Vino con esencia de mujer... (1)

Vino con esencia de mujer –

(primera parte)

Día Viernes, 3 de la tarde y pensando qué hacer para olvidar toda esta semana llena de trabajo

Amo lo que hago, tengo un campo con viñedos y una bodega donde elaboro mis propios vinos, alejado de la ciudad y de todo, lo amo, pero no porque sea mi lugar de escape está exento de problemas y inconvenientes laborales.

Sólo quiero olvidar que por la ineficiencia de mis empleados perdí cientos de litros de mi mejor vino, me embarga la rabia, no por la pérdida monetaria, sino porque deseaba en ese vino transmitir un sentir, mi mejor cosecha, las mejores cepas, lo mejores aromas y sabores y por descuido de la temperatura de las cubas casi todo estuvo perdido, definitivamente, creo que habrá renovación de personal y sólo contrataré mujeres, somos las únicas capaces de ver la importancia en los detalles. Ellos simplemente abren la boca y cualquier jugo de uva les sabe igual y los encuentro borrachos descuidando lo que es mi pasión. No ven como yo las cosas, si para mí las cosas requieren tanto o más cuidado que una mujer, y estos "hombres" como cualquier mujer significa un par de pechos y un buen trasero les da lo mismo y no valoran lo que tienen más allá que un buen cuerpo, menos valorarán un vino que a mí me enloquece así como lo hizo la primer mujer a quien amé… Mi Caroline!!! (La recuerdo, no con pena, pero si con nostalgia porque ella me dio las alas para volar).

Pero mi dulce recuerdo se va cuando me vuelven a recordar lo sucedido y pido que lleven a embotellación lo poco que quedó y que no lo contabilicen para venta porque sólo será para mi consumo personal

Qué rabia, rrrr… si aún tengo ganas de golpearlo, como no darse cuenta que era mi creación, que no era cualquier cosa, que era como mi mujer especial, muchos cientos de litros dentro de mi bodega. Mi tiempo puesto en ello hacia que fuese tan importante y porque no decirlo, cada sorbo de ese vino era como saborear tu esencia, cada parte de tu ser, tenerlo en mi boca era como tenerte a ti, que aún existes sólo en mi imaginación y que acompañas cada fría noche, frente a un gran fogón en mi chimenea, tirada sobre la alfombra, con otra de mis grandes pasiones; la música y el bueno vino… Sólo me faltas tú en mi realidad

Tanta ternura y dedicación puesto en ello y por negligencia de un borracho casi lo pierdo todo.

Todo es parte de un proceso de espera lleno de paciencia, de no descuidar ninguna mata de su nutriente, de agua, y porque no decirlo, de cariño, dedicarse no por obligación, sino como una pasión, hasta que llegado su momento te entrega aquel regalo, su fruto con el cual puedes llegar al resultado de algo capaz de embriagar tus sentidos, de hacerte cerrar los ojos como llegando a un orgasmo sólo con sentir su aroma y su sabor… Amo los vinos tanto como a las mujeres, mi dedicación y mi tiempo puesto en ellos me han demostrado que son lo único que me hace tener lo mejor, como dijo el Principito:

"El tiempo que he dedicado en mi rosa hace que mi rosa sea tan importante"

OK. Fernanda olvídalo, piensa que es simplemente otro amor arrebatado, ya deberías estar acostumbrada ¿o no?. Quedaron unos cientos de litros que serán como los recuerdos, no lo son todo, pero tienes el dulce sabor de haberlo creado y que es sólo tuyo

Necesito salir de acá, mi campo, mi naturaleza es mi refugio, pero por hoy no quiero estar acá, el lunes espero tener otros sentimientos, sino no sé… no respondo de mí. A ver, veamos las alternativas para este fin de semana:

Salir a beber algo… mmm...… (pienso) para qué si puedo hacerlo en casa

Salir con alguna amiga… (Amiga??? En realidad sólo tengo una, las demás son sólo arribistas que se acuerdan cuando necesitan un favor o piensan que aún puedo ceder a un par de miradas calientuchas. No merecen que ni les llame, tampoco estoy tan necesitada de compañía o sí???

Que rabia, Fernanda admítelo -me digo a mi misma- estás sola y por más que evites a Alejandra es la única que sabes que te quiere y te estima por como eres no por tu situación económica o porque estando contigo puede tener mejores posibilidades en la vida, al contrario, jamás recibiría algo de mí, ni siquiera tu amor

Pensándolo dos veces tomo mi móvil y marco, pero antes que comience a sonar corto y mi estómago con un nudo de sentimientos. Tan patética soy que ni siquiera por teléfono logro no sentir algo por aquella mujer que me tiene loca, pero nada puedo hacer, sólo seguir siendo amigas. Soy demasiado tímida para enfrentar mis temores y decirle que la amo, la quiero ver bien y no quiero verla dañada, menos ser yo de causarle otro dolor… ay no sé… ya! Fin de la historia, no la llamaré.

De repente suena mi teléfono y por los pensamientos de hace un momento ni siquiera miro a ver quién era, para mi sorpresa escucho su voz, OH Dios, que dulce voz tiene esta mujer (pienso) y pensar que es así de tierna para todo (me refiero a su vida diaria, no sé en la cama, ay ya sola caí, me sonrojo, que atroz), me derrites Alejandra

Al otro lado del teléfono Alejandra insistía:

Alejandra : -Alo? Fernanda, estás?

Fernanda : Eh sí, hola perdón, tengo mi cabeza en muchas cosas. ¿Cómo estás ingrata?

Ale : Perdón amiga, mucho estudio y sabes que entre que no duermo mucho y paso otro tiempo dopada no me queda mucho de lucidez. Necesito un descanso urgente

Atendiendo a su comentario Fernanda olvida su verdadero sentir y sabe que aún ocultando su amor lo pasarán bien, Alejandra es una mujer muy interesante con mucho tema de conversación y además divertida, claro eso sí siempre y cuando esté sin su depresión que casi absorbe la mayor parte de las horas del día

Fernanda : Oye, estaba a punto de llamarte para proponerte algo.

Alejandra : Dime, a ver si logras algo de motivación.

Antes de seguir con la conversación pienso que mejor será sorprenderla

Alejandra : Aló Fernanda? Qué pasa mujer que de repente de dan tus lapsus y te quedas en silencio

Fernanda : Perdona amiga, pensaba en que tengo algo pendiente y saldré tarde hoy, pensaba ir a verte y salir pero lo siento, mañana mejor te parece?

Alejandra : Mmm...… por qué mejor no te sinceras y me dices que saldrás con alguien, algún amor del que no sepa Fernanda?

Fernanda : (si tú eres mi único amor pienso mordiendo mi labio…) No cómo crees, tu sabes que no ha llegado la acertada.

Alejandra : No sé… conociéndote Fernanda y siéndote tan sincera como suelo ser, te digo que no entiendo cómo puedes ser tan caliente y estar sola

Fernanda : Jajajajá… hay amiga me da risa tu sinceridad… ¿tanto síndrome de abstinencia irradian mis poros…?

Alejandra : Jajajajá… no, no es eso, pero eres preciosa, tienes una excelente situación social y económica, eres una mujer con mucho mundo cultural, inteligentísima, puedes tener a la que quieras y a las que quieras y estás sola. Además que ambas nos conocemos hace mucho y no me puedes negar que eres bastante sensual, si se te nota en la mirada cuando salimos y las otras llegan hipnotizadas por esa mirada que tienes

Fernanda : Ay Alejandra como eres mujer… Sabes que me encantan las mujeres y bueno, de repente soy tan insegura y necesito tasarme a la mejor postor, pero lástima que nadie paga el precio tan alto que cuesta llegar a mis labios

sabes que me vuelvan locas las que me desafían mentalmente, aunque sólo se queden en su mejor intento.

Saber atraer mi atención para algo más que una simple conversación.

Que no intente tocarme desesperadamente al primer encuentro, que sabes que lo detesto y me da por arrancar. Soy a la antigua, me gusta el cortejo, las miradas, los roces… Calentar el agua como tú dices amiga

Alejandra : Para que calientas algo que no has de comer Fernanda, si más las atraes, eres como algo prohibido y mientras más limitantes pones más te siguen y luego te molestas cuando tu celular no deja de sonar.

Fernanda : Jajaja… me conoces tan bien pequeña, (con un poco de modestia) pero sabes que me gusta ver que no pierdo mis encantos, pero nada más, sabes que esperaré por mi mujer especial

Alejandra : Hay Fernanda, eres tan… de repente me das rabia no entiendo esa postura de caliente que tienes por la vida, de mostrarte una mujer imparable y por otro lado me encanta esa ternura con la que esperas que tu primera vez sea especial y no por simple calentura, sino por amor y con tu "Princesa de cuentos"

Fernanda : Ya, (pongo un tono serio) fin de la historia, nos vemos mañana entonces, un abrazo y te pasaré a buscar a la hora de siempre. Cuídese.Bye. -Cuelgo-

Como siempre tan detallista, sorpresiva y loca tomo mi celular y llamo a Juan, quien cuida mi casa en la playa, para que tenga ordenado y condicionado todo para 2 personas, ah y que no olvide dejar todo encendido, que llegaremos como las 10 de la noche, no creo que antes.

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Por otro lado Alejandra se quedó en su cama recostada, mirando su techo, pensando en Fernanda. Siempre sentía como que algo en su corazón se exaltaba cuando Fernanda andaba con sus cosas raras y pensaba si habrá conocido a alguien o por qué fue tan cortante al final, en fin pensó después, no era de su incumbencia, pero sólo quería verla feliz y no quería que nadie la dañara, sino defendería "su niña" (como le decía siempre), con sus propias manos de aquella que osara hacer que de ella brotara una lágrima. Fernanda jamás había estado con una mujer, pero sí tenía un camino lleno de espinas en este aspecto, pero amaba la forma que tenía de no darse por vencida ante el amor, no como Alejandra, que ya pensaba que jamás volvería a amar

No sabía cuánto rato llevaba pensando en mil situaciones, cuando de repente suena el timbre y abre:

Fernanda : ¿Estás lista?

