Viajar es un placer

Viajar es un Placer

Me llamo Isaac y lo confieso; me encantan los encuentros casuales, practicar sexo en lugares atípicos, ceder ante mis instintos más primarios y creo ser afortunado, pues quizá porque me consideren de buen ver (1,85, moreno, ojos azules, 28años,deportista...) he tenido la oportunidad de realizarlo en diversas ocasiones.

La experiencia que os voy a relatar es verídica y sucedió la noche del 29/12/03 durante el trayecto en autocar entre Barcelona y Madrid.

Llegué a la terminal poco antes de la salida del bus y una vez guardada la maleta en su compartimento, fumaba un cigarrillo contemplando a parejas y familias que se despedían entre medio de besos y abrazos (no como yo, que iba en solitario a Madrid a pasar Fin de Año con unos amigos), cuando una morenaza alta, de labios carnosos, ojos oscuros y un cuerpo ,que no se veía pues llevaba un abrigo hasta las rodillas, pero se adivinaba de infarto, peldaño a peldaño fue subiendo la escalera del bus y ocupó la butaca que tenía asignada.

Como es lógico, un servidor albergaba la esperanza que fuera mi compañera de asiento, pero las probabilidades eran mínimas y se confirmaron; me tocó 2 filas por delante suyo en compañía de una anciana. Pero el desencanto duró 15 segundos pues la señora nada más percibir que iba a ocupar mi plaza me pidió que si por favor no me importaba cambiar mi asiento por el de una amiga suya que detrás nuestro me hacía señales con la mano.Al volverme vi que precisamente estaba sentada al ladito de la morenaza y regocijándome por mi buena estrella no dude en aceptar el cambio, recibiendo efusivas muestras de gratitud de las señoras cuando en realidad el favor me lo habían hecho a mi.

Tan sólo acercarme a ella (que se había quitado el abrigo descubriendo una silueta preciosa enfundada en un vestido oscuro de fiesta que acababa en falda corta) mi naturaleza se reveló, noté como mi corazón latía con más fuerza y mi polla crecía dentro del slip; tanto que al pasarla por delante de su cara pues yo tenía ventanilla, ella la siguió con la mirada antes de fijarla directamente en mis ojos casi como desafío, reto que yo acepté manteniendo su mirada.

Lo cierto es que fue un instante, pero suficiente para crear la tensión propia entre dos personas que se atraen, piensan lo mismo el uno del otro y no se atreven a dar el primer paso ya puede conducir al éxito clamoroso o al fracaso estrepitoso.

Comenzó el viaje y la incomodidad iba en aumento pues todo eran insinuaciones: miradas de soslayo, abrir y cerrar de piernas, suspiros..., hasta que fatigado después de un largo dia de trabajo y siendo las 1,30h de la madrugada me rendí al sueño con la morenaza en la retina. Desperté sobresaltado por un bache que pasó el autocar y sorprendido vi como la chica tenía la vista posada en mi entrepierna, que durante el sueño había llegado a su límite y se marcaba nítidamente bajo el pantalón, y no la retiró a pesar de descubrirla, sino que esta acción fue el desencadenante de lo que sucedió.

Sin una palabra, dándose cuenta que yo la seguía, cambió de posición en el asiento, colocándose de perfil y de espaldas a mi, al tiempo que levantaba y acercaba a mi cintura un culito respingón que invitaba a ser penetrado.

No hubo lugar a la duda y me dispuse a follármela...

Primeramente y colocándome también yo de perfil tapé nuestros cuerpos a la altura de la cintura con mi chaqueta, pues aunque era de madrugada y el pasaje parecía dormido preferí evitar sorpresas, y con tiento, esperando su respuesta, empecé a acariciar su cadera recorriendo cada milímetro de su tersa piel hasta llegar al pliegue de su falda. Al asirlo y con un movimiento ascendente de mis dedos, quedó al descubierto tanto su culo como el coñito, ambos hambrientos pidiendo su ración de carne.

Alargando mi mano derecha la extendí sobre su sexo y con gusto descubrí que ella estaba tan excitada como yo, pues antes de retirarlo, comprobé que su minúsculo tanga estaba todo mojadito y pegajoso. Mis dedos suavemente fueron abriéndose camino entre sus labios hasta alcanzar su destino, el clítoris, momento en el que ella profirió un quedo gemido reprimido por las circunstancias.

Con la mano derecha masajeé su clítoris y con la izquierda abrí mi bragueta sacando mi enhiesta verga, que llevaba horas pugnando por la libertad y ansiaba endirse en el coñito de mi compañera. Y así se hizó; cogiéndola fuertemente por la cadera acerqué nuestros sexos que deseaban ser uno y asiendo mi polla por la base la situé a las puertas de su coño. Poco a poco, centímetro a centímetro se la metí toda notando como mi piel se ponía de gallina y el placer nos invadía a los dos, pues ella con los ojos cerrados mordía su labio inferior sellando su boca.

Una y otra vez, de forma cadenciosa, me ensarté en su coñito mientras mis dedos la masturbaban por delante, entrando los dos en una espiral de placer que sólo acabó cuando primero ella después de esconder su cabeza en el recodo del asiento y luego yo, que llegando al culmen del placer, de forma instintiva me apreté contra su coño en un último envite y vacié todo mi esperma en lo más hondo de su ser.

Tras esto, toda la tensión inicial fue sustituida por una relajación absoluta y con parsimonía, pasados 10minutos retiré mi sexo del suyo enfundándolo de nuevo en el pantalón. Ella hizo lo propio con su falda y volvió a su posición natural en el asiento del bus fingiendo estar dormida hasta el final del trayecto.

Descendiendo los últimos peldaños del bus, antes de fundirse en un beso con un chico que la esperaba (supongo que el novio) me dirigió una última mirada de complicidad que quedará grabada para siempre en mi memoria como el sello de una experiencia inolvidable.

¡Qué placer, aún me entran escalofríos de recordarlo! Por qué me gustarán tanto estas situaciones? No lo se, pero me hacen realmente feliz.

Lo que está claro y esta experiencia es un ejemplo, es lo cierto de la máxima:

"No hay que buscar el camino a la felicidad, la felicidad está en el camino"

Si alguien quiere preguntar, explicar, experimentar..., puede contactar conmigo en:

IsaacBcn2@Hotmail.com ¡Hasta pronto amigos/AS!