Viaje a la felicidad 10

10VIAJE…

Se trata de:

La historia de un muchacho, que en poco tiempo pasó de ser un tímido que no se acercaba a las mujeres, a ser un padre de una hijita de año y medio, engañado, desengañado, por su mujer y por su familia… habría que leer Viaje a la felicidad anteriores para tener conocimiento y continuidad de los personajes…

Me llamo Carlos Guerrero, me dicen Cacho, tengo 23 años, estudié en el industrial  de técnico mecánico, rubio de ojos grises, mido 1,70, ya no soy tan gordo como hace dos años, no tengo un físico privilegiado pero casi estoy en peso…

Viaje a la felicidad.

Cada vez que se mencionaba el tema, me recontra calentaba, no se me pasaba la bronca y no era porque me había engañado mi mujer o porque tuviera ahora a tres amantes juntos, lo que me molestaba es que me tomó por tonto, me decía que no tenía ningún sexo, que no esperaba el momento de volver a encontrarnos para gozarlo,  mientras su compañera, mi prima, le mandaba videos a sus hijas, mis primitas en los cuales se veía a Ester, mi mujer teniendo sexo con tres a la vez…y lo peor…no preguntaba por nuestra hija…(mi mujer, Ester y mi prima Isabel, ambas doctoras cirujanas, fueron a hacer un curso a Cuba, después lo continuaron en Rusia, mi mujer se juntó con tres médicos cubanos, cuando volvió nos separamos, al tiempo mi familia le alquila un departamento al lado del mío y se trae a los tres cubanos…mi prima la doctora Isabel hizo lo mismo pero con dos médicos…ella no tiene una hija chiquita conmigo… la conchuda de mi mujer no preguntó nunca por Josefina, nuestra hijita… y mi viejo y mi tío, mi madre, mi tía, mis primitas (las hijas de mi prima Isabel)a todos les parece bien que la conchuda de Ester venga tranquila a vivir con tres tipos y no se le ocurra preguntar por su hija…que se vayan todos a la puta que los parió…

Yo para irme de la sociedad que tenía con mi viejo y mi tío, un taller mecánico y un negocio de venta de autopartes del automóvil, me había traído una casa rodante, mi moto y plata, no lo que me correspondía, pero no podía seguir sufriendo y llegué a Salta con la doctora Elena Gutiérrez 39 años y la enfermera Gladys Moyano 47 años, Elena había heredado una clínica en la ciudad y había venido a hacerse cargo, nosotros vinimos con ella…Gladys iba a ser la segunda, yo chofer y cocinero…somos amantes los tres, las llevo y las traigo al trabajo (a la clínica), les cocino, les toco el violín y con un miembro que erecto mide 25 cm. les doy sexo todos los días, vivimos tranquilos y felices mientras cuidamos a mi hijita Josefina…

Llegamos en junio, además de la clínica Elena había heredado también una casa, de tipo colonial,  no muy cerca del centro, con amplio parque, pileta de natación, de varias habitaciones, le falta bastantes arreglos, a los que tendré que dedicarme…

La clínica.

Ubicada en el centro de la ciudad, a media cuadra de la plaza central, es, dicen, para 20 camas, no sé qué es eso…el asunto es que en la planta baja tiene consultorios y habitaciones, el primer piso es todo de habitaciones… trabajan como diez médicos especialistas, enfermeras y personal de maestranza…la tía de Elena, la doctora Juana Gutiérrez, hermana del padre de Elena, había fallecido en un accidente (un camión se cruzó de ruta y le pasó por arriba al autito de la doctora)…los primeros tiempos, Elena y Gladys estaban medio perdidas, pero le fueron tomando la mano, Elena se había recibido de administración en salud, así que no le iba a resultar difícil llevar adelante esta clínica…

