VIDAS capítulo 61

CAPITULO 61 EZEQUIEL 25:17

ERICK

¿Dónde estoy? No me puedo mover, me duele todo mi cuerpo, mierda, no puedo abrir los ojos los tengo amarrados, siento que estoy muerto, no puede ser, no puedo moverme, apenas siento mis brazos y mis piernas, no puede ser ¿Qué mierda paso?

¿? — Me alegra que despertaras así podremos seguir —

Erick—Que me has hecho hijo de puta—

¿? — Nada que no hubieras hecho tu antes, jejeje —

Erick—Es por ella, si es por eso quiero que sepas que la disfrute y te recuerdo que ya no puedes retroceder el tiempo y lo que le hice no se puede deshacer, DESFOLLADA NO EXISTE—

¿? — Es bueno que pienses así, lo que te estamos haciendo tampoco se puede deshacer y lo vas a recordar por el resto de tu vida, aunque la verdad no he decidido cuánto tiempo vivirás —

24 horas antes:

No puedo creer que accediera, admito que me tuve mis dudas, pero al final cedió y lo que va a pasar será mucho más excitante para mí, en su cama, jajaja, donde duerme junto al imbécil ese. Quiero leer de nuevo sus mensajes, mi victoria en la vida.

Iris—Acepto, pero por favor debemos ser discretos—

Erick—Claro que si amor, veras que no te arrepentirás—

Iris—Estoy arrepentida de conocerte y de darte otra oportunidad—

Erick—jajaja, Pronto dejaras de ser tan rebelde—

Iris—¿Dime a dónde debo llegar? —

Erick—Hagámoslo especial, el hotel donde nos vimos por última vez—

Iris—No, hay mucha gente que me conoce—

Erick—jajaja, Que te parece si vienes a mi nueva casa—

Iris—Tengo miedo que alguien me pueda reconocer en la calle—

Erick—No tienes de que preocuparte, se me está ocurriendo algo—

Iris—Habla ya—

Erick—En tu casa, en tu cama donde duermes con él, ya me estoy excitando con la idea—

Iris—Jamás, eso no, piensa otra cosa, tu eres el que está jugando conmigo—

Erick—Esta decidido, será allí, déjame la puerta de servicio abierta, así puedo escabullirme, además le daré una buena propina al conserje de tu edificio, jajaja, será divertido—

Iris—No por favor, te lo ruego allí no, busca otro lugar—

Erick—No, lo he decidido, será como yo diga y tu solo obedecerás dime el día y la hora—

Iris—Él está de viaje el hasta el viernes, debes llegar después de la media noche—

LETICIA

72 horas antes:

A ver a qué hora llega el vuelo de mi primo, su vuelo esta atrasado por unas horas, espero que todo esté bien, no he hablado con Iris desde hace una semana después que nos juntamos y ella tenía muy mala cara, espero que este bien, Mónica me ha dicho que su caso por despido injustificado está progresando, pero a medias, los abogados de la televisora están retrasándolo todo.

Leticia—QUIQUE, acá estoy—

Quique—Hola primita, cuéntame ¿Cómo está todo? —

Leticia—Raro, por decir lo menos, pero mejor te explico en el auto camino a casa de tus padres—

Quique—Ok—

Le conté lo que decían sus socios, lo que yo vi aquel día que despidieron a Iris, mis dudas y también lo que Pedro me había compartido que le contaron Marta e Iris, su expresión era una mezcla de confusión, miedo y preocupación. Había tráfico y lo volteé a ver, decidí hacer algo que debí haber hecho hace muchos años.

Leticia—Cuéntame que fue lo que paso aquella vez en la finca con mi padre—

Quique—No, aun me duele en el corazón y se que tu padre aun le duele en el cuerpo, no creo que algún día estés lista para escucharlo todo—

Leticia—Se que mi padre estaba haciendo algo, pero no estoy segura de lo que era, imagino que estaba con alguna de las chicas que trabajaban en el servicio en ese tiempo, siempre me lo imagine—

Quique—Así es, y tu hermano lo vio—

Leticia—Creo que hubiera reaccionado de forma similar si hubiera visto eso—

Quique—Lo dudo, lo que él hizo, la expresión que tenía, la fuerza y la rabia—

Leticia—¿La expresión? —

Quique—Si, parecía que lo que hacía lo hacía con gusto, pero el resto de su cuerpo reaccionaba con rabia y lo peor fue como se expreso de Ana y lo que le dijo a Pedro—

Decidí que lo mejor era dejarlo allí en cuanto menciono a Ana, Pedro me diría más cosas después. Le dije a mi primo que nos veríamos antes con Pedro y uno de los socios de mi hermano, para que nos explicara como estaba la situación en el despacho.

