Viaje de generación : día 1 primera parte

Terminé la prepa y para celebrar se organiza un viaje a la playa.

Por fin terminamos la prepa y era momento de celebrar, así que organizamos un viaje a Veracruz como grupo, un viaje sin papás, solamente los graduados con un maestro que nos cuidara, obviamente elegimos al maestro más barco, Ismael, el profe de educación física , un joven de treinta y tantos de esos que quiere ser amigo de sus alumnos y anda de perro con sus alumnas, a mi más de una vez me había piropeado sobre mis senos e invitado a su casa, yo en ese entonces tenía novio y lo amaba mucho, con el había experimentado mis primeras veces, las cuales ya les conté en otros relatos, era virgen aún de la vagina, pero también era muyyyy caliente.

Eran las siete de la mañana y yo dormía en el autobus cuando sentí una mano recorrer mi seno, desperté con un salto y al abrir los ojos vi a Ismael caminando hacia la parte de atrás del camión, pensé que quizás lo había imaginado, no le di importancia y volví a dormir, llegamos al puerto de Veracruz a eso de las 9 de la mañana, llegamos directo al hotel y emocionada tomé mi maleta y me dirigí a mi cuarto, a todos nos había tocado habitaciones dobles, triples y hasta cuádruples, a mis amigas les había tocado juntas, pero a ninguna conmigo, llegué a la habitación y solo había una cama, que suerte la mía, me había tocado sola, o por lo menos eso pensaba.

Iba a cerrar la puerta cuando una mano me detuvo, era el profe, que me dijo, que hace en mi habitación señorita?, preguntó con una sonrisa sospechosa, a mi me dijeron que era la mía profe, vea, le dije enseñándole el papel que me habían dado en recepción, es muy raro, todos sus demás compañeros ya tienen cuarto y al parecer usted quedó volando, no quiero ser grosero pero este es mi cuarto señorita, ay profe pero donde voy a dormir? Pregunté, aunque en realidad ya había entendido todo el asunto y quize seguirle el juego, me puedo quedar aquí profe por favor? No quiero dormir en la playa, esta bien señorita acomode sus cosas, ahorita vemos como nos organizamos, dijo mientras cerraba la puerta detrás de mi y me veía las nalgas.

Puse mi maleta sobre el sillón y me puse cómoda, el por su parte entró al baño a refrescarse y después de un rato salió con su traje de baño y me dijo, voy a nadar un rato, nos vemos después y salió sin verme demasiado, apenas salió del cuarto me desnude y me metí a bañar, estaba sudada y necesitaba quitármelo de inmediato, siempre me ha gustado mucho bañarme, sentir el agua recorriendo mi cuerpo desnudo me provoca placer, después de unos minutos salí y me di cuenta de que había dejado la toalla y mi ropa fuera del baño así que tuve que salir desnuda, lo cual no era problema ya que estaba sola, pero oh sorpresa al salir estaba ahí el profe oliendo la braga sucia que había dejado en mi maleta, la olía con tanta intensidad que no pude evitar sentirme caliente, y le dije : no quiere olerla mejor recién bañada, el profe volteo de inmediato y se quedó mudo al verme desnuda ante el, con mis senos grandes y caderas estrechas, todavía húmeda y con cara de traviesa, dejo caer mi braga al suelo y camino con paso firme hacia mi.

Me comenzó a besar los senos, mordidas pequeñas dio a mis pezones y yo me inmediato empecé a mojarme, mi mano fue directo a su pene, lo masajee sobre el traje de baño advirtiendo el tamaño y grosor, una potente ereccion se hizo presente al sentir mis manos de adolescente, me llevó hasta la cama y me tiró sobre ella, abrió mis piernas y comenzó a besar mi sexo, su lengua chupando mis labios vaginales era una sensación indescriptible, con mis manos revolvi su cabello y con gemidos indiqué lo bien que lo hacia, metía sus dedos al mismo tiempo que su lengua, estaba empapada en mis jugos y tuve un orgasmo sin que me penetrara, era delicioso, ahhhhh dámelo ya, metemela, andaaa, le suplique entre gemidos y voltrandome poniendo el culo en pompa me abrí las nalgas, dámelo papi, dámelo por el culo, como saben aun no quería perder la virginidad entonces tenía sexo anal siempre jeje.

No le dije dos veces cuando sentí un chorro de saliva cayendo sobre mi ano, un dedo comenzó a urgar y a dilatar mi orificio estrecho, estaba ardiendo, lo deseaba dentro ya, así que grité, cogemeeeee, y obediente tomó su verga que era morena, venosa, gorda, sin capucha y con un glande rojo y bello, que comenzó a taladrar mi ano hasta acerlo ceder a su forma, de golpe me metió sus 15 centímetros de verga jalando mi cabello aún mojado y empujando su pelvis contra mis nalgas, me retorci del dolor que aquella cosa me provocó, sentía su palpitar en mi culo, y una lagrima salió de mis ojos, sabía que me había lastimado un poco pero no le importó y comenzó a cogerme con fuerza, mis gritos se oían por todo el pasillo, y el golpeteo de sus huevos me puso a mil, mi mano fue directo a mi vagina y a masajear mi clitoris al ritmo de las embestidas de mi profe, me puso de ladito y levantó mi pierna, como cuchareando sin sacar su verga de mi me besaba en el cuello y apretaba mis tetas, lo estaba gozando tanto o más que yo, me decía te gusta verdad puta, eres una petra deliciosa, y eso me ponía mas y más cachonda.

Sentí como su ritmo de aceleraba y advertí que estaba pronto a venirse, y con mis manos apreté sus nalgas contra mi, vente adentro le dije, quiero sentirte, y el ritmo de sus bombeos aceleraron dando paso a un grito de placer y a que brotara de él un río de semen caliente que inundó mis entrañas, gritamos juntos y nos besamos con mucha pasión, sentí como su verga palpitaba con cada chorro que brotó, al salir de mi pude sentir como un hilo blanco comenzó a escurrir entre mis nalgas, me quedé un rato recostada para recuperarme, el se levantó y con su teléfono me tomó una foto desnuda, sudada y exhausta, abrió mis piernas y tomó una foto de su semen escurriendo de mi, sonrió y me dijo, que rico señorita, pudimos haberlo hecho antes, pero con el sonido del mar de fondo quedó muy rico, yo solo sonreí sin decir nada, debería bañarse de nuevo,en la noche tenemos fiesta arcoiris en el cuarto de los chavos de la banda de guerra, no se la va a querer perder o si?, me dijo en tono travieso mientras se vestía y salía de la habitación.

Fiesta arcoiris, no podía perdermela, este viaje comenzaba bien.

Continuará...