Vidas cruzadas 2ª parte

¡Podríais ser una pareja porno muy atractiva vosotros dos, éste es Brett y tiene una polla enorme, igual que la boca! Miré hacia abajo y realmente el chico iba bien servido

VIDAS CRUZADAS 2ª PARTE

No sé lo que ha ocurrido unas personas me ayudan a levantarme del suelo tras el empujón recibido por Bryan y los gritos de la gente a mi alrededor me hacen darme la vuelta, el gran camión cisterna tumbado de costado y en llamas bajo sus ruedas mucha sangre y el cuerpo deformado de Bryan, en una postura hiperrealista, como si fuera un muñeco desarticulado, sus ojos antes tan azules están cerrados y en sus labios una sonrisa, se oyen el ulular de sirenas y llega la policía, bomberos y ambulancias, del suelo recojo el sobre junto a la invitación y medio trastornado pegado a la pared ando hasta el frente del edificio, los de la ambulancia dicen: ¡Lo llevaremos al Hospital St. Peters, que está más cerca, es cuestión de segundos, rápido chicos! Y la ambulancia parte rauda llevándose a Bryan.

Mis ojos arden por soltar lágrimas, en las escaleras de entrada a la exposición un niñato sentado en ellas mira de izquierda a derecha buscando a alguien, se lo pregunto y levantándome una dulce mirada suelta: ¡Espero a mi amigo Bryan, para entrar con él! Yo poniendo mi mano sobre su delgado hombro dije: ¡Creo que no va a venir, entra conmigo, nos haremos compañía! Él chico muy jovencito se levanta sacudiéndose el pantalón y entra conmigo, mostramos las invitaciones y comenzamos a recorrer las estancias, el joven me dice: ¡Soy Nik! Yo digo: ¡Sean! Él insiste: ¿Cómo sabes que no va a venir Bryan? Yo cabizbajo respondo: ¡Has oído las sirenas y el estruendo de un camión en llamas! Nik responde: ¡Sí, pero no prestaba mucha atención! Trago saliva y continúo: ¡Pues bien, Bryan estaba bajo ése camión que lo aplastaba! Nik cubriéndose el rostro con las manos sollozaba y eso hizo que finalmente las mías aparecieran sobre mi rostro, nos abrazamos desconsoladamente, mientras llorábamos se nos acercó un grupo de jóvenes diciendo: ¡Sí os emocionan estas fotos cuando veáis las vuestras, será peor! Al levantar la vista me encontré frente a un atractivo chico de color y dos jóvenes que parecían iguales, yo dije: ¡A Bryan se lo han llevado al St.Peters, por el accidente del camión! El más afectado de los tres nuevos conocidos fue Peter, que en silencio le caían lágrimas de los ojos, casi sin darnos cuenta nos arrastraron hasta el sitio de nuestras fotos expuestas, concretamente había una a tamaño muy grande y vertical, que no recordaba haber posado para esa foto, simplemente hablaba mientras me iba vistiendo, mi torso al desnudo, los pantalones sin abrochar la cremallera con mis manos abarcando mi voluminoso paquete con mi cabeza mirando a mis manos, realmente la foto era increíblemente bella, el resto eran igual de bonitas, pero a menor tamaño, Nik aparte de varias fotos retocadas para no dejar traslucir su edad, se encontraba una grande en horizontal tumbado sobre una chaisselongue de mimbre con un corto quimono que apenas cubría su cuerpo, sus ojos mirando al techo esperanzado realzaban más la foto, toda ella realzaba lujuria, pena, esperanza y amor.

