VIDAS capítulo 64

Despierta, despierta, que nada será como era antes

CAPITULO 64 DESPERTAR

IRIS

No me había hecho a la idea aun de que ella podía volver a buscar a Erick, saludo muy elegantemente y me pregunto si podía pasar, le dije que si con la cabeza mientras tomaba a mi hija entre mis brazos, ella se paró en medio de la sala y nos observó por unos segundos, no pude descifrar su mirada y me acerque a decirle a Kiki al oído que subiera a su cuarto y se encerrara, de paso que llamara a su tía Leticia, cuando se fue mi hija ella la observaba atentamente, no la perdió de vista hasta que desapareció y se escuchó la puerta de su cuarto. Magda se veía triste pero bella y elegante, como siempre, aun aparentaba tener diez años menos (según mis cálculos de ese momento ella estaría más cerca de los 50 que de los 40), ya se le veía alguna que otra cana y como que había ganado unas pocas libras, no muchas arrugas en su rostro, la verdad viéndolo todo en retrospectiva desee verme como ella a su edad, aun sentía admiración por cómo se veía esa mujer que estuvo a punto de destruir mi vida.

Cuando perdió de vista a mi hija volteo a verme esta vez sí pude captar el odio y el rencor que ella sentía, si una vez estuvo a punto de destruir mi vida, parecía haber vuelto a terminar el trabajo, pero hablo siempre con ese tono que después de todo este tiempo he definido como hipócrita.

Magda—Tu hija es una niña muy hermosa, seguramente será más bella que tu cuando sea toda una mujer—

Iris—¿Qué quieres Magda? —

Magda—Quiero saber dónde está mi esposo—

Iris—No lo sé, no me preguntes por alguien a quien no quiero cerca de mi o de mi hija—

Magda—No sé si mientes Iris, solo sé que con la última persona con la que él tuvo algún tipo de contacto eras tú y no sé si también con tu familia—

Iris—Te repito que no sé dónde este Erick y no me importa saberlo, por mi puede estar en el infierno, me conformo con saber que no se acercara a mi hija—

Magda—Voy a encontrarlo Iris y cuando eso pase y me entere de todo, tú y todos los que te rodean desearan no haber nacido—

Iris—¿Cuántas vidas piensas que puedes arruinar sin consecuencias Magdalena? —

Magda—No entiendo de que me hablas pequeña tonta, pero te aseguro que voy a encontrar a mi esposo más pronto que tarde y tú me las pagaras, creo que empezare con tu pequeña hija y no te dejare morir hasta que la veas destruida—

En ese momento mi ira se apodero y le solté el golpe más fuerte que pude, ella cayó al suelo y me volteo a ver con más ira y odio que al inicio, se levantó y se compuso la ropa, sonrió y me repito que me destruiría por completo. Salió de mi casa y me deje caer sobre el sofá, mi hija bajo las escaleras asustada, en ese momento no sabía si vio o escucho algo de lo que hablamos Magda y yo solo sabía que debía proteger a mi hija, extrañamente no llore solo sentía toda mi rabia acumulada dentro, como a los 10 minutos se apareció Leticia en la puerta y nos vio a mi hija y a mi abrazadas en el sofá.

Leticia—¿Qué paso, la mujer que menciono Kiki al teléfono era ella verdad? —

Iris—Así es cuñada, dijo muchas cosas y creo que las piensa cumplir—

Kiki—Mamá ¿Quién era esa mujer y porque nos odia tanto? —

Leticia—Es una sombra de nuestro pasado, déjamela a mi voy a encargarme de que no vuelva a molestarnos—

Iris—¿Escuchaste algo mi amor? —

Kiki—Solo lo último antes de que la golpearas—

Leticia—¿La golpeaste? Cuñadita estoy muy orgullosa de ti—

Nos reímos las tres por la forma tan jocosa que Leticia dijo eso último, mientras nos recomponíamos y calmábamos a Kiki, le susurre a Leticia que quería hablar con ella a solas, comimos algo y Kiki se fue a su cuarto a tomar una siesta, ese fue el momento para hablar.

Iris—Leticia, tengo miedo Magda estaba muy decidida a encontrar a Erick y después vengarse de nosotros, amenazo a todas las personas que conozco, especialmente a Kiki—

Leticia—Ya te dije, déjame a mi manejar a Magda—

Iris—Confió en ti y espero que puedas con eso, pero también quiero estar preparada para enfrentarla por si tengo que hacerlo para proteger a mi hija—

Leticia—Te entiendo y cuéntame que quieres hacer para prepararte—

Iris—No sé, necesito que me ayudes en eso—

Leticia—Veré que puedo hacer, por lo pronto debes enfocarte en Franco y cuidar a Kiki—