El socio de mi hermano nos conto que las secretarias y los operarios caminaban con miedo si el estaba cerca, no se escondía a la hora de regañar a alguien, incluso trato de liarse a golpes con uno de los auditores de la fiscalía cuando este decía cosas por lo bajo, aparentemente estaba retardando el trabajo a propósito para manipular algo cuando mi hermano lo descubrió.

Lo que más me extrañaba era que Iris dijo que no había notado nada fuera de lo común en casa, aun en situaciones normales cuando se estresaba un poco o se enojaba mi hermano no escondía su carácter y se notaba que algo no estaba bien pero nunca llego a provocarle miedo a nadie o ponerse pesado, pensamos que como Iris tenía problemas también él quería que ella estuviera tranquila y por eso no hacia nada fuera de lo común en casa.

ERICK

Erick—Cof, cof ¿Esto en mi boca es sangre? —

¿? —De nuevo te desmayaste, estás haciéndolo muy complicado todo—

Erick—Mátame de una puta vez, MATAME—

¿? —jejeje, No aun no me he aburrido tanto y parece que tú, pequeño Erick, aun aguantas más y quiero darte más—

Erick—NO, NO, POR FAVOR—

12 horas antes:

Erick—¿Magda? —

Magda—Amor estaré de viaje una temporada mas larga de lo que pensé, me salió un posible negocio en Asia, necesito que te hagas cargo de la agencia, Joaquín te puede ayudar—

Erick—Pensé que te vería antes de tiempo—

Magda—No cielo, aún falta tiempo para que nos veamos—

MAGDA

Dicen que cuando uno se acuesta con niños amanece mojado, creo que eso me pasaba con Erick, aun le falta para convertirse en el hombre que era su padre, pero puede mejorar, como amante (aunque en eso es donde menos le falta), como empresario, como persona, espero que la compañía de Joaquín le ayude a madurar, eso de estarse buscando una amante fija no es muy buena idea, según la gente que tengo siguiéndolo se ha acercado a Iris, no creo que sea por buscar a la niña.

Tampoco creo que intente dejarme, seria muy estúpido de su parte lo tengo donde quiero y si logra acercarse a Iris de esa forma la puedo destruir y a la familia de su esposo así de paso ganarme favores políticos para las próximas elecciones, jajaja, si creo que si lo dejo hacer por un tiempo podría ser beneficioso para mí, aunque lo tenga que castigar después, ya se me ocurrirá algo con Erick.

PEDRO

72 horas antes:

Lo que nos ha comentado el socio de Franco me tiene sospechando, pero no es tan fuerte como esperaba, gracias a dios, pensé que necesitaríamos sedarlo o algo peor, la ultima vez casi mata a su padre, Leticia me ha preguntado de los hechos de esa noche, dice que Quique no le quiere decir que paso, pienso que para el también fue muy traumático, pero si vamos a estar todos en la misma embarcación debemos tener la misma información, le pediré a Quique que se quede y contare yo todo, pero solo a Leticia, quizás la situación de Franco no sea tan grave como ella piensa, lo discutiré con ellos dos cuando se haya retirado el socio de Franco

Pedro—Ok chicos parece que, aunque Franco esta estresado aun no ha pasado a mayores la situación con el trabajo ni la casa—

Leticia—Pedro, eso que tiene mi hermano ¿se cura? —

Pedro—Lamentablemente no hay algo que podrías llamar una cura, pero muchos de los pacientes con trastorno disociativo como el de tu hermano son capaces de llevar vidas plenas—

Quique—Aun y con lo que hizo aquella vez—

Pedro—Eso fue hace muchos años Quique, la pubertad y las hormonas pudieron exacerbar las reacciones y además añade a eso lo que estaba viendo resulta un estado máximo de estrés—

