Violeta, mi eterno amor II

En este relato se daran a conocer muchas revelaciones, y bueno si no es muy intresante en si porque lo dejo a medias es porque tube un leve problema, pero pronto estare suebiendo la continuacion

“Violeta: no… no soy igual a las demás personas, yo no soy… yo no soy… humana – hubo un silencio

- ¡¿Qué?! – no podía creerlo, debía ser una cruel broma”

Violeta: (suena su celular) Discúlpame Beth debo atender esta llamada

Se veía que era importante así que asentí con la cabeza y me quede pensando en sus palabras mientras ella se alejaba un poco, ¿no era humana?, ¿a qué se refería con esto?, tal vez solo era una tontería, la volví a mirar, ella estaba sollozando, se tomaba el pelo con su mano, de seguro ocurrió algo malo, me preocupe, ella se acerco

Violeta: Lo siento mucho Elizabeth, debo irme, tendremos que seguir nuestra charla después – tenía los ojos rojos y su voz entre cortada

  • ¿Estas Bien? ¿Quieres que te ayude en algo? ¿Qué paso Viole? – me preocupaba más como estaba ahora que la conversación que teníamos pendiente

Violeta: Estoy bien no hace falta que hagas nada, solo hubo un pequeño incidente con mi familia, por favor discúlpame – me beso la mejilla

  • No hay drama, solo espero que todo esté bien – no entendía nada, todo me daba vueltas, la veía marcharse casi corriendo, me quede allí, saque otro cigarrillo y volví a cerrar los ojos, ojala no aparezca nadie esta vez

- Historia desde Violeta:

(Se revelaran muchos misterios desde ahora)

Hace más de 3 meses que llegamos con mis padres desde Italia, nuestro “trabajo” está aquí, en esta ciudad del sur de Chile, viajamos con la misión de proteger a una chica, su nombre Elizabeth, tiene alrededor de 15 años y eso es todo lo que sé sobre ella, no quería marcharme de Italia pero la situación lo ameritaba, estaba tan acostumbrada a ese mar de cultura, llevaba años en aquel país y había creado un círculo de amistades muy importante.

Al llegar debimos investigar un poco sobre nuestra protegida, al principio tenía cierto rechazo por que debido a ella había tenido que dejar mucha gente importante, pero la primera vez que la vi… casi me derrito (cabe destacar que hace varios años había asumido mi lesbianismo) ella estaba bajo un árbol en un parque bastante solitario de la ciudad, parecía disfrutar del silencio, tenía un libro en la mano “El cuervo” de Edgar Alan Poe. Era una chica estupenda, no representaba 15 años, media alrededor de 1.60 mt. Delgada pero con unas curvas peligrosas, su cabello castaño claro y liso caía perfectamente escalonado sobre su pecho, de tez blanca, nariz recta y un tanto respingada en la punta, sus ojos eran verdes, sus labios rosados y del grosor perfecto, y sus pechos eran medianos pero hermosos, vestía con una Polera de Nirvana, un short de jeans y unas converce negras, sencillamente hermosa, me hacía sentir que había valido la pena llegar al otro lado del mundo por protegerla.

Durante el siguiente mes mi misión fue seguirla, ver sus rutinas, con quienes compartía, que le gustaba hacer, investigar todo sobre su vida pero sin que ella tenga la menor sospecha. Claro aún no entendía porque debíamos protegerla pero disfrutaba hacerlo, hasta que cierto día escuche una conversación de mis padres con el Líder de nuestro clan, mis padres se notaban preocupados y no podía escuchar mucho salvo unas palabras que me quedaron rondando en mi cabeza “entendemos la gravedad de la situación, si es necesario daremos nuestra vida por proteger a su hija, Elizabeth no correrá peligro mi señor” seguido de eso se acercaron a la puerta y yo Salí corriendo del lugar, en mi cuarto repasaba la historia en mi cabeza una y otra vez sin entenderlo muy bien, ¿Elizabeth era la hija del Líder de nuestro clan?, bueno de seguro están más enredados que yo así que les explicare un poco más mi historia.