Las de Drew, el joven de color, destacaba una enorme en vertical desnudo tan solo cubierto por un delantal frente a la fragua golpeando con fuerza una barra de hierro y en primer término una bonita escultura realizada por él, en las otras se reflejaba el interés por mostrar las obras realizadas, pero el escultural cuerpo de color no pasaba inadvertido a nadie. Finalmente las de los hermanos, eran más divertidas, una muy simpática era estudiando en la mesa en calzoncillos cuando el mayor le arreaba al menor una colleja por distraerle, otras peleándose sobre la cama en slips suspensorios y la grande en horizontal sobre el sofá Peter el menor tumbado y John a horcajadas sobre él ambos con sendas almohadas de plumas peleándose esparciendo las plumas por doquier, en otras se les veía paseando tranquilamente por el parque mirándose de vez en cuando sonriendo después.

Algunas personas se acercaban a nosotros tras ver las fotos y apartaban al interesado del grupo para hablar con él aparte, tomamos canapés y bebidas, casi todos tuvimos el móvil lleno de nuevos personajes, unos por un motivo y otros por otro, en mi caso tenía citas para cubrir dos o tres meses de alquiler, al jovencito Nik le cayeron casi encima, a Drew por trabajos y encargos y a los hermanos por sus posibles contactos, una vez sabida su posición social de herederos acaudalados. Cuando la gente comenzaba a retirarse, yo dije, que iba al hospital para saber algo de Bryan, Nik asintió en acompañarme, pero finalmente fuimos los cinco, nos dijeron que continuaba en quirófano en estado muy grave, indicándonos la posible habitación una vez superada las intervenciones múltiples, en la habitación un hombre sentado en una silla cubriéndose el rostro con ambas manos, era su padre, nos presentamos como amigos de su hijo y que veníamos de la exposición de sus fotos, Drew sacó una hoja de pósit y escribió su nombre y teléfono, poco a poco todos hicimos lo mismo dejando la hoja en la mesita, antes de irnos su padre preguntó sobre la exposición y el lugar, se lo dijimos despidiéndonos apesadumbrados del pobre hombre.

Drew nos invita a tomar algo en su almacén a la salud y mejoría de Bryan, tras beber y brindar por él, Peter mete su mano dentro del pantalón y cerrando los ojos comienza a masturbarse en silencio, Drew acaricia su verga sobre el pantalón, Nik saca su verga fuera de su pantalón masturbándose mirando al resto, John y yo hacemos lo mismo, Peter abre sus ojos y saca también su verga, lo mismo que Drew y lentamente todos nos masturbábamos mirándonos unos a otros, todos terminamos soltando nuestro semen, después todos nos retiramos a nuestros destinos.

Al día siguiente las noticias y periódicos hablaban mucho sobre la exposición, sobre todo de Bryan con sus magníficas fotos, pero también añadían la nota trágica del accidente acaecido instantes antes cerca de la exposición. Unas dos semanas más tarde, tras insistir en saber cómo se encontraba Bryan, nos llamó su padre reuniéndonos a los cinco en la habitación de él en la Residencia, allí nos informó del estado de Bryan, en coma inducido, podía estar meses o años así, o bien desconectarlo, le habían hecho hasta 7 operaciones graves y no se sabía las posibles secuelas sí alguna vez se recuperaba, por eso el padre decidió vaciar la habitación llevándose lo que no quisiéramos nosotros, sus amigos, todos deambulamos por la habitación como zombis.

Nik tomó un jersey celeste enorme para él, también mostró la Polaroid y el padre asintió, de la mesita recogió un billete de 20 transformado en una flor, como a veces se las metía en su bóxer y con eso quedó contento. Drew se concentró en recoger todos los negativos de fotos, tomando un foulard de cuello tras olerlo lo guardó con el resto. Peter tomó la cámara de fotos y varias prendas íntimas de él junto a un chándal completo, John descolgó de la pared una foto donde aparecían los tres sonriendo divertidos y un frasco de perfume preferido por Bryan. Por mi parte estaba muy indeciso y cogí una sudadera de la Facultad, encontré unas fotos suyas y una biblia muy usada, en la primera página una letra femenina había escrito: ¡Ábrelo en una página cualquiera y tendrás la respuesta! En todas las páginas había anotaciones en los márgenes, me lo quedé. El resto junto a la ropa le ayudamos a embalarlo  en cajas cargándolo en una furgoneta, ahora la habitación estaba vacía, desolada, sin vida igual que nuestros corazones.