Cuando llegó la primavera, llegó también el

Cumpleaños 2 de Josefina…

Lo pasamos los cuatro solos, con una torta de dos velitas, no digo que estábamos tristes, pero muy alegres tampoco… después de comer un poco de torta y una mamadera Josefina se durmió (de cuatro a seis horas de tranquilidad), me puse a bailar con Gladys, la apretaba, la estrujaba, ella me agarraba el miembro, se nos pegó Elena, muy suavemente nos fuimos sacando la ropa, al quedar desnudos Gladys se agachó y me la empezó a chupar, con Elena nos besábamos ardientemente, en la cama grande que teníamos, en la que dormíamos todos los días los tres, tuvimos sexo como dos horas, anal, oral, 69, cubana, de todo hicimos…al estar los tres descansando, Elena me dice…

Cacho quiero tener un hijo con vos…en uno o dos años no sé si voy a poder tenerlo…

Me dejó temblando, mi anterior experiencia, con Ester no había resultado bien…

Como pareja digo, ya que Josefina era lo más lindo que me había regalado Dios…

Te parece Elena, después no vas a dejarme por tres cubanos…

Ja ja…boludo qué decís, a mí me van a separar muerta únicamente de mi hijo…

Yo también quiero tener un hijo, ja, ja, dijo Gladys…(ya estaba en la menopausia)…

Mi padre y Silvia  me mandaron mensajes de feliz cumpleaños…el resto de la familia…bien gracias…

Con diciembre llegaron los

Cumpleaños y fiestas…

Cumplí 24, Elena 40 y Gladys 48, programamos un viaje a Bolivia, saldríamos el 12 y volveríamos cuando queramos… los cuatro tranquilos mencioné…

No dijo Elena, vamos a ser cinco…estoy embarazada….

Nooo!!! qué alegría, y saltábamos los cinco…

Esa noche hicimos el amor de a tres, sin galopadas violentas, ni anal…todo muy tranqui entre los tres…

Gladys se la pasa acariciando la panza de Elena…

La casa había quedado un lujo, arreglé los problemas de mampostería, de herrería, de madera, pinté todo, si pasabas por al lado mío salías pintado…hasta los enanos del jardín quedaron un chiche…

La casa era todo en planta baja, tenía un impresionante recibidor living, había que subir dos escalones yendo hacia atrás a un desayunador, la cocina en el centro y el comedor con vista a unos enormes ventanales, se veía la pileta, el quincho al costado y más parque, la casa estaba emplazada en el centro de todo un parque, podías dar la vuelta recorriéndolo…los dormitorios, todos con baño, había cuatro, daban todos al living central…y los dormitorios tenían todos vista y salida al parque…una hermosura de casa.

Nos fuimos a pasear.

Salimos el 12 de diciembre, pasamos por Güemes, recorrimos la ciudad bajamos en la iglesia Santa Rosa de Lima que está ubicada frente a la plaza principal…

Luego fuimos a la ciudad de Jujuy, pusimos la casa rodante en un estacionamiento, almorzamos y después contratamos un tour turístico.

Nos hicieron visitar primero la Catedral Basílica de San Salvador, casa de gobierno, nos explicaron el éxodo jujeño, monumentos, basílica menor de San Francisco, museo Lavalle, teatro Mitre, plazoleta Ricardo Vilca, paseo de los artesanos, barrios residenciales, y parques verdes de la “tacita de plata”, San Martín, botánico municipal, el lineal Xibi, compramos en los artesanos unas especies de máscaras, para poner en el living, dijo Elena…

A la tardecita fuimos a tomar un aperitivo a la plaza central, oímos misa en la catedral y luego pasamos a la cena, Josefina se había dormido hace como dos horas cuando llegamos de vuelta a la casa rodante…

Esa noche a Gladys se le antojó sexo anal, no me podía negar…

Elena no quiso…uno sencillito dijo…

Al otro día,desayunamos y nos fuimos a Purmamarca, estuvimos viendo el cerro de los 7 colores, pero lo que más les gustó a las chicas la cantidad de ropa que ofrecen en la plaza central, que colorido, que diseños, que trabajo, estuvimos recorriendo un poco las calles, tan típicas, tan tradicionales, tan pintorescas…

Almorzamos cazuelas, tamales, humita, locro, todo regado con buen vino, nos fuimos a dormir la siesta a la casa rodante…

Con una excursión fuimos a la Cuesta de Lipán, vistas panorámicas de los paisajes naturales alrededor de Purmamarca…

Al otro día fuimos a las Salinas Grandes, inmenso desierto de sal, vimos vicuñas y llamas, regresamos a la tardecita, directamente a cenar, cazuela de llama, vino y guitarreada, nos acostamos pasada la medianoche, sin sexo.

