Vidas entrelazadas (4: Cora, Fede y una fantasía)

Despues de tener que alejarse Cora por razones laborales,la pareja se encuentra periódicamente y mucho sexo.

Vidas entrelazadas 4 ( Cora y Fede y una fantasía)

A pesar de la relación amorosa, Federico nunca trató de sacar provecho en la faz laboral, por el contrario hacía su trabajo y colaboraba muy eficientemente en todo lo que Cora necesitara, además nunca nadie supo de la relación de amantes que los unía.

Así estuvieron mas de dos años, Cora era muy feliz, pero no pòdía secarse los miedos de perder al muchacho, era demasiado joven y apuesto y las mujeres le rondaban por doquier.Esto lo observó muchas veces con otras empleadas de la Empresa, que lo buscaban aún con alevosía, pero felizmente él se hacía siempre el boludo.

Ella siempre buscaba que en cada encuentro de sexo hubiera algo nuevo o diferente, a veces se vestía en la casa en forma de super puta, con minifaldas muy cortas, medias con portaligas (ligueros)escotes que dejaban ver sus senos en plenitud.Hacían el amor en todos los lugares de la casa, dormitorios, baños, cocina, en el comedor, en el living y hasta en el balcón.Una vez cogieron dentro del auto, en la cochera del edificio, haciendolo como un juego erótico.

Generalmente un fin de semana cada 15 días Federico viajaba a la ciudad de Dolores, a casa de sus padres, Cora aprovechaba para salir con su amiga Mirtha o bien viajaba a Santa Fe a visitar a sus únicos parientes.

Un día Cora es llamada por el gerente de la firma y este le expresa lo siguiente – Sra.Talbot, la empresa necesita de sus valiosos servicios, fuera de la ciudad de Buenos Aires, mas precisamente en la provincia de Neuquen, ahí comenzaremos a construir una usina eléctrica de gran envergadura.Estará a cargo de la obra el ingeniero Franco Ferrari

que ya conoce y Ud.sería la encargada de todas las operaciones comerciales nacionales e internacionales con las empresas intervinientes, así como de la administración de la obra.Confiamos mucho en su capacidad y el Directorio de la Empresa, está de acuerdo en pagarle el doble de su sueldo mas todos los gastos de movilidad, vivienda, etc, durante el período de desarrollo de la obra.

Desde ya Ud. puede rehusarse si no quiere aceptar este ofrecimiento.Tampoco es necesario que me conteste en este momento, tiene tiempo para pensarlo, nos volveríamos a reunir en una semana.

Ella ya había trabajado en otros proyectos en el interior y aun en el exterior del país, él último fue en Bolivia donde ganó una importante cantidad de dólares.Pero ahora la situación era distinta, estaba de por medio su relación con Federico Ferrando.

A pesar del tiempo transcurrido su relación afectiva era excelente y ni que hablar de su relación de amantes, sus encamadas eran de lo mejor, desarrollando un sexo total y sin ningún tipo de tabúes, los dos lo daban todo.

Cora decidió consultarlo con su Fede, el después de escuchar el relato de la conversación con el gerente – le dijo – mirá querida yo te voy a extrañar terriblemente y creo que vos también a mi, eso es lo malo;miremos la parte buena, si bien estarás lejos varios meses, cada tres o cuatro semanas supongo que podrás viajar a Buenos Aires y estaremos todo el tiempo juntos, además es importante para tu futuro en la Empresa, aceptar la tarea para la que indudablemente te necesitan y por último puedes ganar mucho dinero en dólares, que siempre vienen bien..Todos los días nos enviaremos mails y siempre tendré una escusa para llamarte por teléfono desde la oficina varias veces a la semana.Por otra parte, trataré para mitigar tu ausencia, de estudiar intensamente mis últimas materias para graduarme cuanto antes de ingeniero.

A Cora no le parecía tan mal lo que su amante decía, por otra parte la idea de trabajar con el ingeniero Ferrari, no le desagradaba, pués este hombre era un solteron de 55 años, buen mozo, pero muy tímido con las mujeres.En las reuniones de directores, el la miraba bastante, pero sin animarse casi a hablar con ella, a no ser de temas de la Empresa y aún así, cuando ella lo miraba se sonrojaba y bajaba la vista, era realmente un "boludo", pero de todas maneras un buen partido para tenerlo como marido y mas de una vez lo había pensado

Al final la respuesta de Cora fue afirmativa y así fue que dejó Buenos Aires, para ir a radicarse a Coleuco, un pueblito situado a 45 km.de la capital de la provincia, dejando a su querido Fede, en no se sabe que manos..

Desde que ella se fue a trabajar a ese pueblo neuquino, se comunicaba con su amor por mail todos los días y hablaban por teléfono unas dos veces a la semana, por otra parte ell viajaba a Buenos Aires, por lo común, cada tres semanas.

Cuando Cora, venía, haciendolo siempre los fines de semana, estaban todo el tiempo juntos, como dos enamorados que eran.