SEAN

Dos hermanos idénticos físicamente, pero mi hermano Karl es bueno en todo lo que hace y yo me siento torpe a su lado, es mejor en los estudios, en los deportes incluso tiene becas, es dicharachero y muy bromista, le encanta hacerme rabiar, yo lo adoro a pesar de las muchas reprimendas que me llevo por no parecerme a él, Karl me asegura que se les pasará, pero siempre encabeza algún que otro disgusto, que terminan sobre mí.

Éste fin de semana estoy castigado por mis malas notas del trimestre y me voy a perder la acampada junto al lago de todos los alumnos de mi clase, refunfuño y me quejo ante tal injusticia, pero mis padres ni caso. Mi gemelo Karl se ha ido con nuestros compañeros el viernes por la tarde, no volverán hasta el domingo a la misma hora, pero el sábado llaman avisándoles de un accidente en el lago y Karl va en una ambulancia al hospital del Condado mientras el resto desmonta todo para volver a la ciudad, vivimos en una localidad de unas 3.000 personas, nos conocemos casi todos, pero a pesar de la prontitud de la ambulancia mi hermano Karl fallece en el trayecto. Yo estoy atónito, no puedo creer, que Karl el perfecto niño nos haya dejado para siempre, tras horas de lloriqueos, mi madre me mira con desdén, murmurando entre dientes, yo encojo mi cuerpo como si fuera un caparazón. El funeral muy triste solamente algunos allegados a la familia, que se retiran pronto dejándonos solos a mis padres y a mí, mi madre me sacude el cuerpo soltando: ¡Tú tendrías que estar ahí, no tú hermano! Luego se abraza a papá sollozando ruidosamente, siento la presión de una mano sobre mi hombro, giro la cara llorosa viendo a un niño gordito apretando su mano sobre mi hombro, sus ojos azules candorosos lo dicen todo y eso me reconforta.

Durante los dos años siguientes las broncas entre mis padres fue a mayor, apareciendo siempre mi nombre como causante de todo y finalmente deciden separarse enviándome a vivir con los abuelos en un pueblo de montaña, allí soy tan bien recibido cómo en casa de mis padres, solamente mi tío, hermano menor de mi padre parece dispuesto a acogerme mejor, voy a la escuela del pueblo y ayudo a mi tío en las tareas del campo. Una tarde descansando en el prado vigilando a las vacas me pregunta por mis recuerdos con mi hermano y se lo cuento todo, pero me sorprende una pregunta de él: ¿La verga de los dos eran iguales? Yo sonrió diciendo: ¡Se parecían, pero a mí se me ponía más dura rápidamente y eso a Karl le enfurecía! Max, mi tío dijo: ¡Haber muéstrala, si al contacto se endurece, te doy la razón! Abrí mi pantalón mostrándole mi verga flácida, al verla dijo: ¡Si señor será una buena polla! Inclinó su cuerpo sobre ella oliéndola, su respiración agitada sobre mi miembro hizo que comenzara a crecer en tamaño ante sus ojos y con su mano la cogió llevándosela a la boca, el placer era inigualable, sus dedos revolvían la escasa pelambrera del pubis y también acariciaba mis huevos, mientras su cabeza subía y bajaba chupándome la verga.