Leticia—Hablando de eso, quiero saber que paso esa noche, necesito saberlo—

Pedro—Estoy de acuerdo, por eso quiero que te quedes Quique, tú también tienes algo que agregar, cosas que yo no vi y tu si, fuiste el primero en estar allí—

Quique—No, me rehúso y no quiero que me obliguen—

Pedro—Cálmate, nadie te puede obligar a nada, pero tú también necesitas sacarte eso y si necesitamos estar preparados para ayudar a Franco, como cree Leticia, todos debemos estar al tanto de toda de la información que tenemos—

Leticia—Estoy de acuerdo con Pedro—

Decidimos juntarnos al siguiente día en mi consultorio para discutir sobre todo lo que paso el día del ataque a don Rodolfo y el día de la muerte de Ana, Quique no dijo si llegaría o no, pero Leticia aseguro que estaría allá.

IRIS

48 horas antes:

El plan de mi marido me parece descabellado, no sé bien en qué momento piensa hacer que Erick le diga dónde están las “pruebas” de mi infidelidad, seguramente le ofrezca dinero, espero que todo salga bien en su plan, pero tengo miedo que Erick lo lastime y luego nos joda la vida.

Espero que mis amigas no sospechen nada, Leticia me observo como si estuviera estudiándome la última vez que la vi, según Mónica podremos ganar el juicio de mi despido, la verdad no estoy muy atenta a eso en estos días.

Según me dijo, mi esposo, por lo que el averiguo del correo electrónico donde me enviaron las fotos solo Erick tenia acceso y no parece haber enviado nada desde esa computadora, no se bien como tuvo acceso a ella, me imagino que pagando sobornos y escabulléndose por la oficina de la agencia, el nunca fue de esa clase de nerds.

Espero que todo salga bien y no tengamos que arrepentirnos de nada.

ERICK

¿Ya habrá pasado? No escucho nada desde hace un rato, pero no estoy seguro. Maldita sea la hora que decidí meterme en esto, espero que las chicas y Joaquín saquen esas fotos, cuanto antes mejor, no me imagino saliendo bien de acá.

¿? —Maldita sea contigo, pensé que serias lo suficientemente hombre para aguantar—

Erick—aghh, Ya no me queda nada ¿verdad? —

¿? —No, ya no te queda nada pequeño Erick y espero que no pienses que tus amiguitas liberaran algo y menos aún el idiota de tu socio, ya me encargue de ellos—

Erick—Ya nada me importa—

¿? —En serio eres patético, te dije que tu ultima esperanza de conseguir algo se murió y solo puedes sentir lastima de ti—

8 horas antes:

Cuanto arreglo, debo estar presentable para cornear a un “ganador” jajaja, cuando termine hoy con Iris su esposo no podrá satisfacerla nunca más, puto arquitecto, según vi en las noticias ese patético hombrecito pronto estará en la cárcel, mientras Iris y yo estaremos buscando la manera de meter a la abogada esa en la cama, ya esta todo asegurado, ya envié los correos a las chicas y a Joaquín con las instrucciones para que puedan acceder a mi material, las chicas tienen una idea, pero no lo saben todo y Joaquín, cuando regrese le contare todo lo que yo piense que necesita saber.

QUIQUE

48 horas antes:

Según Leticia hay que estar atentos, pero según Pedro parece que no hay nada de que preocuparnos, no tengo idea de que pensar, debo ver a mi primo para hacerme a la idea por mí mismo de que está pasando, será mejor que me apresure a llegar al despacho de Pedro en la universidad.

Pedro—Te esperábamos, gracias por venir, empecemos—

Leticia—Ok, adelante Pedro, tengo tantas dudas como miedos—

Quique—Haces bien—

Pedro—Te puedo decir que estaba pasando cuando yo llegue, tu hermano estaba sobre tu padre con un pedazo de hierro, estaba golpeándolo por la espalda, parece que tuvo la reacción de voltearse antes de que le hiciera daño en sus genitales—

Quique—Exacto, yo estaba en la puerta temblando de miedo—

Pedro—Justo cuando entre tu tío Mauro y dos de sus peones entraron para sujetarlo, pero de un movimiento ambos sujetos pasaron de largo y tu tío recibió el impacto de la vara de hierro en su estómago—