Alejandra : (mirando muy sorprendida) y tú… no tenías tanto que hacer, mentirosa… (Sonríe y se lanza a abrazarla).

Fernanda sólo sonríe, porque logró su objetivo de sorprenderla, pero aún faltaba

Fernanda : Tienes 5 minutos para armar un bolso con algo de ropa, porque nos vamos a la playa, necesitas un pequeño relax y yo también. Puedes llevar lo que quieras, menos tus pastillas, te quiero lúcida para que disfrutes.

Alejandra : Pero Fernanda, porque no me avisaste con la llamada, pucha… es que

Fernanda : Es que nada, por eso no te dije, porque sé que eres de las que si piensa mucho las cosas al final dices que no, así que te quedan 4 minutos y ni lo pienses… ve

Alejandra sólo me sonríe y va a ordenar sus cosas rápidamente, ya que sabe que si su amiga dice 4 minutos, tal vez sean 3

Mientras tanto espero me percato de la presencia de mi "suegra" como le digo de cariño a la mamá de Alejandra. La estimaba mucho y la señora me estaba muy agradecida ya que cada vez que Alejandra estaba conmigo volvía con nuevos aires que la alejaban de su maldita depresión por algunos momentos.

Fernanda : Suegra querida, ¿Cómo está? (me lanzo a abrazarla fuertemente)

Mama de Ale : Ay Fernanda, el gym cada día te tiene más fuerte a ti, no me aprietes tanto que sabes que mis huesos no son como los tuyos

Fernanda : OH, perdón (le digo avergonzada) perdón Sra. Angélica, es que sabe que la quiero mucho y admito que la he extrañado bastante.

Sra. Angélica : Yo también mi niña, pero ¿por qué te has perdido tanto?... ¿Estás con alguien Fernanda?

Fernanda : No señora Angélica, usted sabe que no busco, que mi amor llegará o nos encontraremos, pero el amor no se busca, no se fuerza

Sra. Angélica : Así es Fernanda, que lindo piensas y sientes, ojalá Alejandra hubiese encontrado una mujer como tú y no los "tormentos" que ha tenido como pareja… pero como tú dices, no hay que forzar el amor, tal vez algún día llegarán a estar juntas, me encantaría, hacen tan linda pareja

Fernanda : Sra. Angélica, no se tome tan en serio lo de suegra eh! (digo bromeando, pero cómo me gustaría en realidad estar en los brazos de esa mujer)

Sra. Angélica : Fernanda, no te sonrojes mujer… Espero no te haya molestado mi comentario.

Fernanda : Lo siento, sabe como soy, a veces mi cuerpo reacciona irracionalmente. Tanta inteligencia y no puedo frenar sonrojarme. Además sabe que con usted es imposible que me enoje.

Tengo dos cosas que me delatan en muchos aspectos y que doblegaban mi actitud de mujer fuerte e infranqueable. Una de ellas era que dentro de mi desplante soy bastante tímida, raro debe verse con los comentarios que hizo Alejandra de ser tan "fogosa", pero es cierto y cualquier cosa me hace sonrojar y lo otro… (Bueno más adelante se detallará)

Por fin llega Alejandra, así que tomo sus cosas para llevarlas al auto, (como te amo padre querido por darme el buen gusto por los autos y el vino) y me despido con un gran abrazo de la señora Angélica, pero recuerdo que le traía un detallito, así que voy al frente y se lo traigo y es recibido con mucho agrado, no es ningún sacrificio de mi parte, sabe que la estimo mucho y este es mi segundo hogar.

Alejandra abrazaba a su madre cuando hice avanzar lentamente el vehículo, así que tuvo que acelerar la despedida y subir rápidamente.

Viernes, 19 horas. Sin saberlo tomamos rumbo a lo que será un fin de semana que quedará en el recuerdo de ambas por el resto de nuestras vidas

Fernanda

Somos amigas desde hace un tiempo y de un comienzo hubo una química especial, contagiosa y excitante, que hizo que nos comunicáramos a diario por medio de e-mail. Además de que la distancia era un impedimento para vernos a diario o cada vez que quisiéramos, ya que éramos de distritos diferentes, cosa que nos distanciaba 2 horas aprox., en vehículo la una de la otra, pero el teléfono o el Internet manteníamos el contacto cuando no podía viajar a verla, ya que a mí me era más fácil ir a su encuentro.

El sexto sentido de una era tan agudo como el de la otra y en ocasiones, por medio de presentimientos sabíamos cuándo nos necesitábamos (como amigas). Tal vez que estuviéramos enfermas o que tuviéramos una baja en nuestras defensas emocionales.

Yo tengo 26 años y por un lado una familia con mucho poder económico, por otro lado lo suficientemente ocupados como para enseñarme a demostrar amor o saber expresar mis sentimientos.

Sé que aman y soy la luz de sus ojos, pero en su momento el protegerme tanto me bloqueaba y me hacía actuar de muy mala forma y por otro lado no les sirvió de nada ser "de mundo" como decían ellos, si eran cerrados de mente en cuanto a la homosexualidad, enseñándome de muy pequeña que Dios no se llevaba a personas pecadoras como ellos al cielo, que eran sucios, pervertidos y que jamás debía acercarme a ellos porque podían abusar de mí… siempre habló de "ellos" al género masculino, pero no al femenino, tal vez ese fue su error… Padre, es tan malo escupir al cielo, el escupo te puede caer en la cara

Soy la menor de tres hermanas y la única felizmente soltera. Mis hermanas se casaron cuando yo era bien pequeña y se fueron de casa. A estas alturas pienso que se casaron jóvenes para marcharse simplemente, sus maridos no son tan patanes, pero tampoco unos santos. Pero sí agradezco a Dios por los pequeños que me dieron por sobrinos, el mayor tiene casi mi edad, pero ya casado, otro 23 años y también casado, pero los 3 restantes tienen 11 años, dos que son gemelos y el otro de mi otra hermana, sólo por 2 meses mayor a los gemelos, si parece que se pusieron de acuerdo en hacerlos. En fin, mis bebés son como mis hijos, ellos los crían y yo los malcrío, saben que lo tienen todo, pero si se portan mal también lo pierden todo, así que conmigo no hay gritos, pataletas, ni nada de eso, un ejemplo de niños, pero mis hermanas se hartan con ellos porque dicen que juntándose los tres hay que esconderse de sus travesuras…. Debe ser mi parte niña que no desarrollé bien, porque si nos juntamos los 4 las travesuras son más intensas, se les olvida que es la tía y es la compañera de juegos a la que de repente hasta alguna patada le ha llegado, pero como buen niño hay que olvidar de inmediato (pero luego lo morado de mis piernas me hace recordar que ya no soy niña y que el futbol no es lo mío).

Me crié sola y con los cuidados y sobreprotección de ser la menor, además de que llevaba el estigma de que a mi hermano lo hubieran asesinado a los 19 años. Entraron a la casa de campo donde estaban mis papás de vacaciones y los perros ladraban bastante. En eso llega el capataz y dice que se siente que anda gente, mi padre toma una escopeta que mantenía siempre a la entrada y sale a ver, no percatándose que mi hermano lo acompañaba. Al final no era un tipo ni dos, eran como 9 que venían a robar ganado y caballos y se aprovechan de la oscuridad para apuñalar reiteradas veces a mi padre y a mi hermano. Mi padre quedó gravemente herido, pero luego de un par de días en coma volvió en sí y lo primero que hizo fue preguntar por mi hermano y mi hermano murió esa misma noche, en la clínica no hubo mucho por hacer, le habían perforado el pulmón y el corazón con tantas estocadas, aparte se acentuó todo por la cantidad de sangre perdida, ya que la distancia era bastante del campo a la ciudad.

Con este fatídico hecho mi padre comenzó a beber y perder el sentido de la vida, no llegaba a dormir y andaba como aislado de todo, quedó casi en la ruina mi familia, pero luego de 3 años de dar vueltas se dio un chance para retomar su vida o por lo menos intentarlo, tenía 2 hermosas hijas que aún eran pequeñas, una tenía 11 y la otra 16, pero lo que sí estaba claro es que no volvería a tener hijos, ya que estaba el dolor de una pérdida y no soportarían volver a pasar por algo parecido, pero al año después de esa decisión nazco yo, (supongo que fue producto de las reconciliaciones).

Desde pequeña fui muy precoz, pero por los temores y sobreprotección de mis padres, no pude ser muy sociable, ya que ellos me impedían hacer de amigos, porque según ellos, eran una mala influencia y que no había que confiar en nadie, salvo en los niñitos ricos que llegaban a las cenas de mis padres, que eran tan desagradables que solo los veía llegar y le pedía a mi nana ir a mi pieza.

Tuve una infancia tranquila, pero a la vez muy dura, ya que no podía compartir con nadie mis sueños de niña, mis fantasías, como tampoco las muchas tristezas que contenía mi alma, mis padres me decían que los débiles lloraban y que yo debía de ser fuerte, jamás demostrar mis sentimientos, o sino sería manipulada fácilmente como marioneta para los demás. Y por lo visto era la regla general, porque si no es por mis hermanas jamás me entero que tuve un hermano, en casa no se tocaba el tema, tampoco pregunté jamás a mi padre el por qué cuando estaba de torso desnudo en la piscina, tenía tantas cicatrices en su espalda, ni siquiera una foto de mi hermano había en casa, era un tema tabú. Así que había que seguir con la enseñanza familiar de no demostrar sentimientos. Así fue, ni siquiera mi madre me vio llorar, aunque rara vez lo hacía y cuando no podía contenerme más, esperaba que ellos se durmieran y me encerraba en mi cuarto y explotaban mis rabias y la soledad que me afligía en esa tremenda casa y sin nadie con quien compartir.

Al ingresar al colegio, era un ejemplo de autodisciplina, cortesía, seriedad y fortaleza, cosa que a mis imberbes compañeros no daba mayor agrado, ya que era la niñita adora del plantel docente, tanto por mis antecedentes como persona, como por mis calificaciones, respaldada además por la autoridad que inspiraba el apellido de mi padre; el señor Francisco Javier Ferrer. Cómo poder portarme mal, si era la hija de mi padre...