Me hizo poner a cuatro patas sobre la manta donde nos sentábamos bajándome el pantalón hasta detrás de las rodillas notando su lengua sobre mi culo lamiéndolo y chupándolo, mientras él se despojaba de sus pantalones y poniéndose detrás de mí dijo: ¡Sean, como todo en la vida primero viene el dolor y después el placer, aguanta el primero como un hombre y el segundo te llenará de esperanza! Mientras soltaba esa parrafada mojó su polla con saliva metiéndomela en el culo de un solo golpe, me mordí los labios para no quejarme haciéndolos sangrar, al poco en mi culo notaba como entraba y salía su dura polla, sus rudas manos sujetaban mis caderas follándome a conciencia, notaba un ligero placer cuando empujaba dentro y mi verga creció de nuevo tamborileando con las sacudidas entraba y salía, entraba y salía, cada vez con más intensidad y soltó un gemido apoyando su cuerpo sobre mi espalda mientras yo notaba dentro de mi culo unas salpicaduras de semen, mi verga comenzó a soltar el mío sobre la manta y me reí, con fuerza en mucho tiempo, era como la ubre de una vaca soltando leche. Al terminar mi tío Max, dijo, que tenía un culo precioso para ser follado una y mil veces.

Pasó el tiempo y tío Max me enseñaba a darle placer, ya con la boca como poniendo mi culo, también le encantaba que le comiera el culo a él, pero nunca me dejó penetrarlo, por las noches se colaba en mi cuarto y terminábamos tras el sexo durmiendo juntos abrazados, pero la dicha nunca es definitiva y la abuela nos encontró en su cama teniendo relaciones sexuales, en fin me estaba follando y por descontado la culpa era mía, me prepararon una gran bolsa con lo mío y me dieron puerta, de lejos mi tío al verme cargado cogió el furgón llevándome a la estación de tren, allí metió la mano en su bolsillo sacando muchos billetes, me dijo que buscara un sitio barato donde dormir alentándome diciendo, que con esa cara y mi cuerpo podría ser actor de cine y si tenía que poner el culo por necesidad usara preservativos de la farmacia, el beso que me dio en la boca sonaba a despedida.

Iba a cumplir los 16, algo aterrorizado me enfrentaba al mundo sólo, viajando de Iowa al otro extremo a New York, un taxista me dejó frente a un motel que alquilaban habitaciones por días. Era un cuchitril, al abrir la bolsa encontré un móvil nuevo, regalo de Max, esa noche apenas pegué ojo, por la mañana temprano compré un plano de la ciudad y entré en un bar pidiendo un sándwich con un refresco, un hombre algo robusto me miraba de forma insistente, fui al lavabo, el hombre entró detrás de mí poniéndose a mi lado en el urinario observándome y dijo: ¡Sí me chupas la polla te doy un billete de 50 y 50 más si me dejas follarte! Viendo mi indecisión me acaricia la nuca llevándome al WC privado, me agacho abriendo su pantalón y tomando su verga la chupo con fuerza, él hombre inclinó su cuerpo metiendo su mano dentro de mi pantalón acariciando mi culo, su polla está dura y mojada, me hace levantarme y dándome la vuelta contra la pared termina bajándome los pantalones y sujetándose la verga la mete en mi ano embistiéndome duramente y gimiendo quedamente, terminó dentro de mí, me subí la ropa y él me entregó lo prometido diciendo: ¡Otra vez pide antes el dinero, porque podría ser que no llevara nada y haber disfrutado de tu culo gratis! Y el hombre salió, me guardé el dinero y en el móvil indagué sobre agencias de actores y modelos, había una bastante cercana y me dirigí allí, la representante dijo que necesitaba fotos de muestra me entregó la tarjeta de un fotógrafo para que me las hiciera esa tarde.