Iris—De acuerdo, solo desearía que Pedro me dejara halar con el—

Leticia—Pensé que lo veías a diario—

Iris—Lo hago, atrás de algunos vidrios o desde lejos mientras se pasea, pero Pedro piensa que aún no es el momento para que hablemos—

Leticia—Ok, déjame estudiar a Magda y después hablare con Pedro—


LETICIA

Cuando salí de la casa de Iris y mientras el chofer me llevaba al ayuntamiento para la sesión del consejo pensaba en la forma en la que Pedro estaba tratando a mi hermano, dude si aislar a Franco era la mejor manera de tratarlo, aparentemente eso funciono en el pasado y luego de unas semanas pudo hablar con tranquilidad, pero eso fue hace tiempo ahora la situación era apremiante y para sumarle a todo Magdalena había vuelto.

Magdalena, Magda, la charla con mi padre acerca de ella fue de lo más incómodo, no quise decirle que yo sabía que fueron amantes ocasionales, tampoco me convenia que don Álvaro se enterara de todo eso, esa era una información muy delicada y al menos por nuestra parte ninguno quería que se supiera, aunque hubieran pasado tantos años.

Tampoco me convenia que se supiera lo de Magda y yo, pero eso era más fácil de encubrir y negar, el problema con Magda no era lo que pudiera hacer con lo que sabía del pasado, era lo que podía hacer en el futuro y sus acciones para encontrar a Erick, esa parte era lo que me preocupaba en realidad, sabía que Magda tenía información acerca de nosotros pero nosotros teníamos mucha más información de ella, de hecho lo que sabíamos era más peligroso para ella, de momento solo había una cosa que podía hacer acerca de Magdalena, decidí empezar a llevarla a cabo, así que realice la llamada correspondiente.

Leticia—¿Aló? Inspector, de nuevo necesito de su ayuda—

Inspector—Creo que necesito empezar a cobrarle horas extras abogada, últimamente sus llamadas están siendo muy preocupantes, dígame que puedo hacer por usted hoy—

Leticia—Nada que usted no hiciera en el pasado para mi padre, la verdad solo es vigilancia y espionaje esta vez—

Inspector—Esa es mi especialidad, necesito que me diga todo lo que sepa de la persona—

Le conté los datos que poseía de Magdalena, necesitaba tenerla vigilada el mayor tiempo posible y tratar de anticiparme a sus movimientos, no sabía que tan peligrosa se había vuelto.


PEDRO

Esta vez me sentía más frustrado que de costumbre, ya no solo repetía versos de la biblia, ahora quería comentarlos y estudiarlos, si tan solo lo hiciera en español, las pocas veces que nos hablaba en español lo hacía para insultarnos y burlarse del personal, su sentido del humor era muy oscuro, se burlaba de las deficiencias en el habla de uno de los enfermeros, del peso del encargado de este, del andar de las enfermeras.

Habíamos quedado de juntarnos a comer con Quique y Leticia, ese día lleve a Marta y al bebé, el permiso de maternidad de mi amada esposa estaba a punto de terminarse y ella quería estar el mayor tiempo posible con nuestro hijo antes de tener que regresar al trabajo, por los cuidados del niño no nos preocupamos mi madre había dicho que se haría cargo de él, además vivan cerca de casa y desde que nació Marcos la relación entre Marta y mi madre había mejorado muchísimo, lo suficiente para que mi esposa no hiciera el más mínimo gesto de incomodidad cuando discutíamos que hacer con el bebé cuando ella regresara al trabajo.

Empezamos saludándonos y diciéndole a Leticia lo bien que se le veía cargando a un bebé a ella no le hizo gracia, pero igual siguió jugando con Marcos, cuando el nene se durmió empezamos a hablar con seriedad del asunto.

Pedro—Chicos creo que debemos hablar del regreso de Magdalena—

Marta—¿Qué sabemos de ella? —

Leticia—Está ocupada rastreando los últimos pasos de Erick, pero aún le falta información para saber dónde paso las últimas horas de esa noche y madrugada—

Quique—wow… Me impresionas primita, no pensé que la tuvieras tan vigilada—

Leticia—Pues una tiene que aprender a cuidarse y cuidar a los que quiere—

Pedro—¿Y tú Quique, cuando piensas regresar a España o te piensas regresar acá con tu familia? —

Quique—Había pensado que estas serían unas vacaciones de cómo un mes, pero como resultado de todo esto yo creo que me tomara más tiempo—

Marta—¿Tienes un trabajo o algo para regresar? —

Quique—De hecho, si, además estaba empezando a salir con alguien y de momento parece serio, pero aún no se hasta dónde me llevara esa relación—

Pedro—Volviendo al tema ¿Qué paso con el cuerpo en la morgue? —

Leticia—Ya fue enterrado como desconocido en una fosa común lejos de la ciudad—

Marta—Los investigadores del caso están confundidos y sumergidos en un sinfín de casos más, por lo que no creo que le den importancia a un cuerpo desconocido—