Por fin me encontraba envuelta en un círculo social, pero ahora era yo quien no me permitía juntarme con mis compañeros, los encontraba tan infantiles, tan torpes y mis ratos de descanso eran compartir con algún profesor sobre literatura o arte, cosas que sabía simplemente porque sola no tenía mucho que hacer en casa y gracias a los cuentos nocturnos de su madre aprendí a leer a temprana edad y me sumergí en un mundo que eran mis fantasías y ensoñaciones.

En esos mundos tenía mil amigos, pero no esos niñitos petulantes que acostumbrada a ver, sino aquellos que no sabían de dinero ni mansiones, la regla general era sólo disfrutar. Había enormes castillos, dragones, príncipes, princesas, cabalgatas a caballo y todo lo que pudiera imaginar y cada libro que tenía la biblioteca de la casa fue aumentando mi capacidad de imaginar y de sentir.

Como parte de los viajes familiares y las muchas lecturas, hablaba fluido 4 idiomas (español, francés, inglés, Portugués), a mis 10 años ya sabía de platón y Aristóteles, conocía de aquel Dios que mis padres negaron cuando murió mi hermano y así infinidad de cosas que para cualquier niño hubiesen sido sólo cosas de grandes. Por suerte mi mente y mi conocimiento no lo pudieron limitar mis padres, aunque si se hubiesen dado cuenta de mis pensamientos y hubiesen sabido de mis amigos imaginarios, tal vez me hubiesen llevado al sicólogo para bloquear también esos pensamientos para que no me dañaran.

Tanto dinero, tanto status y la crianza con la clara intensión de ser nada… sólo una mujercita tonta que sería muy educada en el día a día, para a penas salir del colegio casarla con un tipo millonario prepotente, que en el día fuera una dama y en la noche la hiciera sentir una pu… A esa edad tal vez no era muy prudente haber leído ese tipo de libros, pero para mí todo era válido como pensamiento o idea y quién sabe, quizás ese sería mi destino, pero lucharía por algún día ser libre, amaba a mis padres, sé que sus cuidados eran por amor, pero algún día sería la protagonista de uno de mis libros y me iría de casa a conocer el mundo y saber de un sentir verdadero, no tan sólo de lo que aparecía en los libros de un tal Freud que aparte decía que la homosexualidad era una enfermedad que había que tratar con electrochoques… homosexualidad, mi padre hablaba muy mal de esa palabra y al fin y al cabo de esas personas, espero cuando realmente conozca su verdadero significado no pensar lo mismo que él, pensé en su momento.

Con el correr del tiempo, llegó la adolescencia. A la etapa más complicada y donde mis hormonas se revelan producto de mis fantasías y bueno la etapa que forma a todo niño o niña, a esta edad fue el descubrimiento con el sentir, con el compartir, pero también con sufrir mi primera decepción con las personas.

Supe a esa edad lo que era sentir atracción por el sexo opuesto, o sea a lo que se llama hombre, como también aumentar mi círculo social o quizás hacerme de uno al comenzar a juntarme con un grupo de chicas de mi salón, que poco a poco me iban haciendo ver lo mucho que me perdía de la vida.

Había encontrado a mi "primer amor", pero mi timidez a no saber expresar mis sentimientos me impedía acercarme a él. Sé que no se burlaría de mí, pero no tenía el valor de acercarme si quiera. Además que me intimidaba con su mirar, ves que se cruzaban nuestras miradas, él casi me comía con sus ojos, pero tampoco se acercaba por la reputación de niña perfecta que tenía… Todo aquel que llegaba embobado en plan de conquista se iba con su cola entre las piernas, porque mi conocimiento, mi cultura, mi mundo los dejaba sin tener qué contar o qué decir, sin querer los hacía sentir poca cosa y para los hombres no hay una lucha de conquistar una mujer, si se da fácil bien, sino venga la otra y listo. Para nosotras toda la vida es una constante lucha, para empezar con nosotras mismas, luego con los demás.

Un día en particular me sentí muy sola, la novela acabada era de un amor imposible que venció mil obstáculos y al final él muere y ella queda sola y con todo ese amor, así me sentía yo, sola y con mucho amor por querer entregar pero no sabía cómo, era muy notoria mi melancolía y no sé qué pasó (baja en mis defensas emocionales) que primera vez que contaba algo íntimo a una de mis amigas y fue cuando supe lo que era la traición, mi primer traición.

Se llegó la última fiesta de final de año y ahí estaba él, mi príncipe, pero de repente alguien llega y lo besa, que perra digo yo y me fijo bien y es mi amiga, simplemente yo calentaba el agua con las miradas y ella se lo comió, así de vulgar pero francamente así fue

Seguí ahí, mirando el espectáculo, fingí no sentir nada, pero en mi interior quería salir corriendo de aquel lugar, llegar a mi pieza que era mi lugar especial, mi guarida, mi refugio y comenzar a llorar, pero no me di ni cuenta cuando no les despegaba la mirada, y primera vez que me fijaba en esas piernas hermosas, bien apretaditas producto de tanto deporte que practicábamos, si al final educas la cabeza, pero estos colegios riquitos te forman también un cuerpo que te dará dinero de una u otra forma, en fin, ella sé que lo usaría con fines económicos, por no ser más fuerte en mi comentario (perra!!!) … pero me gustaba lo que estaba viendo, morboso pero cierto. Usaba su falda tan corta que no dejaba mucho a la imaginación y esa camisa blanca abotonada que translucía su brassier de encaje blando y es más, recordé que en más de una ocasión al conversar no escuchaba qué me decía, pero sí miraba por entre su ropa esos tremendos pechos que la hacían casi irresistible para cualquier hombre y ahora por lo visto irresistible también para una mujer.

Dentro de mi rabia, noté que ya no era por ella, sino por él, cómo se le ocurría ser tan asqueroso para besar si casi se la comía, que asco pensé, si escurre la saliva, y ella cómo no sabe lo que es un buen beso, y si le enseñara pensé, de repente caigo en el hecho de todo lo que estaba sintiendo, lo que mi padre tanto odiaba, lo que Freud tanto criticaba; lo que Dios jamás perdona; "homosexualidad", estaba mirando con deseo a mi amiga

Quedo helada, estática y no lo podía analizar mucho, soy lo suficientemente inteligente para entender qué ella me gustaba y que me gustó de la primera vez que la vi desnuda en los vestidores del colegio luego de hacer deporte. Recuerdo como esa vez sentí una rara sensación en mi vagina y luego de ir al baño, ahí estaba, empapada de algo pegajoso como goma, me sentí spiderwoman Jajaja… obviamente antes ya me había sentido y visto así, a esa edad uno ya comienza a tocarse y a descubrirse más íntimamente, pero lo que me sorprendió fue la circunstancia, ahora entendía; me había calentado con mi amiga; Sale de las duchas, mientras yo termino de cerrar mi camisa, de repente estaba ahí, frente a mis ojos, totalmente desnuda. Descaradamente me dedico a observarla de pies a cabeza, unas piernas largas, bien ejercitadas, un trasero apretadito, redondito, para mejorar el momento se voltea y su vagina lucía dando un aspecto de mucha preocupación, tenía la línea del bikini perfectamente rasurada, pero en el medio una pequeña mancha de bello cortado, pero no depilado en su totalidad, su color era rubio como su cabellera, se translucía la línea de entrada a su vagina. Su abdomen bien marcado y definido, y sus pechos… ufff...… entre envidia y placer (acaso no han sentido excitación por alguien que tiene tremendos pechos y luego las embarga un sentimiento de envidia porque uno no tiene tanto la bendición de Dios por ese lado), de repente me habla y pufff...… reacciono y ella me mira asombrada, quizás cuánto rato que llevaba viéndola, pero ella sólo rió y me dijo si acaso ahora me gustaban las mujeres y sólo reí mientras bajaba mi rostro rojo avergonzado.

Ahora volvía a hacerse tan presente ese momento, con todos esos detalles y definitivamente era yo la que la que sólo quería cambiar de lugar con ese patán y enseñarle lo que era un beso, pero de nuevo ahí estaba la Fernanda analítica diciéndome que cómo enseñaría si sólo sabía besar mi almohada… RRRR… que rabia, mente moralista, y otra vez habla y me dice mi cabeza: -atina! Es MUJER y tú eres MUJER=

Mujer + mujer + excitación; ERES LESBIANA!!!

Eso me lastimó, vi la cara de mi padre con la primer y más fuerte desilusión de su hija pequeña, la luz de sus ojos; lesbiana, lo que él tanto asqueaba

Ahora, estaba por cometer la primera estupidez de mi vida por seguir un camino que no era el mío

No salí corriendo como sería lo más lógico, me fui donde un grupo de muchachos, dentro de esos todos habían intentado ligar conmigo, ninguno lo logró, hasta ahora… No me di ni cuenta cuando ya estaba en los brazos de uno de ellos, lo besé no tiernamente como deseaba besarla a ella sino fogosamente, pero estaba caliente por ella, me la imaginé así entre mis brazos, pero desnuda, como la vi en esa ocasión, sentí como me mojaba aún más recordar eso. No me di ni cuenta de cuánto rato había ya pasado y estaba en un rincón oscuro y de repente siento una mano tocarme de una forma poco sensual, brusca y torpe buscando mis pechos y salgo de mi ensueño, abro mis ojos y este muchacho intentando meter sus manos bajo mi blusa, eso acabó con la pasión, con el calor, con todo, y sus besos ya me fueron desagradables y sólo lo dejé ahí, sin explicación, sin nada, sólo mirando que me alejaba, dejándolo "notoriamente" excitado.

Cambio de colegio, inicio del ciclo mayor… todo un largo verano para olvidar el gran espectáculo de mi vida. Luego de ese show sólo motivé que los hombres me siguieran por semanas, pero se encontraron con que fue una muestra gratis de algo que jamás se volvería a repetir.

