VIDAS capítulos 5 & 6

Iris inicia su camino pensando en el futuro inmediato y Franco regresa después de una ausencia larga

CAPITULO 5 UN TOQUE DE REALIDAD

ELLA

Luego de la noche con Miguel pasaron un par de semanas para que el las marcas en mi cuerpo desaparecieran y me sintiera yo misma de nuevo, pensaba cómo encarar a mis padres para decirles que quería dejar el instituto, donde estaba pasándola mal, para dedicarme al modelaje a tiempo completo, cuando entro en el teléfono un mensaje de numero desconocido, era Miguel: “ en la dirección que te voy a enviar están solicitando modelos con tus características, lleva tu portafolio ”.

Pensé en mandarlo a la mierda en ese instante, cuando me llego otro mensaje con los datos de la agencia y que dijera que él me enviaba recomendada, la rabia era tanta que casi tiro mi teléfono contra la pared, de nada sirvió bloquear a ese desgraciado, pero decidí calmarme antes de decirle sus verdades y que se olvidara de mí, así que fui a cocina a prepararme una merienda de yogurt griego con granola mientras repasaba en si era verdad o no lo de la agencia, cuando llegaron varias de mis primas de visita.

Una de las que llego era la maquillista que me ayudo a entrar en la revista, ella me conto de una nueva agencia de publicidad y modelaje que recién había tenido un enorme éxito en un par de campañas y cuando dijo los datos de la agencia, resulto ser la misma del mensaje de Miguel, menciono que estaba en crecimiento y solicitaban modelos masculinos y femeninos, pero que solo aceptaban los que estuvieran recomendados por algún contacto de la agencia.

Pensé en lo que decía mi abuela Enriqueta “ Dios sabe porque hace las cosas a veces da y a veces quita ”, parece hoy toco que me diera algo, decidí aplazar la plática con mis padres hasta estar segura dentro de una agencia si no en esa, en alguna otra. La siguiente semana tenía un par de días libres del instituto y los aproveche para ir a la agencia.

Cuando llegue a la agencia me recibió una chica guapa, pero con actitud pesada, me tomo los datos y me pregunto quién me había hablado de la agencia, le mencione a Miguel y me hizo pasar a otra sala donde me recibió otra chica, ella se llamaba Marta resulto ser muy maja y la mar de amable, cuando le mostré mi portafolio se sorprendió y me dijo:

Marta—Que hermosas fotos, ¿Quién te las tomo? –

Iris—Miguel XXX—

Marta—¿Te salió caro? Tiene alguna fama ese tío, es amigo de las dueñas—

Iris—Si, algo me costaron— creo que noto lo que quise decir.

Marta—Definitivamente tienes potencial para el modelaje, espero que te traten bien acá—

Iris—Eso significa que tengo el trabajo dentro de la agencia—

Marta—No sé cómo te imaginas el trabajo, pero mejor te explico cómo es acá, el tuyo no será un empleo de 9 a 5— me dijo mientras sonreía.

Me explico que en el caso de las modelos los clientes elegían a la persona o personas que les parecieran apropiadas para sus productos, la agencia se encargaba de desarrollar un concepto en base al producto y las ideas del cliente, se los presentaban y cuando el cliente aceptara la campaña allí empezaría mi trabajo como modelo que era mucho más complejo que solo verme bien, la paga por sesión era muy superior a la que tenía en la revista y había otras bonificaciones además podía seguir con ese trabajo de la revista siempre que no interfiriera con las sesiones de la agencia, ellos no tenían ningún problema con eso.

Llegué a mi casa feliz, pero al entrar debía encarar a mis padres para contarles la nueva situación, decidí hacerlo después de la cena y se me armo una grande, mi padre se opuso de manera rotunda pero su actitud se relajó al hablarle de los pagos por sesión y de las bonificaciones que nos podían ayudar a llegar más pronto a la meta de sanear nuestra economía familiar a regañadientes aceptaron, yo me comprometí a terminar ese curso en el instituto y aunque me faltara un año, ese lo podría completar después cuando tuviéramos dinero.