Leticia—En la fiscalía están igual, como dijo mi padre nadie extraña a un proxeneta narcotraficante—

Pedro—Se están escuchando todos, pareciera que están hablando de un perro muerto, no de un hombre al que algunas de ustedes conocían—

Marta—Amor te recuerdo que ese hombre estuvo a punto de vender como prostituta a nuestra amiga, de hecho, lo hizo una vez además su esposa/socia no solo estaba al tanto de todo, ella lo planifico, así que perdona por no sentir pena o simpatía por el difunto o la viuda—

Leticia—Sin contar que ella aún conserva nexos con varios narcotraficantes no solo de este lado del mundo, según el inspector también se interesó en algunas operaciones en oriente y Europa—

Quique—También eso de que nadie lo extraña es un error, sabemos que al menos ella si lo extraña y puede ser un peligro, especialmente para Iris—

Leticia—De acuerdo, pero no podemos hacer nada más que vigilarla y esperar a que de ella el primer paso en nuestra dirección, mejor dinos Pedro ¿Cómo te va con él? —

Les conté de mis frustraciones y de todas las cosas que él hacía para confundirnos, Marta sugirió que consultara de nuevo con mi tía, pero ella ya no estaba para esa tarea tan grande y preferiría que se hiciera cargo de Iris como le había pedido anteriormente.

Leticia—Pedro no quiero parecer que me entrometo o que menosprecio tu habilidad profesional como psicólogo, pero ¿Te has planteado que quizás ese no sea el camino adecuado en su tratamiento? —

Pedro—Si lo he hecho—

Marta—Amor, si no mal recuerdo ese enfoque me dijiste que te funciono en el pasado con él, pero creo que, como todos, él ha cambiado—

Quique—¿Por qué razón debe ser distinto de aquella vez a esta? —

Pedro—Iris y quizás en menor medida Kiki—

Leticia—Pedro cree que el chantaje de Erick despertó ese lado de Franco y ahora no sabemos cómo volver a dormirlo—

Marta—Quizás deba ser tiempo que Iris conozca en persona a ese lado de Franco—

Pedro—Me da miedo pensar lo que podría pasar si Iris lo rechaza, pero talvez tengan razón—

Lo tenía decidido, pero no sabía cómo hacerlo, Iris debía hablar con él pero que se podían decir una a otro, según Leticia solo había una manera y seguramente Iris estaba dispuesta a hacerlo, del otro sujeto era del que no estábamos seguros.

El día indicado llego, me presente en el horario acostumbrado, allí estaba el en la oficina que habíamos acondicionado para sus entrevistas, como era costumbre estaba maniatado por una de esas camisas que se ven en televisión, pero esta vez tuvimos que asegurarla la piso para que él no se pudiera levantar, fue la única condición que nos pidió el director del centro, era para que Iris estuviera segura, según me dijo el enfermero él se extrañó con la nueva disposición y se rio como de costumbre de manera prepotente y le dijo algo en otro idioma, pero el enfermero ya estaba entrenado para ignorarlo, luego de asegurarse de que todo estaba en orden salió de la sala y me dijo que ya estaba todo listo, por eso entre y el me vio de nuevo con esa sonrisa que lo hacía parecer estar en control de la situación aunque estuviera amarrado.

Pedro—Buen día ¿Cómo has estado? —

¿? —Mornin´ asshole…você seguiu meu conselho?... você fez o teste de DNA?...i'm sure that boy is too pretty to be your´s— (buen día pendejo ¿seguiste mi consejo de hacer la prueba de ADN?, estoy seguro que ese niño es muy bonito para ser tu hijo).

Pedro—Ya habíamos hablado de conversar solo en español y dijiste que estabas de acuerdo—

¿? —Ich habe dich angelogen— (te menti) .

Pedro—Bien, creo que podemos seguir como siempre ¿Qué me tienes que decir hoy? —

¿? —Pas bon— (nada bueno)

Pedro—Siempre tienes algo que decir, me preocupa que mañana también te quedes sin nada que decir—

¿? —Non preoccuparti del domani, che porterà le sue preoccupazioni, ogni giorno ha già i suoi problemi —(no te preocupes por el mañana, el cual traerá sus propias preocupaciones, cada día tiene sus propios problemas).

Pedro—Eso me suena conocido, mi italiano no es tan bueno como el tuyo, pero aparte del inglés, italiano es la única otra lengua que medio aprendí—

Iris—Eso es del libro de Mateo capítulo 6 versículo 34—

En ese momento el volteo a la puerta y la vio apenado, su cara era como para enmarcarla, estoy seguro que la cámara que graba las sesiones no tenía el mejor ángulo para captar su expresión luego me volteo a ver, seguramente me hubiera matado de haber podido.