Pronto paso a un nivel más de adultos y con esto al inicio de los mejores años de colegiatura. Por cosas del destino, quedó en el mismo curso con Claudia (amiga del otro nivel, que también era preciosa, como no ser caliente con la generosidad de Dios en esos cuerpos (Las cosas que digo "síndrome de abstinencia, debo omitir estos comentarios) Y como era la única que conocía, comenzó una estrecha amistad y confianza.

Estaba en la etapa más difícil, mis sentimientos eran raros y confusos, no comprendía muy bien lo que sentía, ni por quién lo sentía. Además de que había un compañero de curso me estaba enamorando por medio de hermosas y profundas cartas, primera vez que sentía la sutileza y suavidad de un hombre a través de sus palabras, pero más que todo me enternecía en vez de sentirse provocada.

Estaba confusa, no sabía qué responderle, porque por otro lado mis sentidos estaban puestos en Claudia, que no estaba del todo bien, pasaba un muy mal momento amoroso con un patán que jugaba a quererla pero le sacaba celos besándose con quien Claudia más detestaba, pero aún así, desvalorizada como mujer ella seguía igual con ese desgraciado.

Matías, el muchacho que me cortejaba, sentía una gran atracción por mí y yo igual lo miraba y lo encontraba atractivo, no lo puedo negar; era bastante alto, con un cuerpo musculoso, pelos en pecho, una barba bien definida y marcada, pero siempre bien afeitado. Me encantaban esos hombres grandotes que daban la impresión de ser bien machos, pero en cuanto a sentimientos no sabía muy bien lo que sentía.

Tercer grado, a sólo uno de salir ya para entrar en la universidad y comienzo a hacer de las mías… Se confundieron ciertos sucesos y Claudia injustamente me culpa de traición.

Lo que más me dolió no fue todo lo que se dijo de mí, sino que ella lo creyera, sabiendo cómo era yo de sincera, jamás le había mentido ni lo haría, ni a ella ni a nadie, pero prefirió confiar en unas desconocidas y no confiar en mí… cómo se le ocurre creer que yo había querido estar con ese tipo con el que salía, aquel noviecito que tiene, si ni siquiera alguna vez cruzamos miradas. Junto a problemas que tengo en casa con mis padres por mi rebeldía, por querer dejar de ser una autómata dependiente de sus reglamentos, me paso castigada, el auto retenido, el Internet cortado y ahora Claudia que me odia, todo esto me produce una explosión de emociones que me hace estallar y mi más temido sentimiento se volvió realidad; me veo en el sicólogo con mis padres.

El diagnóstico inicial nada alentador, además de decirle a mis padres que yo no ayudaba mucho y que me derivaría al siquiatra para que me medicara por temor a que atentara contra mi vida

Pasan los meses, casi no voy a clases, paso dopada sin sentido de tiempo, lugar ni nada, menos un sentir. Sólo voy al colegio por inercia cada 3 meses a dar exámenes libres, lo que no me significa gran sacrificio y seguir siendo la mejor del curso, pero ya no me importa nada, Claudia pasa por mi lado, la estela de su perfume deja su halo de indiferencia a su paso. Como duele la traición de una amiga pensé. Llego a casa y mi nana esperando a dar mis tantas "medicinas" que me hacían dormir 2 días seguido. Recibo el medicamento y saco otras pastillas más sin que se percatara, que luego las tomo en mi pieza.

De momento recuerdo al siquiatra que les dijo que mantuvieran ocultos los medicamentos, que eran drogan bastante fuertes y yo estaba en lo máximo de dosis, así que ni una dosis más, menos hacer mezclas con unas pequeñitas de color, que eran las fatales (el veneno viene en frasco pequeño). Mi cabeza daba vueltas y sólo aparecía la imagen de Claudia alejándose de mí, algo en mi, supongo lo poco de conciencia que me quedaba, me habla al igual que la vez anterior advirtiéndome que de una simple amiga no se sufre tanto y me digo: Fernanda, te enamoraste de Claudia

Segundo sentimiento tan fuerte que tenía y hacia otra mujer, que sucedía o tan sólo era que no dejaba que un hombre me desafiara, ¿por qué los encontraba tan tontos, monótonos, predecibles y vacíos?, ¿porqué sentía que sólo una mujer me desafiaba intelectualmente y me producía este sentir y de nuevo mi padre… mi madre… desilusión… pena… sueño… dolor en el pecho, no lo soporto… desmayo… silencio….

Sin abrir los ojos siento un bip, bip, bip, algo frío mi cuerpo, mucha gente a mi lado, 5 ml de esto, 3 de esto otro – escucho -. Un tubo en mi boca… desesperación… agitación… mi corazón va a explotar… ahora el bip, bip, bip es más rápido e intenso (no es el correcaminos por si acaso… perdón, sigo con la historia) pierdo el conocimiento de nuevo

Despierto y mi padre a mi lado, intento incorporarme, mi cabeza está muy mareada y él me dice que no me mueva, que estuve muy mal y que no debo agitarme. Tontamente me atrevo a preguntar qué pasó ¿Qué pasó? Mi padre me explica que cuando ellos llegaron a casa yo llevaba horas sin salir de la pieza, cuando fueron a verme estaba inconciente y mi corazón a mil, me llevaron a la clínica y mi nana sólo dijo que me había dado la medicina, pero recién ahí se percata que yo había sacado las pequeñitas fatales y tanta dosis produjo que mi corazón quisiera salirse, pasó mucho tiempo desde el momento en que me las tomé hasta que se dieron cuenta y ya estaban en mi cuerpo, no había cómo lavar el estómago, sólo había que esperar que mi corazón no quedara dañado. Dios me ama tanto, que mi corazón ya estaba bien y pude volver a casa, por lo visto no soy lesbiana y quiere darme otra oportunidad, porque sino y como me enseñó mi padre me hubiese dejado morir, total… una pecadora menos

Matías no se despegó en ningún momento de mí mientras estuve en la clínica, recordé mis últimos pensamientos hacia Claudia y decidí darle una oportunidad a Matías para aclarar mi cabeza y no hacer más daño a mi padre, ya suficiente tenía con mi intento de suicidio.

Ya al año siguiente y último, me doy cuenta que estaba "aprendiendo" a amar a Matías, que aún se la jugaba por mí, hasta el momento eran sólo conversaciones y luego de un beso, supimos que estábamos hechos el uno para el otro. Nos excitamos a tal punto que nos fuimos a un motel y tuvimos sexo toda la noche………. Noooo, no esperen eso (por lo menos no en esta historia) no fue así, ese beso fue en mí el momento más excitante hasta ese momento, pero al juntar los labios y sentir su saliva, y su lengua intentando examinar completa mi boca produjo que lo empujara, sintiendo asco y salí corriendo, mientras dejaba a Matías cuestionándose qué había sucedido.

Mientras caminaba sin saber a dónde, pensaba en ese sentir, quería solo lavar mi boca, tenía nauseas, OH Dios, cómo podía quererse a alguien, sentir que te excitaba o creer que me excitaba y luego que su acercamiento me dé asco.

Ya por finalizar el año antes de entrar a la universidad, llega una niña extranjera, que con sólo ver esas largas piernas entrar al salón, su falda tan corta, su abdomen notoriamente bien definido y aquel rostro… ufff...… siento como me excito y mi entrepierna se humedece, mi cabeza me dice ¡Despierta Fernanda!, jamás había visto a alguien tan bella.

La maestra la presentó al curso, en mi mente sólo algo vago y lejano dicho a la distancia de que venía de Estados Unidos, pero que nació en Berlín, que por el trabajo de su padre viajaba mucho, lo cual posiblemente este lugar sólo fuera un puerto más antes de embarcar rumbo nuevamente, pero en mi cabeza nada de eso tuvo el sentido que debía tener y la maestra le dijo que se sentara donde hubiese lugar disponible.

OH Dios, viene para acá! es el único puesto disponible a mi lado, y para peor siento mi rostro ardiente, maldita sea, me ruboricé y ella no mira su lugar, sino que me mira de fijo y para peor, ahí estaba mi otro gran detalle, cada vez que veía una mujer hermosa mis pezones se ponían duros, notoriamente excitados, como si pusieran hielo en ellos, y con ella primera vez que me daba cuenta el porqué sucedía. Siempre notaba que andaban así, pero hasta ahora entendí el motivo (que caliente no!!!)

Al llegar a mi lado sólo se para y me siento pequeñita, baja hacia donde estoy sentada y posa sus labios sobre mi rostro, y yo sin poder articular palabra, hasta que no sé de dónde aflora un tímido e imperceptible hi!!! (En inglés? ¿por que la saludo en inglés si ya sé que habla español?, pero viene de EE.UU. ay cabeza mía no me ayudas mucho) y ella sorprendida me dice: Hi, how are you? – Fine, thank you!!! (Ese fue mi aporte comunicativo, nuevamente pienso, porque no decirle hola cómo estás en español…)

Caroline, ese es el nombre de aquella pequeña. Ella transformó mi mundo. Al igual que yo había viajado bastante, sabía mucho de cultura y de todo, pero para mi sorpresa y nuestra conversación preferida era sobre sexo… esto último me gustaba, al final sólo jugábamos respondiendo preguntas con supuestos, porque jamás ninguna había estado con alguien.

Comencé a ir a su casa y sus padres me amaban, la dejaban que se quedara en la mía, veíamos películas hasta muy entrada la noche y luego nos quedábamos ahí mismo, de repente despertábamos abrazadas pero ya ninguna se sorprendía de ello, había tal confianza que con ella no me ruborizaba (no sé qué pasaría con mis pezones, me tenían sin cuidado, nada me importaba con ella a mi lado).

Dentro del salón de clases el rumor de que éramos lesbianas y pareja, comenzó a sonar en todos ellos, y cuando sus miradas eran más punzantes ella tomaba mi rostro con sus dos manos y se acercaba tan lentamente a mis labios, que todos esperaban con morbo ese momento, cuando ya estando a milímetros besaba mi mejilla… (Buuu…) cuando volvía a la lucidez de lo ensimismada que me dejaban sus juegos ahí estaba, el rostro de Matías que me miraba celoso y notoriamente apenado (como soy tan desgraciada…). Luego del intento de beso que me dio asco, jamás lo volví a mirar al rostro. Mi incapacidad de expresar un sentir no me dejaba hablar con él y preferí sólo acallar lo que sucedió ese día.