Mi nombre Violeta Pausini Rialto, mis padres son de origen Italiano: Laura R. y Franco P, por supuesto no tengo hermanos… ¿que nos hace una familia única? Bueno para empezar no somos normales, tenemos poderes, mi padre pueden controlar la mente, mi madre dice que así logro que se casara con él jajaja, ella bueno, ella puede mover cosas con la mente, si ambos son unos astros de los controles mentales, muchos deducirían que yo también tengo un poder relacionado con la mente, pero todo lo contrario yo puedo manejar los campos magnéticos, puedo hacer de todo con este poder es sorprendente, pero bueno, volviendo a mis padres, ellos son el brazo derecho de Van Demuerg y de Sara Bourth, los líderes de nuestro Clan, existen 2 clanes, los del norte y los del sur, hace años atrás éramos una sola “familia”, hasta que los del clan del sur fueron invadidos por la codicia la envidia y la sed de poder, creándose una guerra entre ambos clanes.

Los Líderes de nuestro Clan tenían una pequeña hija, Sophia, era 2 años menor que yo, pero pasábamos mucho tiempo juntas en nuestra niñez,  a los 5 años tuve que empezar mi entrenamiento como todos los niños del clan, desde el principio demostré la gran capacidad de mis poderes y fui avanzando con más rapidez que los demás niños, me hacían entrenar en combates con niños del doble de mi edad, yo disfrutaba de entrenar y llevar al máximo la exigencia de mis poderes, pero no dejaba de lado a Sophia, éramos muy unidas y después de cada tarde de entrenamiento salíamos a recorrer el bosque, le enseñaba a Sophia todo lo que sabía, claro como ella aún era un poco pequeña no podía explotar sus poderes, pero esa tarde sin duda me sorprendió

  • ¿viste Sophi?, eh mejorado mucho con mis poderes – lo decía con orgullo luego de comprimir una cabina metálica con mis poderes

Sophia: ¿Por qué yo no puedo hacer eso? – regañaba con dulzura

  • Porque eres muy pequeña Sophi, ya verás que en un poco más aprenderás todo

Sophia: no es justo, ¡Ya verás que puedo ser igual de buena que tú! – seguía regañando, se paró firme imitando mi posición e hizo lo mismo que yo, logrando comprimir la cabina que estaba al lado

  • ¡¿CÓMO HICISTE ESO?! – estaba con la boca abierta, no lo podía creer, ella me miraba sorprendida

Sophia: ¡¡LO LOGREE, VIOLE LO HICE!! – Su carita se volvía un mar de asombro y esos ojitos verdes llenos de alegría, tome a Sophia de la mano y corrimos hasta donde estaban sus padres juntos con los míos hablando

  • ¡¡Señor Van Demuerg, Señor Van Demuerg!! – venia gritando y con mucha emoción

Van Demuerg: ¿Qué ocurre Violeta? – Lo decía con un tono paternal tratando de calmarme y con una sonrisa en su rostro

  • Es Sophi, estábamos en el bosque y, y yo le estaba enseñando mis poderes y ella se enojó porque no podía hacerlo y luego empezó a hacer lo mismo que hacia yo y, y lo logro, lo hizo – Lo dije tan rápido que con suerte me di cuenta de la cara de asombro de todos – Sophi pudo hacer lo mismo que yo – tenía una emoción inexplicable por ello