IRIS

Pedro me había pedido que esperara cerca de la puerta hasta que me llamara, pero al escuchar su voz mi corazón se aceleró, aun con ese tono prepotente y hablando en distintos idiomas me emocione, lo me hizo decidirme a entrar fue escucharlo cuando recitaba ese versículo, era el favorito de mi abuela Enriqueta, a ella le causaba gracia como mi esposo se los decía en otros idiomas, siempre le preguntaba cómo se pronunciaba en uno u otro idioma las partes favoritas de su biblia, Franco no tenía problemas en complacerla y siempre se los repetía con una sonrisa.

Cuando me pare en la puerta y hable, ambos me voltearon a ver, Pedro estaba un poco molesto y me imagino que fue por no haberle hecho caso para que me dijera cuando entrar, del otro lado estaba Franco, o al menos su cuerpo, este me vio sorprendido en cierta forma me recordó a la primera vez que me invito a salir, su mirada era tímida y asustadiza, seguramente yo era la última persona a la que él pensaba que vería, pero como dije no me pude aguantar.

Iris—¿Puedo pasar? — Pedro dijo si y se levantó para que yo ocupara su silla, mi esposo aún mantenía la expresión de sorpresa— ¿Cómo has estado? Te extrañamos en casa—

Pedro—Gracias por venir Iris, lamento que tuvieras que esperar, pero quería ver cómo estaba de humor el día de hoy—

Iris—No te preocupes y me disculpo por entrar así de repente— en ese momento el volteo a ver a Pedro con rabia.

¿? —Was macht sie hier? — (¿Que hace ella aquí?)

Pedro—En español por favor, ninguno habla alemán en esta habitación aparte de ti—

Iris—Tiene razón, hazme ese favor, necesito entender lo que dices—

¿? —¿Qué haces aquí Iris? —

Iris—Estoy acá por ti obviamente— me acerque y acaricie su rostro, ya no tenía la barba y ya lo veía como es el normalmente.

¿? —No tenías porque, pero te agradezco, cuéntame cómo esta tu hija—

Iris—Esta en casa extrañándote como todos—

¿? —Me parece que no me conoce lo suficiente para extrañarme—

Iris—Me parece que tu no la conoces lo suficiente como para decir eso—

La sesión fue tensa, sabía que esa era la cara de mi esposo, pero sus expresiones y sus gestos no eran los de él, además hablaba de forma arrogante y siniestra, estuvimos hablando de cosas impersonales como por 15 minutos hasta que Pedro nos dijo que debíamos terminar por ese día.

Volví a verlo un par de días después y esta vez su humor era un poco distinto, continuamos las sesiones así cada dos días y luego las fuimos aumentando a día de por medio, la verdad la pasaba nerviosa porque no le dejaban moverse, durante ese periodo siempre estuvo amarrado, me harté de verlo así y se lo dije a Pedro.

Iris—Necesito libre a mi esposo—

Pedro—No tienes idea de lo que pides—

Iris—Tú no sabes lo que me duele verlo así—

Pedro—Te lo dije una vez y parece que se te olvido, ese no es tu esposo—

Iris—Si lo es, tú eres quien no quiere verlo—

Pedro—Iris, en serio no tienes idea de cómo es y de lo que puede llegar a hacer—

Iris—Ayúdame en esto Pedro, sé que lograríamos avanzar más de esta forma—

Él se quedó pensativo y suspiro, luego me dijo que lo más que me podía ofrecer era que lo desanclaran del suelo, pero implicaría que tendría que haber algún miembro de seguridad cerca de nosotros, luego le pregunte si podía salir a pasear por lo jardines conmigo y me respondió que sí, siempre y cuando estemos escoltados.

Nuestras reuniones transitaban por ese rumbo, empezaba a sentirme incomoda con la forma de ser que estaba demostrando y no me corte en decírselo de a poco el empezó a dejar de burlarse de la gente, parecía un niño consentido de la edad de mi hija cuando hacia esas cosas, una tarde que no pude ir a la clínica Pedro me llamo.

Pedro—Iris, prepárate creo que de apoco está despertando—

Iris—¿Qué? Explícame mejor—

Pedro—Hoy después de la siesta despertó y pregunto dónde estaba, el enfermero le dio algunas explicaciones y de nuevo se durmió, al rato despertó siendo el mismo de las últimas semanas—

Iris—Entonces no entiendo eso de que está despertando—

Pedro—Así inicio la otra vez, despertaba por momentos y luego dormía, paso así varias veces hasta que por fin despertó—

Mi amigo me explico que la anterior vez hizo eso, despertaba preguntado donde estaba y luego dormía hasta que despertó y ya no pregunto dónde estaba, luego se dieron cuenta que estaba actuando como Franco y la otra personalidad había dormido, le pregunte a Pedro cuanto tiempo había tardado y me dijo que unos cuantos días, mi corazón se llenó de esperanza al pensar que pronto estaría mi esposo de regreso. Pero las cosas no siempre son tan fáciles.