Al otro día, después de desayunar nos fuimos a Tilcara, anduvimos recorriendo los diferentes puestos de ventas de las plazas centrales.

Tanto Elena como Gladys dijeron  de pasar la noche en un hotel, para poder bañarse como humanos (así dijeron), yo no tengo problemas de seguir con la duchita de la casilla, Josefina tampoco…

Nos registramos en un hotel espectacular, a unas cuadras del centro, imponente, con una habitación con balcón que daba al cerro, a la montaña, un paisaje maravilloso, además un hidromasaje grandísimo, entrabamos los cuatro…los cinco…

Almorzamos en el hotel y a la tarde excursión…

Visitamos el Pucará de Tilcara, es el yacimiento arqueológico más importante de la Argentina, la Garganta del Diablo, es una formación geológica de imponente belleza, dejamos para mañana el Pucará de Juella y museos, lo hicimos al otro día…

Que noche que nos pasamos los tres… cuatro… tuvimos sexo por todos lados, me había tomado una pastilla de cien al comenzar y otra en la mitad…quedé destruido…

Como dije fuimos al Pucará de Juella, hay que hacer un largo trecho a pie, se aprecian las ruinas de pueblos antiguos y hermosos paisajes…a la tarde recorrimos museos…a la noche a cenar con música…

El miércoles después de desayunar nos fuimos a Humahuaca, parece que gustó lo de quedarse en un hotel, no era tan lujoso como el anterior, recorrimos la Quebrada de Humahuaca, monumentos, el Cabildo de Humahuaca, centro de artesanos, paseo de las señoritas, museos, fuimos a visitar la ciudad de Iruya, partimos para Abra Pampa, no hay mucho para ver, un pueblo medio desértico, con viento, debe ser duro vivir acá en invierno…

Llegamos a La Quiaca, a un hotel de lujo, con hidromasaje, excursiones, a La Laguna Colorada y el Cordón de los ocho hermanos…al pueblo de Yavi, pueblo que parece detenido en el tiempo, Laguna de los Pozuelos.

Pasamos a Bolivia, a la ciudad de Villazón, para pasar por el puente del control aduanero subieron gendarmes de Argentina y de Bolivia a inspeccionar todo, revisaron por todos lados…

Me causaba gracia, desde la casilla veía un cordón de personas pasar contrabando caminando por una bajante del río…todos con cargas al hombro…

En Villazón recorrimos toda la inmensa feria de ventas, podés encontrar lo que busques, son como mil metros de puestos callejeros y locales en dónde la oferta de promociones son de las más variadas…

Paramos en una estación de servicio la casa rodante. Hicimos la excursión al salar de Uyuni  y volcán Tunapa… fuimos únicamente Gladys y yo, Elena por el embarazo y Josefina por el calor se quedaron…

En las varias horas que pasamos juntos con Gladys, salió el tema de Ester, me contó que no era la misma, que según ella, se estaba drogando, que los médicos cubanos, más que médicos parecían mafiosos, que ella lo habló con Ester y le preguntó por qué había cambiado tanto, por qué no se interesaba por su hijita…la contestación fue que no se metiera, que ella era grande y sabía lo que hacía…

Que la estaba pasando fenómeno…

Por eso decidí venir con Elena, ésta sí que es un amor, está completamente enamorada de vos, desde que te conoció me dijo, lo que pasa que vos te interesaste por Ester, entonces ella se hizo a un lado…

Que con el embarazo está enloquecida, dice que nunca estuvo tan feliz…

Cuando íbamos en el micro le metía la mano  entre las piernas, con los dedos le acariciaba el clítoris, Gladys por momentos bufaba…ella se vengó casi haciéndome un paja…casi…me dejó bien caliente…

Recorrimos el desierto de sal más grande del mundo, visitamos el volcán, vimos varios pueblos, un cementerio de trenes, visitamos la cueva de las momias, una excursión de lo más entretenida…

La que fue entretenida fue la noche que pasé junto a Gladys en el hotel de Uyuni, habíamos cenado abundantemente, con dos botellas de vino, medio mareados entramos a la habitación, no la dejé ni ir al baño, la acomodé arrodillada en la cama, le bajé el pantalón y corrí la bombacha, se la metí de una por el culo…el alarido que pegó!!!