Desde aquel momento se dieron cuenta de que Sophia no era igual a los demás niños, los poderes por lo general se desarrollan a los 5 años y ella solo con 3 añitos había logrado sin ningún entrenamiento el mismo resultado que un niño de 10 años, pero no solo pudo manejar el magnetismo si no que aun más sorprendente era que podía manejar cualquier técnica que se le mostrara, ella lo lograba todo, era una maravilla,  pero pronto los rumores de que Sophia podía hacer esto llegaron hasta el clan del sur… pasó el tiempo yo ya tenía 7 años y Sophi cumpliría los 5, como regalo sus padres le dieron a elegir a donde quería ir a celebrarlo, ella por supuesto dijo que quería ir a la playa, el sr. Van Demuerg y la Sra. Sara decidieron llevarla y le pidieron a mis padres que los acompañáramos, Sophi y yo jugábamos cerca del mar, encontramos una pequeña cueva y la hicimos nuestro refugio, había comenzado a llover y estábamos lejos de nuestros padres así que decidimos quedarnos ahí, Sophi se quedó dormida y yo la miraba detenidamente, no sé qué fue lo que me hizo hacer que me acercara a ella, era pequeña no entendía lo que hacía, pero estaba frente a su rostro y muy despacio le di un inocente beso en sus labios pequeños, ella se movió un poco y abrió los ojos, me miro y se rió dulcemente, como cuando tenía sus ideas que siempre terminaban en un lio para ambas, se levantó y me devolvió aquel inocente beso… yo no sabía que decir, ni porque la había besado, simplemente me dio un impulso por hacerlo, mi primer impulso lésbico, luego de eso salimos de la cueva en medio del compromiso de no decirle nada a nadie sobre eso, todo iba bien hasta que presentí algo y decidí que nos escabulléramos entre unas rocas para no ser vistas, desde allí pude apreciar lo que ocurría, en la playa están nuestros padres de un lado y para nuestra desgracia los líderes del clan del sur en el otro extremo, tenían una acalorada discusión hasta que de pronto se desata una improvisada batalla, no podía simplemente quedarme viendo aquel siniestro espectáculo, sabía que venían por Sophia y no permitiría eso, tomé a Sophi por el brazo y le dije que debíamos escondernos, la cueva estaba muy lejos y la marea había subido así que no era una opción, muy cerca del lugar habían unas ruinas de una pequeño barco así que corrimos al lugar, no alcanzamos a llegar cuando el hijo  mayor de nuestros enemigos se nos cruza

Chico: Y ustedes ¿A dónde creen que van? – nos miraba con altanería

  • ¡¡Aléjate de ella!! – puse a Sophi detrás de mi

Chico: quítate de mi camino pequeña inútil – estiro su mano y vi un destello de luz

Un choque eléctrico recorrió mi cuerpo, estaba entumecida, no podía moverme, vi como Sophia se lanzaba a aquel chico golpeándolo con todas sus fuerzas, él la afirmaba, no podía permitir que la llevara, hice un esfuerzo descomunal levante mi brazo izquierdo y con los trozos de la embarcación abandonada ataqué a ese tipo, trate de ponerme en pie, el imbécil se dio vuelta lanzó todo su poder contra mí, tirándome contra las rocas quedando casi inconsciente, pero un trozo de fierro que había tirado antes de ser medio matada atravesó el vientre del chico dejándolo tirado en el suelo, Sophia corrió hacia mí y me abrazo en medio de llanto, yo solo pude decirle unas palabras “es… con… de… te” y después de aquello no recuerdo nada, desperté en una habitación, rodeada por mis padres y los de Sophi, pero a ella no la veía por ningún lado. Después de recuperarme me dijeron que no habían encontrado a Sophi y no sabían de su paradero, los años siguientes trate de recuperarme pero siempre tenía el recuerdo de sus ojitos verdes, su sonrisa de picardía, su valentía… y ese beso, me culpaba por no haberla protegido, ella era la motivación para que entrenara y me convirtiera años más tardes en la mejor del clan, siendo motivo de orgullo para mis padres.

A los 15 años fui asignada para una misión de recolección de información sobre el clan del sur, para ello me enviaron a Italia junto con un selecto grupo de jóvenes, entre ellos Kathya, así fue como la conocí, esa chica de descendencia francesa era Bellísima y había quedado boca abierta cuando la vi. Éramos 4 los asignados a la misión: Emilia, Javier, Kathya y Yo; los primeros eran novios hace años así que quisieron quedar en el mismo cuarto, por lo que Kathya y yo debimos dormir juntas… las primeras noches fueron una tortura

Kathya: Bueno Violeta, creo que no nos queda más que dormir juntas, no te molesta compartir cuarto con una francesa, ¿verdad? – lo decía con una picardía, sabía lo que provocaba en mi

  • Por supuesto que no me molesta, mientras sean camas separadas – lo decía tan nerviosa.