Llevábamos varios días en esta rutina, ahora yo pasaba más tiempo en la clínica que en casa y Pedro ya no era el único frustrado, el esperaba que esos episodios de despertar de mi esposo se repitieran varias veces al día, en lugar de eso fueron espaciados a cada dos o tres días, me sentía como que estaba abandonando a mi hija y empecé a tener mis dudas acerca de que si esposo podría o no volver, luego me di cuenta que debía tomar una decisión, entre dejar a mi hija en manos de mis padres, conocidos mientras estaba acá con Franco el otro camino era dejar a Franco en la clínica y concentrarme de nuevo en mi hija.

Yo quería ambas opciones, pero debía decidirme por algo, pesando se me ocurrió hacer un último esfuerzo por mi cuenta sin que Pedro supiera, ya que seguramente se negaría rotundamente a ayudarme, ese día me prepare como de costumbre, solo que aprovechándome de ya me conocían y me dejaban pasar sin revisarme como al inicio y me arme de las cosas que necesitaba que por suerte a parte de pocas también eran pequeñas y las podía esconder con facilidad.


MAGDA

Joaquín—Gracias por traerme a este viaje Magda, desde que Erick desapareció las cosa en la agencia han estado de locos, no puedo creer cuanta falta hace para mantener el orden—

Magda—Esto no es un viaje de placer Joaquín, esto son negocios y necesitaba de tener a mano un socio, así que tú eras la única opción—

Joaquín—Aun así, gracias—

Magda—Pronto llegaremos a nuestro destino, prepárate que todas estas horas por estos caminos rurales de Colombia son para poder tener privacidad—

Joaquín—No entiendo cómo es que teniendo tanto dinero y poder como dicen en las noticias que tienen estos sujetos no puedan tener mejores accesos a sus viviendas—

Magda—La respuesta es muy simple Joaquín, discreción—

Cuando por fin llegamos a nuestro destino nos reciben unos tipos no muy grandes, pero muy mal encarados, con tatuajes y cicatrices por todo su cuerpo, no parecen tener ganas de esconderlas y están muy orgullosos de ellas.

Ellos me hablaron diciendo que todo estaba listo, asintiendo con la cabeza como señal de que empezaran le pidieron a Joaquín que los acompañara a un enorme galpón que servía como cochera y como almacén, luego me dirigí hacia la casa pequeña y antigua ubicada a unos 200 metros de donde dejamos el auto, y allí estaba el esperándome.

Magda—Buenas tardes inspector… Rafael si no me equivoco—

Inspector—Buenas tardes señora Magdalena, a que debo su amable invitación a este hermoso país, imagino que debe ser algo muy importante—

Magda—Lo es, se trata de búsqueda y rastreo de un hombre—

Inspector—Usted me dirá quién es el sujeto y yo le pediré un poco de información, básicamente lo que tenga a mano de sus averiguaciones previas, ya que me imagino que usted estuvo investigando algo antes—

Magda—Así es inspector, se trata de mi esposo Erick XXX, desde hace un par de meses que despareció, cuando regrese a nuestro país le estará esperando una carpeta con todo lo que sabemos—

Inspector—¿Por qué no me la entrega ahora y por qué me hace venir hasta acá? Todo esto bien pudo decírmelo allá—

Magda—Estoy en viaje de negocios en esta parte del mundo y no voy a volver por algún tiempo, además en este momento algunos de mis amigos están tratando de obtener más información, yo espero poder adjuntarla a la que ya tiene en su escritorio cuanto antes—

Inspector—Si no tiene nada más que decirme, me gustaría saber ¿cómo supo de mis servicios y como supo cómo contactarme? —

Magda—Por viejos amigos en común, quiero que sepa que usted está muy recomendado desde hace mucho tiempo, las personas que me lo recomendaron decían que usted era el más discreto y efectivo para encomendar este tipo de trabajos—

Inspector—Agradézcales a sus amigos por sus amables palabras para mi persona, prometo averiguarle todo cuanto pueda, me imagino que tendré que esperar a su regreso para poder reportarle mis avances—

Magda—Lamentablemente, para mí, así será inspector—

Inspector—Bien, será mejor que me retire, quisiera pasar un par de días en el caribe colombiano antes de regresar—

Después de la partida del inspector me fui a tomar un baño caliente, acompañada de una botella de aguardiente local, un regalo de uno de mis socios de por acá, necesitaba algo fuerte ya que nunca me imaginé que debía hacer lo que estaba haciendo ahora.