A primera hora de la tarde, un joven de unos 35 años me miraba de arriba abajo girando a mi alrededor, me toma unas pocos fotos y me pide que me desnude totalmente colocándome sobre una tarima de rodillas apoyando mis manos en la misma tarima, toma más fotos, de vez en cuando acaricia mis nalgas diciendo: ¡Bonito culo, una delicia! Deja la cámara y entre mis piernas mete su mano cogiendo mi verga y me masturba enterrando su boca en la raja del culo lamiéndome el ano, momentos después me penetra, su mano continúa masturbándome y con la respiración agitada saca su verga de mi culo poniéndose frente a mi cara metiéndola en mi boca, con dos embistes más termina derramando su semen dentro, una vez satisfecho se pone a mi lado terminando de masturbarme y mojando la tarima con mi semen, me pide que me vista de nuevo diciéndome: ¡No creo que sirvas como actor, eres muy delgado, pero tal vez te puedes dedicar a otro tipo de películas, como lo que acabamos de hacer, porno, tienes un culo perfecto, piénsalo! ¡Las fotos estarán mañana pasa a recogerlas, te las has ganado! Al día siguiente el fotógrafo me entregó las fotos y volvió junto a un joven arrodillado en el suelo frente a él chupándole la polla diciendo: ¡Podríais ser una pareja porno muy atractiva vosotros dos, éste es Brett y tiene una polla enorme, igual que la boca! Miré hacia abajo y realmente el chico iba bien servido.

Las manos de Brett apretaban las nalgas del fotógrafo mientras la polla de éste entraba y salía de su boca, al final dejó de chupar masturbando la verga derramando el semen sobre su cara y chupó de nuevo. Tras arreglarse la ropa el fotógrafo llamó por teléfono y apuntó una dirección pasándome la nota diciendo: ¡Ahí te sacarán fotos para unas revistas de desnudos y te espero mañana por la mañana para hacer la sesión con Brett! Mi polla estaba dura dentro del pantalón recordando la mamada de Brett cuando llegué ante el nuevo fotógrafo, con éste había un joven ayudante, me saludó amistosamente y me pidió que me desnudara, cambiaron varias veces de decorados sacando un sinfín de fotos, estaba exhausto como el fotógrafo que se quitó la camisa, casi de inmediato me encontraba chupando la verga al joven ayudante y siendo enculado por el fotógrafo ambos terminaron llenándome la espalda de semen.

El día siguiente paso veloz, me enseñaron a estar bien limpio por dentro antes del rodaje, realmente disfruté de un increíble sexo con Brett, su enorme verga tan gruesa y larga me causaba dolor y yo gemía quejándome, pero luego todo eran gemidos de ambos, mientras el fotógrafo captaba con las cámaras todos nuestros movimientos grabándolas, al finalizar Brett dijo: ¡Mi polla entraba como un guante en tu culo, eres fantástico y con tú boca también has conseguido que mi ano palpitara de placer con tu lengua insistente, me habría dejado penetrar por ti de lo cachondo que me has puesto, pero la faena es la faena!

Días después el montaje estaba finalizado y nos lo mostró, realmente era excitante, Brett esplendido marcando todos sus músculos incluida su poderosa verga, hasta yo resultaba atractivo liviano como una pluma entre los brazos de Brett, unos divinos primeros planos lamiéndole el culo que palpitaba con mi lengua, él me follaba en diversas posturas, pero la más excitante cuando Brett de rodillas y sentado sobre sus pies me tenía tumbado frente a él, arrastra mis piernas poniéndolas a cada lado de sus caderas mientras mi culo reposa sobre sus muslos y sujetándose la polla me ensarta con ella, ante tal poderío mi cuerpo se arquea hacia atrás como un junco dentro del agua y mecido por el viento, primeros planos de mi cara lujuriosa de placer siendo penetrado, sus manos en mi cintura empuja mi cuerpo sobre el suyo, mi espalda roza sus muslos y rodillas, aprieta más y más su verga dentro de mí, los dos gemímos, mi polla emerge rígida entre ambos mientras Brett susurra: ¡Amigo mío hoy me perteneces, eres mío y yo soy tuyo, que esto dure eternamente! Los dos gemimos de nuevo pasa su brazo doblado tras mi cintura levantando mi torso mirándome a los ojos y dije: ¡Juntos! Mientras digo esto me da una fuerte embestida de polla y yo inclino mi cabeza hacia atrás gimiendo, mi verga comienza a escupir semen sobre el cuerpo de Brett en bastante cantidad manchándole hasta los labios, él inclina su boca saboreando mi gruesa nuez besándola y acunándome con su polla todavía dentro de mi culo, me hace ponerme de pie frente a su cara y sus dedos entran en mi ano, lentamente va saliendo su semen de mi interior, que él recibe en su boca con la lengua fuera, me lame el ano haciéndome sentar de nuevo sobre él y su polla entra de nuevo, nos abrazamos juntando nuestras caras y Fin. Mi polla se ha puesto dura al ver la peli y creo que a todos, ya que no paran de tocárselas, aparte de Brett y yo, está Floyd el fotógrafo y dos jóvenes que también filmaban con las cámaras el día de rodaje, todos estamos satisfechos, Floyd lo va a lanzar a la Red en su página Web, toca esperar la aceptación del público, abren unas botellas de champan y brindamos, me acerco a Brett y le pregunto: ¿Por qué no me besabas en el rodaje, acaso te doy asco? Él acaricia mi mejilla diciendo: ¡Mi niño, eres un encanto, me siento feliz cuando te penetro, pero los besos prefiero reservarlos para cuando aparezca alguien especial, entonces entregaré mi alma, es muy personal! Y depositó un ligero beso sobre mis labios.