La agencia tardo una semana en llamarme y no era para modelar, fue para una exposición de vehículos donde estarían unas chicas que habían realizado un calendario para una marca de motocicletas, nos llamaron a dos chicas más las modelos del calendario, el trabajo consistía en entregar publicidad por todo el recinto mientras las chicas de las fotos interactuaban con el público  promocionando el calendario y la marca (si, era hacerla de edecanes), al llegar vi que el atuendo era un enterizo con los colores de la marca, se ajustaba como una segunda piel al cuerpo con un escote algo pronunciado y la marca que promocionábamos por todo el lado derecho del cuerpo, me escandalice al ver como se me marcaba toda la ropa interior en la tela. La otra chica de la agencia que era de mayor edad me dijo que debí haber llevado solo una tanga, ese día me ayudaron dos chicas de otra marca igual de jóvenes que yo, una llamada Eva me presto otra tanga nueva que tenia de repuesto, aunque me quedo apretada y la otra llamada Rosario me ayudo a disfrazar el camelltoe (creo que así le llaman ahora).

El evento paso en la mañana con los hombres acercándose para verme el trasero y tratar de tocarme cuando podían, yo solo sonreía y aguantaba hasta que llegara la seguridad cuando estuvieran muy pesados los tipos, a la hora de comer nos juntamos las tres de nuevo.

Rosario—Tu deberías estar entre las del calendario—

Eva—A ellas las cuidan más que a nosotras, casi no dejan que las toquen—

Iris—Soy la nueva dentro de la agencia, imagino que es lo que llaman “derecho de piso” –

Eva—La otra edecán de tu agencia no parece que te quiera cerca—

Iris—Eso pienso yo también, pero no quiero molestarme en mi primer trabajo—

Eva—Igual debería cuidarte, seguro es envidia por la juventud—

Rosario—Claro que deberías molestarte y no dejar que te envíen como carne de cañón—

Iris—Gracias, pero necesito el dinero y no quiero que me tomen como alguien difícil para trabajar—

Eva—Nena todas necesitamos el dinero, mírame a mi tengo un bebe y el padre está en la cárcel por tráfico de drogas— me sorprendió esa confesión tan franca —me toco decidirme entre esto o ser puta, aunque a veces no sé si acerté con la decisión—

Rosario—Amiga, acá muchos, por no decir todos, creen que por estar en esta ropa será fácil meterte a la cama, la obligación de tu agencia es cuidarte de esos tipos—

Eva—Para ajustar tu pena, te envían con semejante zorra— dijo dando un suspiro —si no está por acá seguro debe estar dando una de sus mamadas legendarias en algún lado— ambas rieron por el comentario, mientras mis ojos se abrieron como platos por lo que decían.

Cuando les pregunte a que se referían, me contaron varias historias de mi compañera, aventuras con miembros de seguridad de los eventos y ejecutivos de varias marcas, todas las historias eran rumores que ellas habían escuchado tipo: un amigo me conto, una chica le escucho, nada que ellas hubieran visto, pero todas las historias coincidían en que mi compañera de la agencia era una experta en sexo oral, nos quedamos juntas las tres, después de comer, por el resto del evento hasta  finalizar luego intercambiamos números y prometimos salir de fiesta algún día las tres.

Un par de días después llegue a la agencia a recibir mi primer pago y de paso a ver si había otra cosa para mí, al llegar me recibió Marta y platicamos un rato, no me confirmo ni me negó nada de mi compañera, se enfadó con ella cuando le conté que de no ser por las chicas de la otra marca hubiera estado sola todo el tiempo,

Las semanas se fueron pasando entre eventos similares con mejor o peor suerte, luego de un par de meses me llego por fin la experiencia de modelaje en cámara y pasarela, en pasarela los diseñadores decían que me faltaba algo y por eso no me llamaban tanto como me hubiera gustado, por el contrario, en fotografía los camarógrafos me halagaban por mi porte y me pedían seguido para promocionar marcas juveniles.