Estando en un momento en mi casa Caroline, comienza a decirme que su papá tal vez nuevamente se vaya, que escuchó que lo trasladarán nuevamente. Un nudo se hace en mi garganta no quería que se marchara era lo más cercano a una amiga que había tenido y tal vez más que aquello

Ella me devolvía de nuevo las ganas de vivir, de sentir, de dejar mi rebeldía de lado. Se me fue la depresión, la tristeza y todo lo malo y nació de Fernanda una hermosa mariposa salida de una crisálida que casi la hace morir. Ella me quiso tal cual como yo me veía a mi misma, ser la Fernanda que todo lo sentía intensamente, que amaba, pero que los demás odiaban por su actitud de niña perfecta. Con ella no tenía miedo de recorrer el mundo de su mano, soñábamos con viajar juntas, comprar una casa en el campo y otra en la playa, e ir un fin de semana a una y al siguiente a la otra. Tener varios caballos y mucho terreno donde cabalgar, además la casa de campo tenía que tener en sus terrenos un río pero alejado, donde pudiéramos estar solas; ella y yo

Las lágrimas me fueron inevitables, primera vez que lloraba delante de alguien y ella lloraba conmigo, no te vayas le dije, quédate conmigo, sabes que mis padres te adoran, al año siguiente nos vamos a la Universidad y seremos libres de vivir y hacer todo lo que hemos soñado. Ella sólo lloraba y me apretaba tan fuerte como queriendo sacar mi corazón para llevárselo consigo, nos miramos y no lo podemos negar, nos queremos, y no es amor filial, nos amamos como mujer que ama a otra mujer. En una conversación me dijo que desde que se presentó a la clase le llamé la atención y sobretodo por mis ojos, por mi forma de mirar expresar las cosas sin palabras y que nunca saludaba con beso en el rostro, aún menos si no conocía a la otra persona, pero que conmigo le nació hacerlo. Además que siempre se preguntó por qué la saludé en inglés… (Lo mismo me preguntaba yo)

En ese mirar entendimos que nos queríamos, que desde nuestra primer mirada nos deseábamos y nos mirábamos sabiendo que en su momento deberíamos estar juntas. Toma mi rostro y tiemblo, esta vez no es uno de sus juegos en el salón, me mira con sus ojos de niña que tanto me quitan el sueño, toma mi mano y besa mi mejilla, me pregunta por qué tiemblo, no podía hablar, cómo hablar, cómo poder decirte que la amo, que deseo su ternura, que deseo que se quede esa noche y todas las noches que vengan, que se duerma en mis brazos y que despierte en ellos, yo no la conocía y ya la echaba de menos, era ella quien tanto anhelaba mi alma. Transformó mi vida, mejor dicho, me dio una nueva vida, porque lo de antes no era vivir, pero por sobretodo me enseñó del amor… pienso todo esto en mi cabeza, mientras mis lágrimas casi no me dejaban verla entre tanto llanto… Padre lo lamento, te amo, pero más la amo a ella, sé que te dará asco la hija que tanto amaste, pero quiero vivir, quiero amar, quiero ser… papá amo a otra mujer y ambos sabemos que significa eso….

Cuando terminé de hablar conmigo misma, sentía que lo podía todo, pero necesitaba de ella, necesitaba de aquel empujoncito, pero me daba pánico que me rechazara, pero sus ojitos me decían otra cosa, los miraba y decían bésame, bésame y mi cabeza me decía que jamás había besado a una mujer y las experiencias con hombres me dieron asco, pero qué más da, quiero aprender contigo, quiero que seas la princesa de mis cuentos, quiero besarte y hacerte mía

Dejo mis pensamientos de lado y sólo acallo mi mente para actuar, ahora soy yo la que también tomo tu mentón y me acerco para besar tan sutilmente tus labios como sólo lo imaginé en mi mente, en mis sueños, me voy acercando y tú no me rechazas, al contrario, cierras tus ojos y abres tu boquita, pero de repente algo nos sobresalta; rrrrr…. Que rabia!!! Su celular, me dije no contestes, no contestes, pero ella dijo mi papá (lo sabe por la melodía) y saca su móvil rápidamente para contestar.

Espero ansiosa cada segundo de esa espera, quería concluir lo que tanto me costó comenzar, apúrate por favor, no quiero que me entre el miedo y retroceder

Termina su conversación y sólo me dice que debe irse, que su papá se nota muy alterado, pero que intentará volver lo más pronto posible, se viene acercando para besarme, para besarnos y ahora es mi madre quien llega a tocar la puerta, pero sin abrir (quién más quiere integrarse pienso con una rabia que me tenía mis mejillas rojas, pero de indignación):

Fernanda, los padres de Caroline están afuera, dicen que por favor se apresure.

Nos tomamos otros segundos, como queriendo seguir, cuando en eso sentimos girar la manilla de la puerta y nos alejamos. Ya no hay equivocaciones, ni tampoco palabra, nos amamos, nos lo dice nuestro mirar, nuestros corazones que casi podemos sentir como golpean apresuradamente nuestro pecho. Me miras, tomas tus cosas y mi madre entra, como esperando descubrir algo, me da rabia y le respondo pesadamente : ¡Ya va mamá! Y ella sale y me dice, OK avisaré. Caroline besa mi mejilla y baja con lágrimas en sus ojos, dentro de mí un dolor, no era rabia de quedar así, sino un dolor en mi corazón, algo así como me sentí cuando tomé pastillas, pero no era el dolor del órgano físico, era el dolor del amor que estaba dentro de este corazón, la acompaño con mucha pena, hago un sobre esfuerzo por no llorar, ella por más que se frena le es imposible, eso me mata, como odio verla llorar, si sólo merece la felicidad y si se va pienso, ¿cuándo? Uy no lo conversamos bien, pero mañana lo finiquitamos y yo hablaré con mi padre, pero si así fuera tendríamos que ocultar lo nuestro, ay no sé… debo pensar bien

Mi madre conversaba con los padres de Caroline a la entrada y a penas la ven ellos suben al vehículo y le dicen que suba rápido, ella toma mi mano y me acerca a ella y me dice al oído: Te amo bebé, y sí, me quiero quedar contigo… y se marcha, no pude evitar no sonreír y sentir que todos los miedos se iban y por primera vez me sentía tan feliz, tan llena de amor, ahora sí que mi corazón más golpeaba. Me retiré a mi pieza a planear cómo explicarle a mi padre que quería que ella se quedara, cómo hacer para vivir bajo el mismo techo y que no se dieran cuenta que nos amábamos, no me gustaría que nos sorprendieron, preferiría mil veces decírselos yo, cuando en eso nuevamente mi mamá interrumpiendo

¿Qué pasa mamá?

Mamá : Venía a ver cómo estabas hija, luego de lo sucedido no sé, me preocupé. Ella fue tu gran amiga y quien necesitabas para salir de ese foso, pero

Fernanda : (¿Luego de lo sucedido? ¿"Fue" mi gran amiga?, ¿acaso se dio cuenta, nos vio? pero cómo…) -¿De qué hablas mamá?

Mamá : de lo de Caroline y sus padres, es una pena, era una familia muy agradable y ella una niña muy adecuada, yo encontraba que era lo mejor que podías tener como amiga

Fernanda : Si madre, referente a eso pensaba, Caro me lo acaba de mencionar y quería saber si a ustedes no les molesta que ella pueda vivir con nosotros hasta concluir el año y luego ya nos iremos a la Universidad

Mamá : Pero hija, tarde lo vienes a mencionar, ellos van camino al aeropuerto. Ellos se marchan ahora

Fernanda : Queeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee!!!!!!!!!!!!!! Pero cómo, por qué a dónde… Mamá ella no me dijo que se iban ahora

Como lo disimuló tan bien pienso, porque me dijo entonces que se quedaría conmigo, por qué, por qué porqué…. Mil cosas y preguntas en mi cabeza y mi madre responde.

Mamá : No hija, no le quisieron mencionar nada a Caroline, nada con fechas para que no le afectara tanto el cambio. Hoy fueron ellos a retirar sus antecedentes del colegio, pero pensé que ellos te lo habían mencionado, mal ni mal eras su mejor amiga, espero no sea tan fuerte este golpe. Lo siento hija… (dice con tanta pena, secando una lágrima escapada dentro de las mil que quiero contener).

Ay que caló hondo ese: Lo siento hija… No sé que hacer, camino para allá, para acá, lloro, me ahogo en mi llanto, no la puedo dejar ir, no por lo menos tengo que decirle que también la amo y que… no, no lo puedo soportar, la quiero conmigo y dejo de pensar y comienzo a actuar.

Bajo corriendo las escaleras, sin entender bien qué debía hacer. Mi madre me grita: hija, hija, dónde vas – yo sólo corro, sé sólo dónde: a sus brazos

Bajo las escaleras y papá viene llegando, acaba a penas de bajar, no cerraba aún la puerta del Land Rover cuando me monto en el carro, cierro rápidamente y tomo rumbo al aeropuerto, los neumáticos llegaron a sonar con mi brusco arranque, ya en camino digo para mí: lo siento padre, sé cuanto amas tu autazo, pero yo amo aún más a esa mujer y no la dejaré ir.