Quique—En ese momento logré abalanzarme sobre el y detuve la vara cuando estaba a punto de golpear al tío en la cabeza—

Pedro—En ese momento los peones lograron tomarlo por la espalda, yo había llevado un maletín con sedantes que siempre lo llevo conmigo, mientras los peones lo sujetaban logre inyectarle una dosis en el cuello, pero no fue suficiente— en ese momento Pedro suspiro —nos logro golpear a los peones con los codos en la cara, a mi me dio un puñetazo—

Quique—A mi me empujo con tanta fuerza que aun me duele cuando lo recuerdo y fui a dar contra la puerta rompiendo algunos vidrios—

Pedro—Lo sujete por la cara para empujarlo alejándolo de tu padre, pero eso parece que lo enojo más y empezó a hablarme— Pedro estaba a punto de llorar cuando recordó las palabras de mi primo.

Leticia—¿Qué te dijo para que te pongas así? —

Quique—Le dijo “tu eres el estúpido cornudo que se acostaba con mi hermana, jajaja, lo ultimo que dijo fue que tú no eras lo suficientemente hombre para ella, estaba apunto de romper el compromiso contigo para acostarse con otros”—

Leticia—Pero eso no era verdad, todos nos habíamos dado cuenta de que había mucho mas que una amistad entre ustedes, a pesar que no nos habían dicho nada del compromiso—

Pedro—Lo sé, me tomo años decirles a ustedes lo del compromiso, fue hasta que me liberé de ese peso que pude comenzar mi vida de nuevo, hasta que conocí a Marta—

Quique—Esa platica lo distrajo y el tío Mauro le dio en golpe en la cara y los peones lo sujetaron de nuevo, así Pedro pudo ponerle otra dosis de tranquilizante—

Leticia—Escúchame bien Pedro, mi hermana hubiera sido incapaz de decir algo así de ti—

Pedro—Lo sé, en mi corazón lo sé—

Leticia—Pero que paso antes de todo lo que me acaban de contar—

Quique—Habíamos decidido salir a fumar unos porritos que yo llevaba—

Leticia—Recuerdo esa época, no me extraña que llevaras algo así—

Quique—Debíamos pasar por el despacho del tío para ir afuera de la casa— me sentí incomodo revelándole eso a mi prima —sabíamos que los viejos estaban bebiendo en ese despacho, pero de eso habían pasado algunas horas y pensamos que estarían muy borrachos para darse cuenta que pasamos por allí—

Leticia—Asumo que el vio algo entonces—

Quique—Exacto, yo estaba algo lejos ya que no me atrevía a pasar hasta que el estuviera del otro lado lejos de la mirada de la puerta—

Leticia—¿Quién era la chica? —

Quique—Creo que se llamaba Gabriela era la pequeña de pechos grandes—

Leticia—Si la recuerdo—

Quique—Cuando el vio hacia adentro su primera expresión fue de susto, luego se transformó—

Leticia—Mencionaste algo de su expresión ¿Cómo fue el cambio? —

Quique—Le tomo unos segundos, yo aun me encontraba en mi posición cuando vi una mirada llena de rabia, pero a la vez tenía una sonrisa tétrica—

Leticia—¿Qué paso luego? —

Quique—Tomo algo del suelo y despacio abrió la puerta, imagino que para sorprenderlos— me acomodé a mi asiento y seguí hablando, ambos estaban atentos a mis palabras —lo siguiente que vi fue que entro rápidamente, escuche el grito de una mujer y después escuche a Franco diciendo “Eres un hijo de puta, estas muerto y prepárate que te dolerá—

Pedro—También recuerdo que cuando el sedante hizo su efecto vimos que la chica estaba del otro lado con su pecho descubierto y el vestido levantando completamente inconsciente—

Quique—Cuando escuché el grito de la chica me moví hacia la puerta y la abrí, allí fue cuando lo vi con esa expresión de gozo golpeando a tu padre—

Leticia—Me había imaginado algo así, pero ya están todas mis dudas resueltas, lo único que no sospechaba era que el parecía estar gozando cuando golpeaba a nuestro padre—