Callate y sufrí guacha, le decía, mientras le azotaba las nalgas…

Hijo de puta, me rompiste el culo…seguí más fuerte puto…

Y así nos pasamos como dos horas teniendo sexo por todos lados, en la mañana después de desayunar nos fuimos de vuelta a Villazón…

Los cuatro… cinco, partimos para Potosí, no quisimos ir por la ruta principal, dijimos que para conocer los distintos pueblos, deberían ser como 350km,  con el aire prendido, con música, cantando, bebidas frías, sanguchitos, íbamos pasando el recorrido…

En un momento veo como a un kilómetro una camioneta, parecía metida en la zanja, del lado que íbamos y a uno haciendo señas violentamente con los brazos, en medio del camino, ojo, pensé, no va ser cosa que nos asalten.

Me acordé de cuando conocimos a las “comparseras”, me fui acercando muy despacio, miraba para todos lados, igual que las chicas,  esperen que me bajo, no abran a menos que yo les haga señales.

Apenas puse un pie en la tierra, el boliviano, se me acercó rogando, llorando…

Ayúdeme señor, mi señora está por tener familia y no puedo sacar la camioneta, casi me desmayo haciendo fuerza…

Me acerqué a la camioneta y vi a una chica con una impresionante panza a los gemidos por el dolor…

Les hice seña a las chicas, se bajó Elena y vino corriendo, al verla supo qué hacer enseguida.

Denla vuelta con las piernas para acá, dijo , ya vengo.

El señor y yo la tomamos a la chica con mucho cuidado y la pusimos acostada con las piernas para la ruta, vino Elena con su botiquín, Gladys con Josefina en brazos, al señor le hicieron tener levantada una pierna, en la otra Gladys, yo cuidar en brazos a Josefina, ni quise mirar, tardaron un ratito y se empezó a escuchar el llanto de una hermosa criatura.

Gladys se la llevó para la casa rodante, el señor lloraba junto a su esposa…

Elena estuvo unos momentos más no sé qué haciendo y la hizo sentar a la chica…y la hizo bajar a caminar…mierda acaba de tener familia y ya está caminando…

Bueno, chicos a ver cómo hacen para sacar la  camioneta de acá, dame a Jose, me dijo…

Le até una linga en la parte de atrás de la camioneta y con el malacate/guinche la saqué fácilmente…

Amigo le dije la próxima vez que le pase algo así ate una tabla en la rueda de atrás y dele lentamente, tendrá que salir…

Una vez acomodada la camioneta, hicimos un almuerzo entre los ocho…

Nos invitaron a que fuéramos a su casa a festejar la llegada de Manuela, como vimos el amor y entrega que nos daba esa pareja, dimos la vuelta como 50 kilómetros, nos metimos por un camino secundario y llegamos a una casa bastante humilde, en medio del campo, cuando vieron llegar a la camioneta empezó a salir gente de todos lados, la rodearon, todo era alegría, al rato una señora coya nos vino a saludar, era la madre de Juana, la chica, nos bajamos los cinco, todos abrazos y besos…

A la noche se hizo un asado impresionante, éramos como 12, tomamos chicha, comimos picante, yo terminé bastante mareado…

A la mañana después de desayunar nos fuimos, Elena revisó a la madre y a la hija y todo excelente…

Cerca del mediodía llegamos a Potosí… paramos en un hotel impresionante, con escaleras por todos lados, un lujo increíble, la cama grandísima, nos encantaba estar todos tirados en ella…

Hicimos excursiones a las minas de plata, museos, por la ciudad, no dejamos nada por ver…pasamos navidad en una fiesta muy alegre en el hotel, vinieron a mostrarnos lo que iba a ser el Carnaval Minero a celebrarse para reyes aproximadamente…nos acordamos cuando bailamos todos en el carnaval…como manejábamos los tres, el regreso fue sin parar.

Continuará…