Viernes de local liberal

Seguimos intercambiando mensajes calientes con nuestro amigo de Todorelatos en los que le contamos nuestras travesuras.

Seguimos intercambiando mensajes calientes con nuestro amigo de todorelatos en los que le contamos nuestras travesuras.

VIERNES DE LOCAL LIBERAL

La noche no tuvo desperdicio. La verdad es que el local estaba bastante lleno de parejas y algún que otro chico solo, pero muy pocos.

Nos tomamos la copa de rigor en la barra y luego pasamos a la zona privada para quitarnos la ropa y enrollarnos con una toalla.

Cuándo entramos al vestuario había una pareja que se estaba cambiando en ese momento también. Los dos estaban ya desnudos. Tendrían unos 35 o 40. Estaban bastante bien  los dos. Ella buen cuerpo, sin ser exuberante y el era un chico normal.

Nos saludamos y comenzamos a charlar un poquito. Nos contaron que era la primera vez que venían a un local de estas características y que estaban un poco nerviosos, que no habían pasado de las fantasías, que les iba mucho el morbo pero no sabían cómo iban a reaccionar en un local de estas características.

Nosotros los tranquilizamos y les dijimos que aquí se venía a divertirse y que los límites los pone cada pareja. El nos contó que era hetero y que ella en principio era hetero pero no le desagradaba la idea de tocar o sentir a otra mujer. Es lo que se suele llamar bicuriosa.

La conversación era amena y sirvió para tranquilizar un poco los nervios de la nueva pareja.

El preguntó a Gaby si le importaba que la besara su mujer para ver cómo se sentía ella.

Gaby dijo que no había problema. Así pues, las dos hembras, que estaban totalmente desnudas, comenzaron a besarse.

A mí y al otro chico, ver aquella escena, nos la puso dura enseguida. La mujer de él giro la cara y miro como yo la tenía dura. Gaby al ver como la chica miró mi polla le preguntó si quería probarla.

La chica, tras mirar como su marido le asentía con la cabeza, asintió también con la cabeza, así que Gaby la ayudo a ponerse de rodillas y guiando su cabeza con una mano y tomando mi polla con la otra propició el encuentro de ambos, haciendo que mi polla entrara en la boca de la chica.

El chico se acercó y puso su cara cerca de la de su mujer y comenzó a decirle guarradas del tipo "por fin estás probando otra polla que no es la mía", "¿Te gusta la polla de chico?". "Chupa como tú sabes, guarra". Y acto seguido le cogió de la cabeza y comenzó a empujarla para que mi polla entrara más dentro de la garganta de su chica mientras le decía “ahora ya no son fantasías ahora es realidad”.

La chica no se quedó corta y empezó a responderle frases del tipo "por fin me como la polla de otro, estarás satisfecho ..." o "mira qué puta que soy que se la estoy chupando a otro que no eres tú" “Mira como se te pone dura de ver como tu zorra se la chupa a otro”.

Gaby y yo flipábamos con el espectáculo. Realmente necesitaban sacar esas fantasías retenidas.

Entonces el chico se retiró y sentó en el banco del vestuario a masturbarse mientras disfrutaba del espectáculo. Gaby hizo lo propio y sentó al lado del chico también, abriendo sus piernas y comenzando a masturbarse, metiéndose los dedos dentro del coño y acariciándose el clítoris.

El chico le dijo a Gaby que ambos se excitaban mucho cuando utilizaban lenguaje sucio, que nunca habían pasado de eso y que era la primera vez que podían ponerle personajes a sus fantasías y su lenguaje sucio.

Gaby tomando la polla del chico con la otra mano libre lo comenzó a masturbar y le dijo "pues disfruta del espectáculo de la puta de tu mujer y mira la mamada que le está haciendo a mi marido". Mirando a la chica también, Gaby le dijo “Mira como se le ha puesto a tu marido”.

El chico estaba tan excitado que dijo que iba a correrse inmediatamente, así que Gaby acelero la paja del chico para que éste se corriera. Hizo que tremendos chorros de leche le cayeran sobre la barriga al chico.