Tomé la llave, abrí la puerta con una sonrisa de nervios en mi rostro, entramos tímidamente, y allí estaban; 2 camas, una de 1 plaza y la otra de 2 plazas, entre un jugueteo de niñas peleamos por la cama más grande y ella termino ganando, algo apenada por tener que dormir en la cama más pequeña tome mi ropa y me dirigí a darme una ducha, necesitaba relajarme y pensar que era lo que esta chica provocaba en mí, cuando ella me sonreía provocaba un leve cosquilleo en mi vientre, como si traviesas mariposas dieran vueltas dentro de mí, me ponía realmente nerviosa

Kathya: Vamos Viole ¿porque demoras tanto? – ahí estaba ella, recostada en el marco de la puerta del baño y mirándome con una sonrisa traviesa en su rostro

  • ¡Kathya! Diablos estoy desnuda – estaba sonrojada y me tapaba con la toalla

Kathya: No veo nada que yo no tenga, aunque a ti se te ven mucho mejor –  me miraba fijamente y mordía su labio inferior de una manera que me hiciera desear besarla, sí quería besarla y lo haría

  • Aww, emm… yo… yo tengo… es que… no quiero… ¿podrías? – estaba tan nerviosa que hasta tartamudeaba

Kathya: okey, okey, ya me voy, te dejo tu privacidad – salió riéndose pícaramente, sabía que me ponía nerviosa y sabía que me gustaba

Esa semana paso llena de coqueteos por parte de Kathya, siempre me tiraba indirectas, o me piropeaba, yo reafirmaba cada vez más que ella era lesbiana y me decidí de entrar en su juego. Pasaron 8 días en los que tuvimos que investigar  todo sobre el clan del sur y como terminamos antes de lo pronosticado decidimos como grupo quedarnos allí unas semanas “por si alguna información nueva salía” aunque en realidad queríamos disfrutar del lugar, nos había encantado la cultura, los panoramas, nos habíamos enamorado de Italia. Llevábamos 2 meses en aquel hermoso lugar, Kathya y Yo habíamos  creado el hábito de coquetearnos pero sin pasar a mayores, hasta que un día pasó lo que tanto esperábamos

Kathya: ¡¡Violeta!! – gritaba desde la ducha, me asuste y corrí a verla

  • ¿Qué ocurre? – estaba asustada

Kathya: el calienta agua no funciona, el agua esta fría – hacia un puchero de niña pequeña adorable - ¿puedes arreglarlo, por favor?- me coqueteaba con sus ojitos azules

  • ¿Y qué obtengo yo a cambio? – me recosté sobre la puerta, me gustaba juguetear con ella

Kathya: Prometo recompensártelo, bonita – se acercó a mí y me susurro al oído –Sé lo que quieres y te lo doy con gusto – su mano se apodero de mi cintura, estaba muy nerviosa

  • ¿Y según tú, que quiero yo? – respondí igualmente en un susurro

Kathya: Arregla el calienta agua y sabrás que es – me beso muy, muy, muy cerca de mis labios

  • Okey… yo mejor arreglo esto y me voy – estaba nerviosa

Con mi poder pude arreglar el calienta agua (les dije que mi poder servía para muchas cosas) y me retire rápido del lugar, estaba realmente nerviosa por ese “casi beso”, me desvestí, ya era tarde y estaba cansada. Cuando ya estaba solo en ropa interior me di cuenta de que no encontraba mi pijama, lo buscaba como loca, abrí el closet, no estaba allí, las cajoneras, revolví mis maletas, mire debajo de las camas, no lo encontraba por ningún lado, me puse en pie y trate de pensar donde rayos podría estar mi pijama, de pronto escucho a Kathya desde el baño

Kathya: Que bien te vez así, ¿Qué buscas, Bonita? – estaba en la puerta del baño, con su cabello levemente mojado, y un toalla cubriendo lo necesario de su cuerpo