Llego al aeropuerto y no sé dónde buscar… ay me olvidé preguntar a mi madre dónde se irían, tomo el móvil y le pregunto dónde viajarán y mi madre se sorprende de saber que estoy en el aeropuerto, pero me ve tan mal que sólo me dice hija, ten cuidado por favor y le insisto casi gritando; MADRE DÓNDE SE VAN… y ella dice Japón

¡Japón! Grito!!!… sí, me dice mi madre, requieren a su padre con urgencia para atender una multinacional

Japón… sonó tan lejano como la distancia que nos separará… corro a más no poder, llego a la entrega de la recepción de equipaje y nada, ya deben de haber entregado pienso, me voy a la sala de embarque y en vista de no ver nada, entro corriendo sé que están dentro, aún puedo impedirlo, siento gritos a mi espalda y seguridad me persigue, obvio si entré como loca sin pasar por detector ni nada, no importa, la amo y nada me importa, cuando en eso los veo, ya están esperando para ingresar al avión, y ella está a su lado, cabizbaja, sus manos en su cara, obviamente llora, eso destroza mi corazón, no llores bebé pienso, ya estaremos juntas, siento un brazo alcanzarme por atrás diciendo que me detenga y más corro con ese guardia jalando mi brazo con brusquedad, hasta cuándo todos estaban exaltados con la loca que corría y ella se levanta y corre hacia mí y me abraza, te amo le alcanzo a decir antes que vuelva a arrepentirme de lo que le dije, cuando logran alcanzarme 5 guardias y me separan de ella y me pongo como desesperada tirando manotazos para soltarme, ahora me arrepiento de no ir al gimnasio y tener un poco más de músculos para largar lejos a estos insensibles, pero ya no doy más de forcejear y hay el medio escándalo, pero llega su padre y algo que no alcanzo a escuchar le dice a los guardias, y me sueltan y caigo al suelo, débil, llorando y mi bebé tiernamente me toma entre sus brazos y me levanta y lloramos y se lo dije, delante de sus padres, nada me importaba: Te amo, te amo bebé, no te vayas, quédate conmigo y Caroline entre sollozos y sus ojitos inundados y ahogada en un hondo pesar, también me dijo te amo, te amo, te amo

Sus padres nos miraban perplejos, dos muchachas de 17 años, las mejores amigas, ambas tan bellas que eran deseo de cualquier hombre, se encontraban expresándose el amor que sólo otra mujer en su situación entendería

Luego que se disipó el escándalo comenzaron a recibir los ticket y hacer ascenso al avión, sus padres nos dejaron sin interrumpirnos unos leves momentos, pero de repente la separan de mí, no por favor digo, no se la lleve señor, ya hablé con mi padre y puede quedarse en mi casa y ella ayuda a mi comentario y entre sollozos le dice: Papá, mamá no me hagan esto! – pero el tono de su padre se puso fuerte y la toma del brazo y la separa y me dice: Lo siento Fernanda, Japón nos espera, Caroline es nuestra hija y debe estar a nuestro lado y sobretodo ahora, con lo que acabamos de ver y de escuchar… Que bien, homofóbicos, cómo los míos!!! –pienso- Ella intentó zafarse mientras caminaban ya a subir y yo no aguanto verla así y me lanzo de nuevo, ahora a arrebatarla de su padre, es mía, la siento mía, no se la puede llevar, pero él hace un gesto y los guardias están expectantes y se lanzan sobre mí y ahí estamos, llorando a más no poder, ella casi arrastrada por cada brazo de sus padres y yo por 5 guardias que están más que furiosos, porque les rasguñé y golpeé, pero no pueden hacerme nada, no saben que tan poderoso es mi padre, pero lo sospechan y aparte de todo lo que se vio tampoco pueden agredirme, porque sino será por daños, soy menor de edad y aparte otra demanda por homofóbicos, aunque en ese caso mi padre prefiere verme en una celda a mí.

Presa del cansancio y de la pena lo último que veo es ella, subiendo al avión y ya no lucho más y me desmayó

Pasa no sé cuánto tiempo, estoy en mi cama… todo fue un sueño pienso, pero me siento demasiado mal física y emocionalmente para haber sido un sueño. Mi madre está a mi lado, por primera vez la veo acariciarme y me abraza y me pide perdón… perdón por no haberme dado el cariño de madre que necesitaba, que me amaba y que lamentaba mucho lo que estaba sucediendo, que no quería ver que recayera, Caroline me había sacado de mi depresión, pero ahora qué o quién… necesitaba un abrazo, mi bebé me dejó débil a un sentir que no conocía y ahora necesito sentir y de momento es palpar un sentir de madre desconocido, pero que tanto necesitaba para ese momento. La observo y ella llora junta conmigo (irónicamente pienso ¡Mi madre llora!, me sorprende ver lo frágil que se ve. ¿Lo sabrá? me pregunto. Luego refuto lo dicho porque si no, no estaría conmigo y menos así.

Había pasado ya una semana de lo sucedido y no había ido ningún día a clases. Mi cuerpo aún estaba débil, nuevamente con medicamentos, pero no me sentía deprimida, pero sí triste, con una tristeza que no sanaba con nada. Estaba vez sabía que no haría ninguna estupidez, pero sólo lo haría por ella, porque ella me había liberado, ya no lo podía negar, ya no podía ocultarlo ni querer obligarme a mi misma a querer sentir por un hombre, porque era imposible y por primera vez no rechacé mi naturaleza, era lesbiana… y ya no importaba nada

Faltaba sólo semanas para terminar el año y me levanté de mi cama, por primera vez luego que ya pasara más de un mes de que me arrebataran lo que más amaba en el mundo.

Mi padre me espera en su despacho, antes de entrar suspiro y me digo a mis adentros, ya no me importa nada, además que deseaba conversar con él sobre mi futuro y por qué no, terminar con todo esto y decirle que no citara más los hijos de sus colegas a cenas "familiares" porque era lesbiana y si no había sentido nada antes con un hombre, menos lo haría ahora, luego de amar a una mujer

Mi padre me dice que tome asiento. Está serio, bueno es su naturaleza, mostrarse fuerte, infranqueable, el señor Ferrer es digno de mi respeto, en lágrimas solitarias le reproche no ser el padre que cargaba a su hija en brazos, pero todo esto me ha hecho madurar, el amor me hizo madurar y comprender que no porque no me quiera como yo deseo, no significa que no me ame con todo su corazón.

Mis padres quedaron en la quiebra luego de la muerte de mi hermano, pero con su esfuerzo y con el amor de su familia no se dio por vencido y volvió a ser el señor que todos respetaban. Me sorprende ver que ingresa mi madre y cierra la puerta del despacho. Si ya casi veo que salen los tipos de un manicomio intentando llevarse a la hija lesbiana y loca.

Padre le digo, déjame hablar a mí primero, él asiente sólo con la mirada:

Los amo a ambos, sé que mientras más dura sea la vida conmigo, más los entenderé y más los amaré… (Se me hace un nudo en la garganta pero prosigo, sin lágrimas, cómo fielmente me enseñaron).

El próximo año me iré del país a estudiar fuera. Quiero irme a Europa, aún no tengo claro si será algo relacionado con el arte o quizás a Francia a aprender de vinos y viñedos, saben cuánto me gusta el campo, pero de momento sólo tengo claro que necesito caminar sola.

Padre, madre, lamento no haber sido la hija que pensaron, lamento ser la oveja negra que tal vez jamás se case, que quizás no tenga hijos, que por lo mismo no pueda formar una familia de renombre como la nuestra, sólo puedo decir que no lo planeé, que no sé si nací así o no, sólo sé que lo intenté y por ustedes, quise ser la hija perfecta, pero lo siento, descubrí el amor y no puedo seguir luchando, no tengo fuerzas (mis lágrimas comienzan a salir, me avergüenzo, no acostumbro llorar frente a ellos, pero los observo y de los dos caen lágrimas. Eso me anima a seguir y acabar con esto de una buena vez.

Qué decepción papá, lo siento, por mucho tiempo me sentí asquerosa sabes, quería amar a un gran hombre por ti, pero jamás pude si quiera sentir una chispa por ellos, lo siento papá, te amo, pero es aceptarme lesbiana y seguir mi camino o dejarme morir viviendo algo que no es para mí

Mi padre se acerca, jamás me ha golpeado, me pongo en plan de defensa por si me arroja alguna bofetada, pero sólo se agacha frente a mí y me abraza, no recuerdo haber sido abrazada así por mi padre y mi madre se aferra de mí por el otro lado y ahora pienso QUE ENTREN A PONER LA CAMISA DE FUERZA, YA ESTÁ SUJETA!!! Pero nadie ingresaba, mis padres me abrazaban, tal vez era la despedida antes de que me dijeran que me marchara ya de la casa, no sé, no reaccioné

Mi padre se incorpora y me mira como realmente mira un padre a su hija y me dijo:

-Mi amor, sabes que te amamos, has sido nuestra bebé y quien me devolvió las ganas de vivir. Sabes que luego de la muerte de tu hermano (Flaqueo su voz e hizo un silencio para tomar aire)… yo no quería vivir, nada me importaba, mi vida no tenía sentido, aparte me sentía culpable de dejar a tu madre y tus hermanas en la calle, pero llegaste tú, sin planearlo, pero fuiste nuestro milagro, nuestra luz, mi luz y mis ganas de vivir. Te quisimos cuidar de todo y de todos, no soportaríamos otra pérdida, si algo te llegaba a pasar, pero tal vez fue nuestro error porque te privamos de lo que es vivir.

Hija, acepto tu decisión de ir a estudiar donde tú quieras, tienes todo mi apoyo, con tu inteligencia puedes lograr todo lo que te propongas, pero (y volvió a aclarar su voz) con tu madre lo hemos conversado, hemos vivenciado lo que has pasado con Caroline y tampoco somos tontos para ignorar lo sucedido;

En el aeropuerto, personalmente te tomé en mis brazos cuando los guardias te traían desmayada. A penas tomaste mi vehículo pregunté a tu madre lo que sucedía, nos asustamos mucho por como saliste -más por tu auto pensé pero no lo dije- y fuimos con tu madre en su auto.

Te fuiste tan rápido que nos tomaste mucha ventaja, si ni luces veíamos de ti. Llegamos allá y sin saber qué sucedía te arrebato de ellos y te tomo en mis brazos, tú madre conversó con ellos, primero para entender qué sucedía y luego para ofrecerles una demanda por como dejaron las marcas en tus brazos, si casi me lanzó sobre ellos a golpearlos por traer así a mi niña, menos mal y como siempre tu madre me retuvo de hacer una tontera.