En pocos días habíamos conseguido una millonada de descargas de la peli, Floyd me pagó 5000, el resto del mes hicimos cuatro pelis más, una Brett y yo solos, otra con otro chico y las dos últimas con varios chicos más terminando en folladas múltiples, aprovechando la salida de mis fotos en las revistas y al ser mejor pagado me mude de habitación, ahora el lugar era algo más decente y mi móvil no dejaba de sonar, hombres que me pedían citas con ellos constantemente, Brett me aconsejó que subiera mi precio y seleccionara los clientes, ya que las películas no siempre iban igual de bien y eso hice. Ahora tenía clientes fijos, pero de vez en cuando me daba el placer de andar por las calles buscando algunos encuentros rápidos, asistía a una Escuela de Interpretación e incluso abrí una cuenta bancaria, que semanalmente se incrementaba, pero no encontraba con quien compartir mis temores, mis anhelos y pensamientos, entonces apoyado en la esquina de un bloque apareció él, un joven gordito con una bolsa colgando a través de su cuerpo, le pido un cigarro y hablo con él, le invito a mi habitación, él asegura que para tomarme unas fotos, pero todos dicen los mismo, solo quieren cogerme por detrás.

Lo sorprendente, es que esta vez es cierto, me había desnudado delante de él ofreciéndome, su límpida mirada y la forma de hablarme, me llena el corazón, no exige nada, ha acariciado mis nalgas y la espalda, pero me pide que me vista de nuevo mientras él dispara una y otra vez su cámara, parecía una película al revés y eso me enardece poniéndose muy dura mi verga dentro del pantalón, su mano regordeta abre mi cremallera sacándome la polla y suavemente comienza a masturbarme susurrándome bonitas palabras que me encienden más, muevo mi pelvis mientras él sujeta mi verga y suelto mi semen sobre el suelo gimiendo, llorando, el dolor está ahí dentro pronto a salir, me da su número de móvil pidiéndome el mío, me promete unas copias de las fotos, me besa los labios y se va dejándome los 200 prometidos. Durante la semana pienso en él varias veces al día, supongo que no llamará y un día suena el móvil y oigo su voz tan dulce, me indica, que tiene las copias y una sorpresa, que me arregle un poco y nos vemos en una parada de autobús, me dice la dirección, es un sitio céntrico.