Luego de un par de horas y varios tragos que me quemaban por dentro decidí que era hora de dormir, a la mañana siguiente después del desayuno se aproximaron los hombres que me recibieron, me hablo uno al que le decían el ogro, parecía saltar a la vista la razón.

Magda—¿Cómo les fue? —

Ogro—Supimos algunas cosas de las usted nos pidió que le preguntáramos—

Magda—¿Entonces no le respondió a todo? —

Ogro—Si que lo hizo, pero no sé si es lo que usted quería averiguar—

Magda—Bien, espero que tengan todo listo para esta tarde—

Ogro—Así se hará señora—

Magda—Respecto a las chicas—

Ogro—Nada aun señora, desaparecieron al llegar a España, algunos de nuestros contactos sugirieron que ellas buscando llevar la vida que tenían en su país habían caído en alguna red de trata de personas, de rusos o rumanos, pero siguen investigando—

Magda—Mierda, bien ¿Qué me dicen de Joaquín? —

Ogro—¿Su socio? No aguanto, en la madrugada murió—

Magda—Me parece que se les fue la mano, pero al menos contesto todo, esperare para saber bien que les dijo, de momento solo me queda hablarles a los patrones—

Ogro—Muy bien señora, estaré atento por si necesita algo más—

Magda—Gracias y su pago es lo que acordamos, ya está listo para cuando ustedes lo soliciten—

Ogro—Gracias señora—

Por la tarde me puse a ver la grabación de los eventos del día anterior, sobra decir que me sentí asqueada por lo que paso, entretenida con las palabras de Joaquín y decepcionada porque no había mucha más información de la que ya sabía, lo único nuevo fue que en lugar de tres hombres como constaba en el reporte policial fue solo uno, lo otro que me llamo la atención fue lo que dijeron los hombres: él tenía una cicatrices recientes en la región púbica y además una enorme de forma redonda en el hombro derecho.

Acelere la grabación para saber si él había dicho quien le hizo esas cicatrices y el confeso que fue un hombre al que denomino como un fantasma, llevaba una máscara blanca de esas de carnaval y los ojos de esta mascara tenían unas medias color negro, por lo poco que él pudo ver los ojos eran de un color oscuro, verde o café, también menciono que la cicatriz del hombro fue cuando el tipo le puso una vara de acero caliente. Así fue como ese tipo logro hacer que Joaquín les diera el acceso a las cámaras de la agencia y a mi casa, si mi casa, la que compartía con mi esposo y su departamento donde el llevaba a sus conquistas a follar también fueron saqueados todo haciéndolo parecer un robo común y corriente, pero no había nada común en esas actividades, estaban buscando algo, pero yo no sabía que era, mi única esperanza era encontrar a las chicas y poder extraerles la información igual como lo hice con Joaquín.


IRIS

La platica empezó como de costumbre, el hablando pestes de todos y yo escuchando sus berrinches disfrazados de burla contra el personal de la clínica, me recordé que hablando con mi suegra me dijo que ellos trataron de no criar a sus hijos como ella veía que hacían varios otros padres de su círculo de amistades, incluyendo a su cuñada y su esposo, doy fe que Franco y Leticia nunca trataron a nadie de forma prepotente e irrespetuosa en todo el tiempo que llevaba conociéndolos.

Esperaba el momento de hacer mi movimiento y pensé que encerados en esa oficina no podríamos, como de costumbre pedí dar un paseo con él y el guardia accedió, sabía que en esos paseos los guardias se distraían con cualquier cosa, en uno de esos momentos aproveché para llevar a cabo mi plan, era la cosa más estúpida y simple que se me pudo ocurrir, pero también era la única cosa que sabía que podría despertar a Franco, no era nada sexual, era el un gesto cliché, me coloque al lado de él y disimuladamente le coloque uno de los auriculares que tenía y pulse el botón de reproducir en un reproductor pequeño que había comprado.

Mientras las primeras notas sonaban acaricie su rostro y sentí que una lagrima bajaba por mi mejilla, lo deje seguir hasta que empezaron las primeras palabras de la letra de la canción, allí vi que algo cambio en su mirada, no necesitaba más, le quite el audífono y detuve la canción.

El último movimiento fue ponerme una mascada blanca rozándole la cara, en ese momento el pidió regresar a su habitación para poder dormir un rato, me despedí de el con una caricia y un beso en la mejilla, ya había hecho mi intento y ahora dependía de él, al siguiente día no llegue a la clínica.