Te llevé al auto y lloré amargamente mientras no te quería separar de mí, pero fue el momento en que me di cuenta que tomaste tus propias alas y que ya eres grande, tienes 17 años demostrando siempre casi el doble en tu comportar y ahora no fue diferente. Admiro tus decisiones y así como tú fuiste mi luz y me reviviste, entiendo que Caroline fue tu luz y le dio un nuevo sentir a tu vida.

(No lo podía creer sería tan así como lo estaba ordenando mi cabeza) ahora mi madre concluye.

-Hija, por sobretodo te amamos y te amaremos siempre, si tu decisión es amar a una mujer, hazlo pero procura ser feliz, date el tiempo de esperar por quien realmente ames y no que sea algo que luego quieras sólo olvidar, sino que sea algo que conserves en tu corazón por toda tu vida. Amo a tu padre, no nos fue nada fácil estar juntos, pero él luchó y luchó por mí y por mi parte se convirtió en mi primer amor y el último, en las buenas y en las malas y como pareja hemos sabido superar todo, incluso la muerte de tu hermano, pero jamás hubiésemos podido sin la ayuda de Dios que nos envió a nuestra bebé, que ahora emprende su rumbo sola.

-Te amamos hija y queremos conocer a quien sea la elegida, pero que no sea cualquiera y no me refiero a dinero, tiene que ser la princesa de aquel cuento que siempre has querido cumplir (como sabía de mis cuentos… que desgraciada he sido, mi madre y mi padre siempre han sabido de cada paso que doy en mi vida y en mi cabeza y yo tanto que renegué de ellos…)

Ahora sí los abrazo con fuerza, a ambos, lloramos juntos, al rato mi padre sólo me mira y me pide una cosa, que por favor sea respetuosa siempre ante una sociedad que no está acostumbrada, pero ahora dice algo clave: NO SÉ SI NO ESTÁN ACOSTUMBRADOS A VER DOS PERSONAS DEL MISMO SEXO, O NO ESTÁN ACOSTUMBRADOS A VIVIR UN AMOR VERDADERO… Sigo repitiendo sus palabras para grabarlas como mandamiento en mi vida: -Sólo te pido cuidado hija y que no te exhibas en público o frente a nosotros, te respetamos en tu decisión, pero también nos respetas, que sabes que no es nada fácil dar este paso, para ninguno, además que ya estamos viejos y pensar abrir nuestra mente a estas alturas cuesta demasiado… - y sonríe

Tanto tiempo sin ver sonreír así a mis padres, tal vez los necesité cuántas veces, pero si hubiesen estado ahí no sería la mujer que soy ahora, pero ahora que realmente los necesitaba aquí están, cambiando su mundo por mí

Gracias les dije, me hacen la mujer más feliz del mundo, prometo con cumplir cada cosa pedida y como compromiso personal prometo que la primer mujer que bese será de quien realmente esté enamorada, no por calentura o por sexo, será mi verdadero amor, mi princesa y recién ahí se las presentaré como el ser más importante para mi vida

En la tarde voy a clase, me siento diferente, todo es diferente, es como comenzar a vivir, ya no tengo que ocultarlo más, lo saben mis padres y ya nada me importa

Llego al salón y todos me vuelven a mirar como bicho raro, ay Caroline me siento tan débil sin ti para enfrentar todas estas miradas inquisidoras, pero recuerdo a mis padres y ya no es una presión, son ellos que me dan la fortaleza de levantar mi rostro y tomar aquel puesto que hasta hace un tiempo lo ocupaba con ella a mi lado… ufff...… que difícil, si casi te veo ahí, mirándome como cada día que llegaba al salón y su ojitos me esperaban con ansias y tu ¡hola! era la sonrisa más bella del mundo.

Llega Matías y me mira con rabia, obviamente ya todos saben que mi ausencia fue por Caroline, además que el escándalo no fue en un parque fue en el aeropuerto, pero en fin… prefiero haberle dicho que la amaba a haberme quedado con esto dentro, sólo lamento no haber tenido jamás sus labios, su cuerpo desnudo junto a mí… salgo de mi nube y me olvido que Matías estaba ahí y ahora me observaba con más rabia. Hola le digo:

Matías : ¿Así que por ella me rechazaste?

Fernanda : ¿Perdón, hasta donde sé Caroline ni siquiera estaba cuando pasó lo que pasó?

Matías : Sé que no, pero ahora todo está claro, eres lesbiana Fernanda, por eso saliste corriendo cuando te besé, por eso no me hablaste más, por eso para ser tan bella como eres jamás has estado con un hombre, por eso no eras como las otras y por eso te amaba

(comenzó a llorar, intentó frenarlo y aclarar su voz)

Luego de querer matarte, no vivir más, llegó Caroline y tu mundo cambió, pero por ella y para ella. Yo te miraba y qué no hubiese dado porque me hubieses amado como la amabas a ella, porque me mirabas como la mirabas a ella, porque me hubieses sonreído de la forma en que le entregabas a ella lo mejor de ti

Fernanda : Lo observo y más de una lágrima se desliza por su rostro, siento retorcer mi corazón, sólo puedo decir lo siento y él se marcha, sale del salón a los baños.

Como se puede hacer tanto daño a alguien por simplemente no abrir mi boca en su momento, o simplemente no haberle echo ilusiones de algo que nunca sería, que sólo era para contentar a mis padres. Levanto la cabeza y todo el curso mirándome, algunos con más sorpresa que otros… Grandioso, ahora todos sabían que Fernanda Ferrer era lesbiana, pero que tremendo suspiro salió de mí, y los observé con la más amplia de mis sonrisas. Gracias a Dios mis padres lo sabían y tengo su amor incondicional, ya nada más importaba

Las semanas finales fueron un desastre, quería que terminara pronto el año, pero fue un desastre demasiado gracioso. Salía del salón y al volver sobre mi mesa me encontraba sobres con hermosas cartas de amor, otra que está enamorada de su mejor amiga y no haya como decírselo, otras contándome lo que sienten por alguien más, pero por qué no se atreven a contarlo, me hablaba a mi misma, luego aquella mente magistral que siempre me habló tan francamente me decía (y por cierto, con su ironía característica): - ¡ay Fernanda, llevas un mes como lesbiana declarada y ya te crees doctora corazón, juzgando sus indecisiones, olvidándote realmente de todo lo que sufriste para llegar a esta instancia de libertad…! – Y que cierto que era. Nuevamente mi mente tenía razón, pero lo gracioso es que en su mayoría, lo que más recibía eran direcciones de e-mail y números de teléfono con la tan expresiva palabra LLÁMAME!!!

Fuera de sorprenderme me causaba risa, yo no sabía quienes eran porque todos eran anónimos, no tenía interés tampoco en saberlo, pero ellas sí lo sabían, todo el colegio sabía que la niñita perfecta tenía su detalle: era lesbiana y si casi me seguían, me sentía observada, me sentía deseada y acepto que comenzó a gustarme.

Estoy en el salón, pero necesito ir al baño, pido permiso a la maestra y bueno, a la alumna consentida cómo decirle que no

Salgo del baño y me percato que alguien ingresa, pero no miro, estoy lavando mis manos cuando veo por el espejo una mujer que se acerca por atrás hacia mí, sólo observo que es alta, y unos ojos verdes preciosos, pero no diviso bien su rostro. Me toma por la cintura y me voltea para dejarme frente a ella, con otro movimiento brusco me apoya a la pared, la puedo observar ahora sin pestañar: Esos ojos verdes, que bellos, que expresivos, pestañas largas, su mirar intenso, ardiente, medía lo mismo que yo 1.70 aprox. Sus labio superior fino y el inferior más grueso, color rosado, como con brillo, me mira y desliza su lengua por su labio y lo siento en mí como si lo hubiese hecho sobre los míos, con brusquedad ahora toma mis manos y las lleva arriba, sin soltarlas, como creyéndose policía a punto de comenzar una exhaustiva revisión, pero en esa posición siento como su pelvis se aprieta a la mía, si casi siento el calor de su vagina, esa mujer, quien fuese que fuera me estaba volviendo loca

Yo permanecía inmóvil, tampoco hacía intento de soltarme, (tonta no soy) o sea me gustó, me encantó, no dejó de perder ese toque de mujer, pero era brusca, pero para la calentura del momento le permitía lo que fuese… pero con la seguridad que me tomó, que me apoyó a la pared… mmm..... si ya me tenía mojadísima… se fue directo a mis labios, pero moví mi rostro rechazándola, volvió a buscarlos, pero nuevamente moví la cara, me tenía calientísima, pero fácil no sería, era una promesa personal

En vista que no le fue fácil llegar a mi boca, comenzó a besar mi cuello, a deslizar su lengua por él, a lamer el lóbulo de la oreja y dentro de mi calentura abro mis ojos y recuerdo quién es… Antonia… una chica del mismo nivel, pero no es mi compañera. Debe tener unos 20 años (bastante madurita ya) y en ella no existe la palabra vergüenza.

Recuerdo un día que yo conversaba con Matías en un patio trasero del colegio y ella tenía arrinconada a otra niña, como no recordar esas piernas y esos ojos y reacciono y no quiero, no quiero ser un trofeo más de una para cual las mujeres son sólo placer o ir sumando y sumando "números" para jactarse de cuántas se ha "comido" porque esta se las come así como es… Siento que es tan de macho su actitud, es estupenda, pero no me gusta ser el trofeo de nadie y posiblemente tal vez hasta hubiese alguna apuesta de por medio para saber quién sería la primera en besar a Fernanda Ferrer.

Ya con mi mente fría (aún no lo demás) intento zafarme de ella y rrr… porque tendré tan poca fuerza, recuerdo el forcejeo con los guardias, necesito urgente un gimnasio, segunda vez que me lo repito. Pero esta loca no me suelta, así que ya se torna violento y poco agradable, suelto una mano y le planto qué bofetada y me suelta, como que quedó sorprendida más que adolorida y me grita mientras salgo: caerás y no te darás ni cuenta, se que te gustó lo que sentiste.