Al pasar por un callejón veo a un hombre que me atraviesa con la mirada, hace un gesto con la cabeza indicándome el callejón y me acerco, saca su polla, era una virguería, me pide una rápida mamada a cambio de 50, me los da y agachándome comienzo a chuparla, el hombre va tan caliente que no me avisa y termina llenándome la boca con su semen, se cierra el pantalón y se marcha, yo me acerco a una papelera y escupo el semen llevándome un spray mentolado a la boca, entonces distingo a mi gordito Bryan junto a la parada del autobús, había bastante gente que se sube a uno interurbano, quedándose solamente él mirando en mi dirección, le saludo con la mano y cruzo, al llegar junto a él me entrega el sobre y me muestra las fotos, realmente soy yo, pero incluso me veo guapo, entonces me entrega la invitación para la Exposición de fotos y entonces me empuja hacia la acera, tumbado desde el suelo no se lo que pasa pero veo el cuerpo de Bryan voltear y voltear, una y otra vez bajo las chirriantes ruedas de un gran camión pesado, me ayudan a levantarme y miro en su dirección, era lo más parecido a una muñeca desmembrada y sangrando por todos lados, sus ojos cerrados mientras que sus labios sonríen. Pienso que de haber llegado antes tal vez… Las fotos de la exposición fueron increíbles e incluso algunos agentes artísticos anotaron mi número en sus agendas.

Drew

Vivimos hacinados con mis padres en un barrio muy conflictivo, tengo tres hermanos mayores, que siempre se meten conmigo, siempre dicen que tengo que endurecerme más para no recibir malos tratos por el resto de gentuza, para embromarme me llaman su lindo cachorrito, la pubertad ha pasado y dormimos los cuatro en la misma cama, a veces notó la dureza de uno de ellos apretándose en mi trasero lentamente baja mi slip y sujetándose la polla me la mete en el culo con gran dolor, su mano cubre mi boca mientras empuja su miembro más profundamente, mueve su pelvis continuamente y pasado un rato jadea llenándome el culo al terminar.

A partir de ése día los tres terminaban metiéndome sus pollas en el culo saciándose, yo los quería y les odiaba al mismo tiempo por lo que me hacían sentir, vergüenza y placer todo en uno. A veces me follaba uno o los tres uno tras otro, pero ahora lo disfrutaba con ellos e incluso se dejaron penetrar por mí en alguna ocasión sintiéndome dichoso por ello. Fui creciendo y fortaleciéndome, no me importaba ser utilizado por ellos, me llevaban algunos años más, cada vez se volvían más exigentes, pero llegó el momento que me enfrenté a ellos y luché, a uno le di una patada en la entrepierna dejándole doblado, al otro un codazo en la nariz, que quedó sangrando y finalmente al tercero un golpe en la nuez, que quedó varios días sin habla, dejaron de penetrarme a su capricho, aunque reconozco, que de vez en cuando los provocaba para tener sexo con ellos, pero de igual a igual. En ese barrio no pasaba nada bueno y finalmente ocurrió, en una reyerta entre bandas cayeron traspasados por disparos en ráfagas desde un coche en marcha, mis padres me enviaron a otro barrio con la abuela algo más tranquilo, allí comencé a experimentar con cualquier cosa haciendo manualidades, un trozo de madera con lija y paciencia terminaba siendo una figura, trozos de alambre lo mismo, con latas de refresco igual, en la Academia al ver mis dibujos, me dieron una ayuda para Bellas Artes, apenas me relacionaba, en el fin de curso a un hombre le gustó mis grabados sobre una plancha de cobre y pidió comprarlos, desde ése momento fue mi mecenas, me consiguió un estudio en un almacén con varias plantas encima cerrado, él lo compró para mí, de vez en cuando venía a visitarme y hablábamos de distintas tendencias e ideas, él siempre tan elegante, con unos dedos largos y delgados, sus dientes nacarados siempre sonriendo, un día me pidió un favor, que le dejara chupar mi polla, pese a mi renuencia inicial acepté dejando que disfrutara chupándome la polla. A partir de entonces como si fuera un alquiler, un día y hora fijados él disfrutaba comiéndome la polla, sin pedir nada más a cambio, yo mejoraba en técnicas descubriendo un mundo nuevo en la escultura, asistiendo a seminarios, exposiciones para ver las novedades, pasaron los años y un mes no apareció, me pareció extraño, pero no sabía localizarle y sonó el teléfono, era de un bufete de abogados solicitando mi presencia, ya que se trataba de algo delicado.