Entonces yo le pregunté al chico si quería que me follara a su mujer. Este asintió con la cabeza. Así que me enfundé un condón, giré a la chica para que le quedará con la cara delante de su marido y comencé a metérsela desde atrás por el coño, lentamente.

Gaby tomó la cabeza de la chica y mientras la agachaba contra la barriga de su marido y le dijo, "anda, limpia la corrida de tu marido".

Ella hizo caso a todo lo que Gaby le dijo y comenzó a limpiar hasta la última gota de leche que había sobre la barriga de su marido.

Yo, viendo aquel espectáculo, me excité de sobremanera y note mi inminente corrida. Se la saqué a la chica del coño, me quite el condón y me fui a por las tetas de Gaby.  Gaby tomo mi polla con la mano y tras darle unas últimas sacudidas provoco una tremenda corrida sobre sus tetas. Tremenda corrida. Gaby tomó mi polla y se la metió en la boca para terminar de limpiármela.

La chica, sorprendentemente, vino y comenzó a repartir generosamente con sus manos mi corrida sobre las tetas de Gaby jugando con ella, pellizcándole los pezones  y magreando esos pechos mojados en mi corrida.

Para ser la primera vez que iban a un local de intercambio resultaron ser muy morbosos, quizás tenían muchas fantasías y morbosidades contenidas.

Con toda la sudada de la sesión de sexo no tuvimos más remedio que darnos una ducha. Después nos en fundamos la toalla y salimos a tomar una nueva copa la barra. Cuando fuimos a pagarla la camarera nos dijo que estábamos invitados por el chico que estaba al final de la barra.

Era un chico joven de unos 25 años, de complexión normal y con buena presencia. Yo me acerque hablar con él para dar las gracias. El dijo que de nada, que era un placer poder invitaros a una copa y que si queríamos algo más pues sería mucho mejor aún. Yo le hice una seña a Gaby dándole a entender que el chico quería estar con nosotros y ella asintió con la cabeza.

Le dije al chico que estaba de suerte y que Gaby había dado el visto bueno, que si quería podíamos pasar a un reservado después. El chico se sentó junto a nosotros y comenzamos a charlar mientras terminábamos las copas.

Cuando terminamos las copas el chico fue a cambiarse y vino enfundado con su toalla entonces quedamos los tres a un reservado.

Nos sentamos en la cama con Gaby en medio y nosotros a los lados, entonces comenzó el juego. Gaby metió la mano por las toallas y nos saco la polla a cada uno para empezar a masturbarnos. Luego se inclinó sobre la polla de chico para empezar a comérsela mientras abría sus piernas dejándome el coño bien abierto para que comenzará mi tarea de comérselo. Así nos quedamos un rato ella chupándole la polla al chico y yo comiéndole el coño.

El chico se gastaba una buena polla, larga aunque no muy gruesa. Gaby se la metió  bien adentro, llegando hasta la garganta, cosa que sorprendió al chico ya que pensaba que no sería capaz de tragársela toda. El muchacho gozaba de la mamada de Gaby.

Entonces la puse a 4 para que pudiera seguir comiéndole la polla al chico y así ya la vez comenzar a follármela yo.

Ella empezó con su típico juego de miradas y palabras soeces que tanto me pone. "Que gusto chupar esta polla mientras me folla mi marido". "¿Te gusta cómo me la trago?". Todo ello mientras miraba al chico con ojos de viciosa.

Luego cambiaron las tornas, le dijo al chico que se pusiera un condón porque se lo iba a follar. El chico se puso el condón y se tumba boca arriba en la cama. Gaby se subió y se fue metiendo la polla del chico poco a poco dentro de su coño para después comenzar a cabalgarlo.

Yo me puse de pie delante de su cara empecé a follarle la boca con mi polla. A veces le metía la polla en la boca y otra los huevos.

