Violeta, sigue siendo mi droga

Lo que al principio pareció alcohol, y una simple noche de diversión, se convirtió en mi droga. Violeta y yo empezamos una relación casi todos los días probamos en habitación es distintas de la casa pero… 3 semanas después de empezar nuestra locura y de venirse a vivir conmigo dimos un paso más.

Era una típica tarde de domingo , a violeta se le ocurrió dar una vuelta por el centro comercial. No es que tuviera mucha ganas de ir de compras pero el simplemente hecho de estar con ella me satisfacía.

Llegamos allí y ella fue directa a las salas de cine. Tardó unos cinco minutos en volver, cuando regresó me dijo:

• Vamos a entrar a ver esta película que se que te va a gustar.

En efecto la película era de terror mi género favorito y bueno a día de hoy recuerdo nada más el título y los diez primeros minutos de película, ya que lo que allí sucedió me dejó enloquecido.

A los diez minutos de empezar el film, me encontré algo incómodo ya que no había ido al baño.

Violeta cielo disculpame dos minutos voy al aseo. La Di un beso en la mejilla y salí de la sala.

Estando ya en el baño, entre en uno de los privados , sin saber cómo no por que se me puso dura como un palo. La puerta se intentó abrir tras de mi, fallo no había echado el pestillo.

Ocupado- dije esperando una respuesta. Pero no la hubo. En cambio la puerta de abril esta vez con más fuerza. Era Violeta la que estaba detrás de mí.

Cariño , esto hay que solucionarlo, no puede ser que ya desde la mañana estés así.

Agarró el cinturón de su pantalón , se lo quitó y para sorpresa mía me lo pudo  por el cuello. Me agarró fuerte hacia atrás.

Ahora vas a saber lo que es disfrutar- me dijo al oído.

Con una sola mano bajo su pantalón, después el mío, y de una sola vez metió todo su miembro dentro de mi.

Comenzó a embestirme, una y otra vez , yo estaba apunto de correrme ya no podía mas.

Me voy a correr mi amor , ya no puedo mas la dije.

Entonces ella corto en seco, me la sacó y me dijo.

No, estaba vez te toca a ti

Se puso delante de mí, se puso encima del retrete a cuatro patas y me dijo:

Metemela hasta correrte.

Introduje mi pene dentro de su hermoso culo hasta el fondo. Ella arqueo la espalda en señal de dolor pero al contrario de eso me dijo:

• No pares mi vida por favor

Segun se la metía cogí su miembro y comenze a masturbarlo. Tal fue la excitación al correrse ella en mi mano que me corrí yo dentro de ella.

Salimos del baño unos veinte minutos después de haber entrado. Era tal nuestra excitación que nos fuimos a probar a otro lugar y nos olvidamos de que estábamos viendo una película aunque eso lo dejo para el siguiente relato.