Luego de varios meses en la agencia mi situación se fue estabilizando y un día quede para hablar con Marta, que de a poco se fue convirtiendo en mi mejor amiga, donde me conto varios proyectos que tenía la agencia y por último me aviso que en poco más de una semana había una sesión para promocionar un centro comercial que abriría próximamente y habían solicitado a varios modelos jóvenes de la agencia que estarían para esa campaña, que estuviera atenta al llamado.

Llego el día de la sesión la gente empezó a llegar y los asistentes de los fotógrafos empezaron a arreglar las luces y todo el equipo, llegaron los fotógrafos, la primera era una chica rubia como de la edad de Marta, muy guapa y con mucho estilo de como unos 25 o 26 años, para mi desgracia el otro era Miguel, le pedí a Marta que me pusiera en el grupo con la chica, que se llamaba Carmen, ella accedió pero me dijo que Miguel le había hablado para que yo estuviera en su grupo (que se joda dijimos al mismo tiempo), esperamos a que llegaran el resto de personal y modelos, cuando llego EL, era el chico más guapo que había visto en mi vida, era alto,  con un rostro y un cuerpo hermosos, capto toda mi atención en ese instante.

CAPITULO 6 EN EL AFTER

EL

La chica que hablo resulto ser la rubia que llego con mi primo a la fiesta, nos pusimos a platicar durante un rato, de edad era un poco mayor que mi primo, llego con un vestido color verde oscuro una chaqueta de cuero negra, medias negras y zapatos tipo botas militares, el vestido le quedaba ajustado al cuerpo y marcaba una figura tipo guitarra los pechos se le notaban pequeños pero firmes, al estar platicando con ella por un rato la vi más linda que al principio, su charla era amena y divertida, tenía un acento español un poco diluido, no reconocí de que región especifica.

Carmen—¿Es cierto que eres un genio? –

Franco—jajaja, Esa definición implica muchas cosas más que solo ser inteligente—

Carmen—Explícate—

Franco—Por ejemplo, podría implicar que al frotar una lampara salgo yo con todos mis libros—

Carmen—¿Y cumplirías todos mis deseos? –

Franco—Lo intentaría, al menos—

Carmen—jajaja, ¿Cómo te definirías entonces? –

Franco—Soy un chico que saco una nota alta en una prueba y tiene facilidad para algunas cosas—

Carmen—Que chico tan modesto, dame unos minutos, voy a ver que hacen mis amigos, no confió en ellos son capaces hacer cualquier cosa si se aburren—

Cuando se levantó no pude evitar mirarla, la gracia con la que se movía era de ensueño y el movimiento de su culo era casi hipnótico, al rato regreso ella junto con Quique a decirme que se retiraban que tenían otra fiesta y si me quería ir con ellos, casi todos los amigos de mi hermana se habían retirado y solo quedaban los pagafantas que menos me agradaron y los acompañe.

En el camino cuando pregunte hacia donde nos dirigíamos, ninguno me quiso explicar cuál era nuestro destino, estábamos en el asiento de atrás con Carmen en el medio, mi primo y yo, adelante el amigo de primo conducía prácticamente en silencio y las dos chicas de cabello negro estaban en el asiento del copiloto dándose piquitos y susurrándose.

Carmen—Chicas ¿Por qué tanto secreto? – ambas solo rieron de forma picara.

Quique—Seguro creen que no debimos traerlo—

Carmen—Creo que estará bien, siempre y cuando no le dejemos solo—

Quique—Mira quien lo dice, eres la primera en dejarnos solos siempre—

Todos rieron al mismo tiempo y Carmen me tomo por el mentón dándome un suave y prolongado beso en la mejilla, mientras me acariciaba el muslo, una de las chicas dijo “ parece que, si Carmen desaparece, no lo hará sola ”, en mi mente solo deseaba que esas palabras fueran ciertas, ella me hacía sentir como en una nube, ¿será que me estaba enamorando?