Fede se había comprado su primer auto y ese viernes por la tarde fue a buscarla al aeroparque de la ciudad de Buenos Aires.Cuando se encontraron el le besó la mejilla, no querían mantener mucha efusividad por temor a ser vistos por alguien que los conozca, sobre todo de la Empresa.

Se marcharon rápidamente al departamento de la dama, donde ahora si, dieron rienda suelta a sus ansias y se besaron y se toquetearon como locos.

¿Qué quieres que hagamos? – le dijo él.

Mirá querido tengo una ganas bárbaras de hacer el amor, que me muero, podemos pedir que nos traigan la comida y luego nos acostamos y le damos durante toda la noche.

Luego de cenar Fede – le dijo – mi amor, coger enseguida de comer hace mal, podríamos salir a tomar un café en algún lugar oscuro, esos de trampa, y luego si darle con todo al sexo -¿te parece bien? –

Es una buena idea – dijo la mujer –

Fede poniendo una cara de pícaro – le dijo – yo tengo desde hace tiempo una fantasía, como tantas que hemosa tenido y realñizado juntos.

A ver ¿con que me vas a salir?

Mirá, quiero que te pongas en pelotas y lñuego te vistas con un par de botas y el abrigo largo negro que vos tenés.He pensado en esa fantasía mil veces.

¿Y tu pretendes que yo salga así a la calle?

Si, justamente.

Y bueno, si vos me lo pedís, solicitud concedida.A ella estas cosas tambien le encantaban y por sobretodo porque además no quería negarle nada, no vaya a ser que en su ausencia alguien le conceda algo así.

Se vistió como él se lo había pedido y saliero rumbo a un pequeño barcito del barrio de la Recoleta.Dentro del auto ella se abrió el tapado y mostrándole su desnudez – le dijo – disfrutá de mis encantos, tesoro y el toqueteó con la mano libre ese hermoso cuerpo dueño de una mujer de 50 años

Cuando llegaron al barcito se cerró el abrigo con el cinturón, pués no tenía botones y caminó delante de él meneándose y moviendo ese hermoso culo para deleite del muchacho El lugar era sumamente oscuro, pidieron dos Wiskys.

Estaban sentado uno al lado del otro, por la ubicación nadie los podía ver, entonces Fede le habrió el abrigo e inclinándose sobre ella le empezó a chupar la concha, ella levantó un poco las piernas para facilitarle la intensa lamida de sus genitales, - mientras le decía –

¡hay mi amor ¡ como gozo! Que bien me chupas....seguí.....seguí mi turro, mi macho, dale con tu puta lengua a mi puta cajeta.Y loca de gozo, llegó al orgasmo diciendo ¡me encanta tu fantasía!Luego de un rato de intensa franela decidieron volver al departamento, ella salió adelante meneándose y moviendo el culo, cosa que hacía a la perfección, Fede se acercó y por encima del abrigo le tocó a plena mano el ojete, diciéndole – esta noche te voy a romper el orto para que goces como la gran puta que sos.

Al sentarse en el auto, antes de arrancar rumbo a su destino, ella le abrió la bragueta del pantalón y extrayendo del mismo la parada poronga del joven – le dijo –vos me hiciste acabar con tu hermosa bpoca, ahora yo te voy a sacar tu rica lechita con la mía, y comenzo a hacerle, como solo ella sabía hacerle una mamada de pija increíble, tragándosela toda y dándole ese intenso calor que emanaba de su garganta hasta hacerlo irremediablemente acabar con semejante placer.

Ni bien ingresaron al living, el le sacó el abrigo y se dedicó a admirar ese bello cuerpo desnudosolamente cubierto hasta las rodillas por un par de botas negras, que la hacian aún mas sexi.Le pidió que se ponga de rodillas sobre el asiento del sillón y abriéndole las nalgas le dijo – te voy a coger ese hemoso orto.

Si...si dale – le contestó ella –

A esta altura de los acontecimientos ya no era necesario que usaran vaselina para garchar por el ano, ya Federico le habia penetrado tantas veces ese agujero, que el mismo resultaba de lo más complaciente para el buen pene del muchacho.Se lo puso en la puerta del ojete y presionando suavemente pero ininterrumpidamente se la fue metiendo hasta que sus huevos acariciaban la vulva de la diosa, mientras tanto se masturbaba a mas no poder, llegando por dos veces a obtener intensos orgasmos expresados en forma ruidosa por intensos jadeos y expresiones como, partime el orto mi amor.......¡este ojete es todo tuyo! perforámelo mi tesoro.¡hay.......como gozo cuando me la metes hasta el fondo.........así hasta que él le brindo una buena eyaculación.Cuando le secó el miembro del orificio se quedó mirando como le salia borbotones el semen.

Ella le pregunto – ¿Fede que estás mirando?¿pasa algo?

No mi amor, miro como te sale del culo mi leche.

A ver - -dijo ella – y desde su posición de arrodillada, llevando dos dedos de su mano derecha hacia el ano, los mojó en el semen que fluía y se los chupó ávidamente.

Luego hicieron el amor hasta las primeras horas de la madrugada.

Esas terribles cogidas dejaban a Cora tranquila por varios días, hasta un nuevo viaje a Buenos Aires.