LETICIA

Leticia—¿Cómo estuvo su viaje relámpago inspector? —

Inspector—Mejor de lo que esperaba, el café de allá es exquisito—

Leticia—¿Incluso mejor que el de nuestro país? —

Inspector—No me ponga en un aprieto abogada—

Leticia—jajaja, De acuerdo inspector, pero cuénteme ¿ella hizo lo que pensábamos? —

Inspector—Así es abogada, incluso llego con su socio Joaquín, pero me temo que ella volverá sola—

Leticia—Si es que algún día vuelve—

Inspector—Créame abogada volverá, pero su situación será muy distinta—

Leticia—¿Hay algo en particular que deba saber inspector? —

Inspector—Solo que las noticias de lo que paso con el señor Joaquín se han esparcido muy rápido y los socios de ella en este país no confían en ella para nada, ya que consideran que fue capaz de hacerle eso a su más antiguo asociado y amigo ellos temen de lo que será capaz de hacerles, además juntos ellos tienen más hombres a su servicio de los que ella puede contratar, en caso que la señora piense en una confrontación directa—

Leticia—Básicamente estará sola y su cruzada para encontrar a Erick la mantendrá ocupada—

Inspector—Mas que una cruzada es una obsesión para ella encontrarlo—

Leticia—Espero que nuestro plan para llevarla por otros rumbos funcione—

Inspector—Usted sabe que ningún plan es perfecto y puede haber problemas—

Leticia—Estoy de acuerdo, pero ahora dígame ¿Cómo le fue con las chicas? —

Inspector—Las he puesto en un país diferente al que su hermano las envió, con nuevas identidades y nuevas vidas, confiemos que el miedo que él les coloco las mantenga alejadas de la vista—

Leticia—Gracias inspector, estaremos en contacto—

Ya todas las piezas estaban donde las queríamos respecto a Magda y Erick, aun nos faltaba encontrar al socio de Franco que escapo y nos podríamos tranquilizar respecto a mi hermano, me costó mucho dinero encontrar a esas dos pequeñas zorras y luego poderles mover de España sin dejar rastro, además de sus nuevas identidades, dios mío parece que estoy viviendo en una película de espías, pero esta era la situación a la que nos había empujado el intento de chantaje de Erick y la posterior reacción de mi hermano.

Según me informo el inspector usando las grabaciones de lo que decía Franco, la noche siguiente de lo que paso con Erick mi hermano se movió rastreando a todas las personas alrededor de Erick, el primero fue Joaquín un poco de fuerza sobre él y dijo la combinación de la caja fuerte de la agencia y luego le dio acceso a las casas de Magda y Erick, así como a la oficina de ellos, otro poco de dolor y dio el nombre de las dos chicas esas que eran la amigas más cercanas a Erick, así como también donde era más probable localizarlas, parece que no fue difícil para él, las chicas eran muy fiesteras y les encantaba probar de todo, literalmente, me imagino que por eso no le fue difícil sacarlas del club, ignoro por completo que fue lo que paso hasta que las chicas fueron vistas en el aeropuerto, en los videos del aeropuerto se les notaba con miedo y vestidas para salir de fiesta sin mayor equipaje, llamaron la atención de todos, además pagaron su pasaje solo de ida en efectivo, por lo que entendí mi hermano les dio todo el efectivo que había encontrado en todas las cajas fuertes que saqueo buscando los videos que tenia Erick, eso y el miedo que les puso en sus cabezas fue suficiente para que accedieran a irse.


IRIS

Mi corazón estaba triste, pasé tres días sin aparecerme por la clínica, le dije a Pedro y a los demás que mi hija también me necesitaba y la había estado descuidando, la verdad mi hija era de las primeras que me animaba a pasar mas tiempo con Franco, hasta que un día el enfermero de la clínica me llamo.

Enfermero—Señorita, pensé en hablar con usted antes que, bueno con los doctores, especialmente con el doctor Pedro. Han pasado cosas con su esposo desde el día que le puso esa grabación—

Iris—¿Usted se dio cuenta? —

Enfermero—Por supuesto, dejamos que a veces los familiares de nuestros pacientes hagan pequeñas locuras, nos metemos cuando alguna de esas locuras amenaza al paciente o son potencialmente peligrosas para nosotros, lo que usted hizo fue una nada comparado con otras cosas que he visto—

Iris—Le agradezco que me dejara y me gustaría saber si alguien más sabe—

Enfermero—No señorita, solo usted y yo sabemos, jajaja, no se preocupe nadie lo sabrá, muchos doctores son muy estrictos sobre sus métodos y dejarles saber que paso algo así podría poner en peligro mi empleo—

Iris—Cuénteme lo que le pasa a mi marido—

Enfermero—Se la pasa cantando y desde ayer que empieza a preguntar más seguido donde esta—

Iris—Se refiere a que está haciendo progresos—

Enfermero—Así es señorita, me imagino que la canción que se la pasa cantando es especial para ustedes y por eso la tiene siempre en mente, incluso el doctor Pedro se ha mostrado confundido cuando se la paso cantando en su última sesión—

Iris—Le agradezco su llamada—

Al momento de colgar una enorme sonrisa apareció en mi rostro, por suerte estaba sola en casa si no hubiera tenido que dar muchas explicaciones que no quería dar en ese momento de alegría, al día siguiente me presente de nuevo en la clínica y el enfermero solo me sonrió, Pedro estaba exultante, me dijo que en estos días había habido muchos “progresos” ahora se la pasaba mas tiempo dormido y cuando despertaba dos de tres veces preguntaba dónde estaba, cuando se la pasaba siendo el otro sujeto nunca era mas de un par de horas antes de volver a dormir.

