Vino. 5
Julia se aventuró a sacarla de su ensimismamiento con una nueva pregunta: -¿No tienes intención de volver algún día?- Clara permaneció pensativa durante unos segundos más, como si meditara la respuesta realmente. - Tal vez cuando decida casarme.
Julia se aventuró a sacarla de su ensimismamiento con una nueva pregunta: -¿No tienes intención de volver algún día?- Clara permaneció pensativa durante unos segundos más, como si meditara la respuesta realmente. - Tal vez cuando decida casarme.- Julia no pudo evitar soltar una carcajada que probablemente despertaría a todos los cangrejos de la zona obligándolos a asomarse pa
ra comprobar de donde provenía aquel alboroto, alegrándole la existencia a los pájaros que dormitaban en sus nidos.- ¿Por qué te hace tanta gracia?- El rostro de Clara se debatía entre la incertidumbre y aquella risa contagiosa. Julia se tomó su tiempo para recomponer el rostro y la seriedad: Pues porque no creo que te cases, en fin, ahora podrías hacerlo, pero no lo creo. -¿Qué insinúas? ¿Que nadie me soportaría?- Julia exhaló el aire de forma escandalosa y escudriñó el rostro de la joven, no quería perderse ni un detalle de su reacción aunque la penumbra dificultara la tarea.- Insinúo que eres gay.
El gesto de contrariedad de Clara fue exagerado, como el de un niño que aún no posee la capacidad de controlar la expresión de sus emociones. - ¡Claro que no lo soy!- Julia volvió a reír, esta vez sin tanto ruido. - A ver, ¿cuántos novios has tenido?- Clara se tomó su tiempo para responder, se sabía acorralada. - Sólo puedo considerar a uno como tal. Pero, sí que he tenido algunas historias no muy largas. - Ahí lo tienes. - Eso no quiere decir nada, simplemente estudiar y trabajar no te deja mucho tiempo libre para dedicarte a alguien. Y tampoco es tan fácil encontrar a un hombre con el que congenies y prefiera estar contigo antes que con sus amigotes de fiesta en fiesta. - Venga Clara, sé honesta. Nadie a tu edad está tan hastiada de los hombres. Mira a tus hermanas, son más jóvenes y ya están a punto de casarse. Hasta tu padre consigue novia después de tantos fracasos.