El chico le dijo a Gaby que no lo cabalgara tan rápido porque sino se correría muy pronto. Gaby le dijo que no había problema que se corría las veces que hiciera falta, que ahí estamos para disfrutar. El chico le dijo que siempre le había gustado poder correrse en la boca de una chica, pero que nunca lo había hecho. Gaby le dijo que no había problema que hoy iba a poder hacerlo, que nos íbamos a correr los dos en su boca.

Así pues, Gaby se bajó del muchacho, le quito el condón y cogiéndonos a los dos por la polla nos puso delante de su cara, comenzando a masturbarnos fuertemente las pollas. Se metía una en la boca mientras masturbaba la otra y así las iba alternando. Luego en un acto de sorpresa se metió las dos a la vez dentro de la boca jugando con la lengua sobre ellas.

El chico no daba crédito a lo que veía. Dijo que erá la primera vez que veía a una mujer chupar dos pollas a la vez. Entonces Gaby la saco y nos volvió a masturbar las pollas muy fuertemente.  El chico anuncio su corrida así que Gaby se metió la polla del chico en la boca y la chupo muy fuerte hasta que esté se vacío dentro de su boca. La chupo fuertemente hasta no dejarle ni una gota de leche. Luego fui yo el que le advirtió de mi próxima corrida, así que abrió la boca esperando que le disparara dentro todo. Así lo hice juntando la corrida del chico, que estaba dentro de la boca de Gaby, con la que estaba yo disparando en ese momento.

Fue tal la cantidad de leche que tenía Gaby dentro de la boca que se le derramo por la comisura de los labios cayéndole sobre los pechos. El chico cogió sus manos y froto la corrida sobre los pechos de ella. Ella al ver eso, dejo que saliera toda la leche de su boca para caer sobre sus pechos y que así el chico se pudiera deleitar ricamente repartiendo la abundante corrida sobre sus tetas. Como disfrutaba el muchacho ...

Después nos fuimos los tres a la ducha para refrescarnos y limpiarnos. Nos metimos los tres en la misma ducha y mientras el chico limpiaba Gaby por delante yo la limpiaba por detrás. Ella, cómo no, se encargó de enjabonarnos y limpiarnos bien limpias nuestras pollas que con el jugueteo se habían vuelto a poner duras.

Gaby, al ver eso, dijo que no se podían desperdiciar esas empalmadas y que ella seguía muy cachonda, muy excitada.

Así pues, volvimos al reservado y sin pensárselo dos veces Biga empujó al chico contra la cama, quedando esté boca arriba y con la polla apuntando hacia arriba. Ella misma le puso otro condón y se subió encima a  cabalgarlo y girando la cabeza y mirándome de forma muy lasciva me dijo mientras se mordía los labios. "Fóllame el culo".

Yo no pude más que hacer caso a lo que me dijo, así que acerqué mi lengua y le chupe bien chupado todo su culo para dejarlo bien mojadito y que así mi polla entrará más fácilmente. Cuando estuvo bien mojado comencé a meterle mi polla lentamente por su estrecho culo y así quedamos los tres con ella ensartada por nuestras pollas, una por el coño y otra por el culo.

Comenzamos con un acompasado juego de mete y saca en el que las dos pollas nuestras entraban y salían a la vez esos agujeros provocandole un gran placer.  Bueno, los tres estábamos disfrutando al máximo.

Al rato el chico le dijo que si podía probar también su culo, a lo que Gaby dijo que no había ningún problema. Cambiamos las posiciones y me puse yo boca arriba para que Biga se montara sobre mi polla y dejando el culo en pompa el chico pudo apreciar el agujero de su culo que ya estaba dilatando por la follada que estaba pegando yo antes. Así pues, el chico acerco su polla y empezó a meterla lentamente por el culo de Gaby comenzando de nuevo con el mete y saca.

