Vicio en el campo (1)

Mi nombre es David, tengo 20 años y pertenezco a una familia de lo más normal... o al menos eso es lo que creía.

Vivimos en una casa de campo en el norte de España.

Mi familia está compuesta por mi padre José de 43 años, mi madre Mariló de 42, mi hermana Sara de 18 y yo.

Nuestra vida era de lo más normal. Sara y yo íbamos a la escuela, y mis padres trabajaban en casa y en el campo.

Un día de verano llegó nuestro abuelo Luis y se quedó a vivir con nosotros. Pensamos que se habría cansado de vivir con mi tía Isabel (hermana de mi madre) y su familia.

Me levanté bastante tarde aquel día de Julio. No teníamos clase así que no había prisa. Bajé a la cocina, me preparé el desayuno... lo normal. Lo que ya no era tan normal es que no hubiese nadie por allí. Seguramente estarían trabajando la tierra. Sin darle más importancia salí de casa y me encaminé a saludar a nuestro perro que dormía en una caseta en la parte de atrás de la casa. Al pasar cerca del pajar escuché voces. Voces y gemidos. Quise saber lo que pasaba, así que despacio y en silencio subí por unas escaleras que conducen hasta allí y asomé un poco la cabeza para ver lo que pasaba. Lo que ví me dejó completamente petrificado. Mi madre tenía las manos apoyadas en una de las vigas del pajar mientras ponía su culo en pompa. Se había subido la falda hasta la cintura y sacado las tetas fuera de la blusa. No eran tetas, eran un par de melones enormes que se movían al ritmo de la follada. Aquellos melones blancos y aquel culo grande y gordo de piel blanca que estaba siendo follado por mi abuelo! ¡Su propio padre!

• Joder Mariló, sigues siendo tan puta como siempre...uffff... qué gustazoooo...
• Ohhhhh siiiiiiii, y tu cipote sigue siendo enormeee papáaaaaaa... ooooohhhhhhhh, como lo echaba de menos..... siiiiiiii, siiiiiiiiii, dame rabo, cabrón, dame rabooooooo.....ooooohhhh, que se nota que te lo han cuidado bien eh... ufffffff, qué gozadaaaaaaa
• Siiiii, ya sabes lo puta que es tu hermanita, jejeje..... oooohhh....me la ha entrenado bien la muy golfa...ufffff...
• Ya veremos quién lo es más, que a mi a golfa no me gana nadieeeeee.....ooohhhhhhhh siiiiii, jódete al putón de tu hija siiiiiiiiiiiiiiiii...

Estaba en estado de shock viendo aquel espectáculo. Mi madre follada por su padre y encima este también se estaba tirando a mi tía Isabel!!! A sus 62 años era todo un semental...

Era algo surrealista, pero a la vez no pude evitar sacarme la polla y meneármela con furia.

• Mi niña, me voy a correr... uffff ya no puedo más, joderrrrrr....
• Córrete en mi boca papá... ummmmmm

El espectáculo era increíble, mi madre con sus enormes melones, de rodillas recibiendo la lechada de su padre. Joder, y qué pedazo de polla gastaba el abuelo. Le restregaba su enorme cipote por la cara.

Yo por mi parte me pegué la mejor corrida de mi vida (hasta entonces) y salí de allí antes de que me pillasen.

Pero las aventuras de mi peculiar familia no terminaron ahí, ni mucho menos. CONTINUARÁ...