Pedro—Te puedo confirmar que eso parecía, pero les digo a ambos ese no era Franco, no sé cómo llamarlo, las pocas veces que ocurría el cambio en la clínica nunca menciono un nombre o algo así, solamente se sentaba a recitar cosas en otros idiomas hasta que cambiaba a Franco de nuevo—

Leticia—Me imagino que tendría esa mirada tan fría—

Pedro—Así es, mi tía Olga lo entrevisto un par de veces y nunca hizo otra cosa más que recitar en otros idiomas—

Leticia—¿Qué recitaba? —

Pedro—En italiano partes de la divina comedia, en alemán a veces partes del mein kampf y de la biblia o trozos de Hesse, en ingles trozos de Shakespeare o de Wolf y también trozos de la biblia, en francés trozos del Marque de Sade, la verdad era todo muy variado, pero siempre lo alternaba todo con versículos de la biblia, pero no decía ningún versículo en especial—

Leticia—¿Qué decía tu tía Olga? —

Pedro—Que parecía estar haciéndolo a propósito para confundirnos—

Salimos del despacho y Leticia me fue a dejar a mi casa, dijo que pasaría a ver como estaban Iris y Franco de camino a su casa, no me ofrecí a acompañarla por miedo, pero cuando entre en la casa de mis padres mi madre me dijo que quería hablar conmigo de algo raro después de que comiera algo.

Doña Miriam—Hijo últimamente llegaron a la casa notificaciones de pagos e impuestos atrasados de una propiedad a tu nombre—

Quique—¿Qué propiedad madre? –

Doña Miriam—Una en las afueras al sur, cerca de la casa de tus tíos Rodolfo y Ana— me quede pensando por unos minutos y reaccione imaginándome cual era esa propiedad.

Quique—Gracias madre me hare cargo de eso mañana a primera hora—

Doña Miriam—Recuerdo que antes de irte a España querías comprar una propiedad en ese sector, espero que no lo hicieras—

Quique—No madre, no lo haría sin consultártelo, pero quizás Franco sepa algo, hablare con él por la mañana—

ERICK

Apenas puedo respirar, no sé qué más me hará este animal, si al menos pudiera ver su rostro, aun me tiene vendado, no se cuanto tiempo ha pasado, solo se que me ha violado al menos tres veces con algo solido y el dolor en mi pecho me dice que tengo algunas costillas rotas, ¿Cuánto más puede aguantar golpeándome así?

¿?– De nuevo te despiertas, que bueno veras pequeño Erick ya me estoy cansando, pero este juego ha resultado muy divertido, de momento ya no sentirás mas dolor en tu ano, me aburrí de esa parte, porque no mejor decidimos entre ambos ¿Me sientes? este es tu tendón de Aquiles, dicen que es muy doloroso, que tal si me muestras que tan doloroso puede ser algo allí—

Erick—Ya déjame morir, yo no tengo la culpa de que tu esposa sea una puta que se dejó seducir— plaf, sentí una nueva cachetada con algo sólido.

¿? —No vuelvas a mencionarla o te ira peor, créeme que lo que sientes ahora no es nada si te atreves a mencionarla de nuevo—

Erick—Maldito perro, dile a ese imbécil de esposo de Iris y a esa perra que los veré en el infierno—

¿? —Acabas de darme permiso de para cortarte y ver cuanto dolor puedes aguantar cuando te inyecte adrenalina, jajaja

Erick—NO, NO, YA NOOOO—

6 horas antes:

Erick—¿Joaquín? —

Joaquín—Aló, dime Erick en que te puedo ayudar—

Erick—Te he enviado un correo después te explico para que es—

Joaquín—No puedo verlo ahora, pero te recuerdo que Magda necesita que te hagas cargo de los negocios mientras ella no esté—

Erick—Ya hablé con ella hace un rato, veremos eso mañana y de paso te explico lo del correo—

Joaquín—Ok, pequeño Erick ya hablaremos—

Como odio que él me diga así, pero así me llamaba Magda en las noches de sexo, decía que era su pequeño consentido, jajaja, a veces era como follarse a mi madre, pero esa idea en realidad me parecía asquerosa, por mucho que los chicos en el instituto del pueblo decían que estaba buena y era muy bella, nunca le podre perdonar que me arrastrara a su pueblo huyendo de quien sabe qué.