Aun nos faltaba que despertara del todo, Pedro me dijo que cuando lo hiciera se debía quedar un tiempo más para observaciones y asegurarse que al menos durante un largo periodo de tiempo no apareciera el otro tipo.


FRANCO

Mierda ¿Dónde estoy de nuevo? ¿Qué me ha pasado, cuanto llevo acá? No me puedo creer que estoy amarrado de nuevo ¿Iris? ¿Kiki?

Enfermero—Buen día—

Franco—Buen día, espere yo lo recuerdo, usted estaba acá hace años cuando me paso lo mismo—

Enfermero—jejeje, Será mejor que llame a su doctor—

Franco—Antes por favor dígame cualquier cosa de mi esposa—

Enfermero—¿Se refiere a la presentadora de noticias? Ha estado viniendo casi a diario a verlo—

Franco—Gracias—

Ahora que habrá pasado lo ultimo que recuerdo es ver a Iris llorando, recuerdo que no era por mi culpa, era por otra cosa u otra persona no lo recuerdo, será mejor que espere y deseo que me puedan contar todo sin medias verdades ¿Dios que habrá pasado para estar así de nuevo?

Como una hora después entro Pedro y detrás de el Iris, yo aun me encontraba atado y ella corrió en mi dirección a besarme, casi atropella a Pedro en el camino, cuando me soltó del beso nos miramos a los ojos, ella estaba llorando y riéndose, no paraba de hablarme de cuanto me extrañaban ella y Kiki, también me dijo que mis padres y mis hermanos venían en camino, la vi extrañado “ ¿hermanos? ” si Quique es como tu hermano, fue lo que me respondió, no sabia que el estaba en el país, igual tampoco sabia cuanto tiempo llevaba de nuevo en esa clínica.

Pedro—Bien parece que estas mejor ¿Sabes que te tienes que quedar en observación un tiempo? —

Franco—Me imagino que así debe ser—

Iris—Pero que no sea mucho tiempo Pedro, quiero tenerlo cuanto antes en casa—

Pedro—Ya veremos cómo evoluciona—

Franco—Amor me puedes conseguir algún refresco o una bebida hidratante—

Iris—Se lo pediré al enfermero, ya vuelvo—

Franco—Gracias… Iris te amo— en ese momento una lagrima apareció en mi mejilla y ella corrió a besarme de nuevo antes de salir.

Pedro—Puedes preguntar Franco, imagino que tienes muchas dudas—

Franco—Tengo miedo de saber las respuestas—

Pedro—Ok, empiezo yo, llevas poco mas de dos meses acá, la crisis empezó por el estrés de tu trabajo unido a que el padre de Kiki… bueno regreso y amenazo a Iris— me imagine que por eso la recuerdo cuando estaba llorando.

Franco—¿En que la amenazo? —

Pedro—Con pelearle la custodia y la paternidad de la niña—

Franco—Pero eso no se resuelve tan fácil—

Pedro—Se resuelve rápido con la ayuda de tu familia, especialmente tu hermana, esperamos no saber nada de ese tipo en el futuro—

Franco—¿Qué me dices del juicio en el estudio? —

Pedro—Nada claro aún, según parece la fiscalía quiere atrapar al socio que se escapó—

Franco—Gracias, Pedro— en ese momento escuchamos los pasos de Iris acercándose.

Iris—Ya te traen tu refresco amor, me imagino que le preguntaste a Pedro algunas cosas, espero que me preguntes muchas cosas a mí, hay tantas cosas que debo contarte—

Estuvimos hablando un largo rato Iris me conto muchas cosas de Kiki y de sus padres, que todos oraban por mí, luego me recordaron del pequeño Marcos, dios solo lo vi una o dos veces, Pedro me mostro unas fotos y el bebé estaba enorme, tenia rasgos parecidos a Pedro, pero el cabello rubio de Marta.

Luego aparecieron mis padres junto a mi hermana y mi primo, creo que cuando hablamos quien mas lloro fue Quique, había algo que me molestaba y era el hecho de no poder dejar de ver a Leticia, ella se dio cuenta y actuó como si nada pasara, según Pedro ella ayudo mucho a que la situación con el padre de Kiki no se arreglara pero, aunque esa explicación era completamente creable algo me hacia verla mas que a mi esposa y a mis padres, necesitaba saber que fue lo que paso.