaba a Cesar, ella gozaba y gemía fuerte ahogada en esa gruesa verga, luego se dio vuelta y se montó sobre Lucio, cabalgándolo de frente a él, que al mismo tiempo se comía sus turgentes pechos, Cesar se acomodó detrás de ella y comenzó a lamer su ano, abriéndolo, metiéndole dos de sus dedos, para luego colocarse sobre ella y apuntar su enorme pija sobre su agujerito, mi amiga tenía la concha llena con la otra gran verga y otra estaba a punto de penetrarla por su culito, el macho presionó y la verga entró un poco, mi amiga dio un pequeño grito de dolor, la verga presionó otro poco y ella lo soportó mejor, empezando a disfrutarlo, una nueva embestida y ahora ella empezó a pedir más, esto animó a los dos machos que comenzaron a cogerla fuerte y en unos momentos, mi amiga tenía sus agujeros llenos de dos enormes vergas que la penetraban fuerte y profundo, haciéndola gozar, ella daba gritos de placer mientras las vergas la cogían sin compasión llevándola a acabar de manera brutal.
Con Mariela seguíamos masturbándonos, pero yo quería algo mas así que me puse de costado y le pedí que me cogiera, ella se acomodó detrás de mí en cucharita y me clavó por la concha su dura y gruesa verga, cogiéndome fuerte, mientras veíamos como Carolina a pesar de su orgasmo seguía cabalgando las dos vergas que la llenaban toda cuando Cesar se salió de su culo y acabó sobre su espalda y nalgas, desparramando toda su lechita caliente sobre mi amiga, que siguió cabalgando la otra verga y alcanzó otro orgasmo al mismo tiempo que Lucio también acababa dentro de ella. Mariela me seguía cogiendo fuerte, la hice sentar y yo me coloqué sobre ella de espaldas y me clavé su verga por el culito, montándola fuerte, Cesar se acercó, con su verga flácida por la reciente acabada y me la ofreció para que se la limpie, parado frente a mí tome su verga y se la lamí y chupe toda, mientras me cogía a mi amiga montada sobre ella, en unos pocos minutos, la verga estaba dura de nuevo, la sentía crecer en mi boca, cuando estuvo al máximo esplendor, Cesar la dirigió a mi concha y me penetró, sentí oleadas de placer con sus embestidas, tenía la verga de mi amiga llenado mi culito y la otra inmensa verga abriendo toda mi conchita, ambas me cogían fuerte e intensamente, llevándome a una acabada intensa que baño con mis jugos a las vergas que me llenaban de placer.
Entonces me levanté y Cesar se ubicó frente a Mariela, levantó sus piernas colocándolas sobre sus hombros y apuntó su verga a su culito, penetrándola fuerte, ella gimió de placer, la cogió duro un buen rato y Mariela con la excitación traía su verga totalmente dura, me agaché sobre ella y me la comí toda, chupándosela fuerte, las embestidas que recibía en su culo, me hacían devorar su verga hasta mi garganta, el macho aceleró sus movimientos y explotó en el culo de mi amiga que al mismo tiempo estalló en mi boca, soltando abundante leche caliente, al igual que la que recibía en su culito. Volví a la cama junto a Caro y Lucio, ella mamaba su verga poniéndosela dura de nuevo, yo me puse de espaldas sobre él y me senté sobre su verga refregando mi concha húmeda sobre su sexo duro y caliente, mojándosela, la pase entre mis nalgas mojando el agujerito de mi ano, me apoye sobre la verga y me deje caer sobre ella, enterrándomela hasta la mitad, gemí de fuerte placer y algo de dolor, pero me encantaba y lo cabalgué mas fuerte hasta hundirme toda en su verga, clavándomela profundo en mi culito.
Lo cabalgaba fuerte, subiendo y bajando por todo el largo de su pija, Carolina me comía las tetas y jugaba con dos dedos en mi concha, mi culo se llenaba con ese pedazo de carne duro y grueso, entonces se acercó Cesar, con su verga algo flácida aún, pero me la puso sobre mis tetas, lo que Carolina aprovechó para mamársela y endurecérsela, me daba vergazos sobre mis pezones duros y excitados y sobre la lengua de Caro, la llevo a mi boca y me la trague completa, mi amiga se unió a mí y nos turnábamos para comérsela, mientras no dejaba de cabalgar fuerte la otra verga que penetraba mi culo, le pedí a Cesar que cogiera mi concha, quería dos vergas dentro de mí, él se acomodo y me penetró fuerte, en unas pocas embestidas, la tenía toda clavada en mi interior, tenía mis dos agujeros llenos con dos tremendas vergas que empezaron a cogerme muy fuerte y duro, yo me movía enterrándome en ellas, tomaron un ritmo infernal. Muy rápido y profundo, entraban y salían de mí, me llevaron a un orgasmo bestial, acabe muy fuerte sobre esas dos pijas enormes, pero quería mas y empecé a moverme fuerte sobre ellos, cabalgándolos, yo ahora llevaba el ritmo, mi concha y culo apretaba sus vergas, que explotaron en leche dentro de mis agujeros, pero yo no podía parar, quería mas, acabe de nuevo y los seguí cogiendo, ahora era yo las que los dominaba y exprimía sus vergas, los machos intentaron seguir, pero ya no podían, me cogieron un rato mas pero luego sus vergas se rindieron, yo los seguía cogiendo fuerte, pero me pidieron por favor que parara, ya sus vergas se ablandaron dentro de mí, no podían continuar mas.
¿No te dije que me iban a pedir por favor que pare de cogerlos?, les dije
tienes razon, eres una hembra infernal, dijeron riendo
Caro me empezó a besar y hundió su lengua en mi concha, para hacerme acabar, se unió Mariela y poniéndose detrás de mí, me la metió por el culo, diciéndome que iba a continuar lo que ellos no pudieron, con mis amigas, una cogiéndome el culo y otra comiéndose mi concha, tuve una acabada tremenda, exploté de placer y fue tal lo que gocé, que como algunas veces, mis jugos fueron como una eyaculación, dos fuertes chorros salieron de mi concha, mojando por completo la cara de la sorprendida Carolina, y luego otros chorros mas no tan intensos que mi amiga se encargó de beber, al tiempo que Mariela descargaba toda su leche en mi culito.
Con mis amigas nos fuimos a bañar y luego nos despedimos de nuestros amigos, después de haber gozado de una noche muy intensa, llena de sexo y placer, pero esta solo había sido nuestra primera noche, hubo otras mas tan calientes e intensas, pero esas se las cuento en la próxima historia.
Pero como sigue la historia, se los contara Carolina en la próxima.
Continuara...