A los 2 minutos el chico le dijo a Gaby que tenía un culo tan estrecho y que le estaba dando un placer tan inmenso que provocaría que se corriera enseguida. Gaby le dijo que no había ningún problema que avisará cuando se quisiera correr y que podía hacerlo sobre sus tetas

El chico saco la polla del culo de Gaby se quitó el condón y se puso delante de ella a masturbarse. Gaby se desmonto de mí y le ofreció los pechos al chico para que se corriera sobre ellos. El chico no tardo ni 30 segundos en soltar tremendos chorros derechos sobre los pechos de Gaby. Para facilitar la cosa Gabi le ayudo agitando fuertemente su polla para exprimirle hasta la última gota y luego comenzó a jugar con ella rozándola con sus pezones.

Yo reclamé entonces mi derecho a correrme también. Gaby me cogió la polla y la comenzó a masturbar fuertemente, mientras mirándome a los ojos me pedía, "échame tu leche en mis tetas también cariño", "quiero sentir tu corrida junto con la del muchacho por mis tetas". Yo ante tales palabras y la velocidad de la paja que me estaba haciendo Gaby no tarde mucho en soltarle mi leche sobre las tetas. Gaby estrujo hasta que salió la última gota y finalizó la faena metiéndosela en la boca y chupando fuerte para deja mi polla bien limpia.

Luego mientras nos miraba a los dos con ojos lascivos comenzó a repartirse la leche generosamente sobre sus pechos mientras nos decía,"mira como me habéis dejado, ahora tenemos que irnos otra vez a la ducha".

Así hicimos, nos volvimos a meter los tres en la ducha para limpiarnos. Luego nos pusimos las toallas y el chico nos brindó otra copa en la barra.  Allí quedamos hablando un rato hasta que el chico nos dijo que se le hacía tarde y tenía que irse y dándome la mano a mí y un beso a Gaby nos dio las gracias por el rato tan placentero que había pasado con nosotros.

Nosotros al rato hicimos también lo propio y tras terminar la Copa fuimos al vestuario para quitarnos la toalla y vestirnos.

Cuando entramos en el vestuario nos volvimos a encontrar la pareja del principio que también se estaba vistiendo.

La chica nos preguntó que qué tal había ido y nosotros le dijimos que muy bien que habíamos estado con un chico, que la habíamos follado varias veces por el coño y por el culo y que incluso Gaby había hecho una mamada doble.

La chica pregunto que qué era eso de una mamada doble. Gaby le dijo que era meterse las dos pollas a la vez en la boca. Entonces la chica se giró y le dijo al marido que si podía probar eso antes de que se fueran. Su marido dijo que eso dependía de mí también.  Yo le dije que no había ningún problema, que si le apetecía yo estaba dispuesto. Gaby la ánimo a que no probará.

Así pues su marido y yo nos sacamos las pollas y las acercamos hasta delante de su cara. La chica hizo lo propio chupando primero una y masturbando la otra y luego cambiando el orden. Al rato dijo, ahora las 2, así que su marido y yo comenzamos a introducir lentamente las dos pollas a la vez en la boca de la chica. Esta comenzó a jugar con su lengua y las pollas que estaban dentro de su boca mientras a su vez con sus manos nos acaricia va los huevos. Gaby para ayudar cogió la cabeza de la chica y comenzó a empujarla contra nuestras pollas para ayudarla a que entraron y salieran de su boca.

Al rato la chica dijo que ya era hora de que nos corriéramos así que pidió ayuda a Gaby y mientras ella masturbaba a su marido Gaby me hacía la paja mí. Al rato el marido de ella avisa que se va a correr y comienza a disparar chorros de leche sobre la cara de su mujer. Entonces Gaby acelero fuertemente mi paja, con lo que también comencé yo a disparar fuertes chorros de leche sobre la cara de la chica.

Ella solo hacía que mostrar cara de placer mientras se restregaba con las manos la leche por su cara y a su vez nos cogía las pollas y se las metía en la boca para dejarlas bien limpias. Parecía que era el regalo de su vida.

Ya después de esto, sólo quedaba darse una ducha, vestirse y regresar a casa porque ya no nos quedaba cuerpo ni fuerza para nada más. Habían sido varias corridas y uno ya sus años no puede correrse tantas veces.

Así pues, tras vestirnos nos despedimos de la pareja y salimos del local, muy relajados, rumbo a nuestra casa.