IRIS

24 horas antes:

Dios mio estoy tan nerviosa, esa visita de mi cuñada anoche me puso peor, espero que Franco no haga ninguna locura, confió en el y se que no me decepcionara.

Por suerte Franco reacciono bastante bien con su hermana, está muy confiado y aun no me dice nada, mis padres accedieron a llevarse a Kiki en estos días, no ha visto nada de mi nerviosismo, mama me dijo que Marta paso a visitarlos anoche junto con el bebé, el pequeño Marcos, me gusta el nombre de mi futuro ahijado, pronto todo esto con Erick acabara y podré volver a mi vida, gracias a dios no le dije a Kiki que su padre estaba en la ciudad y quería conocerla, no me hubiera perdonado que mi pequeña conociera a ese monstruo y quien sabe por que caminos la hubiera llevado, solo espero no volver a saber nada de su existencia después de esta noche, rezare para que encuentre la luz y no siga por este camino que lleva en la vida, según Mónica entre Joaquín, Magda y Erick convirtieron la agencia de modelos en una agencia de scorts de alto vuelo, no sé cuántas pobres chicas habrán caído en sus garras, mi esposo dijo que saldría a hacer los últimos arreglos para convencer a Erick de que no siga con esta tontería.

QUIQUE

24 horas antes:

Quique—Prima, como estuvo tu visita ayer a tu hermano—

Leticia—Normal de hecho, solo vi a Iris un poco nerviosa, pero no vi nada raro en Franco—

Quique—¿Eso es bueno o malo? —

Leticia—Aun no lo sé, se me hace raro que este todo tan normal, es cierto que ambos están preocupados y de hecho Franco menciono algo de que en las auditorias que han hecho en sus proyectos aun no encuentran nada raro—

Quique—Quizás este menos estresado ahora—

Leticia—Puede ser ¿Cómo estuvo tu noche con tus padres? —

Quique—Pues paso algo y debo preguntarle a Franco respecto a eso—

Leticia—Cuéntame—

Quique—Me apareció una propiedad, que yo no compre, pero si quería comprarla antes de irme a España y solo Franco y mi madre sabían de mi intención—

Leticia—Entonces crees que Franco tuvo algo que ver en eso—

Quique—Así es, por eso quisiera hablar con el hoy, pero no contesta ni Iris tampoco—

Leticia—Ellos mencionaron algo de ir a ver una de las obras de el estudio de Franco, pero desconozco si lo harían hoy—

Quique—Talvez estén por allá, será mejor que intente llamarlos más tarde—

ERICK

Que es ese sonido, está arrastrando algo “ ¿hijo de puta que haces? ” no me responde, solo escucho más ruidos de cosas moviéndose, especialmente algo pesado, el dolor, el dolor cuando me corto hizo parecer el dolor de mi violación una pequeña jaqueca ¿Qué es este olor, humo?

¿? —Me gustaría que te vieras, antes de irnos, creo que no quedo mal ya que es mi primera vez haciendo esto—

Me quito el pañuelo que cubría mis ojos, mi imagen en el espejo, esa masa llena sangre, de moretones y cortes era mi imagen, mi rostro el hijo de puta lo corto y ya no quedaba nada de este, mi cuerpo, mis piernas sangraban demasiado, mi pecho, mi abdomen, entonces él se paró frente a mi para verme por última vez.

No pude verlo bien la máscara blanca cubría todo su rostro, además sus ojos los cubrió con una fina tela negra que de haber tenido un poco de luz sabría cómo eran, lo que me hizo después fue golpearme la tráquea de un puñetazo certero “ así no gritaras ” desde ese momento me costó respirar, y no pude emitir sonido alguno.

¿? —Quizás te preguntas a donde iremos, te confieso que yo no sé a dónde iré por el mundo ahora que al fin estoy bien no pienso regresar con ellas seguramente no podre hablar de todas las cosas que hicimos hoy tu y yo, por otra parte, les dará asco y miedo que yo este rondando por allí, aunque no me creas las amo y lo que hicimos acá es solo una muestra de lo que seria capaz de hacer por ellas, ahora te dejo antes que las cosas se pongan más calientes, jejeje. Tu mientras tanto estarás en un lugar donde te juzgarán y decidirán que hacer contigo—

Calor, eso es lo que siento, el calor me está dando paz a pesar del dolor, el humo eso me preocupa un poco, antes de irse el maldito me deja en el suelo, el suelo está caliente, no sé si estoy desamarrado igual no puedo moverme, de a poco la sensación de calor empieza a llegar a mi cuerpo, de a poco la temperatura a mi alrededor sube.