Bueno, aparte de ser anecdótico no dejó de causarme risa y sobretodo su comentario final y me lo ratificaba a mi misma con una gran sonrisa, me "encantaban" las mujeres ya no cabía duda… y ahí estaba esa sensación de caminar incómodo, toda húmeda al salón Jajaja… que chistoso, me reí sola, pero no volvería al baño, esa loca seguía ahí, tal vez ahora yo no podría decirle que no

Entro al salón y todo me miran (porque tendré que ser el centro de atracción desde que se sabe que soy lesbiana)

Fernanda, te pasa algo, -pregunta mi profesora-… No miss, me sentí mareada, tomé agua y tomé aire un rato, pero ya me siento mejor, gracias, por dentro reí con descaro al acordarme de la forma en que me estaban haciendo tomar aire

Bueno, ufff...… gran racconto que hice de mi pasado, con penas, con alegrías, con pasiones inconclusas, pero avanzaré un poco más los años

Salí del colegio, temía que para la licenciatura alguien se expresara mal por mi condición delante de mis padres (algún o alguna despechada, eso me pasaba por caliente, sí, lo admito me comenzó a gustar el jueguito de coquetear y luego huir)… pero mi padre daba miedo sólo con su presencia, tanta seriedad y pensar que era tan frágil, bueno, como hija de tigre tuve que salir rayada, tan fuerte que me creo y tan sensible que soy, me debilidad: el amor

Por fin, vacaciones, las disfruto con mis padres, nos vamos a Brasil a disfrutar de las garotiñas, me daba risa observar que tenía los mismos gustos de mi padre, mirábamos las mismas mujeres… que gracioso, supongo que a más de alguna le ha pasado

Finiquito mis detalles y definitivamente emprendo rumbo. Europa.

Comienzo por arte renacentista, me apasiona, pero como hobby, muchos museos, muchas esculturas, mucha historia, ufff..... exquisito contenido para mi ávida inteligencia, pero quería algo más. Estoy dos años en esto y me voy a Francia a beber directamente de sus vinos, y comenzó mi pasión (aún más) por el campo, por sus uvas, sus vinos… (y mis ratos libres un necesario gimnasio, jamás permitiría que alguien me contuviera).

Caroline, aún te recuerdo, pero ya tiernamente, fuiste mi primer amor de niña, fuiste mi escape de la razón, jamás supe de ti, espero que tus padres al final te comprendieran así como los míos.

Utilicé estos años para sólo apasionarme en cultura y estudios, nada de mujeres, ya habría tiempo, además que siempre me repetía, el amor no se busca al amor llega o se encuentran. Lo que sí hacia era conversar por el Internet con mujeres, lesbianas obviamente, necesitaba sentirme reflejada, es hermoso nuestro sentir y sobretodo poder expresarlo.

Sinceramente pienso que no sé si una pareja hetero llegue a amar como se aman dos mujeres… tanta suavidad, comunicación sin palabras, sensualidad, tan habilidosas que somos, tan inteligentes y sutiles para lograr lo que queremos.

Cada día me enamoraba más de mi esencia y de la mujer que iba haciendo de mí. De todas aquellas con las cuales compartía sacaba lo que más me gustaba y fui complementando la Fernanda que ya me encantaba, pero quería hacer de mí una gran mujer, también una gran amante, la razón, necesitaba hacerme aún mejor en todo sentido, cuando ella llegara sabría reconocerme y yo a ella. Tendría la teoría de las cosas, ella me daría la práctica del amor

Un día comienzo a conversar con alguien que me llamó la atención por su nick Buffy (como la caza vampiros) aún queda algo de oscuridad en mí, los vampiros me encantan, como novela, como imagen, como mito y Buffy me gustó en mi juventud por la escena entre Tara y la otra chica, no recuerdo ahora su nombre, un beso tan sutil, tan tierno… aún no me aceptaba como lesbiana en ese entonces, pero admito que me provocó.

Nunca preguntaba nombre, ni ubicación, menos teléfonos, porque sólo eran conversaciones, tampoco quería toparme con alguien que me conociera y llegara a oído de mis padres que una Ferrer casi estaba ofreciendo sexo por Webcams, hay que cuidarse de todo y de todos… (Inseguridades de niña, que ahora de grande se agradecen sobretodo estando lejos de casa)… Además que eran páginas europeas, difícilmente alguien me conociera o fuese de mi país (Chile).

Comienzo a conversar con Buffy, me atrae su nick, el mío Quimera… ella admite que también le atrae mi nick y por qué quimera, e pregunta y le digo que es por dos cosas, por el animal mitológico que representa; su fortaleza y por otro lado porque como significado quimera significa ilusión, algo que jamás se realizará… queda en silencio (o sea no escribe nada) pienso que se fue, así que cerré la ventana, ya cerraba mi laptop y veo que me dice: ¿por qué eres una ilusión, tan difícil es llegar a ti? A lo que respondí: Lo difícil no es llegar a mí, es saber retenerme… y comenzó nuestra fluida plática, veo la hora: 4 de la madrugada, bueno tal vez ella no tuvieran tantas responsabilidades como yo, pensé que era más temprano pero no supe cómo me motivó tanto conversar con ella. Al final dentro de tanta franqueza dicha aceptamos darnos nuestros e-mail y nuestros nombres: Yo, Fernanda Anaís Ferrer y Ella Alejandra Ríos, alías Buffy

Luego de esa conversación no hay día en que no conversemos o por lo menos nos escribamos un mail para saber como van nuestras vidas.

Admito que he omitido mi situación económica, no quiero que surja un interés de amistad o lo que sea por el dinero de mis padres… (yo y mis inseguridades). Quiero conocerla en persona y luego le diré.

Tomo dos años en uno en mis estudios de vinificación, enología, vitivinicultura. Me encanta y me resulta bastante fácil, pronto volveré a casa, hace un año que no veo a mis padres y porque también no admitirlo, me gustaría conocer a Alejandra, a todo esto y mejor aún también es Chilena.

Nos llevamos bastante bien… y creo que es justo contar un poco de su vida para comprender ciertos sucesos (no puedo ser sólo yo cierto, pero prometo que será bien breve)

..

Alejandra es una chica interesantísima y su historia en cuanto a mujeres es más clara, porque siempre se sintió atraída por ellas, yo creo que desde que nació y vio la enfermera supo que lo suyo eran las mujeres (así como a muchas)

Vivía con su madre, su hermano mayor y Matilda, su sobrinita. Su hermano era Gerente de algo en el aeropuerto (donde hice escándalo). Ella egresada de la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad de Barcelona.

Ambas nos sentimos atraídas por similitud de gustos y conocimientos culturales e intelectuales. Amamos la lectura, el cine, el arte, la música y nos apasionamos con las ciencias ocultas y el misticismo.

En cuanto a experiencias amorosas, en mí es nula (espero cambie el marcador) pero Ale ha tenido varias espinas en este camino. Antes de aceptar su homosexualidad, tuvo 2 parejas del sexo opuesto y luego de iniciada en el mundo lésbico, ha tenido 3 parejas, pero la última; Florencia, una hermosa Argentina, que logró enamorarla y cautivarla, para luego marcharse a su país, sin previo aviso, sólo contándole vía e-mail que estaba en su país y que no volvería por mucho tiempo a Chile y además, por terceras personas, sabe que Florencia la engañó cuando estaban juntas, cosa que la afecto tanto que incluso llegó a atentar contra su vida.

Estaba todo fríamente calculado para que nada fallara. No había nadie en casa. Su hermano y su madre habían salido y no volverían hasta 2 días después.

Alejandra se fue a su pieza y lenta y conscientemente comenzó con lo que sería el fin de su sufrimiento y el paso a una mejor vida. Tomó varias cajas de pastillas para dormir y comenzó pausadamente a consumirlas, una a una, llegando a más de 30 unidades cuando perdió el conocimiento, no recordando hasta que días después despertó en la UCI (Unidad de Cuidados Intensivos). Por suerte, surgió un imprevisto y su madre regresó al poco rato de caer ella inconsciente, encontrando a su niña sobre la cama, sin reaccionar y con su mano aún con calmantes. Su cuerpo estaba frío y ninguna parte de sí con movimientos.

Su madre llamó la ambulancia y fue sometida de urgencia a una desintoxicación y las siguientes horas serían cruciales para saber si vivía o moría, que era lo que ella quería. Afortunadamente vivió y quiso incorporarse a su vida normal, pero los lugares y situaciones que compartió con Florencia, inevitablemente se venían a su mente y no se alejaban, lo cual le hacía mucho daño. Aparte que día a día se iba enterando de alguna nueva infidelidad de Florencia que peor la dejaba.

Su depresión no pasaba, como tampoco las ganas de morir o hacerse daño. Así fue como comenzó a hacerse heridas en su cuerpo, especialmente en su abdomen, ya que no se notaban y su pensamiento era que por lo menos servía para refrenar su instinto suicida.

En mi encontró la comprensión que no encontraba en nadie, yo la entendía perfectamente, quien más que yo podía entender lo que era sufrir por amor, por traición, por desilusión, por abandono… (Recordé a Caroline…)

Por suerte y bueno nuevamente nombro a quien fue mi primer amor, mi ilusión, mi Caroline, mi bebé, logré salir, pero Alejandra aún continuaba

Éramos dos locas en un mundo de cuerdos. Dos personas tan similares, pero verdaderas extrañas al resto del mundo que estaba incapacitado de ver y aceptar sus pensamientos, actitudes y sentimientos.

Así fue como Fernanda y Alejandra (Buffy y Quimera) dan inicio a una amistad necesaria para ambas, ya que entre ellas encontraban la comprensión que el resto les negaba.

Dos chicas muy jóvenes (26 años Fernanda y 29 Alejandra), con un alma muy maltratada, pero pura e ingenua que aún no encontraban las personas que realmente las merecieran, se lanzaban a la aventura de disfrutar un fin de semana juntas, sin saber que esto cambiaría totalmente sus vidas, sentimientos y almas.

(Continuará…)

Nota: Por favor, no sean tan severos, acepto sus críticas pero no me lapiden hasta el final. Llevo años sin escribir, 8 años, tal vez incluso un poco más, luego del final sabrán qué me motivó a dar un nuevo inicio. Gracias