Cuando nuestro chofer improvisado anuncio que habíamos llegado después de como media hora, nos estacionamos frente a una casa con fachada antigua, de un portón salió un tipo moreno enorme, mi primo se bajó y fue a hablar con el sujeto, le dio unos billetes, luego nos abrieron el portón y mi primo hizo señas para que entráramos.

Al bajar del auto Carmen me soltó y se acercó a saludar a otro de los tipos de seguridad, las chicas me tomaron una de cada brazo diciéndome “ si esta te deja, nosotras nos encargamos de ti ”. Carmen regreso rápido y se rio irónicamente al verme en medio de las chicas, me tomo por la espalda abrazando la cintura, así caminamos los cuatro tropezándonos hacia una puerta de ventanal con cortinas grandes y pesadas al traspasar se podía ver que había gente de todas las edades, nadie volteo a vernos la mayoría ni se percataron del grupo de jóvenes que entrabamos a la sala, había música ambiental suave que dejaba conversar sin necesidad de acercarse de más, las chicas me dejaron con mi primo, mientras el chico se fue a saludar a un grupo que estaba alejado de la puerta, nos acercamos a la barra y mi primo le hizo una señal al que atendía y este nos dio una botella de agua mineral a cada uno, en ese momento regreso el amigo de mi primo y le dio una pastilla a mi primo y cuando intento darme otra a mí, Quique le dijo que no con la cabeza el chico regreso con el grupo que  busco al llegar.

Quique—¿Qué te parece? –

Franco—¿El lugar? Está bien–

Quique— No baboso, Carmen, a ella le gustas— dijo tomándose la pastilla que le dio su amigo — a ti parece que te encanta— yo me reí por su comentario —solo ten cuidado no te enamores—

Franco—Tratare, pero no te prometo nada— mientras observaba a todos en la sala.

Quique—A mí no me prometas nada, es por ti, ella no se comprometerá con nada ni con nadie, he visto a un más de un par de chicos y chicas que se enamoran de ella y terminar mal—

Franco—Ok, intentare, entre esos chicos ¿estas tu? — él no me respondió.

Las chicas regresaron, Carmen se recostó sobre mí y una de las otras chicas le planto un enorme beso a mi primo, mientras la otra hacia la misma operación que hizo Carmen ahora con mi primo, la que lo beso sugirió que nos fuéramos a la sala de baile que allí estaríamos más en “ambiente”, atravesamos un pasillo ancho hacia otra sección de la propiedad y al llegar abrieron una puerta pesada que dejo escapar música bailable que no se escuchaba desde fuera, cuando entramos la chicas nos arrastraron a la pista y empezamos a bailar, la gente era de edades más jóvenes que en la sala anterior pero no pude calcular la cantidad ni se les veían los rostros con claridad.

Luego de un rato de estar bailando Carmen me tomo de una mano y me llevo a un rincón donde empezamos a besarnos muy apasionadamente, tanto que empecé a tener una erección de campeonato, en un momento me pregunto si quería ir a ver algo interesante, le dije que si con la cabeza y salimos de la sala por el mismo pasillo, solo que esta vez al llegar a la mitad abrió una puerta que daba a unas escaleras hacia el segundo nivel, entramos en la primera puerta la sala tenía solo unas luces muy tenues de color rosa, casi no se miraba nada, pero valla que se escuchaban cosas, eran sonidos de gente teniendo relaciones, sonidos que yo solo había escuchado en las pelis porno, habían varias cortinas que ella me dijo que son para separar cabinas pequeñas, abrió una y estaba vacía, me empujó hacia adentro y empezó a besarme yo me volví a empalmar mientras ella me tocaba el pene por encima del pantalón.