4 horas antes:

Erick—Ya estoy por acá abajo—

Iris—Ya me encargué del conserje—

Erick—Así me gusta una perrita obediente y que se anticipe a las necesidades de su amo—

Iris—Eres un hijo de puta—

Erick—Pronto tu serás mi puta particular—

Entre en el departamento de ella, allí estaba vestida normal, no se puso ningún atuendo sexi, lastima por mí que quería verla esplendorosa y entregada, supongo que solo la veré entregada a mí. Parece que ha estado llorando, pequeña ridícula, pronto las lágrimas desaparecerán y habrá placer, al menos para mí.

Iris—¿Quieres algo de beber? —

Erick—Obviamente necesito festejar que al fin estaremos juntos de nuevo amor—

Iris—No me llames así, dime lo que quieres para beber—

Erick—Lo que tengas a mano estará bien— se levantó a la cocina y después de unos minutos regreso con dos copas y una botella de coñac —excelente idea que decidieras unírteme en la celebración, sirvió tragos bastante generosos en ambas copas— mientras ella solamente contemplaba la suya yo bebi la mía de un solo golpe y me serví otra— Iris amor acompáñame con otro trago, por nosotros— ella solamente probo un sorbo y yo de nuevo me la tomé de un trago.

Iris—Tu me dices a que hora quieres que empecemos—

Erick—Adelántate al cuarto y llévate la botella contigo— mi éxtasis era total, tanto que casi me tropiezo cuando la seguí segundos después de asegurarme que la grabadora digital que cargaba conmigo estaba encendida —ya estoy acá, me gusta que me recibas con otro trago, pero esta vez acompáñame completamente—

Iris—De acuerdo, bebamos juntos—

Ambos nos bebimos hasta la última gota de las copas, fue entonces que vi en su rostro una lagrima, estaba a punto de decirle algo cuando sentí que me mareaba, esta vez no era mi estado de ánimo, era el trago que había bebido, mierda ella me drogo, apenas pude sostenerme para sacar mi teléfono e intentar enviar un mensaje a las chicas, cuando por detrás una mano me arranco el teléfono y no sabía quién era, la oscuridad fue solo alterada por un fuerte dolor en mi entrepierna.

Escuche una voz de hombre hablándole, apenas escuche lo último que le dijo “ ¿Confías en mí?” lo siguiente que supe era que estaba amarrado y un hombre me estaba hablando.

¿? —Espero que estés listo para llegar hasta las últimas consecuencias ¿En serio creíste que podrías salirte con la tuya en esto? No tienes idea del dolor que causaste, pero pronto lo sabrás—

Mi calvario empezó allí, el dolor físico era horrible, no sabia que alguien pudiera provocar tanto dolor, sospeche que ellos habían contratado a alguien que me diera una lección, pensando que había sido un error por parte de ellos, ya que si no aparezco las “pruebas” saldrán a la luz y ellos junto a sus carreras políticas estarían condenadas a desaparecer, esa seria mi victoria sobre estos idiotas, lo peor era no ver nada, me habían vendado los ojos.

IRIS

4 horas antes:

Mi esposo ya esta acá, con el a mi lado seguramente pasaremos esto.

Franco—Cielo, en cuanto el entre quiero que le ofrezcas un trago de esta botella de coñac—

Iris—No sé si él quiera eso ¿Qué tal si quiere alguna otra cosa? —

Franco—Le dices que esto es lo único que hay, que yo no bebo y por eso no hay gran variedad de bebidas en la casa—

Iris—¿Qué más debo hacer? —

Franco—Síguele el juego, si te pide que lo acompañes a tomar, hazlo, pero no dejes que empiece a tocarte o algo en la sala tráelo acá a la habitación—

Iris—¿Cuándo saldrás? —

Franco—Yo sabre cuando hacerlo—

Todo estaba de acuerdo al plan de mi esposo, y parecía ir bien, no quise probar demasiado de la botella que me dio Franco, el sorbo que le di en la sala me dejo una sensación extraña ¿En qué demonios me metí ahora?

