Viernes por la tarde en el super...

Era viernes por la tarde, otro viernes más... No tenía planes, así que me disponía a pasar la noche viendo una peli... Como no tenía ganas de cocinar baje al súper a por una pizza, me puse un pantalón y una camiseta. Prescindí de la ropa interior para no entretenerme, me puse las deportivas, cogí dinero y baje...

Era viernes por la tarde, otro viernes más...

No tenía planes, así que me disponía a pasar la noche viendo una peli...

Como no tenía ganas de cocinar baje al súper a por una pizza, me puse un pantalón y una camiseta. Prescindí de la ropa interior para no entretenerme, me puse las deportivas, cogí dinero y baje...

Entre en el súper, era tarde ya, así que había poca gente. Empecé a buscar el pasillo en el que estaban las cosas que necesitaba y me cruce con un chico, me lo había cruzado otras veces, más o menos a esas horas, supongo que pasaba por el súper después de trabajar antes de ir a casa como muchas otras personas que me solía cruzar.

Pero el me llamaba la atención, me miraba cada vez que nos cruzábamos, yo le miraba de reojo y seguía mi camino, pero él me miraba con más detenimiento...

Ese día al cruzármelo, no sé porque, pero le sonreí, me devolvió la sonrisa y siguió a lo suyo.

Por fin llegue al pasillo de las pizzas, elegí una, la cogí, luego fui a por un refresco y alguna chorrada para picar...estar sola me daba un poco de bajón, era aburrido pasar el viernes noche viendo una peli...

Así que para animarme pensé en comprar helado...jejeje

Me había cruzado 2 veces más a mi misterioso desconocido... y... ¿casualidad? Si, allí estaba, al lado del congelador de los helados. Yo como si nada fui a buscar algo que me gustara, el se acercó un poco mas...

No sé porque pero me pasa a menudo que cuando quiero coger algo esta al fondo... así que me incliné mas para poder llegar... mi pecho estaba más dentro que fuera del congelador, al no llevar sujetador podía notar el frío, y sentía como se endurecían mis pezones. Mientras hacía malabares para coger aquel dichoso helado mire de reojo, mi desconocido estaba a escasos centímetros de mi, buscando o haciendo como que buscaba algo...

Tanto me despiste que casi me caigo...pero unas manos cálidas me cogieron por la cintura, note un escalofrío del contacto de esa calidez con mi piel fría por el dichoso congelador, me giré, con mi bote de helado en la mano, era el... Una de sus manos seguía en mi cintura... pero su mirada bajaba de mi cara a mi pecho...ya no me acordaba...mis pezones estaban de punta y se remarcaban bajo la camiseta. No sé porque pero me salió una risilla, se puso rojo, soltó mi cintura y me dijo:

-Está bien?

-Sí, gracias...

-No hay de que...

Se alejo de mí y yo me dispuse a ir a la caja a pagar. Estando en la cola, sentí como si alguien me observara, inconscientemente me gire, dos personas más atrás allí estaba... Me recorrió otro escalofrío por el cuerpo recordando sus manos cálidas en mi cintura, las miradas furtivas y esa mirada fija y descarada sobre mis pezones duros, aparte de ponerme a 100...me quede atontada y lo siguiente que hoy fui a la cajera diciendo señora...son 10 euros... jejeje.

Salí de la caja... me pare a comprobar el cambio y mire de reojo, ya le tocaba a él, estaba pagando su compra...

Me espere en un rincón, haciendo como que hablaba por el móvil y le vi entrar en el parking...le seguí...pero tardé tanto que le perdí la pista... seguí andando por si le veía entrar a su coche...

De repente note otra vez esas manos cálidas en mi cintura...su coche estaba al lado de un pilar, sabía que le había seguido y se había quedado tras el pilar, con lo cual no le vi.

Note su aliento y su voz en mi oído, una voz dulce que me excitaba

-Te estaba esperando...

-Como sabias que te seguiría?

-Me lo dijeron tos ojos, y la reacción de tu cuerpo...

Subió su mano, metiéndola bajo mi camiseta...acariciando mi pecho...mientras deslizaba su otra mano dentro de mi pantalón...estaba tan apegado a mí que podía sentir su erección...y él podía sentir en sus dedos la humedad de mi excitación...

Era la hora de cerrar el súper así que no podíamos seguir allí, me gire y le dije

-Acompáñame...

Subimos en su coche y fuimos a mi casa que estaba en la calle de al lado. Entramos deje la compra sin sacar de la bolsa en la nevera... y me cogió por la cintura, besándome desenfrenadamente mientras yo le guiaba hasta el salón.

Allí me quito la camiseta, mirando, besando y lamiendo mis pechos con detenimiento...bajando con sus besos por mi cintura, desabrochando mi pantalón hasta quitármelo y allí de rodillas besando mi sexo desnudo....

Le hice levantar para quitarle la camisa, acariciando aquel pecho varonil y desnudo...Le abrece para sentir su pecho peludo sobre mis senos, y fui bajando mis manos por su espalda, rodeando su cintura hasta llegar al botón de su pantalón, deseaba arrancarle esa prenda y liberar esa dura verga que me deseaba, estaba firme y no dude en introducirla en mi boca arrancándole un gemido de placer, estaba muy excitada y le lamía sin control, absorbiéndole por completo...

Me hizo levantar y me hizo sentar en la butaca, colocando mis piernas una en cada reposabrazos, acariciando mis muslos para después meter su cabeza entre mis piernas, mis gemidos eran altos, aquella lengua ardiente me devoraba por completo, recorriendo cada rincón de mi sexo, jugueteando con mi clítoris....no tardé en correrme y él me siguió con tanta excitación...

Le hice ponerse de pie, y allí sentada empecé a lamerle cada gota de semen, sin dejar rastro...

Le lleve hasta mi cuarto, le recosté sobre mi cama y seguí lamiendo cada centímetro de aquella verga, acariciando sus testículos y su ano hasta que su pene estuvo otra vez duro...

Entonces se incorporo, me beso con dulzura, y acariciando mi cuerpo me giro hasta ponerme de espaldas a él y a 4 patas.

Me penetro suavemente, con un vaivén que me enloquecía...note como la sacaba y penetraba mi ano, entrando de mi ano a mi vulva y viceversa, enloqueciéndome por completo, sumiéndome en el más completo de los placeres, acariciaba mis pechos que se movían al compás de las sacudidas, recorría mi espalda con sus manos hasta cogerse a mis caderas empujando en una penetración más profunda...entrando y saliendo de ambos agujeros, provocándome orgasmos infinitos acompasados de sus gemidos...hasta que en el último empujón dentro de mi vulva se corrió, dejando todo su esplendor ardiente recorriendo mis entrañas. Agotado beso mi espalda y se dejo caer en la cama, cogiéndome y acercándome hasta a el... Sonriendo, me miro y le dije:

-Hola, soy Luna, encantada de conocerte.

-Hola, soy Lobo, el gusto es mío.