  • Ammm… Kathya… ¿no has visto mi pijama? No lo encuentro por ningún lado – la miraba algo avergonzada

Kathya: uf, que mala suerte bonita, la mucama se llevó hoy por la mañana toda la ropa que encontró, incluyendo los pijamas, y no los traerá hasta mañana – los decía con tono de picardía

  • ¡Fuck!, justo hoy que hará tanto frio, bueno que más da – aún seguía en ropa interior, me gire para buscar alguna otra camisa que ponerme, de pronto siento la mano de Kathya en mi cintura

Kathya: si tu problema es el frío, yo sé cómo calentarte – me abrazaba por la espalda y acariciaba mi abdomen con suavidad, erizando de nervios mi piel

  • ¿Qué… que… que haces Kathya? – estaba nerviosa pero me encantaba esa sensación, en mi interior solo quería que siguiera

Kathya: shhh, silencio, deja que yo me ocupe de esto – apego su pelvis a mi trasero, se sentía tan bien

Sentía sus besos en mi cuello, lo recorría suavemente, provocaba algo en mí que no sabía que era, sus manos se apoderaron de mi cuerpo, pasaba por mi abdomen, bajaba por mis mulos, y subía nuevamente hasta mis brazos, me giro, quedamos frente a frente, en su mirada podía ver deseo, me afirmo contra el closet, yo solo me dejaba controlar, sus labios volvieron a mi cuello, pasaba por detrás de mí oreja, mordió suavemente mi lóbulo, me hizo soltar un gemido involuntario, ella sonrió en mi cuello, le gustaba ver cómo me tenía a su merced, afirmaba mis brazos para evitar que yo me resistiera, aunque no era necesario, yo no me iba a interponer, logre zafar uno de mis brazos y afirme su rostro, la mire fijamente, ya no podía resistir más, pose mis labios en los suyos, fue un beso lento, lujurioso, sus labios eran suaves y su lengua rosaba tímidamente la mía, entre la locura de ese beso y el jugueteo de nuestras manos termine arrancándole la toalla que tapaba su hermoso cuerpo, era bellísima, sus senos eran medianos, unos pezones erectos sobresalían invitándome a morderlos, besarlos, comerlos, baje mi mirada, su abdomen plano, más abajo, me ponía nerviosa, su cuerpo me ponía nerviosa, su monte de venus totalmente depilado, pero había algo que quería apreciar más que nada, su trasero, su paradito trasero y esas piernas tonificadas, me volvía loca. Ella me despojo de mi poca ropa, y esa noche… esa noche fue mía y yo fui suya.

Al poco tiempo comenzamos a pololear… fuimos muy felices juntas, mis padres sabían y nos apoyaban, pase momentos realmente inolvidables junto a ella,  estuvimos viviendo en Italia todo ese tiempo, pero de improviso me comencé a sentir rara, algo empezó a cambiar entre nosotras, no sé si fue en ella o fue en mí, duramos 1 año juntas “Felices” hasta que sus celos me fueron alejando de ella, la quería mucho pero ya no la amaba, siempre que la besaba había algo que le faltaba, algo que dejaba una “insatisfacción” en cada beso, me sentía incomoda sabiendo que yo no la amaba, y bueno ella era tan celosa que había dejado un poco mi vida social con amigos de lado por complacerla a ella, y eso no me gustaba nada. Dejamos de ser novias pero no de perder el contacto, nos dimos un tiempo, habiendo pasado 6 meses de nuestra “separación” o más bien termino de nuestra relación, me dieron a conocer que me iban a asignar a una misión lejos de Italia y que iría con mis padres, así que me decidí a contarle a Kathya que me marcharía y obviamente lo nuestro definitivamente no tenía solución

Bueno si bien les dejo esto a medias es porque tube un leve problema, pero pronto estare suebiendo el resto, gracias por sus comentarios que me incentiban a seguir y bueno, gran parte de este relato esta basado en mis vivencias, porfavor sigan comentando que para mi es muy importante, Besos & abrazos desde Chile - <3