Cuando me adelante hacia la habitación, mi esposo me estaba esperando, sirvió un trago grande en la copa de Erick y saco de su bolsillo unas capsulas, vacío dos en la copa y me guiño un ojo. Cuando Erick apareció en la puerta le ofrecí la copa que había preparado mi esposo y me pidió que le acompañara bebiéndome toda mi copa, así lo hice y note de inmediato que me empecé a marear.

Note que a Erick le paso lo mismo, pero con efectos mas fuertes, mientras lo mío era un mareo fuerte, Erick casi se cae de bruces en el suelo, intento sacar su teléfono, pero mi esposo lo tomo antes de que el pudiera hacer algo.

Franco lo vio cuando cayó al suelo y le pateo la entrepierna, en condiciones normales un hombre hubiera estado retorciéndose de dolor, pero Erick apenas se movió con incomodidad, pensé que lo había matado, estaba a punto de gritar cuando el me tomo con un brazo y puso su mano para taparme la boca.

Franco—Tranquila amor, no está muerto, necesitamos averiguar que hizo con el material que tiene—

Iris—¿Qué piensas hacer? — en ese momento me soltó y empezó a servir otra copa de licor.

Franco—Descuida amor no tienes nada de qué preocuparte, pero dime algo ¿Confías en mí? — eso lo dijo mientras sacaba otra capsula de su bolsillo y vaciaba el contenido en la copa.

Iris—Si amor, confió en ti— el me ofreció la copa y la bebi de golpe, empecé a sentirme mal y el me tomo por el brazo, luego me guio hasta la cama donde me ayudo a recostarme y me quede dormida.

QUIQUE

Estaba pensando en como seria ver a Franco, las pocas veces que había venido al país la pasábamos bien, junto con Iris, la nena y Leticia, eran salidas familiares, algo que no pensé nunca que podría llegar a disfrutar, lamente no poder estar con ellos el día de su boda. Era la madrugada y aunque tenía sueño todo lo que estaba en mi cabeza me daba vueltas, era como si algo no me dejara dormir, como si estuviera esperando algo.

De repente escucho el teléfono de la casa sonar, lo que se me hizo raro, al rato una de las mujeres del servicio me fue a tocar la puerta, seguramente noto que tenía la luz encendida.

Empleada—Joven Quique, es para usted es del cuerpo de bomberos del ayuntamiento—

Quique—Gracias, enseguida atiendo—

Bombero—Buenas noches señor Enrique XXX, es para informarle de un fuerte incendio en su propiedad ubicada en la dirección YYY—

Quique—Perdón, pero de que propiedad me está hablando—

Bombero—Una al sur de la ciudad—

Quique—Deme un segundo, ya recordé, gracias, pero creo que esa propiedad esta vacía—

Bombero—No sabría decirle, pero será mejor que se apresure a llegar, el incendio es fuerte y apenas podemos controlarlo, quizás usted nos ayude para saber si hay gente—

Mierda esa era la dirección de donde estaba el club, pero que demonios habrá pasado para que hubiera un incendio, será mejor que me apresure a ir, les contare después a mis padres después lo que paso.

Cuando llegue el lugar era un infierno, creo que no había visto un fuego así fuera de la televisión, el jefe de los bomberos se me acerca y me explica que un estudio de construcción había estado moviendo cosas para iniciar con la reconstrucción del lugar y tenían mucho material adentro, varias de esas cosas eran inflamables y parece ser que unos chicos, seguramente drogadictos del sector, habían estado jugando por allí y accidentalmente iniciaron el fuego.

Me dieron una placa medio quemada, donde se alcanzaba a leer que la constructora que estaba trabajando en ese proyecto era la de mi primo, inmediatamente le marqué, pero no conseguí comunicarme, luego intente con Iris y tampoco me comunico. Me estaba poniendo incomodo con esa situación, de repente se acercó un bombero al jefe gritando que podría haber alguien allí quemándose vivo y que intentarían sacarlo.

Inmediatamente me aterre, y trate de acercarme al lugar de donde venia el bombero, no me dejaron pasar, llame a Leticia indicándole lo que pasaba y ella dijo que llegaría tan pronto como pudiera.