Rápidamente me bajo el pantalón y empezó a besarme mi pene y lamerlo, en eso me percate que habían dos chicos en la entrada masturbándose viendo el espectáculo que estábamos dando, se lo mencione y ella se paró dirigiéndose hacia ellos exagerando sus movimientos, al llegar paso por el medio y uno le acaricio el culo, ella solo le aparto la mano y paso de largo, unos segundos después regreso con una mujer mayor (lo digo por algunas canas que se le notaban en su melena negra), pero de muy bonito cuerpo resaltado por el vestido blanco corto que portaba, también llevaba puesta una máscara de carnaval, Carmen la obligo a ponerse de rodillas en medio de los chicos y le dijo a ella, “ espero te entretengas ”, volvió a acercarse a mí quitándose la chaqueta y el vestido, allí me di cuenta que no tenía ropa interior, se acercó, me recostó sobre un sofá y se empezó a colocar para hacer un 69, la pare y le dije que no sabía que hacer que era mi primera vez, me sonrió tiernamente y se paró de nuevo dirigiéndose a la entrada les dijo al trio que estaba allí “ olvide que era una noche especial, ciao, diviértanse ”, les cerro las cortinas y regreso hacia mí, me ayudo a desvestirme y continuo con su felación.

Cuando ella considero que ya estaba listo me vio a los ojos y me dijo, “ esto no está nada mal, has aguantado más de lo que pensé y estas de buen tamaño ”, mientras sonreía de forma lujuriosa no bajaba la mirada directa en mis ojos, me sentó y se puso a montarme mientras me tomaba por el cabello y me hacía besar sus pechos, duramos varios minutos en esa posición, cuando empecé a sentir que estaba a punto de correrme, ella se dio cuenta y se sacó mi pene, luego siguió besándome y me dijo “ aún no es tiempo ”, se agacho y me empezó a dar otra mamada allí si ya no aguante y me corrí en una mujer por primera vez, ella solo sonreía mientras trataba de tragarse todo y una parte de mi leche le salió por la comisura de los labios, se paró y salto sobre mí metiendo su lengua en mi boca, caímos sobre el sofá, yo estaba cansado y feliz ( lo más feliz que había estado hasta ese día ),  me dijo que nos vistiéramos y saliéramos a buscar a los otros, el trio ya no estaba en la entrada y bajamos al salón donde habíamos dejado a mi primo y sus amigas los llamamos para irnos, fuimos a buscar al otro chico pero el bartender nos dijo que se había retirado hacia rato con el otro grupo.

Carmen tomo el asiento del conductor, yo al lado y mi primo y sus amigas atrás, se durmieron enseguida, decidimos pasar a comer algo a una cafetería, ya casi estaba amaneciendo, fuimos a comprar y pusimos la comida sobre el cofre del auto mientras los otros descansaban.

Franco—Ha sido una gran noche para mí—

Carmen—Lo sé y me alegra, yo lo pase bien igual—

Franco—¿Cuál fue el precio que pago Quique para que pasara esto? –

Carmen—¿No te entiendo? –

Franco—Una mujer como tú, no se fija en chicos como yo— mientras ella me miraba sorprendida —no creo que seas prostituta, pero sí creo que le sacaste algo a mi primo—

Carmen—Interesante, eres más listo de lo que tu primo piensa— sacando esa sonrisa traviesa que me enamoraba cada vez más —pero eso queda entre él y yo, tu solo disfrútalo mientras dure—

Franco—¿Aun hay más? jajaja—

Carmen—Hasta que estés despabilao, ¿Cómo supiste que tu primo y yo te preparamos esto? –

Franco—Varias cosas: en la fiesta me buscaste, luego en la barra tuve una rara conversación con mi primo y por último lo que dijiste en el cubículo, igual les agradezco—

Carmen—No lo hagas aun (la verdad fue más placentero de lo que esperaba) — me susurro.