Me arreglé lo mejor que pude y fui al bufete, allí me notificaron, que según el testamento del Míster Roswell, me hacía la donación de la totalidad del edificio donde yo trabajaba y vivía, los impuestos estaba pagados durante los 50 años siguientes, dejándome además una pequeña renta mensual para los gastos más acuciantes, me preguntaron si aceptaba la herencia, pero antes de responder, quise saber cómo había muerto, ellos de forma escueta dijeron: ¡Estaba en una sauna masculina y le dio un ictus cerebral, cayendo fulminado en el acto, no pudieron hacer nada por él, cuando llegó la ambulancia ya estaba muerto! Acepté la herencia y lo primero que hice fue sobre una plancha de cobre un retrato repujado mental de él sonriéndome antes de zamparse mi polla, ahora ansiaba esa boca en mi verga. Al día siguiente fui para firmar unos papeles al bufete de abogados y al tomar el autobús, un joven gordo me miraba atónito, su mirada iban de mis manos a mi rostro, me insinuó que le gustaría fotografiar mis manos y rostro y yo le dije: ¿Cuándo? Y casi instantes después me estaba sacando fotos delante del torno de alfarería con las manos embarradas, luego con mis últimas esculturas y yo me iba excitando mientras él me ordenaba una y otra cosa, es menor que yo, no es atractivo, pero tiene algo especial, tal vez sus ojos, su sonrisa, ahora me he quitado la camisa y frente a la fragua desnudo totalmente excepto por un delantal ignifugo y golpeo el hierro candente como si fuera una polla, sudo y mi verga crece.

Cuando señala que ya tiene las fotos y deja la cámara, me acerco a él, paseo mis dedos por su boca diciéndole, que tiene unos ojos azules muy bonitos y unos labios apetitosos, sus regordetas manos acarician mi pecho rozándome las tetillas que se endurecen como el hierro, él se agacha delante de mí girando el delantal y sus dos manos sujetan mi polla mientras que su lengua se dispara entrando dentro de la piel del prepucio ¡Joder, solamente su lengua ha levantado mi verga en su totalidad, su boca engulle mi capullo, nadie me había excitado tanto en tan pocos minutos! Mientras chupa se masturba con su mano dentro del pantalón, yo empujo mi pelvis metiéndole más mi polla en la boca, noto su agitada respiración oliendo mi pubis mientras traga, se pone colorado ante el esfuerzo pero continúa metiéndosela más al fondo, mis dedos entre su cabello lo acarician y descargo mi semen en su boca, sigue chupando dejándome mi verga limpia, creo que él se ha corrido entre sus dedos, se levanta y beso sus labios, nos damos los números de móvil y promete traerme copias de las fotos, días después aparece entregándome las copias y la invitación a la Exposición, esta vez no ha habido sexo y pienso, que me habría gustado chuparle la polla aunque fuera chiquita, pero sus fotos son increíbles, no creía que nadie pudiera sacar tan buen partido mientras estoy trabajando, estoy erótico, exótico y hasta impúdico mostrando partes de mi cuerpo.

La exposición fue un éxito agridulce, las fotos expuestas cautivaron a la gente y algunos se acercaron para hacerme encargos de esculturas, Pero el autor de todo ello Bryan, estaba entre la vida y la muerte. Tras la visita al hospital invité a los amigos de Bryan a tomar una copa en el taller y terminamos todos masturbándonos en honor de Bryan, el rostro de todos reflejan pesadumbre, pero John apenas deja traslucir lo mismo, su cara mira con un cierto desdén al resto de nosotros, creo que tendré que averiguar más sobre él.